Al otro lado de la Luna -2-

… El Señor Oscar Wilde nació el 16 de octubre de 1854, en Dublín y estudió en el…  La clase parecía estar fluyendo mejor de lo normal y a decir verdad, no tenia muchos ánimos de interrumpirla, me eche para atrás y me dispuse a cerrar la puerta nuevamente…

• ¡Oh! Señorita O´Connor, parece que se le ha hecho un poco tarde - Dijo el profesor Patterson al percatarse de mi presencia

- Tuve un pequeño inconveniente, pero usted ya estaba al tanto de ello - Dije incorporándome nuevamente en el aula

- No le estoy pidiendo explicaciones Alex, viniendo de parte de una alumna tan ejemplar, como usted, un retraso no es nada. Por favor, tome asiento, para continuar con la clase

Di la vuelta para buscar un asiento libre y pude percatarme, de que tres de los rostros que me observaban no me eran familiares, alumnos nuevos, deduje de inmediato, estaba claro que no eran de ningún otro curso.

Me senté delante de Alan, detrás de una de las alumnas nuevas. A mi lado izquierdo había un puesto vacio, el cual supuse, tomaría Sam en caso de que se dignara a entrar a clases, delante de él, estaría Brian, un muy buen amigo suyo, al que yo no toleraba y a mi lado derecho, estaban los dos alumnos restantes, una pequeña y delicada mujer y un muchacho al cual de primer instancia, no detalle mucho.

…Wilde, que había mantenido una íntima amistad con lord Alfred Douglas, fue acusado por el padre de éste, el marqués de Queensberry, de sodomía… Yo conocía de principio a fin la biografía de Oscar Fingal O´Flahertie Wills Wilde, la había leído tantas veces que parecía sabérmela de memoria, por lo cual las palabras del profesor Patterson eran predecibles para mi

• Disculpe profesor Patterson, ¿Podría hacerle una pregunta?

- Si, Brian… Adelante

- ¿Qué es eso?

- ¿Sodomía?

- Si, eso -  Su pregunta me hizo pensar que su ignorancia, era tal vez lo que yo, no podía tolerar

- La Sodomía, Brian, es la practica del coito anal - Explico el Profesor Patterson, pero a leguas se notaba que no había sido suficiente, para despejar la duda de Brian

- Sexo anal, penetración anal, coger por detrás, meter por el…

• Señorita O´Connor -  Mi explicación se vio suspendida por el Profesor - Creo que al Señor Anderson  ya le quedo claro el término

- Lo siento Profesor Patterson, me deje llevar por la emoción

El aula entera se giro para mirarme, exceptuando los tres alumnos nuevos, que continuaron con su vista enfocada en el Profesor Patterson, quien por cierto, también tenía su mirada fija en mí.

El timbre de cambio de clase sonó enseguida, ensordeciéndome por varios minutos.

Esperábamos, pacientes la llegada del Profesor de la siguiente clase, pero pasaban los minutos y nadie cruzaba la puerta, por lo que la compostura del aula se perdió por completo, comenzaron a lanzar bolas de papel, habían gritos, risas, y una distorsión de conversaciones increíble. Yo me encontraba dibujando garabatos en una hoja de papel, líneas rectas, curvas, círculos… Nada con verdadera importancia, al igual que el resto de mi vida.

- Vaya, realmente es algo abstracto - Comento una voz, que no logre identificar

Levante la cabeza y me encontré con la mirada de la joven que estaba delante de mí, la cual inicialmente pretendía ignorar, pero que logro cautivarme por completo. Su mirada, era tan profunda como el mar y tan hermosa como el mismo. Sus ojos azules, se tornaron curiosos y pude notar que llevaba varios minutos mirándola, sin decir nada

- Mi nombre es Hannah  - Dijo, extendiendo su mano

- Alex… Bueno, en realidad es Alexandra, pero puedes llamarme Alex, si gustas… O Alexa, si te parece mas cómodo - Preferí callar, antes de continuar haciendo el ridículo.

Ella dibujo una sonrisa picara y recobro su postura inicial, yo continúe haciendo mis garabatos, mas distraída aun que minutos antes.

- ¿Con quién saldrás al receso? - Se giro nuevamente Hannah para preguntarme.

Gire hacia mi izquierda y el asiento de Sam, se encontraba vacio, por lo que supuse que se había quedado con Ariadna y yo tenia claro, que no quería tenerla cerca o  por lo menos, no mientras aun sintiera algo por ella

-  Contigo, si quieres

- ¿Vamos? - Dijo Hannah, extendiendo su mano para ayudarme a levantar de mi pupitre.

Ni siquiera me había percatado de que el timbre había sonado ya, deje lo que estaba haciendo y tome la mano de Hannah, mientras recuperaba mi natural estado anímico.

Una vez fuera del aula, hablamos un sinfín de cosas, sus padres se separaron cuando ella y su hermano estaban aun muy chicos, debido a que su madre había descubierto que su padre le era infiel y que tenía otra familia, de la cual eran procedentes Noah y Alison, los otros dos alumnos nuevos. Su madre había muerto años atrás en un accidente aéreo, donde también viajaba su hermano, ella había pasado ese verano en la casa de sus abuelos, por lo que no había estado presente en el accidente, pero debido a lo seniles que estos se encontraban no habían podido continuar con su crianza, por lo que su padre había tomado su custodia, hacia ya casi cuatro años.

- Y… ¿Tienes novio? - Me anime a preguntarle

- ¿Cómo dices? - Dijo ella, algo sorprendida por la pregunta

- ¿Tienes novio? ­- le repetí mirándola siempre a los ojos

Hubo una pausa, de unos cuantos minutos, minutos donde lo único que hice fue mirarla y contemplar su belleza

- No - dijo al fin.

- Vaya, que sorpresa ­- Pense en voz alta

- Quizás no ha llegado alguien que se robe mi atención. Y tu… ¿Tienes novio? ­- Pregunto ella, dándole un vuelco total a la conversación.

- No - Le respondí de inmediato mientras me perdía en sus hermosos ojos azules, aunque a decir verdad, hacia mucho que nadie me hacia esa pregunta. Mis preferencias sexuales eran algo… Evidentes, por decirlo de alguna manera

Nos quedamos un momento así, apreciando nuestras miradas, nuestros rostros…

Mi mirada no aguanto más, baje la cabeza mientras sentía como me ruborizaba nuevamente. Estaba totalmente intimidada y eso era algo que yo, no sentía muy a menudo. Y luego llego mi mayor temor: el silencio incomodo, ninguna decía nada y aunque me moría por decir miles de cosas, la situación no le ayudaba mucho a mi ataque de pánico.

No sé si afortunadamente o por desgracia, pero el timbre inundo los pasillos con su repicar y con una sonrisa, pusimos fin a aquella incomoda escena.

- Hannah, adelántate, yo llegare luego, tengo algo que hacer - Dije, al ver a Sam a lo lejos

- Vale, nos vemos

Camine lo mas rápido que pude hasta llegar a èl, cuando estuve lo suficientemente cerca, tome su mano y comencé un trotecillo suave, hasta llegar al salón de clases, el cual aun se encontraba en completa desautoridad, por lo cual no había otra cosa que un desorden inigualable.

- Ven, quiero enseñarte algo - Dije sonriente

Entramos desapercibidos y nos acomodamos en los puestos que anteriormente había apartado para nosotros, pude notar que Hannah y Noah no se encontraban en las mismas ubicaciones que antes, Noah estaba sentado donde estaba anteriormente Hannah y Hannah estaba delante de Sam, en el puesto que ocupaba Brian, anteriormente. Alison había conservado su asiento y Brian estaba detrás de ella, queriendo quizás, llamar su atención

- Alex, no creo que aquí haya algo fuera de lo normal - Había cierto tono de decepción en su voz, pero parecía que aun no se había percatado de su nueva distracción, así que me pareció conveniente, darle una pequeña ayudita

• ¿No?, ¿ni siquiera el chico nuevo?

- ¿Cual chico nue…

Sus palabras se cortaron, cuando sus ojos hicieron contacto con los de Noah, quien al parecer, se había girado al escuchar la palabra “Nuevo”…

- ¡Oh! Sam, había olvidado comentarte, tenemos nuevos compañeros… El es…-

- Noah Harman - Dijo el chico sin esperar siquiera que terminara la frase

- McAlister, Samuel McAlister

Sam nunca parecía sorprenderse, pero yo, fácilmente podía distinguir cuando algo o alguien, capturaba su atención y evidentemente, Noah lo había hecho, pero yo, no quería enfocar mi atención en una conversación que  no era de mi incumbencia

- Sam, ¿que te parece si intercambiamos lugares?, al parecer, Noah es mas alto que yo y realmente quiero prestar atención a la clase - Tome como escusa lo primero que se me vino a la mente, aunque en realidad lo único que me interesaba era poder percibir nuevamente, el dulce aroma que emanaba Hannah

- Claro, no tengo inconveniente.

Cambiamos lugares inmediatamente, al parecer nadie más que nosotros comprendimos las verdaderas intenciones.

- Con que Hannah Harman  - Comente al sentarme

- No, Toller, mi apellido es Toller - Dijo ella mientras se giraba - Noah y Alison, conservaron el apellido del esposo de su madre

- Oh, lo siento, no lo sabia

- Tranquila, igual no hay inconveniente - Dijo mientras dibujaba una enorme sonrisa en su rostro

- O sea que… Legalmente, ellos no son tus hermanos

- Si, aunque solo legalmente -  Contesto en medio de resoplidos

- Bueno, nunca se sabe

- Si, tienes razón, pero el parecido con mi padre es evidente, incluso a veces soy yo la que no parece hija suya

- Bueno, entonces si es así… Comenzare a buscar los papeles de mi adopción ¾ Debía ponerle un poco de humor a la conversación

Continuamos hablando hasta que sonó la campana de cambio de clase, me conto que la relación con su padre no era muy buena y que a veces sentía que estaba en una familia que no le pertenecía. Pregunte por la relación que tenía con sus hermanos, pero tan solo contesto con otra pregunta: ¿Como te la llevarías con alguien que te ha robado lo único que realmente te pertenecía? No dije nada, pero sabia cual era la respuesta exacta a esa pregunta.