Algo mas que Manoseos en los aseos de un Bar

Algo mas que Manos en los aseos de un Bar

Hola, me llamo Susana, ante todo gracias a todos los que me habéis leído, sobre todo aun más agradecida a aquellos que me habéis escrito. Agradezco de corazón, que os haya gustado e incluso que os haya sido tan placentero, como a mí relatarlos.

Aunque se que me habéis pedido que acorte los datos de mi perfil, también os pido que seáis paciente, pues otros lectores me habéis pedido todo lo contrario (pero me tenéis que perdonar, que al menos me repita en mi prologo). Soy una ardiente chica de 22 años del sur de Andalucía (pues nací en Sevilla un 30 de Mayo de 1985, es reseña por los lectores referentes a mis 22 eternos años, por que carajo sois tan incrédulos). Me voy a describir como soy, morena con cabellos largos, de ojos castaños y vivos, mido 1.75m de altura, mi peso creo que no importa (joder, pues no dejo de hacer ejercicios, ya sabéis de que tipo… suelo montar), mis medidas 90/59/88 aprox., y bisexual. Me definiría como simpática, extrovertida, atractiva e intrigante, una sin vergüenza integral, simpática, muy buena gente, bastante loca... Vamos una chica con la que se puede pasar un buen rato (para algo más, de 15 minutos).

Me gusta conocer gente, descubrir cosas nuevas, divertirme, lo típico de una chica de mi edad (tengo una manera especial de ver la vida creo, que os habéis dado cuenta). Me gusta salir de noche, hacer locuras, aunque me sea difícil de reconocer que me gusta beber en exceso… joder por que coño debo de controlarme (coño, solo por el echo de que acabo en rollada. En esos momentos solo me importa, lo que tienen entre sus piernas, y que lo sepan usar bien, pues quiero un hombre…. y no una nenaza). Soy conciente que mi forma de vestir, me hace ser más destacable para ser manoseada, aunque no soy ni fetichista, ni exhibicionista, simplemente me gusta vestir de forma que realce mi cuerpo. He hecho cosas que ruborizarían a más de uno, pero he gozado haciéndolas de cada una, he disfrutado de lo lindo. Me considero muy joven, para no dejar de probar cosas, dicen que tengo un hermoso cuerpo (como decía mi abuelo, de pecado), me considero una mujer ardiente, de mente muy abierta, deseo ampliar mis experiencias y probar cosas nuevas.

He de explicaros, que mis gustos en general, aunque lo niegue es la morbosidad que me produce, ser manoseada en publico, sentirme acariciada, siempre que sean lugares públicos (coño, es tal la morbosidad, que es difícil describirla, pero os la intentare relatar). No comprendo por que me acusáis de ser adicta al sexo, de ser una ninfomana desenfrenada, solo por el hecho que todos los días mantengo una relación de sexo, e incluso varias veces al día. Tanto por conocidos como por extraños, sin importarme de quien se trate siempre que me gusten, aunque sea un poquito. Y aun mas con todo lo liberales que decimos ser, seguimos siendo unos anticuados, pues os digo que hoy día cuando me veis, ya sea cogida de la mano o por la cintura, no me dejan de mirarme como si fuera un bicho raro, una subnormal o si tuviera alguna enfermedad rara. Cuando en verdad somos seres humanos como cualquiera, nos tacha de putas, guarronas o calientapollas en vez de pensar que simplemente somos mujeres, eso si sensibles y especiales.

Mis relaciones con los hombres maduros, son puramente por el morbo, aunque algunos lo maquillen, por la búsqueda del amor paterno (joder, menos palabrería, que sois unas niñatas, pues me han hecho disfrutar como verdaderos machos… aprender joder, si os ofendéis… os jodeis). Que lo importante no es como lo hacéis, sino como nos hagáis disfrutar, dejar de pensar mientras "folláis" con nosotras… pues parecéis maquinas, queréis que todo este calculado y los primeros que falláis sois vosotros (joder, ni tan siquiera notáis cuando logramos nuestros orgasmos, ni cuando os engañamos al simular alguno). Es para joderse, que cuando os desconcentráis perdéis vuestra erección, dejándonos a medias, y luego nos pedís volver a empezar (coño, como si fuera tan sencillo). Muchos de vosotros, pensáis, que entre vuestras manos tenéis la consola de la Game, joder que somos personas, que somos frágil y que tenemos sentimientos, que ha veces nos tratáis peor que a un animal, demostrar que nos amáis (joder, que para algo tenéis corazón). Haber si sois más sensibles, que tenéis más ternura con el puto móvil, que con nosotras, y menos correr que ni sois Fernando Alonso, ni nosotras somos Hamilton.

No significa, que algunos chicos seáis menos amantes, sino que olvidan esos pequeños detalles, que lo importante es que disfrutemos ambos no solo vosotros. Estoy bastante harta que me dejéis a medias, pues sois una panda de cabrones, que me dejáis mas caliente que al principio, con la necesidad de ir a buscar e incluso a veces a alguna chica, que logre lo que un supuesto "macho" no ha podido, o sea que me pueda satisfacer. Lo primero me debo disculpar, pues no siempre puedo responder a todos los que me habéis mandado vuestro email. Desde hace bastantes años, por no deciros desde que nací, mi morbosidad es tan grande que la necesidad que tengo por buscar placer, es mayor que mi estabilidad por buscar mi felicidad. Mi problema de ser complacida, algo parecida a la actual, no digo que no todos deis la talla, pues mi chico es el primero que me tiene mas que contenta, pero mi debilidad por ser infiel creo que viene de familia, en otras palabras por naturaleza dicen que soy una hija de puta. Joder, pero cuando me calentáis, no puedo contenerme pues tengo la necesidad de ser complacida, e intruso aun mas no me importa por quien o con que.

Hola ante todo, bueno comenzare mi relataros una nueva confesión, o en otras palabras unas paginas mas de mi diario. Me ocurrió hace un par de años aproximadamente, recuerdo que me ocurrió un sábado noche, salí con unos amigos de rutas por bares (os podría decir la rutas que seguimos, pero eso mejor me los pedís a mi email). Bueno la cuestión era que me encontraba en uno de esos bares, por no deciros que la verdad era un Púb (coño, al estilo la "Gruta", los que seáis de Sevilla lo sabréis), me encontraba con unos amigos para ser exacta con dos, mis amigas hacia tiempo que me habían dejado, no le reprocho nada pues iban bien acompañada y se a lo que iban. Estos entre palabrería intentaban llevarme a la cama, tanto uno como el otro me pedía una copa tras otra, o sea que lo le importarle el "como" llegaría, pues saben que con una copa de más, me es difícil decir No a cualquier cosa que me pidan (joder, con mi puto problema con la bebida). En incluso dejaba caer alguna mirada picara o algún gesto provocativo, a cuantos hombres había en la barra sin importarme que estaba acompañada, e incluso de algunos os diría que podría ser hasta mi padre.

Continuo, me encontraba sentada en mi taburete junta a la barra. Franqueada por los dos chicos, mientras uno de ellos chicos estaba a mi derecha comentándome algo, que en verdad os digo que apenas lo escuchaba, pues ni me importaba lo que me decía. Pues más atenta estaba, a sus movimientos sobre mi costado y mi brazo, pues el bulto que tenía me daba tal tan frotamiento, que la notaba bastante caliente. Mientras el otro chico el cual estaba a mi izquierda delante mía, había comenzado por ir acariciándome inicialmente desde mis rodillas hasta a medio muslos, para ir ascendiendo su mano introduciéndose poco a poco, por debajo de mi falda. A medida que no apreciaba en mi, ninguna objeción introducía aun mas su mano, notándola por la parte interna de mis muslos hacia mi pubis. Sus caricias a vista de todos, era de lo mas descarada, mientras ambos no dejaban de hablarme cada vez mas picará y con segundas intenciones. Joder, como explicaros la situación, pues no solo la situación me estaba calentando, sino al sentir como las yemas de los dedos del chico de delante mía, como rozaba levemente mi pubis, suavemente como si rascara sobre la tela de mis braguitas (coño, en ese momento no me hubiera importado, haberme dejarme hacer sobre la barra…).

Por mucho que intentaba darme a entender, que me iría con ambos, como que se notaban que eran algo cortito, aunque creo que ambos se oponían el iríamos los tres a la cama (machistas de miérda). No recuerdo el porque, pues sin venir a cuento se nos acercó una tía, la cual me tacho de puta, a mi… (Joder, la muy guarra seguramente estaría muerta de celos). No comprendo por que piensan eso de mi, por que es tan difícil que penséis que solo es pura diversión, por que una chica no puede divertirse con dos hombres al mismo tiempo… por no deciros irnos a la cama. La verdad es que algunas sois bastantes estrechas… no solo de mente, no me extraña que al final os ponga vuestros chicos los cuernos, pues les ponéis tanto impedimentos, trabas o reparos que al final se lo ponéis en bandeja. Bueno sigo, entre copa y copa me entraron unas ganas locas de mear, por lo que se me lo comente amablemente y me fui a los servicios, para nada llegar encontrarme una buena cola, como no aguantaba más me decidí a entrar en los aseos de los chicos (coño, no aguantaba mas). Eso si antes de entrar, me asegure después de haber esperado 10 minutos que no habían entrado nadie, y aun menos salido alguno.

Sigo vale, entre en los aseos, dirigiéndome rápidamente a uno de los retretes, nada mas entrar intente cerrar la puerta, dándome cuenta que estaban rotos… en otras palabras le faltaba el pasador, por lo que me senté en el wc pues estaba deseando de hacer mis necesidades, aguante la puerta con la mano como mejor pude, cuando sin esperarlo la puerta se abrió dándome la sorpresa que apareció un hombre (ostia, no supe ni que decir, sino fuera que ya había acabado de mear, me lo hubiera echo encima)

Que cabron, aquel tío tenia la prisa que yo antes tenía, os digo aunque por su aspecto inicial no se le veía agresivo, pero el observarle hay de pie con una mano sobre la puerta, y con la otra sujetando un tremendo y erecto miembro, evidentemente era con la intención de vaciar su vejiga. Os juro, que no se que me pasó pero me quedé como hipnotizada, estaba de piedra mirando aquella hermosura (joder, el tío podría ser mi padre, ostia no por la edad que aparentaba, sino la apariencia).

Este comenzó a preguntarme por mi presencia allí, mas que asombrado se encontraba furioso (enojado, cabreado… joder, ignoro el porque, pues había mas servicios libres). Cuando quise responderle, apenas me salió palabra alguna con sentido o que pudiera explicar mi presencia allí, además lo peor de todo era mi cara de boba borracha, que miraba aquel trozo de carne que tenia este en la mano, y que no hacia nada por evitar aquella situación. Cuando por fin reaccione, me dispuse a ponerme de pie, al tiempo que intente subirme las braguitas, recuerdo el susto que me pegue del sonido que hizo la tapa del wc al caer, que me hizo mirar hacia atrás. Cuando gire mi vista de nuevo hacia delante, me encontré a este tío casi pegado a mi, había aprovechado el cabronazo a entrar en el aseo al tiempo que alzando su brazo hacia mí, me dio tal empujón que me hizo caer sobre la taza del wc, sentí algo de dolor por la dureza de esta, aparte de notarla lo fría que estaba. Sin tiempo ni para reaccionar, pues creo que el alcohol me lo impidió (joder, me hizo lenta de reflejos e incluso de pensamientos).

Continuo, este con fuerza dentro cerrando la puerta tras de sí, y como si conociera la falta de esta, coloco un objeto como pasador, dejando la puerta bien cerrada y sin salida. Cuando por fin pude reaccionar, evidentemente era tarde, pues este se echo sobre mí, haciendo sentir no solo su aparente viejo cuerpo sino activo y fuerte, intente rehui su acción pero de nuevo un nuevo empujón, casi manda chocar mi cuerpo contra la cisterna. Sin poder recuperarme, sentí su rostro rozar mi rostro, sus labios pretendía los mis labios, encontrándose precisamente con mi negativa a dárselos (joder, borracha pero no tanto). Al tiempo que note con pánico, como con violencia introducía su mano entre mis piernas, sin esperar a que le diera permiso, sentí sus ásperas manos como con dureza acariciaba mi piel (joder, si a eso se le podría llamar caricias), note como sus manos recorrían desde mis rodillas, hasta e ir introduciéndose por la parte interna de mis muslos, hasta sentirla en mi ingle (ostia, de cabron… pero os juro que casi me hace que me venga).

Tuve que pensar con rapidez, comentándole que mi novio me esperaba en la barra (obviamente le intente engañarle, pero sin éxito alguno), no supe que mas decirle por lo que nuevamente le comente, que era virgen que me dejara en paz, pero ni se lo creyó aparte de soltar una carcajada. Sentía como varios de sus dedos presionaba mi vagina, sintiendo como la yema de uno de sus dedos, al tiempo que se introducía dentro de mi orificio vaginal, me hizo dejar escapar un grito ahogado, mas diría yo que se trataba de un gemido de gusto. Casi me hizo vomitar, pues el muy cabron cuando comenzó a besarme, más parecía que me babeaba, era humillante y hasta vejatorio pues sentía sus labios, recorriendo desde mi cuello hasta descender hasta mis hombros. Al tiempo que comenzó a tirar, de mi vestido hacia abajo poco duro mis tirantas, al tiempo que sentí como una de sus manos bajaba la cremallera de mi vestido. Joder, entre presuntas lagrimas le pedí que se detuviera, nada mas descender mi vestido hasta notarlo sobre mis cintura, note como con violencia de un tirón dejo mis pechos al aire.

Bajando su rostro hasta mis senos, comenzó a chupar mis pechos, a lamer mi piel, a mordisquear mis pezones hasta dejármelos tan duros como piedras. Y no precisamente me quedaba quieta, pues ignoraba como que mis golpes ni tan siquiera le hacían nada, golpeaba su cuerpo una y otra vez, quizás no con la violencia que se esperaría o quizás por que comenzaba a disfrutar. Os juro, que si en esos momentos hubiera tenido braguitas, hubieran estado mas que humedecidas, pues notaba como mi vagina con el juego de esos dedos, la había dejado encharcada y no precisamente de haberme meado encima de pánico, sino de haber alcanzado ya un orgasmo debido a está vejación. De vez en cuando bajaba mi mirada… avergonzada, observando como mis braguitas se encontraban liadas en mis pies, pensando que ni tan siquiera me había dado tiempo a colocármelas. Sigo, aunque continuaba luchando por evitar este acoso, intentaba levantarme por evitar sus manoseos, pero una y otra vez me hacia sentar sobre la taza de wc.

En un momento de la refriega, el viejo al tiempo que me hizo sentar, coloco una de sus manos sobre mi cabeza para ser exacta sobre mi nuca, tirando de mí hacia su vientre para ser exacta hacia su entre pierna… hacia su miembro. El cual aun permanecía fuera de su pantalón, totalmente erecto. Aunque no era muy grande de longitud, sí era bastante grueso, estaba brillante, quizás por que de el emanaba líquido viscoso que salía de esa cabezota, que asombrada mas por la forma… que por el grosor, pues mas parecía un sombrerete. Intuí lo que posiblemente me ocurriría, por lo que le pegue un par de puñetazos en su estomago, devolviéndomelo este en forma de bofetadas a modo de que me estuviera quieta (coño, estaba excitada… algo extraño). A medida que fui dejando de luchar, hasta el punto que me deje hacer totalmente sin resistencia, y siendo de lo mas sumisa. Este cogiendo su miembro por la base de con la mano, la dirigió hacia mi rostro, comenzando primero a abofetearme un par de veces con ella.

Minutos más empezó a restregármela, tanto por la cara como principalmente por los labios, hasta comenzar a presionar sobre ellos, hasta introducirme poco a poco ese sombrerete en la boca. El muy hijo de puta, en forma amenazante me comentaba que ni pensara ni en mordérsela, mientras levantaba una de sus manos en alto. Recuerdo que aunque hice todo lo posible por abrir mi boca, un pellizco suyo en mi pezón me hizo abrirla aun mas, introduciéndomela de golpe hasta sentirme llena de carne. No os voy a negar que no me gusto, sobre todo a estas alturas vosotros me conocéis bastante bien, me va sobre todo que me fuercen un poco (joder, que buena estaba). Aunque sin saber por que motivo, lleve una de mis manos a mi pubis comenzándome a frotar, dándome placer tanto que no fue muy difícil alcanzar un segundo orgasmo, mientras le chupaba ese violador miembro. El muy cabron fue notando como poco a poco fui colaborando, por no decir que coji y no mejor dicho el mando, pues mientras la tenia dentro de mi boca, siendo yo misma sin mano alguna la que le practicaba la chupada.

Mientras una de mis manos la tenía sujetando sus genitales, los estaba masajeando al tiempo que me la sacaba de la boca, no sólo por cojer aire sino por recorrer con mis labios todo su tallo, y con la punta de la lengua lamía sus venas. El muy cerdo, sin haber avisado antes se vino en mi boca (joder, tuve que tragar a marcha forzadas, sino quería atragantarme con sus líquidos calientes y espesos), aunque apenas pude tragar en su totalidad pues me dieron tales arcadas, que me la tuve que sacar sino de ahí no salía, por lo que me hizo continuar recogiendo tanto con la lengua o con mis propios dedos. Era tal la cantidad, que no solo me manche la cara, sino el cuello y hasta como no, me caían hasta mis pechos, diluyendo por esto hasta acabar en mi vestido. Sin tiempo para reponerme, o por lo menos coger aire (joder, como es verdad que la violencia llama a la violencia), pues como he dicho sin tiempo a reponerme, el muy cabron me sujeto por una de mis muñecas con fuerza, tirando de mi a modo de zarandearme, hasta que de un nuevo tirón me hizo girarme.

Dios… quede de espalda a el (joder, que mareo tenia, me falto poco para que hubiera echado la pota, ya no solo era por el alcohol sino por el mismos zarandeo). Lo peor que ni me di cuenta que había quedado de culo (ostias, os juro por dios que ni me di cuenta), coño con solo deciros que me hizo digamos aterrizar al sentir sus manos en mis nalgas, comprendí rápidamente que el estaba detrás mía, estaba de culo con una de mis piernas flexionadas sobre la taza del wc, mientras con los brazos extendido me sujetaba a los lados. Nada mas abrir los ojos, y encontrarme no solo con la cisterna y las pintadas de rotulador en los azulejos, sino que caí que le estaba mostrando mis nalgas eso si aun cubiertas por mi vestido. Sigo, con toda la mala leche que mostráis los macho (pues solo la mostráis o para levantarnos la mano o la voz), tiro de mi vestido hacia arriba hasta dejármelo colgando del cuello, seguramente se excito aun mas al ver que continuaba sin braguitas (joder, no me extraña ni me dio tiempo a ponérmela, y aun mas con tanto zarandeo, donde coño habrán ido), continuo vale

Coloco una de sus manos sobre mi cintura, mientras su otra mano dirigió su miembro hacia mi entrada vaginal, no había perdido ni tan siquiera un milímetro de su erección (joder, ante aquel monumento mas creí que se trataba de mi chico Jhos, que de este viejo capullo). Como os he dicho antes, al muy hijo de puta ni se le noto que ya se había venido, como si se llevara meses sin correrse, aun mas cuando sentí la dureza de aquel vástago, cuando quiso penetrarme, comenzó a presionar sobre mi entrada vagina (ostia, os juro que temí mas, que me la metiera de un golpe, a que se corriera dentro). Rápidamente le comente, que no lo hiciera que me haría daño, os digo que el viejo engañaba bastante, pues aunque por su apariencia y su edad daba la sensación que no daba para mas, pero viéndole ahí parado con su miembro totalmente erecta, y eso que ya se había venido pero por Dios, que aparentaba otra persona.

Sigo pues, con bastante dolor note, como de un sólo golpe seco me la introdujo, no pude evitar soltar un grito de dolor, que obviamente por el sonido del bar nadie escucho. El muy cabron, comenzó una series de penetraciones violentas, los golpes de su pelvis contra mis nalgas eran salvajes, haciéndome lograr no solo un orgasmo, sino que tuve varios seguidos (joder, sentí mis piernas temblar, hasta creí que me desmayaría). Entretanto sentía con cierto dolor, como una de sus manos se entretenía amasando uno de mis pechos, el muy cabronazo no se si lo hacia apropósito o no, pero lo hacia tan fuerte que me los tenia ya enrojecido, mientras que con su otra mano me tenia bien sujeta por la cintura, ya sabéis marcando el compás de la "folla". No se que tiempo se llevo penetrándome, pero hasta escuche el entrar y salir de chicos en los aseos, no se si nos habría visto o no, pero escuchábamos a estos entre carcajadas y cuchicheos hacia los desconocidos folladores.

Coño, estaba bastante cansada, no sentía ni mis piernas estarían acaso ya dormidas (joder, hasta me acorde de rambo… ja ja ja), sentía mis piernas desfallecer agotada por el cansancio, no dejaba de comentarme "que tenia un cuerpo hermoso, unos pechos tentadores y un culo como para forrar nabos". Que debido a mi estado de embriaguez, tenia que aprovecharía que era mas asequible el aprovecharse de mi, pues mis fuerzas no son las mismas, y que se había dado cuenta que me va la marcha. Me la sacaba con rapidez, para volverla a meter con violencia, pero ya no dolía tanto pues de lo dilatada que estaba, me entraba con tal facilidad que solo sentía placer. Note no solo por la rapidez de sus embestidas, sino por como le sudaban las manos y el mismo nerviosismo, sentí al tiempo como se le iba hinchando su cabezota, como se marcaban sus venas en mi orificio. En un momento creí que se vendría dentro, algo obvio por la forma de penetrarme, pero si previo aviso me la saco con rapidez, y sin decir nada poso caliente y húmedo miembro sobre mis nalgas, al tiempo que unos chorros chocaban contra mis glúteos.

Dios, sentía como vertía todo sus líquidos sobre mis nalgas, sintiéndola caliente recorriendo mi piel, como el muy cabron con uno de sus dedos, ayudaba a diluir esa crema viscosa hacia mi ojete, al tiempo que presionaba sobre este e introduciéndomelo con sus propios jugos (coño, me sentí sucia pero disfrutaba como una zorra, quizás lo sea). Mientras me penetraba con sus dedos, no dejaba de soltarme entre comentarios, obscenidades y cada vez mas subidos de tono, hasta el punto que en un momento dado, me pidió mi el numero de mi móvil para poder repetirlo otro día (joder, hoy día sigo pensando el motivo por el cual se lo di, pero es obvio estaba disfrutando). Cuando después de haberme echado sus líquidos, los cuales estos diluían por mis nalgas, muslos, tobillos y hasta mis pies e ir formando un charco.

Se fue incorporando, fue levantándose al tiempo que fue arreglando sus ropas, al tiempo que me comentaba que yo hiciera lo mismo, pues no me aconsejaba el quedarme allí, no después de lo que hemos hecho. A no ser, que no deseara salir de los aseos de caballeros, pero ante todo saliera en silencio y sin contestar, pues lo que había echo, era deseo de ambos, y en ningún momento se había propasado de mi (cabron, macho tenia que ser). Como pude arregle mis ropas, ayudándome este a salir, pues previamente observo que no hubiera ningún chico en los servicios, tras despedirnos este se marcho filtrándose entre la gente. Yo aproveche por meterme en los aseos de señoras, acercándome rápidamente al espejo, observando sorprendida mi aspecto, pues veía como mi vestido se encontraba manchado de líquidos blanquecinos, espesos y aún frescos. De mi rostro, con cara de haber "sufrido", pues la pintura estaba totalmente corrida, por lo que intente maquillarme, me sentía avergonzada con lo que veía reflejada, tras salir de los aseos observé como los chicos, con los cuales estaba antes estaban ahora acompañados por otras chicas (afortunadas).

Recuerdo, que al pasar barra del bar en dirección a la salida, me di cuenta que se encontraba una pareja madura sentada, sorprendiéndome pues el era el hombres que previamente me había humillado, vejado y hasta digamos violado (coño, aunque eso si estoy muy agradecida, por haberme echo disfrutar. Creo que si me hubiera quedado ese día en la barra, con los chicos no me hubiera comido nada). Bueno me dirigí a casa, donde en un primer momento pensé en ducharme, el poder quitarme estos líquidos resecos que recorrían mi cuerpo, pero el sólo recordar como había comenzado, acabe en la cama masturbándome hasta alcanzar otra vez por venirme. No se que me ocurría, me encontraba nerviosa y no me podía quedar dormida, por lo que decidí coger mi diario y plasmar mi experiencia ahora que la tenia fresca… y no mejor dicho. Joder, os puedo asegurar que después de haber escrito mi experiencia, y de haberme masturbado varias veces, me quede dormida y os aseguro que esa noche, dormí muy bien.

Sabéis, no pude aguantarme de introducir una de mis manos entre mis piernas y darme tal placer, que incluso os aseguro que ahora mismo estoy acabando por narrar tal hecho, estoy tan húmeda como cachonda como ese día. Bueno mi negativa a dar el móvil, es en cuestión por lo que me ocurrió apartir de ese día, en los días consecutivos en las noches recibía la llamada, del viejo del bar, para darme las buenas noches, y para algo mas que ya os contare

Bueno ante todo, debo deciros referente a los comentarios de mi forma de explicaros mis historias. Que si mi escritura, no esta bien redactada, que apenas es legible, que tiene dificultad a la hora de leer o incluso que da mal sentido, a la hora de explicar los placeres obtenidos o sentidos. Lo siento enormemente, pero intentare redactaros lo mejor que pueda mis experiencias, me cuesta a veces escribir todos mis sensaciones, pues el plasmarlas creo que es lo mas difícil. Espero que os haya gustado, si queréis que siga contaros me lo comentáis pues me gusta mucho recibir vuestros email.

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