Alina y Susana
Relato Futanari.
Mi nombre es Alina, tengo 26 años, soy de estatura media, delgada, muy blanca, cabello largo rizado café, labios delgados, linda sonrisa, ojos vistosos color marrón, no tengo grandes atributos, normales diría y salvo mis piernas que son gruesitas. Vivo con mis padres aún, soy la menor de una familia de solamente hermanas, todas las hermanas ya salieron de casa con sus familias, soy la que queda aún.
Mi vida lleva cierta normalidad, he tenidos algunos pretendientes pero al final no se concretó nada serio, trabajo como secretaria en una empresa de bienes raíces, salgo con amigas de vez en cuando, me gusta andar en bicicleta, correr y paseos. En fin, solterona.
Sexualmentemente hablando me considero una mujer independiente en ello, logró satisfacer a plenitud mis apetitos yo sola, por las noches antes de dormir o recién cuando despierto en la mañana, delicadamente mis manos entran en contacto con mi cuerpo en un recorrido candente y lento, luego más insistentemente, a veces en ropa interior me froto sobre un almohadón de contextura firme con una funda de seda, y finalmente totalmente desnuda siempre me froto frenéticamente mi clítoris y mis pezones hasta que culminar en un poderoso e intenso orgasmo. Me encanta, me relaja, paso con nuevas energías si es en la mañana o duermo placenteramente si es en la noche. Es lo que hago y me eso me hace sentir totalmente desinteresada en el sexo.
Ya entrando en la historia, mis padres por el boom de la tecnología terminaron en facebook, ellos algo viejos con su perfil, al cabo de un tiempo entraron en contacto con gente que no veían en décadas, particularmente entraron en contacto con una prima de mi madre, igual que ella de avanzada edad la cual eran grandes amigas en la infancia. Al cabo de unas semanas ella visitó nuestra casa, todo muy bien, vino con su nieta Susana, ya que ella es la protagonista de la historia se las describiré.
Susana de 19 años, es alta, cabello rubio lacio, rostro lindo de labios gruesos, ojos negros, blanca pero de un color bonito, su cuerpo algo realmente llamativo, grandes senos firmes, caderas anchas, trasero grueso, algo falta de ejercicio pero con nalgas sensuales, hermosas piernas largas. Por su forma de vestir y su porte era de clase sencilla igual que la prima de Mamá. No era una belleza perfecta pero era muy atractiva y realmente era llamativo verla al menos para mi. Ese día que llegaron llego con unos jeans color gris y una blusa de tirantes azul marino. Sandalias de plataforma que la hacían lucir aún más alta.
Susana estaba para cuidar a su abuela y eran unidas, a pesar de su atractivo físico se notaba muy cohibida y algo penosa, era algo callada y tímida.
Llegaron un jueves en la tarde, yo estaba allí para conocer a la famosa mejor amiga de mi madre y luego tenía que irme a una salida con las amigas. Como nuestra casa es grande se quedarían con nosotros 1 par de días, cada una le dieron un cuarto para que estuvieran cómodas.
Cuando llegue ya todos estaban durmiendo. Era algo tarde, no quise despertar a nadie así que entre despacio y en silencio. Por dicha la casa es grande y mi habitación está lejos de la habitación de invitados y la habitación principal. Sin embargo hay un dormitorio adicional que no se usa pero que está al lado de mi cuarto. Pase a un lado de la puerta y por debajo de la puerta se podía apreciar que estaban las luces encendidas así que entra mi cuarto sin hacer ruido. Al otro día me di cuenta que Susana era la que ocupaba esa habitación.
Mis padres estaban súper contentos, ellos pensionados podían llevarlos pasear y conocer los lugares bonitos de la zona con las visitas y recordar los viejos tiempos. Yo trabajaba el viernes no los pude acompañar. Ellos tenían mucho que mostrarles las atracciones para los visitantes. Al fin llegó el viernes podría salir poco mas temprano descansar y en la noche reunirme con los amigos.
Al llegar a casa mi madre me pidió que fuera de compras con Susana para que llevara algunas cosas bonitas de vestir y zapatos. Ya que Susana no llevaba mucha ropa y en especial sus zapatos estaban gastados. Me imagine que harían eso ellos son muy caritativos, en fin tuve que ir, ella estaba apenada y no quería ir. Al final mi madre que es insistente como no tienen idea la convenció de ir conmigo. Salimos, la invite un café primero para que se relajará estuvimos conversando, algo cohibida al inicio, comencé con mis bromas, me impresionaba lo silenciosa que era y su voz tan suave que costaba escucharla, luego de un rato de mis bromas la fueron relajando, conforme pasó el tiempo me gané su confianza y se abrió conmigo, me contó que ella trabaja desde chica limpiando casas de día y estudia de noche, vive con su abuela porque su padre no lo conoce y su madre murio de cancer. Se notaba que había pasado cosas difíciles y que era una luchadora a pesar de todo.
Mientras estábamos allí un hombre muy guapo de otra mesa, le mando una flor de un vendedor ambulante que pasaba, yo no me sorprendí ya que Susana tiene una curvas pronunciadas y realmente llama la atención. El mismo hombre luego le mandó con el salonero un papel con su número y una propuesta para conocerse escrita. Ella me dijo que nos fuéramos que no le gustaba esas cosas y se levanto, dejo el papel y la rosa en la mesa. Fui a pagar y nos fuimos a las tiendas a comprar.
Yo me reía por la extraña reacción, pensé que las chicas de pueblo eran así y no le di importancia. Entramos a la primera tienda, perfecta para ella, ropa muy bonita. Escogimos bastantes cosas y fuimos a que se midiera de todo. Entraba y salía del vestidor. Nos divertimos, probando cosas, cualquier cosas en ella parecía algo sensual y llenaba sensualmente bien cada prenda que le ofrecía. Escogí lo mejor ya que si fuera por ella no hubiera elegido nada.
Ella estaba apenada e insistió que no era necesario, pero realmente lo era, cuando entramos al auto ella estaba algo conmovida por cómo la tratamos, y se puso a llorar, yo la abrace le di un beso en la mejilla y la tome de las cara y le dije que no se preocupara, que no fuera tan dramática que eran solo cosas. Ella me dijo gracias y me dio un beso en mi mejilla. Me miraba fijamente con sus ojos llorosos, su boca entreabierta y yo muy cerca a ella. Le di otro beso en su frente. Ella se me abrazo fuerte también. Me sentí muy bien con eso pero luego entre en razón y me separe. “Bueno vamos a casa” dije con una sonrisa para romper el ambiente al tenso. Trate de hacer como que no hubiera pasado nada en el camino ella no decía palabra, como no puedo estar callada porque me vuelvo loca comencé la plática.
Alina: Porque no aceptaste la flor de chico lindo del café.
Susana: No me gusto el.
Alina: Ok, y has tenido novio en el pasado.
Susana: No. para nada.
Alina:Porque?.
Susana: No creo que le guste a los hombres.
Alina: Que dices? -muy sorprendida- Si eres una belleza!. No te entiendo.
Susana: Si te digo la verdad te asustarias.
Alina: Jaja, vaya ponme a prueba.
Susana: Es algo que a cualquiera le daría asco.
Alina: Ok, vaya no se, tienes una enfermedad sexual eso quieres decir?.
Susana: No, soy deforme.
Alina: Caray Susana no entiendo.
Susana: Tendría que mostrarte para que lo entiendas.
Alina: Claro ok.
Susana: En la noche voy a tu cuarto y te lo puedo enseñar.
Alina: Como quieras, Susana, me tienes en un misterio porque no solamente me dices.
Susana: Es que si nada mas te digo no lo vas a creer tienes que verlo.
Alina: Estas segura?, es algo peligroso? dime te creo.
Susana: No no es algo que me afecte la salud, solo es feo.
Alina: Segura si no quieres decirme.
Susana: Bueno te lo diré pero no te rías es algo dificil para mi contarlo pero puedo confiar en ti que no se lo dirás a nadie.
Alina: No me voy a reir decime.
El camino de regreso se hizo lento por un accidente de tráfico y me dio tiempo de insistir, realmente estaba muy curiosa de que podía ser lo que a una chica tan bella la hiciera pensar que fuera deforme. Finalmente tras insistir con paciencia ella comenzó a ceder y abrirse conmigo.
Alina: Alguna vez le has dicho a alguien acerca de tu problema?.
Susana: No nunca.
Alina: Creeme no te voy a juzgar y decírselo a alguien te va quitar un peso de encima creelo.
Susana: Nunca se lo he dicho a nadie pero creo que te lo contarle a ti si tu me prometes no decirle a nadie.
Alina: Claro te juro por mis padres que no dire nada.
Susana: Bueno desde que tengo 14 años mi clítoris aumento de tamaño.
Alina: Qué dices? Que tan grande Susana, es normal que crezca.
Susana: Yo se que tiene que hacerse como un botoncito pero el mio tiene el tamaño de un pepino cuando está erguido. Pero normalmente está encogido. entre mis labios vaginales.
Me quedé unos segundos mirándola fijamente con cara de mensa y pensando si había escuchado bien.
Alina: Que me dijiste Susana?
Sus ojos se llenaron de lágrimas me respondió titubeando.
Susana: Tengo un pene que se para, me da vergüenza y me siento como un monstruo.
Y se puso a llorar. No sabía qué pensar al respecto, si sería una broma, si exagerada. Pero sea lo que fuera realmente estaba muy afectada por ello.
Alina: Bueno, en la noche lo vemos para ver si te puedo conseguir alguien que te ayude.
Le tomé la mano mientras conducía.
Susana: Sabía que no me creerías, mientras lloraba. Prometiste que no le dirías a nadie.
Alina: Esta bien, esta bien no le diré nada. Tranquila.
Se tranquilizo un poco pero seguía triste así que paré el auto a la orilla del camino. La mire fijamente y le dije.
Alina: Se lo que sea no dejas de ser especial y hermosa.
La tome de las mejillas con ambas manos y le di un beso suave en sus labios. Me separe y seguí conduciendo sin decir nada.
Continuamos el camino a casa, ya con mejor ánimo y finalmente nos volvimos a ver reímos con sonrisas nerviosas. Cuando llegamos a casa antes de bajarnos ella me preguntó.
Susana: Porque me besaste?
(Me sonroje y baje la cabeza)
Alina: no se lo pensé en el momento. Fue solo un piquito para que te sintieras mejor.
Susana: ¿Te arrepientes después de lo que te conté?
Alina: No, pienso que igual eres linda, no, es que, que pena. Te digo la verdad? Nunca había hecho eso antes, no soy de ese tipo de mujeres. Osea, no se, solo fue un piquito para que te sintieras mejor, pero pienso que nadie te debería despreciar por tu problema, eres muy dulce, una mujer luchadora, linda y pienso que esas cosas se pueden superar. Y la verdad si tuviera que hacerlo de nuevo lo haría porque pienso que eres linda...
Sin decir nada Susana se acercó a mí y me dio un piquito en la punta de mis labios. Me quede algo tonta. Se separó y me miró a los ojos
Susana: Entonces yo te gusto?.
Y se bajó del auto. Me quede con los ojos bien abiertos.
No dije nada, ella sonrió, bajamos las cosas del auto entramos sin mediar palabras, mis padres y su abuela estaban en la sala, conversando alegremente.
La noche transcurrió normal, cenamos, una charla amena, contamos como nos fue en el centro comercial, el chico del café, pero lo que paso al regreso ni una palabra. Susana actuaba natural como era ella, callada.
Llegó el momento de dormir, fui a mi cuarto, espere, pero no tocaban la puerta. Me senté en la cama me hacía una trenza para dormir mas comoda y me puse a pensar en todo lo que pasaba, tenía que explicar a Susana que no era lo que ella pensaba o si ella también estaba jugando conmigo. Me acosté solo con la luz de la lámpara, pensaba en ese problema que ella tenía. Si era mentira todo era muy convincente. Me levanté para cambiarme me quite la ropa interior, hacía algo de calor, me puse una malla negra ajustada de lycra y una blusa de tirantes blanca.
Al cabo de unos minutos me consumía el sueño pensaba que se había arrepentido y todo fue una broma. Así que fui a buscarla, salí del cuarto, todo estaba apagado, fui a su puerta despacito, en el trayecto no sabía porque pero me sentía excitada sexualmente, pensé: “que me pasa?”. toque suavecito la puerta, la puerta se abrió sola un poquito porque no estaba bien cerrada, así que entre, las luces estaban apagadas, susurre “Susana”, escuche entre las sombras un susurro, “pasa Alina y cierra bien”. Entre con cuidado, le di doble paso a la puerta y pregunté si podía encender las luces. “Si enciende” el susurro algo agitado
Ella estaba acostada de lado, con una blusa de tirantes rosa flojita y cobijada a la cintura.
Alina: Lo siento Susana, ya me voy no quería despertarte, es que pense que irias a mi cuarto pero parece que te dormiste.
Susana: No, Alina no te vayas, te estaba esperando. Acércate siéntate aquí
Me senté a su lado, parecía que ella estaba desnuda de la cintura para abajo y en verdad me enseñaría algo, sus pezones estaban erguidos sobre su blusa y su cuerpo estaba algo sudado. De sus cobijas venía un aroma dulzón y fuerte. Estaba acostada de lado, se puso boca arriba, abrió las piernas y debajo de las cobijas se podía ver un gran bulto del tamaño de un pepino, ella tomo las sabanas de la orilla y me dijo si estaba lista. Moví mi cabeza, diciendo de que si.
Ella bajó la sábana, y como si fuera camara lenta se fue asomando algo que nunca espere ver. Entre sus labios vaginales muy carnosos, crecía un falo de un color rosado, con una textura lisa, muy mojado, parecía duro como roca, tenía un aspecto casi como un pene de tamaño normal pero sin orificio. Era algo que en principio me asusto y luego vi el rostro de Susana agitado, asustada esperando mi reacción con una lágrima rodando por su mejilla, estaba excitada al máximo y al mismo tiempo avergonzada. Pensé en levantarme y salir corriendo. Pero me acerque lentamente a su cara asustada y le di un besito corto en sus labios gruesos color rojo natural, le dije que no pasaba nada. Que ella era linda.
Ella me abrazo y se puso a llorar, me abrazo, no le dije palabras solo la abrace, tome la cobija le tape su verga y me acosté a su lado. Sin decir nada ella recostó su cabeza en mi pecho y lloró hasta quedarse dormida. Me acomode a su lado. Decidí antes torturarme con pensamientos de lo raro, y malo de lo que estaba pasando.relajarme, y ser de consuelo a una pobre campecina que había pasado por tantas cosas y me necesitaba. Apague las luces y me dormí con ella.
En la madrugada me desperté ella me tenia abrazada desde atrás con su brazo me rodeaba y estaban muy cerca de mis senos, me desperté muy excitada. Sentía su pene erecto entre mis nalgas, solo mi licra y la cobija me protegía de ser frotada directamente. Me voltee de reojo vi que dormía, tal vez tenía un sueño erótico,en esa situación me deje llevar, sin pensar en nada solo tratar de disfrutar. Empine mi trasero y lo acerque más a ella. Su cuerpo involuntariamente movía las caderas embistiendo mis nalgas lentamente, en un momento se clavó entre mis glúteos marcados por la lycra y comenzó a frotarme así desde el coño hasta el ano. Yo le tomé su mano y la puse en mi seno. Ella en su dormitar también gemía y su respiración me daba en mi nuca, Se puso mas fuerte en un momento, sentia riquisimo todo. Ella se despertó se detuvo en seco, se separo de mi, me dijo que lo sentía que no era su intención, me voltie y le dije tranquila. Ella estaba apenada.
Alina: Yo se que tienes necesidades porque yo tambien las tengo, las amigas podemos compartir el placer. No pensemos tanto dejémonos llevar.
No podía creer que palabras como esas salieran de mi boca pero fluyeron como si las hubiera practicado toda mi vida.
Me puse sobre ella y moví mis caderas de adelante y atrás frotando mi vagina sobre su bulto.
Alina: ¿Ya lo has usado con una mujer?.
Susana: No!, nunca.
Alina: Ya es hora. -y me frote algunas veces rápido y le puse mis manos en sus senos masajeandolo. Ella gimio de placer-
Susana: No le dirás a nadie? -con su voz entre cortada-
Alina: Este es nuestro secreto. -Le plante un beso en sus labios-
Me tomo de las nalgas y se comenzó a mover desde abajo frontado su super clitoris
Sentía su protuberancia casi penetrandome comenzó a empapar la cobija y mi leggings se mojaban también. Nos besabamos apasionadamente y metí mi mano debajo de su blusa. Esa noche comenzó a caer un torrencial aguacero, lo cual era perfecto. Sentí y masajee esos enormes senos, eso la hizo enloquecer. Le quite la blusa y fue con mi boca directo a sus senos a llenarla de besos, chupetes, mamadas de teta, de todo, babeaba como si estuviera comiendo un manjar, así me traslade, lentamente por su ombligo, costados, caderas y fui bajando su cobija poco a poco descubriendo su gran secreto, pensé en lo bizarro que era todo aquello, no solo estaba haciendo el amor con una mujer si no que le mamaría su verga. Y pensaba eso mientras besaba sus muslos y vi su verga parada era algo tentador, que me hizo olvidar cualquier rastro de pudor o razonamientas con mis mano la tome y la frote de arriba abajo era tan suave y tan resbaladiza, como si le hubieran puesto lubricante. me acerque con mi boca mire a Susana, ella susurró: “no lo hagas si no quieres”. La mire fijamente a los ojos y metí ese extraño miembro en mi boca, Susana le vibraron las piernas, empezó a gemir y a los pocos segundos me susurro “me estoy viniendo”. Salía una sustancia blanca de su coño y su falo palpitaba como si tuviera vida propia. Supe que hablaba enserio. Fui más despacio y con mi lengua le di un trabajo oral. “Sigue no pares” me dijo ella y su verga estaba super parada parecía podía mantener la erección aunque se viniera mil veces.
Usaba mis manos y mi lengua dándole golpecitos con mi lengua en la punta mientras mi manos aprisionaron y frotaba su verga. Eso le fascinaba por la expresión de su cara. Finalmente le dije: “Quiero que me cojas”.
Me acosté boca arriba me quité los leggings que estaban empapados abrí mis piernas, sus caderas más anchas que las mías me obligaban abrirme más de lo normal, ella me beso y me dijo “allá voy”. Puso la verga en mi vagina y el primer intento se resbaló y se fue hacia abajo frotando mi ano eso me hizo dar un respingo, ella se disculpo, con mi mano le tomé la verga y la puse muy cerca ella empujo y fue entrando naturalmente, era una sensación que me sobrepaso, entre en otra dimensión no era yo, fue tanta la excitación que solo recuerdo sensaciones orgásmicas nada más, mi mente estaba nublada, ahora solo recuerdo segmentos confusos: ella me lo hacia rapido, fuerte, sin cesar, recuerdos como los olores, los gemidos, el sudor, son intermitentes, entramos en un estado de tal nivel de excitación que no lo recordamos bien esa primera vez que Susana me penetro. No se como se siente una droga, pero definitivamente debió ser lo más cerca de un estado de total éxtasis. Luego ella cayó a mi lado, ambas jadeando, empapadas, derretidas completamente, exhaustas, la cama quedó literalmente bañada de jugos vaginales. Me abrazo y poco a poco recuperamos el aliento, le toque el cabello cabo de pocos segundos dormimos. El torrencial aguacero término.
Los primeros rayos del sol nos sorprendieron en la mañana desnudas con nuestras piernas entrelazadas mi cara en su pecho, mi pequeño cuerpo casi sobre el de ella. Ella estaba despierta, me miró con una sonrisa y me acarició la cara, la miré y sonreí.
Alina: Como estas?-le pregunte algo ronca-
Susana: Bien, -me dijo algo afónica-
Sonreímos y nos miramos con ternura.
Alina: Cuando vuelven.
Susana: No lo se.
Me quede pensando unos segundos.
Alina: Puedo ir a verte?
Susana: Claro.
Alina: Si me ven aquí mis padres no se que van a pesar.
Nos besamos y luego me puse la ropa, le di otro beso y me fui a hurtadillas a mi cuarto.
Me acosté , cuando mi cabeza tocó la almohada me dormí y del cansancio dormí hasta tarde. Cuando desperté baje y solo estaban mis padres, Susana y su abuela se habían ido.
Alina: Cuando se fueron?
Mi Madre: En la mañana temprano. Susana te dejo un papel con su número y tambien le di el tuyo. Que bueno que pudieran ser amigas.
Alina: Gracias. Ma.
Mi Madre: Se veía cansada Susana, me dijo que se habían quedado platicando hasta tarde anoche.
Alina: Si Ma, cosas de chica.
Mi Madre: Que raro no escuche nada, parece que al final pudo conseguir una amiga, mi prima me dijo que no tiene amigas o amigos.
Alina: Qué raro es una chica muy dulce.
Mi Madre: Así es, espero puedan seguir en contacto le hará bien a ella….
Al buscar mi telefono tenia un mensaje de Susana. “Soy Susana no me olvides.”
Fin.
Espero contarles más historias al respecto. Espero sus amables comentarios.
Este relato no quiere herir los sentimientos de alguien solo pretende ser de entretenimientos para los que lo lean. Espero que algunos le guste. Saludos.