Algo mas que sexo (1)

ALGO MAS QUE SEXO (I) S.Marin

-Oyee! ponme otra

-Otra?, no cree que sé esta pasando?

-Yo le digo a Vd. Lo que tiene que hacer? O acaso es que no se las pago?

-Vale vale tranquilo que solo me preocupaba por Vd.

-Le he dicho yo que se preocupe por mí?

El camarero le sirvió y se marcho pensando que vaya tío más jilipoyas y desgraciado. Allí estaba Fernando borracho como una cuba intentando ahogar sus penas en alcohol y cuanto más bebía mas se acordaba de lo que estaba sufriendo, la tarde anterior había podido plegar pronto del trabajo, por fin podía un DIA plegar pronto, mientras andaba de camino hacia su casa iba pensando que podían hacer lo que quedaba de tarde para pasar un atardecer inolvidable con su mujer y al entrar a casa pudo ver la imagen que siempre había pensado que pudiera pasar y que tantas soluciones había pensado, lo mato a el y a ella bueno no solo a ella por que el no tiene culpa, o si no me siento y les digo que sigan que me da morbo mirarles, o le corto la polla al tío a rodajas. Pues si allí estaba Carmen su mujer con su mejor amigo Ricardo fallando como posesos en el sofá de su propia casa y aun teniendo tantas soluciones pensadas no le vino ninguna a la mente, solo se quedo perplejo, agacho la cabeza y se marcho llorando, ninguno de los dos le siguió para darle alguna explicación, todos se quedaron mucho y Fernando salió por la puerta tal y como había venido.

Y allí se encontraba Fernando con la ropa del trabajo, sucio y completamente borracho, llorando a cada trago que entraba por su garganta de un wiski amargo y con sabor a ceniza, en el primer puticlub que había podido encontrar, un antro oscuro lleno de mugre pero con unas lindas niñas que por el acento no debía ser ninguna de aquí.

-Cariño me invitas a una copa

-Te he dicho antes que no que me dejéis en paz

-Estas seguro- nada mas decir eso la niña rubia que había estado sentado con un tío que al final se había marchado sin probar sus exquisitos servicios, le toco la polla por encima del pantalón y le miro con una carita muy irresistible.

-Déjame por favor no tengo ganas

-Pues chico aquí se viene para lo que se viene y no a emborracharse guapo. Parecía que Fernando había conseguido apuntillar ese ego que tenia la chica, ya era el segundo en toda la noche y ella no estaba acostumbrada a que nadie le dijese que no. La chica se marcho escaleras arriba y Fernando siguió bebiendo de esa copa que ya estaba grasienta por culpa de la grasa que traía Fernando en las manos por culpa del trabajo y que no le había dado tiempo ni de lavarse.

Al poco rato volvió a bajar la chica rubia acompañada de una señora más mayor que las demás debía tener unos 55 años, de estructura gruesa y con cara de malos amigos, debería ser la Madame del local, la rubia miro a la madame y me señalo, la mujer se acerco hacia mi y mirándome de arriba a bajo me dijo:

-Oiga ya ha bebido bastante y este sitio no es para emborracharse

-Pero si no hago nada malo joder déjeme en paz, no se da cuenta de que no estoy para ostias

-Pues se va a tener que marchar por que vamos a cerrar ya son las 6 de la mañana y ya es hora ir a dormir.

-Me acabo la ultima y me voy

-Gracias se lo agradezco

-De nada

-Déjeme adivinarlo, es nuevo socio del club de los cornudos, es o no es así?

-La hija de puta se ha liado con mi mejor amigo

-No te preocupes pasa muy a menudo, aquí venís todos como mínimo dos veces, la primera para tirarse a una de mis chicas y la otra para enfundarse los cuernos con este asqueroso wiski.

-Lo siento de verdad solo quería pensar un poco y beber algo, no estoy para sexo, ahora me haría falta algo mas que sexo

-A si? – y tras pensar un poco le dijo-Yo te puedo ayudar si quieres, que te parece?

-Tu me puedes ayudar? Como?

-Tu hazme caso y no lo olvidaras nunca

Fernando se acabó la copa de un trago y agarrado de la mano de aquella mujer subió las escaleras convencido de encontrar la solución allí arriba. Entraron en una habitación, las pareces estaban pintadas de rosa y una gran cama aguardaba en el centro de la habitación, un pequeño lavabo se entreveía detrás de una puerta que le quedaba a la derecha, el suelo esta enmoquetado del mismo color que las paredes de aquella habitación, que a Fernando le parecía el paraíso.

-Cariño túmbate en la cama y quítate la ropa, ahora vengo- dicho esto se metió dentro del lavabo. Fernando le hizo caso, sin pensar en nada se empezó a quitar la ropa, en ese momento se dio cuenta de que ni se había duchado, joder que cerdo pensó. A los 5 minutos salió aquella mujer, embutida dentro de un vestido de por lo menos tres tallas más pequeño del que solía usar ella normalmente, un traje de cuero negro brillante que dejaba al aire sus enormes pechos mediante dos agujeritos que aquel vestido llevaba justo en la parte del pecho, Dios!!! que tetas, pensó Fernando, siguió con la mirada aquel vestido que le tenia absuelto, en la parte de su sexo portaba una cremallera y estaba muy claro que esa cremallera no iba a durar mucho tiempo cerrada, adornaba esa figura unos zapatos de tacón de aguja negros a conjunto del vestido. Una vez revisado todo el material que se le exponía de tan sugerente forma Fernando se levanto y con un tono de voz tremoloso le dijo que el se tenia que duchar un poco pues no le había dado tiempo a ducharse y olía a tigre.

-Tranquilo cariño me encantan las fieras , túmbate y goza amor, por que lo que vas a sentir hoy no lo olvidaras en mucho tiempo- Dicho eso se acerco a Fernando y con un fuerte empujón le tumbo en la cama, rápidamente la mujer se le sentó encima y agachándose empezó a besarle el pecho, Fernando cerro los ojos y se dejo hacer disfrutaba sintiendo los lamidos de esa lengua que le recorría todo el pecho, le lamía los pezones y se los ponía muy duros, seguidamente la mujer cogió un brazo de Fernando lo estiro y lo comenzó a atar a un cinturón que se hallaba en la pata de la cama, Fernando abrió los ojos sorprendido ante el fantástico juego a que le sometía aquella mujer, una vez atado el primero empezó con el otro, Fernando estaba viendo cumplida una de sus mayores fantasías, ser follado por una mujer, el estaba acostumbrado a tener que hacerlos todo con su mujer, y le encantaba la idea que una mujer que apenas conocía le estuviera atando a una cama con la intención de follarselo, una vez acabado los brazos empezó con la piernas, La mujer miraba a Fernando y el le correspondía con una sonrisa a la vez que le pedía que se diera prisa que estaba deseando sentir su coño por todo su cuerpo. Una vez atado la mujer subió lentamente besando las piernas de Fernando acercándose poco a poco a una polla que ya estaba a punto de reventar, cuando se acerco a los huevos empezó a lamerlos, besarlos e incluso metiendose uno entero en la boca, Fernando alucinaba eso nunca se lo había hecho su mujer y por primera vez pensó: que le den por culo a la puta de mi mujer. La polla de Fernando ya se encontraba dentro de la boca de aquella mujer que con mucho afán le chupaba la polla, Fernando volaba de placer, de un placer jamás conocido hasta ahora, no podía aguantar mas y avisando que estaba apunto se corrió, la mujer no saco la polla de su boca y se trago todo el espeso semen que brotaba de la polla de Fernando, no dejo desperdiciar ni una gota, se lo trago todo, Fernando yacía en aquella cama descompuesto de placer, con la polla todavía dentro de la boca de aquella mujer que ahora le estaba limpiando con su boca su desvanecida polla. La mujer se levanto, le miro y le dijo:

-Cariño ahora me toca gozar a mi. Se puso encima de Fernando a la altura de la cara y quedándose en cuclillas le metió la tira de la cremallera en la boca, Fernando apretó la tira y con un suave movimiento le abrió la mitad de la cremallera, aquella cremallera llegaba hasta la espalda, por lo que la mujer continuo abriéndose la cremallera hasta dejarla totalmente abierta, se levanto y se despojo de aquel vestido que apretaba sus carnes, cuando acabo de quitárselo todas sus carnes salieron de aquella opresión que las tenia bien apretadas, volvió a la postura anterior, de cuclillas en la cara de Fernando que rápidamente saco su lengua y empezó a lamer aquel coño que no dejaba de producir jugos de fabuloso sabor, la mujer se apretaba los pezones y gemía de placer, cada vez apretaba mas su cuerpo contra la cara de Fernando, gimiendo cada vez con mas fuerza, cuando de repente Fernando noto algo caliente en su pecho, la mujer no paraba de apretar mas fuerte y ya estaba gritando como si estuviera poseída, Fernando volvió a notar otra vez aquella sensación notada anteriormente, de nuevo su pecho notaba algo caliente, cuando de pronto un olor especial le acabo de despejar la duda, rápidamente miro hacia abajo y grito:

-¡¡¡¡¡¡HIJA DE LA GRAN PUTA TE ESTAS CAGANDO ENCIMA MIO!!!!!!, ESTAS LOCA O QUE????????

La mujer empezó a reírse a carcajada limpia mientras le gritaba :

-NO QUERIAS ALGO MAS QUE SEXO?? PUES TOMA Y PRUÉBALO CORNUDO DE MIERDA!!!!!!!! – Dicho esto bajó su mano y cogió un trozo de mierda restregándolo por la boca de Fernando que solo podía mover la cara pues estaba totalmente atado y claro no podía gritar por que si no se iba a tragar toda aquella mierda que la puta le estaba restregando por la cara. Cuando acabo de restregárselo la mujer se llevo la mano a su pecho y se la limpio dejándose todo el pecho lleno de mierda, Fernando aprovechó para gritar:

-HIJA DE PUTA SUÉLTAME QUE TE MATO CABRONAAAAAAAA!!!!!!!!!!!

-Y PARA QUE NO TE OLVIDES DE MI EN TODO EL DIA .......- Justo dijo eso y cogió toda la ropa de Fernando y la restregó por la abundante mierda que quedaba todavía en el pecho de Fernando. Cuando acabó se acerco a la cara de Fernando y le dijo:

-Cielo ha estado fantástico, he disfrutado como hacia mucho tiempo no lo hacia, a partir de ahora espero que sepas medir tus palabras, ¡por cierto¡ no hace falta que pagues nada la casa invita-

Y como si no nada aquella mujer salió de la habitación dejando atrás lo gritos de Fernando que no hacia mas que recordarle el trabajo que ejercía su madre. Al cabo de 5 minutos aparecieron dos tíos, eran los mismos que estaban en la puerta del Púb., le soltaron y lo sacaron a patadas del local, tirandole la ropa encima y dejándolo en la calle completamente desnudo y lleno de mierda.

Fernando no se lo podía creer rápidamente se vistió y salió corriendo de aquella calle totalmente avergonzado y nuevamente triste, ya mas calmado se metió en el lavabo de un bar y se limpio todo lo que pudo, esa peste seguía invadiendo su cuerpo, y no hacia mas que susurrar:

-Hija de puta, hija de puta, hija de puta.

Y allí estaba Fernando en el lavabo de un bar limpiándose la mierda que una puta le había restregado por todo el cuerpo, su mujer con su mejor amigo y su vida destrozada.

Se miro al espejo durante 30 segundo miro al techo del lavabo y dijo en voz alta:

-Ahora ya que más me puede pasar, Diosssssssss!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Continuara.....