Alberto. Mi joven sumiso.

Sin pretenderlo, termine conviviendo con un chico más joven que se convirtió en mi sumiso, mi juguete y mi polla

Alberto. Mi joven sumiso

Que ganitas de volver a casa. Al final me pille un vuelo de regreso y llame a Alberto para que fuera a recogerme al aeropuerto.

He quedado con él en la parada de taxis. Llevo unos leggings de cuero con cremalleras y correas en los laterales de mi cintura que se ajustan perfectamente a mis curvas. Botines negros de tacón de aguja con plataforma que elevan mi 1´57 y camisa blanca que deja ver mi sujetador de encaje al llevarla un par de botones abierta. Me maquillé lo justo y recogí el pelo en un moño despeinado.

Justo cuando estoy esperando veo como dos chicas que están a mi lado hablan  y señalan hacia mi izquierda. Sonríen y por sus gestos se trata de algo que les llamó la atención. Miro hacía la izquierda y veo como se acerca hacia nosotras un chico vestido con un pantalón de cuero negro ajustado, botas de militar, camiseta negra con botones en la parte superior abierta mostrando la parte alta de su pecho y en las muñecas unas muñequeras de cuero.

En mi cara se dibuja una sonrisa y veo que es Alberto, aunque le gusta que le llamen AL. Es un hombre de 29 años muy atractivo, mide 1´88, unos 75 kg, pelo negro y corto, barba de unos 3 días, cuerpo atlético y unos preciosos ojos marrones que esconde tras sus gafas de sol. Sinceramente este chico es un pecado y un juguete en mis manos.

Se para a mi lado y me da un pico.

-Que bien que ya estés de vuelta –me dice con una sonrisa en esa boca que me pierde

-Hola AL ¿Cómo te fue en mi ausencia? – veo como estira su camiseta por la parte de abajo y le miro

Escucho el cuchicheo y no puedo evitar mirar hacia donde están las chicas y sonreír al ver como se comen a AL con la mirada.

-¿Cuánto tiempo llevas sin correrte? –le digo por lo bajito mientras miro como su pantalón se marca de una forma exagerada.

-Un par de semanas –me dice bajando la cabeza

-¿Joder lo has visto? Madre mía, pero eso no puede ser de verdad – dice una de las chicas mirando el tremendo bulto que se marca en el pantalón de AL.

Miro hacia ellas y sin desviar la mirada me pego a AL. Levanto un poco su camiseta y veo su polla completamente dura hacia un lado y apretada bajo el pantalón.

-Os aseguro que es de verdad. -Deslizo la mano por encima del pantalón recorriéndola. Siento como palpita y jadea al sentir mi mano.

-Hay zorras con suerte, hay que joderse –la escucho decir por lo bajo a una de las chicas

-Coge mis maletas, son esas dos. Vamos mi Chico.- Miro a AL fijamente mientras le señalo con el dedo las maletas.

Sonrío maliciosamente mientras me giro y camino por donde vino AL,  el cual me sigue con las maletas.

-¿Dónde dejaste el coche mi Chico?

-Siga recto, yo la indico.

Camino delante de él, mi movimiento de cadera es inevitable por los tacones que llevo, sé que “mi Chico” lleva sus ojos clavados en mi culo y su polla debe de palpitar sin parar bajo el pantalón. Llegamos donde AL dejo el coche y regresamos a casa.

AL es de todo menos discreto. Es muy tímido, pero a la vez un descarado nato que pasa de todo.

Nos conocimos en la cafetería que trabaja y en la que suelo desayunar a diario pues está al lado de la oficina. Solemos bromear entre nosotros y hay muy buen rollo. Es un placer ver ese cuerpo pasear por la terraza o el local mientras sirve las mesas. En ocasiones lleva un marcado paquete, que es imposible no mirar salvo que no tengas ojos en la cara.

Una mañana mientras desayunaba, escucho a AL hablar por teléfono y discutir con alguien. AL me contó que tenía un problema en el piso y  que la casera les había dicho a él y sus compañeros que tenían que salir de allí en una semana. No podían vivir en él mientras hacían una reforma un tanto larga y complicada. Tenían que levantar parte del suelo por culpa de una avería y había decido cambiar las baldosas de la casa o gran parte de estas. Con el trabajo no le quedaba tiempo para buscar un sitio y mudarse tan rápido.

Reconozco que amo mi libertad y mi espacio. Aunque llevo mucho tiempo sin compartir piso y me he acostumbrado a vivir sola, al ver la situación en la que estaba, no pude resistirme en ofrecerle mi casa mientras buscaba algo más tranquilamente.

La respuesta fue un SI instantáneo. Le di mi dirección, un juego de llaves y le pedí que se mudara como viera oportuno. Yo por trabajo no disponía de todo el tiempo que quería y no estaría siempre en casa. En unos días se mudó y ya llevamos unos meses conviviendo. En este tiempo he viajado por trabajo y el tiempo que he estado en casa, me ha servido para conocerle mejor y sorprenderme de cómo es AL realmente. Desde el principio he intentado que se sienta a gusto y no como un extraño.

Un día llego del trabajo y veo que AL se mete en el baño y cierra la puerta. Cuando paso por su cuarto veo que su ordenador esta encendido. Mi curiosidad me puede y me acerco a la mesa. Tiene una página abierta, se llama CAM4 y está en el nombre de usuario chicociberse.

Hay un montón de juguetes sobre el escritorio. Desde un amplio surtido de plugs anal, una polla con ventosa de una dimensión bastante grande, tiene ropa, un arnés de cuero, una jaula, cockring y un collar con correa. Me sorprende todo ello y salgo de allí para ir a mi cuarto.

Saco el portátil y busco la página. Consigo dar con el perfil de chicociberse y lo reviso. Hay fotos que coinciden con el físico de Al y me sorprendo al verle en ese estado de erección y al tamaño de su polla que le llega hasta el ombligo. Reconozco que nunca le  había visto desnudo. En casa suele ir en pantalón corto y camiseta por fuera. Es complicado disimular ese marcado paquete que lleva a veces. Y su culo redondo ajustado bajo el pantalón es tremendo. Es muy atractivo. Como mujer me pone y reconozco que me he tocado pensando en él, pero nunca le he buscado. Convivir con él hace que sea un tanto más distante, porque no quiero problemas. También reconozco, que a partir de ese día, todo cambio.

Veo como AL sale del baño y sin detenerse me saluda.

-¡Buenas tardes Paola!

  • ¡Hola AL!

Va a su cuarto y cierra la puerta. Al cabo de unos minutos veo como inicia sesión de nuevo, abre su cam y allí está el.

-Guauuu joder con AL. –digo en un susurro mirando la pantalla embobada

Ahora lleva el arnés de cuero. He revisado su perfil y he visto que es sumiso y le gusta estar en castidad. Creo que le va a reventar la polla de lo dura que esta. Lleva un cockring y recorre su polla con la mano abierta hasta llegar al glande creando un hilo con el presemen y su dedo.

Agarra su polla, se pajea suavemente, desliza la mano por sus huevos y se gira. Desliza ambas manos por sus nalgas y se da un azote. Mis ojos están clavados en la pantalla y veo con sorpresa todo lo que hace. Ahora se abre las nalgas y puedo ver que tiene un plug joya en el culo. Desliza la mano sobre él, lo saca y entra un par de veces y se gira de nuevo para sentarse.

Veo que hay una ventana de chat en el que se puede escribir. La gente deja mensajes y entre ellos hay uno que pone lo que acaba de hacer AL. Me atrevo a escribir en él.

-¿Cuánto tiempo llevas duro?

-2 horas

-¿Cuánto llevas sin correrte?

-10 días – me responde

No puedo evitar poner los ojos como platos. Yo no aguanto un día sin hacerlo. Para mí el explotar y correrme como si no hubiera un mañana es como el aire que respiro. AL sigue tocándose y su polla palpita.

-Tienes una bonita polla ¿puedo saber cuánto mide?

-22 cm

-Se ve muy gruesa –resoplo mientras escribo

-Lo es

-¿Conoces la circunferencia?

-17 cm en la base

-¿Tienes Dueña que te someta? – me estoy poniendo cachonda

-No, pero alguna me ha sometido

-¿Te gustaría que yo lo hiciera? –se me pasan cosas por la cabeza y no tengo ni idea del tema

-Si ¿porque no? –cada vez que deja de teclear acaricia su polla

-Me encantaría que te pusieras tu collar –solo de pensar que lo hará, me excita sobremanera

Agarra el collar y se lo ajusta al cuello. Me muestra la correa.

Me levanto y me quito el vestido. Quedo en ropa interior, medias y tacones. Las medias son negras, finas y con liga de encaje al muslo. Llevo un conjunto negro de tanga y sujetador de encaje transparente. Bajo la pantalla del portátil y camino hacia el cuarto de AL. Abro la puerta sin llamar y veo su cara de sorpresa. Me acerco a él y agarrando la correa tiro de ella.

-Apaga el ordenador y sal fuera ahora mismo – le digo en tono serio y salgo de la habitación

Veo como teclea y cierra la pantalla del portátil. Se levanta y camina hacia la puerta hasta ponerse a mi lado

-¿Así que este collar no tiene dueña? – le pregunto mientras agarro la cadena y la deslizo por mi mano

-No Señora –me dice mientras se arrodilla ante mí

Me agacho, acerco mi cara a su oreja y al mirar hacia abajo veo como palpita su polla.

-¿Dime tu nombre? –le digo en su oreja para que sienta mi aliento

-Puede llamarme “Chico” Señora –me dice bajando la cabeza y con las manos en posición sumisa

-Serás “mi Chico”, ahora eres mío –le digo acariciando su cabeza como si fuera un perro

Justo a mi lado está el sofá y me siento cruzando las piernas.

-Ven aquí –le digo

Camina a 4 patas hasta ponerse a mi lado. Llevo la mano a su barbilla y se la levanto para que me mire.

-No voy a hacer nada que tú no quieras. Reconozco que no tengo experiencia en este tema y aunque puedo ser un tanto dominante, no sé muy bien que es lo que buscas exactamente.

-¿Podemos aprender juntos Señora?  -Me dice con una mirada casi suplicante porque acepte

-Antes tenemos que hablar como Paola y AL. Después lo haremos como tu Señora y mi chico. Si estamos de acuerdo… lo haremos. ¿Te parece bien mi Chico?

-Si Señora, lo estoy deseando

Me levanto del sofá y cogiendo su correa tiro de el para que camine a 4 patas detrás mío. Le llevo al baño y lo pongo al lado de la ducha.

-Esto es lo único que haremos antes de nuestra charla pendiente. Quiero que me desnudes y permanezcas de rodillas mientras me ducho. ¿Te ha quedado claro?

-Si Señora

-Empieza mi Chico

Lleva sus manos a mis pies y quita uno a uno mis zapatos. Los deja uno pegado al otro justo a su lado. Veo que lo hace como si fuera un ritual. Lleva sus manos a una de mis medias y la desliza hacia abajo con sumo cuidado. La dobla, la deja a su lado y hace lo mismo con la otra. Levanta la mirada y me mira, a lo que yo asiento con la cabeza indicándole que siga. Estoy muy excitada, nunca antes había estado ante una situación así. Siento que es como un juguete en mis manos. Lleva sus manos al tanga y lo desliza por mis piernas. Le ayudo levantando mis pies para que lo  quite y le tiendo mi mano para que me lo de.

-Tome Señora – me dice

Acerco el tanga a mi nariz y lo huelo aspirando con fuerza. Estoy muy cachonda.

-Levántate – le digo

Le doy la espalda y dejo que me quite el sujetador. Lo abre y desliza los tirantes por mis hombros y mis brazos hasta quedar con él en la mano. Se acerca lo justo para no rozarme con su polla, aunque sin querer su glande roza mi espalda. Me encanta esa suavidad y lo mojada que esta. A su lado soy pequeña y más sin tacones.

-Arrodíllate – le digo mientras me giro y deslizo la mano por su cabeza de nuevo

-Toma es un regalo –le paso el tanga que llevo en la mano.

Entro en la ducha y dejo caer el agua por mi cuerpo. Reconozco que en alguna ocasión, AL ha dejado la puerta un poco abierta y he mirado de pasada mientras se duchaba. Pero tenerle ahí de rodillas, mirándome, me excita sobremanera. Pongo jabón en mis manos y me froto. Sentir el agua caer sobre mi piel me destensa del largo día.

-Uffffff  que placer por favor –resoplo mientras toda mi piel se eriza con fuerza

Dejo caer agua sobre mi pelo y deslizo las manos por el echándolo hacia atrás. Cierro los ojos y sigo acariciándome. Por un momento me olvido de que no estoy sola y mis manos recorren mis pechos, los aprieto y pellizco los pezones entre mis dedos. Bajo por mi vientre con la mano abierta hasta llegar a mi pubis. Sigo por encima de mi coño y uno de mis dedos se cuela entre mis labios abriéndolos, sintiendo el flujo que hay entre ellos mientras subo. Mi coño está completamente rasurado y suave.

Escucho un pequeño ruido y abro los ojos. Veo a AL en la puerta de la ducha mirándome, recorriéndome con la mirada y al sentirse descubierto, baja la mirada.

-Entra de rodillas pero quédate en la entrada y mírame –le digo

Veo como gatea colocándose dentro, pero en la misma puerta. Se sienta sobre sus piernas y me mira. Su polla esta como el acero y palpita. Lleva el tanga en la mano y roza su polla con él.

-Abre la boca mi Chico. –le digo mientras acerco un par de dedos y los meto para que saboree mis flujos.

Jadea en mis dedos chupando y lamiendo como si fuera un perro. Su mano se desliza por la polla casi por inercia. Sonrío al verlo y saco los dedos. Me echo hacia atrás y me pego a la pared. Cierro el grifo y le miro. Deslizo la mano hacia mi coño y hundo un par de dedos dentro. Comienzo a follarme mientras la palma de mi mano frota el clítoris.

Le escucho resoplar y desliza la mano por su polla. La suelta con rabia y vuelve a ella. Su cuerpo se tensa. Yo sigo masturbándome y cada vez estoy más al límite. Mi respiración se dispara, mi cuerpo se tensa, mi piel se eriza, mis pezones están como piedras y comienzo a gruñir con fuerza. El suelta su polla con rabia y se estremece de gusto sin llegar a correrse.

-AHHHHHHHHHHHHHH ¡JODER ME CORRO! –estallo con fuerza y me estremezco de placer.

Siento un orgasmo largo e intenso y no puedo dejar de mirar cómo se muerde el labio y se acaricia. Sigo moviendo mis dedos cada vez más despacio, hasta deslizarlos entre mis labios. Me acerco a él, abro bien mis piernas y agarrándole del pelo pego su cabeza a mi coño.

-Límpiamelo –le digo

Sin decir nada hunde su boca en mi coño y me lo come con desesperación. Desliza la lengua por encima, entre mis labios, en la entrada, rodeando mi clítoris.

-Mmmmmm  no pares joder – gimo sin poder evitarlo. Nunca me lo habían comido con tanta ansia.

Su mano abre mis labios mayores y su lengua juega en mi clítoris totalmente expuesto y sensible. Cada roce me vuelve loca y no puedo dejar de gemir.

-Uffff –resoplo.

Le dejo limpiarlo durante unos minutos. Tiro de su pelo hacia atrás y le hago parar. Le miro a los ojos y veo como se relame. Tiene media cara manchada con mis flujos. Deslizo la lengua por su cara y recojo parte de estos.

-¿Sabes que eres un buen chico?

-Me encanta complacerla Ama

Es la primera vez que me llama Ama y me gusta sentir esa sensación de propiedad. Sonrío y le doy la mano para ayudarlo a levantarse.

-Dúchate conmigo –le digo

Abro el grifo y dejo que el agua caiga por nuestros cuerpos. Su polla sigue dura y amenazante, es impresionante verla. Creo que nunca había tenido una polla tan grande cerca. No me entraría toda en la boca y tengo mis dudas de que me entre por completo en el coño sin reventarme. Aún así un escalofrío recorre todo mi cuerpo solo de pensarlo.

Nos duchamos y no puedo evitar deslizar la mano por su polla. La miro como si no hubiera visto nunca una. La recorro suavemente y acaricio los huevos con la punta de mis dedos. Veo como echa la cabeza hacia atrás y se tensa. Muerde su labio y gime. Deslizo la lengua por su pezón, lo muerdo y pellizco el otro entre mis dedos. Su cuerpo se tensa de nuevo y gimo. Me separo de él y sigo duchándome. Sigo muy caliente, muy excitada, deseo más y… o paro o me lo follo allí mismo. Termino de enjabonarme, me lavo el pelo y salgo de la ducha, dejándole que el termine.

-Te espero fuera –le digo

Me envuelvo en una toalla y secándome el pelo con otra salgo al salón y me siento en el sofá. Le veo salir del baño con una toalla y se acerca a mí.

-Tenemos que hablar AL. –le digo mientras golpeo el sofá para que se siente a mi lado.

-¿Paola estas molesta conmigo? ¿Me vas a echar?

-No AL, no te voy a echar. Yo no funciono así. No te ofrezco mi casa y después te echo como si nada. Pero tenemos que hablar de lo que ha pasado. No sé si tienes pareja, si esto es puntual, si solo es un juego, no se….

-No puedo mentirte por algo que has visto con tus propios ojos. Soy sumiso, me pone muchísimo que me sometan y me gusta la castidad. –me dice medio bajando la cabeza

-¿Eso es lo que provoca los empalmes que llevas muchas veces? –le digo mirándole a los ojos

-Sí, ya veo que te has dado cuenta. –me dice tímidamente

-Claro que me he dado cuenta y más de una clienta también.

Estuvimos hablando durante largo rato. Hablamos de todo un poco, de él, de mí y de lo que haríamos a partir de ahora. Él nunca había tenido nada real, no lo habían sometido, ni había conocido ninguna mujer Dominante. Solo lo habían sometido de forma ciber y yo desconozco como es la dominación femenina. Muchas cosas son nuevas para nosotros  y me ha pedido que aprendamos juntos. Hemos marcados nuestros límites y preferencias. Yo no soy sádica y a él no le gusta el dolor.

Le gusta servir y creo que todo lo que me cuenta lo puedo controlar. Le encanta exhibirse y que lo miren. Así que hemos llegado al acuerdo de que él se encargara de los trabajos de la casa. Sera mi sumiso doméstico. Queda exento de cualquier tipo de pago económico, como alquiler, agua y luz. Aunque lleva unos meses conmigo y no le había cobrado nada, él había insistido en numerosas ocasiones con ayudar en los gastos. Seguirá sin pagar nada, pero cuando yo esté en casa, el hará todo tipo de tareas completamente desnudo, salvo que yo le indique lo contrario. Puedo disponer de el en cualquier momento y hacer lo que me plazca. Es mi sumiso, mi juguete y mi polla. Yo entiendo que le guste la castidad, pero a mí me encanta follar, así que él me follara cuando yo se lo diga y no se correrá. Ha aceptado, pero no creo que sea consciente a lo que se enfrenta conmigo. Creo que va a ser todo un reto para ambos.

He pasado tiempo fuera, también lo hemos pasado juntos y nos hemos adaptado a la nueva situación. Es un buen sumiso y nunca he necesitado castigarle por nada. Cuando estoy fuera  él no puede invitar a nadie. Es mi casa, mi espacio y es lo único que le pido en mi ausencia. Pero cuando estamos juntos, la cosa puede cambiar.

Antes de vivir sola compartí casa con Angy y Marta. Desde entonces tenemos una bonita amistad y quedo con ellas siempre que puedo. Suelo salir de fiesta con ellas y sé que han compartido cama en algún trio. Angy es separada y Marta soltera. En una de nuestras últimas salidas se quejaban de la mala suerte que habían tenido últimamente con los hombres y que no habían disfrutado del mejor sexo. Yo me eche a reír y les dije que no compartía la misma opinión. Ellas saben que mi vida sexual es bastante intensa. Les pregunte si se dejarían follar por alguien más joven, con una buena polla y que no les pusiera pegas en nada. A lo que las dos dijeron directamente que SI. Las invite a cenar en casa para el siguiente fin de semana y no les deje preguntar nada más. Mi cabeza empezaba a imaginar cosas y me excitaba por segundos.

Aprovechando que AL tenía ese día libre, le dije que había quedado con un par de amigos en casa para cenar y necesitaba que me echara una mano con todo. Así que se prestó a ayudarme en todo lo que necesitara, incluido ser mi sumiso por esa noche. Le indiqué como quería que vistiera para la ocasión. Llevaría el collar con la cadena, muñequeras, un bóxer transparente negro, el cockring y el plug anal joya. Tampoco le deje hacer más preguntas y no le dije que en lugar de 2 hombres, vendrían dos mujeres.

El miércoles deje un mensaje en el grupo que tengo con las chicas con las condiciones para la cena. “¡Hola chicas! Espero que no me falléis el sábado y podamos disfrutar de la cena que os tengo preparada. Debéis venir con vestido y no podéis traer ropa interior en la parte de abajo. Tengo muchas ganas de que conozcáis a mi compañero de piso. Paola”

Aunque les comente que tenía un compañero de piso, no les había hablado mucho de él y no saben que es sumiso.

Llega el sábado por la noche y todo está listo para la ocasión. Yo llevo falda negra a medio muslo y con una abertura en el derecho, corsé rojo, medias negras con liga al muslo, tanga de hilo de encaje y zapato de tacón de aguja negro.

Cuando suena el timbre, le agarro de la cadena y tiro de él.

-Mi Chico vamos a recibir a los invitados. –le digo sonriendo

Camina a mi lado, de pie.

-¿Nervioso? –le digo acariciando su mejilla

-Si mi Ama, estoy nervioso.

-Pues relájate, porque lo pasaras muy bien. – sonrío

Abro la puerta mientras le miro. Veo como se dibuja una sonrisa en su cara al ver que son dos mujeres y me guiña un ojo.

-¡Hola chicas! ¡Que guapas estáis! Pasad por favor. – Me pongo a un lado y mi Chico hace lo mismo.

Cuando entran, mi Chico cierra la puerta y camina a mi lado hasta ponernos al lado de mis amigas. Estas resoplan y le recorren con la mirada.

-Joder Paola, que calladito te lo tenías. –me dice Angy mirando hacia la polla de Chico.

-Os presento a “Chico”, es mi compañero de piso y mi sumiso. –sonrío maliciosamente mientras Chico se pone de rodillas a mi lado y le acaricio la cabeza

-Uffffff quiero uno igual que el –dice Marta mientras le ve arrodillarse y mirando su polla marcada e hinchada bajo el bóxer.

-Mi Chico ellas son Angy y Marta, eres su regalo por esta noche. –sonrío al ver las caras que ponen al decirlo

-¿Nuestro regalo? –me dice Angy

-Sí, digamos que es vuestro regalo. Ya lo iréis descubriendo durante la cena. –dibujo una sonrisa en mi boca y veo la cara de desconcierto de las dos.

-Encantado de conocerlas. Estoy a su entera disposición. –les dice Chico

-Muy bien mi Chico –le digo agarrándole de la barbilla para que me mire

Angy es una mujer de 45 años, 1´65, su peso es normal, rubia, pelo corto, facciones dulces, ojos azules y 95B de pecho. Lleva un vestido de color rojo cruzado al pecho y por encima de la rodilla. Lo acompaña con sandalias de tacón y tiras finitas de color rojo también.

Marta es más bien delgada, 43 años, 1´60, morena, pelo rizado y largo. 90B de pecho, ojos verdes y labios carnosos. Trae un vestido verde menta suelto, solo ajustado al pecho y zapato de tacón con tiras anchas de color blanco.

Me muevo y me pongo detrás de ellas. Deslizo la mano por encima de sus vestidos y toco sus culos para comprobar que no llevan ropa interior.

-Veo que habéis seguido mis indicaciones. –les doy un azote a las dos.

-¿Tú también eres nuestro regalo? –me dice Marta

-Más quisieras tu – le digo con una sonrisa

El salón está dividido en dos espacios. En la zona en la que estamos hay dos sofás grandes colocados en L  en los que nos acomodamos y delante de estos la mesa centro sobre la que hay algo de picoteo. Chico va a la cocina y trae la botella de vino que dejé allí. Sirve nuestras copas y se pone a mi lado. Lleva un marcado paquete desde hace un buen rato.

-¿él no va a cenar con nosotras? –me dice Angy

-Sí, pero todo a su debido tiempo. – le digo sonriendo.

Antes de que llegaran he estado hablando con mi Chico y le he dado las órdenes que seguirá durante la cena.

Picoteamos algo antes de cenar y las chicas no pueden evitar bromear en lo referente a Chico. Sin duda alguna, el tema preferido fue su polla. Mi Chico estaba puesto de tal forma que podía ver lo que provocaban las palabras de las chicas.

-Veo que os gusta su polla. Sois unas guarras chicas. Parece que no habéis visto una en vuestra vida. –les digo mientras deslizo la mano por ella.

Las chicas están encantadas de ver a Chico así, exhibiéndose delante de ellas, sin protestar y tan obediente.

-Esta cena es un poco encerrona. Ambas partes tenéis fantasías y deseáis cosas. –les miro a los 3 y prosigo.

-Para Chico va a ser todo un placer que lo ofrezca o ceda a mis amigas y para vosotras será todo un placer el tener buen sexo como hace tiempo no habéis tenido. Podéis pedirle a Chico que haga para vosotras lo que deseéis. La única condición es que yo estaré presente. –Los miro y en la cara de chico hay una pequeña sonrisa. Después de un rato charlando y picoteando… empieza la fiesta

-Puedes empezar mi Chico –le digo mientras miro a las chicas

Chico mueve la mesa centro para separarla y poder ponerse entre Angy y Marta. Una vez delante de ellas, baja su bóxer dejando salir su polla completamente erecta y se lo quita.

-Joder! Pedazo polla jajajajaja –suelta Angy riéndose

Yo no puedo dejar de mirarlas. Ver sus gestos, su nerviosismo e intranquilidad. Chico se agacha y se pone de rodillas. Agarra las rodillas de Angy y las separa con cuidado, casi como pidiendo permiso para hacerlo.

-Es vuestro regalo, así que disfrutarlo al máximo. –les digo, indicando que se dejen hacer

Desliza las manos por sus muslos hasta llevar ambas hasta sus nalgas y tira de ella hacia el borde del sofá. Se recuesta en el respaldo y abriendo sus piernas da total acceso a la boca de Chico.

-Uffffff –Angy resopla al sentir como desliza la lengua recorriéndolo

Desliza la lengua por encima de sus labios, sube y baja por ellos. Lleva el coño completamente rasurado. Yo me levanto del sofá y me pongo a su lado. Veo como Chico abre el coño de Angy deslizando sus dedos y la lengua por él limpiando sus flujos.

-Joder que boquita tiene. –dice con la respiración entrecortada y acelerada

Hunde un dedo en su coño, rodea el clítoris, lo muerde entre sus dientes, con sus labios y succiona. Su coño cada vez está más mojado y al deslizar los dedos provoca un pequeño chapoteo. Marta no pierde detalle de la boca de Chico.

-¿Por qué no te desnudas? La siguiente serás tú –le digo a Marta

Sin pensárselo dos veces, Marta se mueve en el sofá y desliza el vestido hacia arriba. Se lo quita y estirando mi mano lo recojo. No lleva sujetador debajo y queda completamente desnuda. Sus pezones están duros.

Angy se retuerce de gusto. Su clítoris esta duro y Chico no para de follarla con los dedos. Por su respiración, siento que va a correrse en nada. Chico desliza la mano por el muslo de Marta.

-Acércate a Angy y así podrá tocarme mejor. – indico a Marta

Marta se pega a Angy y Chico sube por su muslo hasta su entrepierna. Marta se recuesta en el sofá y da mayor acceso a su coño. Agarra sus tetas y las aprieta. El desliza los dedos entre los labios de su coño. Solo lleva un pequeña tira de bello sobre su rajita. Hace vibrar la lengua en el clítoris de Angy y mueve los dedos un poco más rápido. Lleva un par de dedos a la entrada del coño de Marta y empuja. Está muy mojada y se deslizan solos. Entra y sale de ella y con el pulgar juega en el clítoris. Mueve los dedos más rápido en el coño de Angy y hace vibrar la lengua. Su cuerpo se tensa y agarrando la cabeza de Chico, se corre en su boca.

-Joder me corro cabrón, como lo comes, ohhhh siiiiiii –grita mientras le llena la boca de flujos

Poco a poco baja el ritmo de sus dedos y los saca. Me mira y asiento con la cabeza, se lleva los dedos a la boca y los chupa hasta dejarlos limpios de flujos. Retira los dedos del coño de Marta.

-Ponte a 4 patas sobre el sofá –le dice a Angy

-tu también Marta –le digo

Marta se pone a 4 patas y Angy abre su vestido para poder quitarlo. Me acerco a ella y recojo toda su ropa mientras se pone a 4 en el sofá. Chico se mueve y agarrando su polla, la lleva a la entrada del coño de Angy y se la clava directamente.

-Ahhhhhhhhhhhh ¡joder! –grita al sentir como se la clava por completo

Chico mueve su cadera y lleva su mano al coño de Marta. Desliza los dedos por el recorriéndolo y al subir le da un azote en su culo.

-auuuuu –protesta al sentirlo

Chico no deja de follar a Angy, su movimiento de cadera es rápido. Mete los dedos en el coño de Marta y la folla con ellos haciéndola gemir con fuerza.

-ahhhh ¡joder me va a reventar el coño! –grita Angy

Ambas están muy cachondas y yo me estoy poniendo muy perra también. Sigo mirando la escena de las dos con el culo en pompa sobre el sofá y Chico follandoselas sin parar. Hace girar los dedos en el coño de Marta y sus dedos son como una polla entrando y saliendo.

Deslizo la mano por el culo de Marta y acaricio sus nalgas. Miro a Chico que no deja de mirarme pidiendo mi aprobación para follarla con más intensidad. Asiento con la cabeza y sacando los dedos del coño de Marta, agarra las caderas de Angy comenzando con un mete y saca sin parar. Yo azoto el coño de Marta con la mano y mojando un par de dedos los hundo dentro moviéndolos rápido.

-AHHHHHHHHHHHHH ¡JODER ME CORRO! –Angy grita como una loca mientras se corre en la polla de Chico.

Chico me mira y sonríe. Se escucha el chapoteo de mis dedos en el coño de Marta y esta estalla también en otro orgasmo.

-¡ME CORROOOO! AHHHHHHHHH –Gime y grita mientras giro mis dedos en su interior

Chico sigue moviéndose mientras Angy deja de correrse y cuando termina yo saco los dedos del coño de Marta.

Saca la polla del coño de Angy y azota ambos culos  a la vez. Yo sonrió al ver como protestan. Pone una de sus manos en la cadera de Marta y encarando su polla, se la clava hasta el fondo.

-AHHHHHHHHHHHHH ¡JODER! –Chico la hunde despacio, pero del tirón.

La polla de abre camino hasta tocar el fondo y veo como se agarra mientras empuja con fuerza.

-¿Preparada para disfrutar? –le digo a Marta

-Joder, pero si me voy a correr sin que se mueva de lo grande que es –dice al sentirse tan llena.

Miro a Chico de forma cómplice y él sonríe. Sabe que la primera vez que yo sentí su polla dentro, me corrí enseguida sin poder evitarlo al sentirme tan llena y tan abierta.

Comienza a mover sus caderas en un mete y saca.

-AHHHHHHHHHHHHH –Marta grita sin parar

Yo me pongo junto a Angy y la miro. Aun anda recuperándose del orgasmo. Deslizo la mano por su coño, esta empapado.

-Eres una perra muy caliente, no sabía que eras tan guarra jajajajja  -me rio de forma cómplice.

-Joder Paola, no me toques las narices. Para guarra tu zorra. Ahora entiendo porque llevas siempre una sonrisa. – me dice mientras mira como Chico se folla a Marta y la tiene a gritos

-ME CORROOOOOO JODER!!!  -grita como una loca y Chico sigue sin parar

Su cuerpo se retuerce y se estremece de gusto. Chico la empotrándola contra el sofá y ella se agarra con fuerza.

-ME CORRO OTRA VEZ JODER!!! –grita Marta

No baja el ritmo y arrastra a Marta a un segundo orgasmo mientras Angy y yo nos reímos. Da un par de embestidas y sale. Veo como su polla palpita y se estremece de gusto. Esta empapada de flujos. Me acerco a Chico y acaricio su vientre.

-¿Todo bien mi Chico? –sonrío mientras controla no correrse

-Si mi Ama, bastante bien, gracias mi Ama.

Cuando se tranquilizaron un poco, aprovecharon a darse una ducha y refrescarse de la sudada que llevaban. Yo mientras puse la mesa para sentarnos a cenar tranquilamente. Después de cenar decidimos seguir un poco más la fiesta. Las chicas querían aprovechar la oportunidad de poder mandar a chico todo lo que quisieran y disfrutar su regalo al máximo.

Tras mi regreso de Sevilla, cuando llegamos a casa AL deja las maletas en mi habitación y se va a su cuarto. Yo necesito una ducha y refrescarme. Me seco antes de salir y me pongo una camiseta de tirantes y unas mallas cortas. Voy en busca de AL.

Cuando entro en el cuarto esta con poca luz. Solo la de una lamparita que hay sobre la mesita de noche. AL se ha quitado la ropa y tan solo lleva el bóxer.

(Voy a poner lo que ambos sentimos en cada cosa que hacemos. Lo que nos provocamos y a donde nos lleva nuestro deseo)

Paola: me acerco por detrás. Deslizo las manos por tu pecho hasta llegar a tus pezones y los pellizco

Chico: mmm siento un escalofrió y gimo

Paola: mientras mi boca se pega a tu cuello, te beso y sientes mi respiración en tu oreja

Chico: empiezo a respirar muy fuerte. Esta llegada repentina me ha asustado. Pero tu beso me excita muchísimo

Paola: te susurro... no te he traído nada de Sevilla, pero quiero hacerte un regalo

Chico: jadeo y te miro a los ojos emocionado

Paola: agarro tu silla y la giro

Chico: me quedo petrificado

Paola: me coloco entre tus piernas

Chico: las abro despacio

Paola: te miro y mis dedos pellizcan de nuevo tus pezones

Chico: auch

Paola: levántate - te digo

Chico : me pongo de pie de inmediato. Te miro y mi pecho se levanta por la respiración. Trago saliva. Estoy bastante nervioso con eso del regalo, no sé qué puede pasar por tu cabeza. Mi polla está hacia la izquierda pegada al muslo, con el bóxer apretado y bastante dura.

Paola: llevo las manos al bóxer y tiro del hacia abajo. Lo deslizo por tus piernas y te lo quito. Me ayudas levantando tus pies

Chico: mi polla salta hacia arriba dando un bote y quedo desnudo delante de ti

Paola: siéntate.

Chico: me vuelvo a sentar y trago saliva

Paola: agarro tu polla y la escupo

Chico: al notar tu saliva mi polla se tensa y gimo de placer

Paola: vuelvo a escupir varias veces y la restriego por tu polla, la humedezco

Chico: Uffffff. Noto tú saliva caliente empapar mi polla y me vuelvo loco. Echando la cabeza hacia atrás y disfrutando como un perro

Paola: te miro y bajo la cabeza. Sientes mi respiración en tu polla, saco la lengua y comienzo a chupar tus huevos deslizando la lengua por ellos

Chico: ahhhh. No me lo puedo creer

Paola: con la palma de mi mano empujo la polla contra tu vientre

Chico: te miro y gimo desesperado. Llevo muchos días sin correrme y cada lametón es casi un orgasmo

Paola: sientes como la recorro de arriba abajo empujándola, se desliza bien al estar húmeda

Chico: me retuerzo sobre la silla gozando de placer

Paola: mi lengua caliente se sigue deslizando por tus huevos. Con la otra mano los levanto y deslizo la lengua por debajo

Chico: noto las placenteras cosquillas de tu lengua menearse

Paola: estiro la piel con mis labios

Chico: Uffff

Paola: por un lado, por el otro

Chico: tu lengua tan cerca de mi culo me vuelve loco y no puedo evitar gemir en voz alta

Paola: meto uno de tus huevos en mi boca

Chico: me agarro a la silla con las manos

Paola: sientes el calor, la humedad, como succiono y hago el vacío con el dentro, mientras lo estiro y sientes la tensión que creo, hasta que suelto y lo dejo caer

Chico: ahhhh mi polla se vuelve a tensar y me obligas a arquear la espalda

Paola: te miro y veo tus gestos. Mi mano no deja de empujar y acariciar tu polla con la palma de la mano

Chico: te devuelvo la mirada completamente desesperado

Paola: agarro el otro huevo y hago lo mismo

Chico: ohhhh vuelvo a gemir como loco

Paola: lo meto en mi boca, succiono, lo voy estirando, se tensa y lo dejo caer. Sonrío. Escupo en tus huevos

Chico: sigo respirando muy fuerte

Paola: los acaricio con mi mano

Chico: ahhhh sonrío de placer

Paola: algo que decir Mi chico?

Chico: me encanta que me escupas

Paola: ves cómo me relamo

Chico: una gota de presemen me asoma del glande

Paola: bajo la lengua de nuevo y la deslizo desde abajo. Subo por tus huevos y rozo la base de tu polla

Chico: intento controlarme. Me agarro más fuerte a la silla

Paola: mi mano sube por tu polla, pero sin empujar. Sientes mi lengua subir por el tronco

Chico: mi cabeza solo piensa en agarrarte de la nuca y follarte la boca pero soy tu sumiso y estoy a tu merced

Paola: mi mano rodea tu polla por la parte de arriba y sigo deslizando la lengua

Chico: notar tu mano tan cerca del glande me estremece

Paola: mi lengua sigue su camino. No dejo de mirarte a la cara sin perder detalle de lo que te hago sentir. Subo hasta el frenillo y mientras mi lengua sube, la mano baja un poco

Chico: ahí la sensibilidad es extrema y me retuerzo  sobre la silla gimiendo. Un gemido largo y sincero

Paola: con la punta de la lengua rozo el frenillo

Chico: empiezo a sudar, estoy en tensión y quiero pasarme así la vida entera

Paola: solo lo rozo con la punta

Chico: mi cadera se levanta de la silla sin que yo pueda evitarlo

Paola: giro en tu glande y lo rodeo. Deslizo la parte de abajo de mi lengua por él. Subo un poco y sientes la lengua como recorre el glande

Chico: mi culo está en el aire moviéndose de arriba abajo. Mi instinto me obliga a moverme

Paola: mi mano la agarra firme

Chico: trago saliva

Paola: mis ojos se entornan de vicio y escupo en tu polla un par de veces

Chico: noto esa mirada que se me clava. Ahhhhhhhh siiiiiii

Paola: mis babas bajan y las restriego

Chico: no puedo parar de jadear

Paola: sonrío. Llevo la punta de la lengua al frenillo de nuevo y juego en el

Chico: mmmmmm. Cada vez que lo haces mi cadera se mueve arriba y abajo con la esperanza de que entre en tu boca

Paola: busco tensarte

Chico: mis manos agarran la silla con fuerza y no puedo parar de gemir

Paola: y justo cuando te tensas.... mi boca se abre y la hundo dentro

Chico: AHHHHHHHHHHH DIOSSSSSS

Paola: mis labios se adaptan a tu polla

Chico: empujo con mi cadera

Paola: sientes el calor, la humedad. Gimo en tu polla.

Chico: me vibra la polla con tu gemido

Paola: Mi mano sube y baja, gira en ella haciendo tope entre mi boca y tu base. Succiono al sacarla. Suelto al meterla

Chico: ohhh joder

Paola: mi lengua se mueve por un lado, por el otro

Chico: mi boca abierta jadea mirando cómo me la comes

Paola: en cada movimiento la sientes por un lado. Sientes como pasa hacia arriba y haces tope en la parte baja de esta

Chico: intento sincronizar mi cadera con tu ritmo pero tu mano me aprieta la base y no me dejas meter más de lo que quieres

Paola: sale y sientes como tu polla se desliza de nuevo por encima de mi lengua

Chico: ahhhh por diosss

Paola: la hago salir de tal forma que tu glande sienta el roce en mi paladar

Chico: estoy sin habla. Los huevos me hormiguean. Tengo la polla empapada en saliva y cada vez que tocas mi glande veo las estrellas. Me duelen las manos de agarrarme a la silla y respiro tan fuerte que se me van a salir los pulmones

Paola: sientes como succiono con fuerza, como la suelto. Mis babas se deslizan hacia tus huevos

Chico: y me encanta el ruido que haces. Tu saliva ya me chorrea por los muslos y moja mi culo y la silla

Paola: hundo un poco más tu polla, hasta que roza mi garganta y al mover tu cadera me provocas una arcada

Chico: ohhh si joder

Paola: al hacerlo, la saco y cojo aire

Chico: te miro a los ojos

Paola: hilos de babas van de mi boca a tu polla

Chico: veo los hilos y me vuelvo loco

Paola: colócate al borde

Chico: pero temo que te hayas enfadado por chocar contra tu garganta. Me muevo despacio hacia el borde de la silla. Mi culo se empapa de la saliva que ha caído y veo tus labios brillar

Paola: mis ojos están llenos de deseo. Escupo en tus huevos

Chico: ahhhh

Paola: dime... ¿qué quieres que haga?

Chico: el goteo de presemen es continuo. Te miro y estoy sin palabras

Paola: mientras te pregunto... llevo un par de dedos a mi boca y los chupo.

Chico: Uffff interpreto eso como una señal

Paola: ¿no vas a decir nada?

Chico: si ama...

Paola: sonrío. Bajo la mano y sientes la punta de mis dedos en tu ano

Chico: soy tu sumiso y puedes hacer lo que quieras conmigo

Paola: ¿seguro?

Chico: abro las piernas y te facilito el gesto. Seguro Ama

Paola: ¿has estado jugando con tu culo hoy? Agarro tu polla

Chico: hoy no ama. Hoy estaba esperándote. Trago saliva al ver que te has puesto algo seria

Paola: ves como coloco los dedos y dejo caer saliva sobre ellos. Están pegados a tu ano

Chico: mi polla late en tu mano. Me estremezco ligeramente al sentir tus dedos

Paola: muevo los dedos. ¿1 o 2?

Chico: puedo con dos Ama

Paola: al escucharte... mi boca se abre y meto de nuevo tu polla dentro

Chico: ohhh joder...

Paola: mis dedos empujan un poco en tu culo

Chico: eso no me lo esperaba gimo como loco. Muevo mi culo sobre tus dedos

Paola: sientes como te follo con la boca. Empujo los dedos

Chico: la punta golpea contra tu garganta y me encanta

Paola: y entro dentro de ti

Chico: aunque me da deseo de meterla más al fondo, noto como tus dedos entran y mi polla se tensa como un ladrillo. Vuelvo a gemir. Esta vez pienso si los vecinos habrán oído algo

Paola: intento seguir el ritmo de mi boca y los dedos

Chico: la sensación es increíble. Mueva donde mueva la cadera siento placer

Paola: mis babas chorrean por tu polla. Te follo el culo con mis dedos

Chico: mis huevos están llenos de leche, me has tenido semanas enteras en castidad

Paola: entran y salen. Primero despacio y luego subo un poco el ritmo

Chico: empiezo a temblar de placer

Paola: Sabes que no te puedes correr en mi boca

Chico: sé que no me puedo correr ama

Paola: porque si no... Te tendré más tiempo en castidad

Chico: ahhhh si ama si

Paola: sigo follandote con mi boca

Chico: sigo agarrando la silla y con la fuerza de mis brazos levanto mi culo y lo dejo caer sobre tus dedos ayudándote a tu ritmo

Paola: subo un poco más el ritmo y la succión. Quiero ver como reaccionas cuando no puedas más y llevarte al límite

Chico: me tienes bien entrenado. Se relaja rápido y tus dedos entran y salen fácilmente y estoy tan mojado que no puedo parar de moverme sobre ellos. La punta de mi polla golpea la entrada de tu garganta

Paola: sigo follandote con los dedos

Chico: saber que no me puedo correr me excita muchísimo

Paola: mi boca no deja de follarte

Chico: te miro a los ojos y se me corta la respiración

Paola: sientes demasiada fricción,

Chico: jadeo fuerte. Ama....

Paola: saco los dedos de tu culo

Chico: por favor... ama...

Paola: la polla de mi boca

Chico: ahhhh

Paola: y paro

Chico: empiezo a temblar sobre la silla. Mi cadera se mueve arriba y abajo como si aún siguieras tocándome.

Paola: me encanta verte así. Me levanto y me desnudo

Chico: estoy empapado de sudor y saliva. Mi polla chorrea presemen y babas

Paola: ves como la ropa cae al suelo

Chico: sigo sin parar de temblar y te miro. He estado a punto de correrme. Te veo desnudar y me empiezo a agobiar. No sé qué planeas. Pero no sé si lo aguantare

Paola: ves como bajo la mano a mi coño

Chico: sigo tu mano con la mirada

Paola: deslizo los dedos y escuchas el chapoteo

Chico: mi polla se tensa tanto que me golpea el vientre con fuerza. Me excita muchísimo saber que usarme así te ha puesto tan mojada. Ahhhh joder.... grito mientras intento sujetarme a la silla

Paola: levanto la mano y la llevo a tu boca. Ábrela -te digo

Chico: sin pensarlo dos veces abro la boca y me meto tus dedos. Empiezo a lamerlos y a chuparlos. Intento a estar a la altura de la mamada que me acabas de dar.

Paola: están llenos de mis flujos

Chico: noto tu sabor

Paola: estoy chorreando

Chico: y te miro a los ojos mientras chupo para no desperdiciar nada

Paola: ¿te gusta?

Chico: mmmmmm Asiento con la cabeza con la boca llena de tus dedos y tus flujos

Paola: acerco mi cara a la tuya y te miro fijamente

Chico: noto mi polla latir al ritmo de mi corazón

Paola: y te digo... quiero que te levantes y me folles como se merece tu ama

Chico: cojo aire y respiro profundamente. Me levanto despacio y me acerco a ti buscando tus labios. Te miro para pedir permiso

Paola: asiento con la cabeza

Chico: te beso en los labios mojados con tu saliva, el sabor de mi polla y los flujos que acabo de chupar

Paola: correspondo a tu beso

Chico: se juntan en nuestras bocas. Te miro y me pongo detrás de ti. Agarro tu nuca y empujo suavemente para que te inclines sobre la silla. Beso tu cuello y tus hombros. Los muerdo suavemente. Beso tu espalda y mis manos aprietan tus pechos

Paola: mi piel se eriza con fuerza

Chico: sigo bajando lamiendo tu espalda hasta llegar al nacimiento de tu culo

Paola: mis pezones están como piedras joder

Chico: Me arrodillo y abro un poco tus piernas

Paola: ves cómo me retuerzo de placer y me estremezco

Chico: muerdo tu culo y empiezo a besarlo y a lamerlo

Paola: mmmmmm

Chico: me adentro entre tus nalgas con la lengua y me doy un baño con tus flujos. Empiezo a lamer como un loco todo lo que tengo delante. Tu coño empapado primero y después tu culo también mojado

Paola: siento como mis flujos te mojan

Chico: mi lengua se mueve todo lo ancha que puedo. Quiero abarcarte toda. Abro la boca y succiono tu coño

Paola: mmmmmm gimo con fuerza

Chico: al oírte gemir no lo puedo evitar. Rápidamente me pongo de pie detrás de ti, agarro mi polla y coloco la punta a la entrada de tu coño

Paola: mi coño está muy mojado y sensible. Darte placer me excita muchísimo

Chico: gracias ama, te digo. Agarro tus caderas con las manos

Paola: aprovecha tu regalo

Chico: y la clavo lentamente

Paola: Ahhhhhhhhhhhh joder

Chico: no quiero hacerte daño

Paola: siento como la hundes

Chico: pero estas tan mojada que entra como si nada

Paola: como me abres

Chico: poco a poco entra hasta la mitad

Paola: mi coño es estrechito y sientes la presión

Chico: la saco y vuelvo a meterla un poco más deprisa

Paola: gimo

Chico: siempre hasta la mitad. Noto las paredes de tu coño abrazando mi polla y mojándola más si cabe.  Empiezo a subir el ritmo. Se me ponen los ojos en blanco. No puedo más y te doy un azote

Paola: ohhh si

Chico: empiezo a follarte hasta la base y mis huevos topan contra tu coño follándote durísimo

Paola: grito sin parar

Chico: he perdido la consciencia del tiempo

Paola: cada embestida grito más fuerte

Chico: no paro de follarte

Paola: mi coño se contrae

Chico: vuelvo a azotarte

Paola: mi piel se eriza. Sientes como aprieto en tu polla con cada azote

Chico: te agarro del pelo y tiro hacia atrás

Paola: mi espalda se arquea

Chico: gimo como loco. La saco del todo y la meto entera

Paola: tu polla entra hasta el fondo

Chico: empiezo a follarte así, toda fuera y toda dentro

Paola: ahhhhhhhhhhhhhhhhh Joder. Mi culo choca contra ti sin poder separarme porque me tienes fijada

Chico: muerdo tu cuello y la clavo hasta el fondo

Paola: ahhhhhhhhhhhhhhhhh joder. Intento ponerme de puntillas y siento como empujas

Chico: jadeo como loco. ¿Ama?...

Paola: ¿sí?

Chico: siempre he querido hacer una cosa...

Paola: ¿qué?

Chico: ¿si consigo que te corras me dejaras hacerlo?

Paola: eso es fácil, porque estoy a punto de correrme

Chico: empiezo a follarte a un ritmo bestial. Ya no se ni cuando entra ni cuando sale

Paola: grito sin parar y me agarro con fuerza a la silla

Chico: te agarro del culo muy fuerte

Paola: siento que vas a destrozarme el coño

Chico: una mano aprieta tu pecho para que no te vayas lejos de mí

Paola: mi cuerpo se tensa

Chico: sigo follandote, noto tu coño apretarse y no paro

Paola: comienzo a gruñir con fuerza

Chico: ya no soy una persona, soy un animal, soy tu animal

Paola: y sientes como estallo

Chico: ni siquiera me da miedo correrme

Paola: me corro en tu polla

Chico: noto tu calor húmedo caer sobre mi polla, pero no me importa

Paola: grito sin parar

Chico: sigo follando, me he vuelto un objeto y solo sirvo para darte placer. La mano que tengo en tus tetas pasa a tu coño empapado.

Paola: me arrastras a un orgasmo largo e intenso

Chico: y lo froto mientras te follo ahora más lento, para que notes toda mi polla

Paola: ahhhhhhhhhhhhhhhhh

Chico: la meto algo inclinada para que te roce más

Paola: mi clítoris está muy sensible

Chico: y no paro de mover la mano y de palmearte el coño

Paola: Ahhhhhhhh joder

Chico: quiero llevarte otra vez al orgasmo. La saco del todo, te siento en la silla, agarro tus tobillos y subo tus piernas. La clavo sin piedad y mientras vuelvo a follarte te miro a la cara

Paola: grito al sentirte, mis ojos se clavan en los tuyos

Chico: me has vuelto loco no puedo parar, mi polla y mis huevos chocan con tu coño dando unas palmadas terribles

Paola: grito sin parar al sentir tu polla Ahhhhhhhhhhhh joder

Chico: noto como te contraes y sonrío. Para esto te sirvo. Para esto te soy útil. Soy tu máquina de dar placer.

Paola: mi coño se contrae mmmmmm siiii

Chico: noto más humedad

Paola: me encanta correrme en tu polla

Chico: huele mucho a sexo

Paola: y me encanta

Chico: agarro tus muslos para sentirte más cerca. Córrete cuantas veces quieras ama, para eso me tienes y empápame con tus flujos

Paola: Ahhhhhhhh siiii joder no dejes de follarme

Chico: la saco del todo y la clavo. Tu coño tiembla, puedo notarlo y me inclino sobre ti

Paola: todo mi cuerpo tiembla de placer

Chico: te como la boca y mi cadera no para de moverse

Paola: cada vez estoy más sensible y mi respiración sigue disparada

Chico: la silla se ha ido moviendo con cada embestida hasta chocar contra la pared. No puedes ir más atrás

Paola: Ahhhhhhhhhhhh joder

Chico: mi culo se mueve adelante y atrás

Paola: me voy a correr de nuevo

Chico: clavándote mis 22 cm desde la punta hasta la base. Llevo tus manos a mi culo y me aprieto más contra ti

Paola: comienzo a gruñir. Mis dedos se clavan en tu culo y te aprieto con fuerza

Chico: dejo que tú marques el ritmo con tus manos sobre mi culo

Paola: estallo a gritos. Mi cuerpo tiembla

Chico: disfruto tanto al verte

Paola: grito sin parar con la boca abierta y cogiendo aire a bocanadas

Chico: es un espectáculo ver cómo te corres y eso me hace sentir feliz

Paola: mmmmmm

Chico: mi polla es tu juguete, todo mi ser

Paola: mi coño se contrae sin parar en tu polla. Poco a poco se mueve dentro de mí, sientes como vuelves a alargar mi orgasmo y como lo intensificas

Chico: me aprietas tanto que por primera vez en un buen rato siento que me puedo correr. Que al fin y al cabo soy humano y siento miedo de defraudarte. Me concentro y sigo follandote hasta que acabes el orgasmo.

Paola: termino de correrme… ¿Mi chico?

Chico: ¿si ama?

Paola: ¿qué es lo que querías hacerme?

Chico: trago saliva y cojo aire intentando recuperarme del esfuerzo. Con la polla aun dentro de ti te digo: veras… sé que soy tu sumiso, estoy a tus órdenes y que lo de hoy ahhhh... ha sido un grandísimo regalo mmm.....

Paola: sientes la presión de mi coño en tu polla y sigo recuperándome del orgasmo. ¿Pero?

Chico: hacia mucho que no me la chupaban así... Pero es que has puesto la mano en la base de mi polla... y cuando tocaba la garganta te ibas hacia atrás... y me preguntaba si me dejarías... Ahhhh... Meterte la polla hasta la base ama...

Paola: ¿qué? si me matas... espero que me hagas el boca a boca

Chico: sonrío

Paola: y me devuelvas a la vida para contarme que pude con 22 cm

Chico: se me escapa una risa cómplice. No he dicho que tenga que ser una follada de boca ama

Paola: lo se

Chico: puede ser a tu ritmo, o como tú quieras ama

Paola: suelto tu culo

Chico: noto la ausencia de tus dedos

Paola: sal

Chico: pienso que seguramente me hayas dejado marca y sonrío. ¿A dónde Ama?

Paola: de mi coño

Chico: oh, sí perdón

Paola: jajajajaja siento tu nerviosismo

Chico: estaba tan a gusto ahí dentro que… Saco la polla. Sigue durísima mojada, palpitando y algo roja.

Paola: te miro a los ojos y te digo.... te dije que hoy te haría un regalo

Chico: Si ama. Trago saliva

Paola: mi boca es para tu polla

Chico: mi polla se tensa dando un saltito como si lo hubiera oído

Paola: quiero que hagas lo que deseas

Chico: gracias ama

Paola: te cedo el control total como regalo

Chico: me pongo nervioso. Te ayudo a levantar de la silla ofreciéndote la mano. Mi mano acaricia tu pelo y se queda en tu cuello. Empujo tu hombro hacia abajo y hago que te arrodilles. Te miro y con la misma mano llevo el pulgar a la boca para que la abras. Con la otra mano agarro mi polla y la dirijo hacia tu boca. Te abro la boca y meto la punta dentro. Mi mano derecha agarra tu nuca y la izquierda la base de la polla. Empiezo a meter lentamente y a sacar muy despacio la polla

Paola: te dejo hacer y llevo mis manos a tus muslos.

Chico: después de unos segundos de tanteo aprieto un poco más

Paola: sientes como no aprieto mis labios en tu polla

Chico: y ahora en cada golpe la punta de mi polla toca la entrada de tu garganta. La sensación es increíble y ver cómo me miras me vuelve loco

Paola: no dejo de mirarte mientras lo haces

Chico: a la vez que mi punta toca tu garganta tus labios tocan el puño que agarra mi base

Paola: me provocas arcadas y mis babas se deslizan por las comisuras

Chico: dejo mi polla en ese punto y te miro. Esa es la entrada y aun te queda todo un puño de polla por tragar. ¿Lo quieres?

Paola: no puedo hablar y te cedi el control como regalo aun sabiendo a lo que me enfrentaba

Chico: te miro a los ojos y veo tu sí. Suelto la mano que agarra mi polla y la llevo a tu nuca junto a mi otra mano. Agarro tu cabeza y aprieto contra mi polla. Noto como te resistes así que aflojo pero en seguida vuelvo a apretar y entra

Paola: tu polla entra en mi garganta

Chico: la saco de tu garganta pero dejándola en tu boca y vuelvo a apretar

Paola: me falta el aire. Ves cómo me pongo roja, como empiezan a correr las lágrimas por mis mejillas

Chico: saco mi polla del todo para que cojas aire y cuando lo has hecho vuelvo a meterla de golpe

Paola: cojo aire a bocanadas

Chico: y empiezo a follarte la garganta. Noto tu nariz golpeando mi vientre y tus labios rodeando la base de mi polla por completo. Es una sensación increíble y noto como se me contraen los huevos

Paola: mis dedos se clavan en tus muslos

Chico: mi polla se contrae y noto que estoy muy cerca de correrme, así que agarro tu cabeza y la aparto de mí. Saco la polla y me siento a duras penas en la silla

Paola: cojo aire de nuevo con fuerza

Chico: mientras mi polla tiembla de placer, te miro. Gracias Ama. Noto tu mamada y trato de aguantarme. Ohhh  joderrr... ahhhh.... te miro

Paola: te miro e intento relajarme. Sabes que tenías el control y podías hacer lo que desearas ¿verdad?

Chico: si Ama. Pero sé que no puedo correrme sin tu permiso y menos en tu boca Ama. Ante todo soy tu sumiso

Paola: si te cedo el control no eres mi sumiso, eres el dominante

Chico: mi polla de babas y flujos delante de ti. Te miro y pienso. Si ama... solo que estoy tan acostumbrado a obedecer...

Paola: ¿no te gusto la sensación de control?

Chico: si Ama. Trago saliva. Pero mi cometido es servirte, es difícil para mí adoptar ese papel

Paola: eso cuando no tengas el control, es un regalo

Chico: ha sido la fuerza de la costumbre ama

Paola: por eso accedí a tus deseos

Chico: lo siento ama si te he defraudado

Paola: así que tú decides como terminarlo

Chico: pero justo cuando me iba a correr mi cabeza pensó en tus normas y decidí que lo mejor es obedecerlas. Decido ser tu sumiso Ama, no estoy hecho para el control. Al menos has podido con los 22 cm. Sonrío pícaramente

Paola: jajajajaja me rio ante tu comentario. ¿Todo bien?

Chico: si Ama. Sonrío. Mejor que nunca. Este regalo ha sido brutal. Cada día que paso contigo me doy más cuenta de que mereces todo el placer que te pueda proporcionar. Es un placer ser tu sumiso y que tú seas mi Ama.

Paola: Gracias mi Chico. El placer es que tú me dejes disfrutar a tu lado siempre que podemos.

Mi Chico me abre un mundo nuevo que desconocía y en el que puedo disfrutar de un nuevo placer. Cada día me alegro más de que este en casa. Gracias mi Chico por estar ahí.