Alex y yo

Hola, mi nombre es claudia y he decidido después de tanto tiempo desahogar un poco mis culpas a través de este medio solo espero que les guste lo que a continuación leerán ya que pretendo hacerlo con cierta frecuencia bueno comencemos.

Para empezar les cuento que soy blanca, no soy baja pero tampoco alta mas bien termino medio, según mis amistades tengo buen cuerpo y debo acotar que mis senos son grandes y tengo un trasero que hace juego con ellas, es decir es grande para mi cuerpo, mi cabello es negro y mis ojos oscuros.

Todo comenzó una tarde cuando mi esposo y yo fuimos a una ciudad cercana a la que vivimos a hacer unas compras en un centro comercial muy grande. Mis pies me mataban después de tanto caminar y decidimos descansar una rato para continuar las compras, en el momento que nos estamos sentando a una mesa llega un muchacho y saluda a mi esposo era un viejo amigo suyo de la universidad, como es costumbre en algunos hombres se saludaron de costumbre y mí marido me lo presento se llamaba Alex y aunque de reojo y a primera vista puedo decir que l chico tenia sus atributos.

Después de una charla Alex nos invita a cenar a su casa aceptamos e incluso decidimos quedarnos a dormir esa noche aunque en principio no era nuestra intención.

Alquilamos una habitación en el mismo hotel del centro comercial y subimos a descansar un rato mas y yo como no pierdo una ocasión aproveche de medirme una cosas que había comprado, me duche y mientras mi marido se bañaba me comencé a seleccionar lo que me pondría esa noche las selección fue fácil, tome una falda negra con motivos árabes una blusa blanca qua hacia juego con ella , un brassier blanco y un diminuta hilo que compre con la intención e que mi marido me lo quitase después de la cena.

Nos vestimos y salimos rumbo a la casa de Alex. Debo decir que la casa era bellísima muy grande con inmensos jardines que la rodeaban. En la puerta nos esperaba Alex vestido para ocasión cuando baje del coche y vio la prominencia de mi pecho me fije como sus ojos casi salen de su orbita pero el supo disimular su admiración ya que mi esposo estaba ahí.

Tomamos una copas, charlamos hasta la hora de la cena la mesa aunque se encontraba en un inmenso salón era algo pequeña, nos dispusimos a cenar y a mi me toco sentarme entre ellos la veda ya se sentía los efectos del alcohol a mi varias veces me costaba mantener mi posición aunque ellos se veían como si nada.

Al terminar la cena decidimos ir a la terraza y seguir la charla en compañía de las copas. Le dije a mi esposo que nos fuéramos y Alex al escuchar eso nos pidió que nos quedásemos en su casa, mi marido le explico que ya teníamos habitación en el hotel y el dijo que no importaba que al DIA siguiente fueramos a buscar nuestras cosas. Aceptamos su ofrecimiento y seguimos charlando y tomando como no s raro en toda conversación comenzaron a hablar de sexo y entonces yo decidí ir al baño de venida me fije que mi esposo no estaba le pregunte a Alex por el y me contesto que había ido al otro baño, yo le conteste que estaba bien y entonces me propuso que bailáramos para que se me quitara un poco el sueño yo acepte y comenzamos a bailar, el no paraba de decirme lo feliz que estaba de habernos encontrado y lo alagado que se sentía con nuestra presencia. La música cambio y se puso suave el me trajo hasta el y yo sentí un paquete al nivel de mi vientre, me miro y me dijo que lo traía loco que daría lo que fuera por hacerme suya y que mi cuerpo le encantaba. Yo quede en shokc no sabia si apartarme de el y buscar a mi marido o besarlo.

Me dijo que mi marido estaba dormido de la borrachera que no me preocupara y seguidamente con una brusquesa sutil me forzó a besarlo seguidamente metiendo su lengua en mi boca. Yo no me resistí y masaje su lengua con la mía parecíamos unos poseídos lo tire hacia un sofá y mirándolo fijamente a los ojos con una rabia de deseo abrí mi blusa y tome su cabeza presionándola contra mi pecho el comenzó una lucha contra mi brassier el cual salio disparado dejando mis senos al aire a su disposición los cuales apretaba, chupaba, mordía y golpeaba suavemente yo nunca me había sentido así tan puta, el me tomo entre sus brazos y me tiro en el mismo sofá abrió mis piernas y metió su cabeza entre ellas lamiendo mi concha después de haber roto con furia ese pequeño hilo que mi Marido debía quitar, yo le decía entre mis gemidos " chuparme bien lámeme así, el metió su lengua y apartaba mis labios vaginales con sus dedos.

De repente se levanto abrió su pantalón y saco una polla gruesísima que era un poco mas grande que la de mi esposo yo la tome con mis manos y comencé a chupársela con el mismo frenesí con el que todo comenzó me costaba mucho mamarle la verga ya que mis labios se estiraban al máximo pero cada ancada la disfrutaba, el me tomaba por el cabello diciendo lo puta que resulte ser eso me entusiasmaba mas y yo entre gemidos me preocupaba por darle placer cuan sentí que su leche iba a salir, pare me levante y lo bese de forma tal me aparte de el diciéndole ahora esta puta quiere que te la cojas bien duro me volví a apartar de el y dando me la vuelta le ofrecí mi sexo mojado y chorreante de mis líquidos el no vacilo sabia l oque debía hacer así que sin mas ni mas me envistió de tal manera que sentí su enorme guevo llegar a mi garganta eso fue suficiente para lograr en mi un orgasmo que me hizo retorcer de placer , Alex me bombeaba con mas fuerzas y yo le pedía que lo hiciera con mas fuerza me cogia como una perra me daba nalgadas y hasta me metió su dedo índice en mi culo lo cual me encanto aunque era la primera vez que algo entraba en el, me saco la verga y dándome vuelta me cargo yo tome por debajo de mi ese inmenso guevo y me lo volví a meter, lo bese y tomando con mi mano su cara lo mire fijamente ahora era yo la que me movía con frenesí el comenzó a sentir los embates de mis embestidas y solo llego a de gruñir y decir " así, así hazme acabar perra" y segundos después vació su leche dentro de mi la cual me invadió totalmente, pero yo no pare de moverme y el decidió túllame al sofá de nuevo yo corrí hacia el y tome su verga que aun seguía dura y se la chupe hasta que su flacidez fue mas evidente.

Me levante nos besamos, mordí su oreja, le di las buenas noches y me retire a mi recamara en la cual mi esposo dormía como oso invernando pase mis dedo por mi concha y los pase por sus labios.

Al día siguiente nos levantamos tomamos una ducha desayunamos con Alex nos acompaño a buscar nuestras cosas y nos despedimos hasta otra nueva ocasión, yo al despedirme lo hice con un beso en su mejilla y susurre a su oído "la próxima será en mi casa".

Bueno amigo gracias por leer mi relato nos veremos en la próxima ocasión.