Algos y Hedoné (2)

Diciendo la verdad...

¿Por qué no invitar una amiga?...

En eso veo como se acerca Deneve; caminaba a paso lento como temiendo mi reacción; muy tímida parece. Creo que aparenta menor edad que la mía… entonces escucho:

-Hola. Un gusto conocerte.

Yo: -Igualmente.- Sonreímos ambas; parecía simpática; mí madre y aquella señora estaban en su mundo de ropa…ufff… iba para largo; entonces se me ocurrió invitarla a tomar en un café cercano; y preguntarles un par de cosas. –Ven acompáñame a tomar un café. Ellas dos tardaran.

La veía confundida, pero al final acepto.

Entremos a un lugar acogedor, y nos sentamos cerca a la ventana que da a la boutique. Y ella al igual que yo pedimos un descafeinado con unas donas. Entonces empecé:

-Bueno primero que todo quiero preguntarte: ¿si somos familia; que sería yo de ti y de la señora Isabel?

Deneve: -Ah… pues déjame pensar…mmm…seríamos como primas adoptivas de segundo grado. Y mi madre; tía adoptiva.

Yo: -¿Qué? ¿Cómo así? No tiene sentido.

Deneve: -Lo que pasa es que tu abuela paterna… se caso por segunda vez con mi tío después de morir tu abuelo y de tener a tu papá y tu tío… entonces tu padre fue como criado por nuestra familia; somos familia sin compartir sangre. Creo.- Termino diciendo con una gran sonrisa.

Yo: -Humm… Da que pensar. En fin, y dime; ¿tu y tu madre tienen todo listo para salir hoy?- Que no se note las ganas que tenía de irme.

Ella apenas sonrió sonrojada y contesto:

-Claro! Falta ver si mis hermanas lo están.

Yo: -¿Cuantas hermanas tienes?

Deneve: -Tengo dos. Soy la menor acabo de cumplir los 25 años, mi hermana Dania tiene 28 y Elizabeth tiene 31.

Yo: -¿En serio? Entonces significa que eres mayor que yo. Tengo 24. Pero y dime: ¿ellas saben del viaje?

Deneve: - Si. Hace poco las llame y se están alistando; si quieres las recogemos.

Yo: -Claro, vamos. Pero avisemos primero.

Efectivamente. Le explicamos a mi madre y a la señora Isabel; que mientras ellas se alistaban yo recogía a las demás. Con eso mi madre me presto su camioneta:

María (Mamá): -Mira Jalis, aquí tienes las llaves, pero por favor, por lo que más quieras, cuídala si; que no pase lo de hace unos meses.

Jalis: -Claro que no mamá, además yo conduzco muy bien. :D

María: -Bueno, aquí tienes. Me llamas para encontrarnos que nosotras primero debemos ir por unas cosas.

Con eso me subí y le abrí la puerta a Deneve; la cual me pregunto:

-¿A qué se refería tu madre con lo de meses antes?

Yo: -Ah, eso. No es un tema del que me guste hablar; pero bueno te contare

-Flash Back-

Hace unos meses mis amigos y yo salimos a celebrar el cumpleaños de Donovan; mi mejor amigo. Y como no, le pedí prestada la camioneta a mi madre para que cupiésemos todos; así que en todo el recorrido anduve manejando; hasta que entramos a un puf y de tanto licor que tome no estaba en condiciones de manejar; entonces Jean Carlos otro amigo, me dijo que el llevaría la camioneta a la casa de mi madre; y el resto me llevaron al apartamento.

Cuando desperté al siguiente día Jean Carlos me llamaba desesperado diciéndome que había estrellado la camioneta contra un camión de carga pesada y estaba totalmente destrozada; el a duras penas se había lacerado el brazo, nada más.

Fui a verlo y efectivamente la camioneta no tenia ninguna esperanza de arreglo; no le mencione nada a Jean Carlos; entonces le dije a mi madre que había sido yo, por estar tomada.

Luego de ello me castigo suspendiendo el uso de mi auto; y me toco pagarlo de a pocos mientras estaba en la mitad de mi carrera.

-Fin de Flash Back-

Yo: -Y eso fue lo que sucedió

Deneve: -Vaya… quien lo hubiese pensado. Por eso faltaste algunos días a la universidad.

Yo: -Si…pero bueno…qu…espera ¿Cómo sabes eso?

Deneve: -Parece que nunca te percataste, pero yo estudio en la misma universidad, incluso en tu misma facultad; solo que en otro salón.- Termino diciendo riendo.

Yo: -No tenia ni idea. No es que me fije mucho en la gente de la U. La mayoría son muy cerrados conmigo; y la verdad a duras penas me concentro en las clases; tal vez te haya visto pero soy mala recordando. Pero y tú, ¿acaso es que me espías?

Al instante Deneve se puso roja y nerviosa:

-No… no es eso… sino que…- (La note más seria) –Se dice mucho por la facultad… o más bien se cuchichea cosas muy raras sobre ti. Como el otro día; dijeron que tuviste algo con una estudiante; y que después de acostarte con ella, la cambiaste por una maestra de la facultad de artes. Y muchas cosas más; por eso todos en la facultad saben de ti.

Yo: -Ah, eso. Pues que decirte, en parte es cierto…pero…mmm

Deneve: -No tienes por que decirme… no debí mencionarlo

Yo: -No tranquila no hay problema; estoy acostumbrada… pero lo que en verdad paso fue

-Flash Back-

Los gemidos se escuchaban entre los arboles; y ahí fuera de las miradas curiosas me hallaba contra uno de ellos, con mis piernas abiertas y entre ellas la cabeza de Lauren.

Mordía mis dedos para amortiguar los gritos que aclamaban salir de mí; intentaba por todos los medios sostenerme de algo, el árbol, la cabeza de Lauren, ¿el aire?; solo torcía mis ojos e imaginaba el rubor que debía tener con ese calor sofocante. Sentí como Lauren empezaba a introducirme dos dedos y como sufría mis primeros espasmos, mientras acariciaba las paredes de mi vagina; su cálida respiración daba en mi sexo directamente y meneaba la cabeza mientras hundía cada vez más su rostro en él; mi sexo.

En eso le pedí más y baje mi mirada; y vi algo realmente excitante. Vi el rostro de Lauren; sus ojos me miraban fijamente a los míos, tenía las pupilas dilatadas, parecía un gato; una mirada de felina, su boca y nariz hacían estragos con su respiración y de repente mientras estaba absorta de ella saco sus dedos de mi. La mire interrogante pero de inmediato cerré mis ojos al sentir como introducía ahora tres dedos, su lengua se movía ávida sobre mi clítoris y con sus dedos intentaba tocar lo mas profundo, yo era un mar de jadeos y flujos; exhale hacia atrás y sentí como mi vagina succionaba sus dedos y empezaba a correrme, hasta que con fuerza succiono mi clítoris y sus dedos se adentraron hasta el fondo. Esta vez no cerré mi boca y de ella salió un grito profundo, ronco; y me tense de inmediato, Lauren me tomo de las nalgas y enterró sus uñas mientras se pegaba a mi sexo profundamente. Por un momento no sentí nada en mi cuerpo, solo las olas de placer después del orgasmo; y sin darme cuenta me encontraba de puntas y totalmente recargada en Lauren que se encontraba lamiendo mis fluidos. Me resultaba tan excitante la situación, por que mientras estamos en estos arboles que conforman un pequeño jardín al lado de la cafetería de la universidad; que estaba llena de gente, solo esperaba que nadie nos haya escuchado.

Espere hasta que me dejo completamente limpia; la tome del rostro hasta situarla a mi altura y probar mis fluidos desde sus labios, pero nuestro momento se vio interrumpido, escuchamos voces que se introducían entre los arboles acercándose hacia nosotras; solo atine a correr, no sin antes tomarla de la mano; sin notar que tenía mi falda atrapada entre mi blusa, mis bragas aun estaban a medio muslo y Lauren estaba totalmente despeinada y con todo su brillo labial corrido. Pero cuando salimos corriendo del frondoso follaje, vi como todos los ojos de la cafetería estaba en nosotras.

Los hombres comenzaron a chiflar y decir cosas extasiados; y la mayoría de mujeres nos miraban sonrojadas, una que otra indignada y otra mirando risueña. Lauren de la vergüenza se escudo detrás de mi; y yo más roja que nunca, empecé a andar con Lauren a mis espaldas; no sin antes subirme las bragas. Compuse mi ropa, y la de Lauren.

Yo: -Espero por ti en la puerta de tu facultad. ¿OK?

Lauren: (Aún no estaba recuperada del todo) –Eh… si…si…hoy salgo tarde, pero bueno, te veo a la salida.- Me dio un pico y todo una dirección contraria a la mía.

Jajaja me daba tanta risa, siempre hay una primera vez para toda y esa era hacer el ridículo.

Esa misma tarde salí temprano y estacione el carro enfrente de la facultad de Lauren, y espere; ya habían salido sus compañeros de salón así que decidí entrar, pero en la puerta me encontré con Sara; una hermosa mujer de unos 38 años bien puestos; más bien bajita pero que te roba el aliento.

Encontrarla allí era una verdadera sorpresa, así que me acerque.

Yo: -¡Hola Sara!- Dije mientras nos dábamos un beso en cada mejilla. –Tanto tiempo sin verte. Pero, perdón la pregunta: ¿Qué haces aquí?

Sara: (Tenía la cara de sorpresa; y parecía que de felicidad). –Jajaja, eso debería preguntarlo yo; pero por sino te acuerdas te dije que yo era profesora de arte gráfico.

Yo: -Ah, si claro, pero en verdad no me acordaba : D- Que curioso- Ah, entonces tú debes ser la profesora de Lauren.

Sara: -¿La señorita Benavidez? Ah, si, pero a que viene eso.

Yo: -Es que la estoy esperando, ¿aún se encuentra adentro?

Sara: (Un poco más seria) –Si, hoy le correspondía organizar los materiales, no debe tardar en

Nos vimos interrumpidas por Lauren que se engancho a mi cuello y me planto un beso muy sonoro en la mejilla.

Lauren: ¡Hola Jalisquilla! Espero no haberme tardado… ah, perdón Jalis; ella es mi profesora, la señorita Sara Cocull… Coccuu… ehh

Sara: -Coclucci… Si ya nos conocíamos- Dijo cortante. – Nos vemos luego- Parecía que se había ido con un humor de perros.

Yo: -Bueno, y tu, ¿Cómo sigues?

Lauren: -Ni me lo recuerdes, hoy todo el día estuvieron haciendo bromas con "eso" en clase; la profesora Sara casi me saca del salón.

Yo: -En verdad lo siento, sino te lo hubiera propuesto seguro que no

Lauren: -Eso no importa ya, pero más bien vámonos que aún me debes algo.- Dijo esto mientras me apretaba el trasero.

Di un respingo y sonreí, subimos al carro y di pedal a fondo; no me importaba la clase de insultos que escuchaba de otros conductores mientras los rebasaba, ni me di cuenta de cómo iba Lauren solo acelere. Cuando llegue frene en seco; y Fernando el portero abrió el garaje, entre; pero al salir del carro y subir al ascensor me di cuenta de que faltaba algo, ¿pero qué?... mmm… ¡LAUREN!

Detuve el ascensor y baje de nuevo; me acerque al auto y la vi; pasmada mirando hacia el frente; volteo a verme solo para exhalar un respiro e intentar levantarse; la ayude a parase.

Lauren: -No deberías conducir de esa manera, sabes que yo estoy relacionado con ello, pero otra persona podría, no se, darle algo

Yo: -Perdóname ¿si?... Es que tenía muchas ansias de llegar y

Lauren: -Nahh… ahora continuemos

Nos subimos al ascensor, oprimí el botón de mi apartamento y empecé a besar a Lauren a la vez que el ascensor empezaba a subir. Pero cerca del cuarto nivel apareció una viejita que se subió con nosotras. Pero envés de parar seguí besándola en el cuello, mientras la viejita nos daba la espalda; Lauren intentaba apartarme como podía, pero yo insistía.

Si ya me habían visto en la Universidad en peores situaciones, no veo el por que detenerme ahora. Subí de su cuello a su oreja con mi lengua y al llegar a su lóbulo lo mordí e introducía mi lengua. Ella de nuevo intento resistirse, logrando empujarme al mismo instante que la viejita se volteaba a mirarnos a ambas aireadas.

Vi como nos miraba de arriba a bajo, y luego se volteaba para hacer notar su incomodidad; entonces estire mi mano hasta tocar las piernas de Lauren; se removió pero no se aparto, estire un poco más y pude notar su entallado trasero en ese pantalón de licra, y no pude resistirme de apegarme a ella hasta que nuestros hombros se rozaron y apretarle su pomposo trasero, Lauren dio un respingo y la viejita se volteo alertada, pero al verme con mi mano en el trasero de la "señorita" Lauren y esta mas roja y distraída que nunca; se volteo y oprimió el botón del siguiente botón mientras azorada empezada a decir cosas intangibles llena de furia, lo único que le entendí antes de que se bajara fue que prefería subir por las escaleras que tener la presencia de dos pervertidas.

En eso siento que Lauren me empuja y oprime el botón de recepción.

Yo: -Pero, ¿qué pasa?

Lauren: -No te parece suficiente, que vergüenza… y mucho más con esa señora… ¡Dios!... sabes que ya se quitaron las ganas, mejor me voy antes de que te ahorque

Yo: -Ay, pero no es para tanto Lauren, ni conocemos a esa señora

Lauren: -Ese no es el punto Jalis, sino que si buscamos respeto de lo que somos, también deberíamos respetar su espacio.- (Ahí va de nuevo)

Yo: -No es la primera pareja que se besa o toca en un ascensor

Lauren: -Si, eso lo se, pero es diferente cuando hay más personas, y ni que decir lo que paso en el campus; sabes dejémoslo por hoy hablamos después

Se abrieron las puertas del ascensor, me baje y ella solamente se despidió de mi con un beso en la mejilla; ni la mire estaba furiosa

Me acosté con mucha rabia y con un calentón…uff… no se que mas me enfureció, si lo que dijo Lauren o como me dejo.

Al día siguiente hablamos en la universidad y arreglamos las cosas, bueno lo que sea que tuviéramos iba bien; y así continuamos unas cuantas semanas, la recogía por las tardes y hacíamos algo, pero como la vez pasada se estaba tardando demasiado en salir de la facultad la llame al celular. Me contesto para decirme que no tardaba ya le faltaba poco, estaba aprovechando que Sara estaba para supervisarla.

Yo: -Ah, bueno no importa, pero y dime ¿donde están los baños?

Lauren: -Entra a la facultad y el primer nivel a tres puertas de la entrada esta el baño de maestros; entra y no te preocupes no hay nadie.

Yo: -Gracias, te espero.

Entre y seguí las indicaciones de Lauren; entre al baño de maestros y vi mi reflejo en el espejo un poco desaliñado; así que empecé a arreglarme. Cuando siento una voz:

-¿Para qué te arreglas si te ves perfecta?

Me voltee y vi a Sara con una de sus radiantes sonrisas, mientras estaba apoyada en el marco de la puerta.

Yo: -Hola Sara, pensé que estabas con Lauren

Sara: -Ella se las puede arreglar sola, pero y tú: ¿sigues con ella?

Yo: -Pues si, es bastante especial y es muy buena persona

Sara: -Ah, con eso traduzco que es muy bella y es buena en la cama.

Yo: -No me refería a eso, y tú; ¿por qué preguntas?- Ya me estaba sacando de casillas.

Sara: -No por nada, sino que no es común de ti involucrarte con una niñata cuando puedes tener a alguien mejor

Yo: -Y según tú, ¿Quién es mejor?

Sara: -Pues no lo se…- Decía esto mientras se acercaba a mi y me acorralaba contra la pared. –Por ejemplo… yo

No pude negarlo, Sara es y siempre será hermosa; estaba a centímetros de mi rostro mientras me mordía los labios con desesperación; no sabia que hacer, Sara me atraía todavía pero aunque no tuviese nada con Lauren no me parecía correcto sucumbir en brazos de esta mujer.

Puso sus manos alrededor de mi cuello y empezó a besarme; me quede quieta, estática, pero al sentir como cepillaba sus labios con los míos, acariciaba mi cuello con su dedos y como con su lengua pedía permiso para entrar en mi boca. Y no me resistí, correspondí a sus besos, la tome de la cintura y dando la vuelta la azote contra la pared, consumíamos nuestras bocas con desesperación mientras tomaba una de sus piernas y la enroscaba en mi cintura; mientras con una mano masajeaba su pezón sobre la tela de su blusa mi otra mano exploraba sobre sus bragas; empezó a gemir un poco alto pero antes de que hiciésemos cualquier cosa, mire hacia la puerta y vi a Lauren mirando la escena impactada, sus ojos abiertos al máximo y sus manos a cada lado de sus cuerpo.

Me separe de inmediato de Saray trate de acercarme a Lauren; ella solo se alejo y me miro al rostro. Vi como su vista empezaba a nublarse y salía caminando rápido mientras yo iba detrás de ella, no me importaba nada de Sara; sabia que la había embarrado y terriblemente; logre detenerla en el jardín de descanso había varias personas allí.

Yo: -Lauren lo siento, yo me deje-.- PLASH!!

Juraría que mi rostro dio una vuelta de 180 grados, y el ardor no tardo en aparecer.

Lauren: -LLEVAR… ESO ES LO QUE INTENTAS DECIRME… NO SEAS SINICA… ¡POR DIOS! NO SE AVECES QUE TE PASA POR LA CABEZA…- respiro un poco- sabes que Jalis dejemos así; tu no eres nada mío y yo nada tuyo… La verdad no tengo el por que reclamarte por que ninguna nos atamos a la otra; pero al igual me degradaste como persona; y no quiero saber cuantas veces te acostaste con esa vieja, pero duele más que sea mi profesora

Yo: -Lauren en verdad lo siento, no se que me paso… lo siento tanto, perdóname, nunca pero nunca pensé hacerte esto y menos con ella; pero debes saber que nunca me acosté con ella; hasta sucedió…lo que sucedió- Ya ni sabia lo que decía.

Lauren: -No me importa, sabes más bien me voy… no más

Yo: -Lauren en verdad

Lauren: -¡Que no más!

Vi como se retiraba y todos los demás compañeros que habían presenciado el espectáculo hacían ese característico sonido de –"UHHH"- otros –"ESO… CON LA PROFE Y ESA…UFF…BIEN GARCÍA"- Ni los mire, seguí mi camino.

-Fin de Flash Back-

Yo: -Y bueno después de ello busque a Lauren para que me perdonara de miles de formas pero se negó y a la semana hizo un traslado de universidad, no la volví a ver, pero en verdad espero que este bien; y pues Sara sigue dictando clases, pero nada que ver y hasta le deseo también que le vaya bien.

Deneve me miraba sorprendida, tal vez de cómo le conté cada detalle, no omití nada; estaba un tanto sonrojada.

Deneve: -No sabia… pero en verdad lo siento

Yo: -No importa, es un capitulo pasado

Deneve: -Mmm… Ah Jalis!

Yo: -¿Si? ¿Qué pasa?

Deneve: -Por la próxima a la derecha.

Yo: -Ok.

Cuando llegamos, saludamos al celador y subimos al ascensor, se abrieron las puertas y pude ver las siluetas de dos mujeres agachadas cerrando su maleta, y entonces Deneve dijo:

-Jalis, te presento a mis hermanas: Elizabeth y Dania.

Eran…eran

Fin de la segunda parte.

Gracias a todos los que llevaron su lectura hasta aquí.

Próximamente la tercera parte.

Z.J