Al límite de la verdad

Capitulo 2 – luis

Capitulo 2 – Luis

Ey, que tal, me llamo Luis, tengo 19 años, estudio en 'universidad de artes costa del caribe', estoy en el equipo de atletismo junto con mis amigos, me gusta salir hacer ejerció por las mañanas en el parque que esta a la vuelta de la calle; mi madre murió, así que solo somos papa y Julián(mi hermano mayor), acudo a terapia psicológica desde hace 8 años; después de un traumático suceso del pasado. Mi familia no están privilegiada como la de mis amigos, en pocas palabras somos una familia humilde.

Esto de escribir un diario es algo que normalmente yo no haría, pero mis amigos insistieron tanto en que lo haga que terminaron convenciéndome.

Veamos como resulta.

EL DIARIO DE

LUIS

Son las 7:00 am, y me encuentro en el parque haciendo mi rutina de ejercicios; empecé hacer esto desde aquel suceso ocurrido, algo que nadie aparte papa sabe, no puedo siquiera tratar de recordar lo sucedido gracias a las terapias que recibo tres veces a la semana desde ese entonces.

Luego de 50 minutos de ejercicio y que el sol se calentara aun mas, decido volver a casa, pero cuando estoy por irme mi celular comienza a sonar.

–hola, ¿con el señor Luis Eduardo Martínez?. –pregunta una mujer del otro lado.

–si, con el habla.

–me comunicó con usted de parte de la empresa times-cop; lamento informarle que hemos rechazado su hoja de vida debido a la falta de experiencia en las vacantes que estaban disponibles.

–discúlpeme señorita pero no puede estar hablando enserio ¿verdad?; a ver yo enserio necesito ese trabajo por favor.

–lo siento mucho señor Martínez, pero no hay nada que yo pueda hacer.

–entiendo. –digo y corto la llamada. –MALDITA SEA, ¡ahora ¿que se supone que hago?!. –me pregunto a mi mismo en voz alta.

–quizás yo pueda ayudarte. –me dice una voz a mis espaldas, haciendo que pegue un pequeño brinco del susto que me dio.

–¿tu quien eres? y ¿por que escuchas conversaciones ajenas?. –preguntó frunciendo el ceño.

–puedo ser la solución a tus problemas económicos. –me dice mientras recorre cada centímetro de mi cuerpo con la mirada.

–así y como piensas hacerlo ¿con obras de caridad? O ¿eres acaso dueño de una empresa?, cosa que no creo que sea por la forma en la que vas vestido. –lleva puesto una camisa playera de colores algo extravagantes, unos jeans negros muy ajustados y zapatos blancos.

–"ahora todos son críticos". –dice haciendo comillas con sus dedos.

–como sea, a que se debe el haberme hecho perder tiempo en esta conversación.

–quiero ofrecerte un empleo, de ti depende si lo aceptas o no.

–si? Y ¿de que va el empleo?. –solo sonríe, me entrega una tarjeta con una dirección y se va.

Pero este cree que soy tan imbécil como para ir a una ubicación sin saber a que voy; me quedo allí de pie mirando lejos y en una decisión repentina guardo la tarjeta en el bolcillo de la sudadera.

[...]

Después de enterarnos de la pelea de Rodrigo. David, Bernardo y yo fuimos a evitar que algo malo pasara; cosa que por suerte no ocurrió gracias a que David logro desapartar a Rodrigo de marcos y llevarlo al salón de clases antes de que el director los viera.

[...]

Al terminar la clase David nos pregunta que haremos mientras llega la hora del almuerzo; Bernardo dice que debe hacer unas "cosas" en su computadora, Rodrigo dice que debe atender unos " asuntos" lo cual hizo que todos dijéramos al unísono ' ojo con buscar mas problemas de los que ya tienes' el solo asiente y se va, yo tengo que ir a terapia.

–vale ya buscare que hacer. –nos dice David a la vez que se dirige a la cafetería.

Llego al consultorio y me quedo en la sala de espera mientras me autorizan que ingrese a la oficina del psicólogo; me encuentro solo aquí en la sala de espera(bueno también esta la recepcionista), cuando escucho entrar a otra persona, dirijo la vista hacia la entrada y mis ojos se abren como platos al ver quien es la persona que esta entrando al consultorio.

–Si...Silvia –logro decir tratando de no hacer notar mi asombro.

–Hola Luis, que sorpresa encontrarte aquí.

–No eres la única sorprendida. No sabia que venias aquí. ¿Como es que nunca nos habíamos encontrado hasta ahora?

–jajá, tal vez por que nunca había venido un lunes; resulta que este semestre me toco cambiar el horario por los ensayos de danza. –dice con una dulce sonrisa en sus labios.

–si, eso lo explica. Y... me contaras por que asistes aquí. –le digo a la vez que le giño un ojo.

–ok, siempre y cuando tu me cuentes primero que haces aquí. –dice con una expresión de victoria.

–vale tu ganas, ya me enterare por otro lado o cuando decidas contarme. –digo con una risa burlona.

–enserio no... –Silvia es interrumpida por la secretaria indicándome que puedo pasar al consultorio.

Al salir del consultorio de inmediato hicieron pasar a Silvia, por lo que no pude volver hablar con ella y me dirigí de vuelta a la universidad.

[...]

Al terminar la clase decido tomar la tarjeta que me dio aquel tipo esta mañana, la tarjeta dice "brands studios" y en la parte de abajo esta el numero y al lado la dirección del lugar, después de pensar si ir o no...decido ir.

Al salir de la universidad veo a Rodrigo dirigirse al estacionamiento, me parece un poco extraño ya que el no viene en auto a la universidad de seguro se va a encontrar con otra de sus "conquistas" Pienso y sigo mi camino.

[...]

Llego al sitio y... la verdad no se ve tan mal, al entrar el primero que me recibe es el hombre que me dio la tarjeta.

–sabia que vendrías jajá.

–no por que quiera, si no por que necesito un empleo urgente.

–si si como sea, ven sígueme.

Nos dirigimos hacia una oficina que tampoco esta nada mal, lo raro es una cámara que esta sobre el escritorio.

–bien aquí es donde será tu primera vez. –lo dice con cara de cinismo, yo la verdad no entiendo a que se refiere.

–¿mi primera vez? Jajá yo ya tuve mi primera vez hace muuucho tiempo, así que no entiendo a que se refiere. –suelta una fuertes carcajadas.

–me refiero a que aquí será tu primera paja frente a las cámaras. –¡que!, acaso escuche bien.

–espere esta hablando enserio, por que yo no me voy a prostituir.

–escucha se que la primera vez no es fácil pero te aseguro que las ganancias son muy buenas. –acaso este no escucho bien o tiene problemas.

–que yo no me voy a prostituir.

–esta bien solo mira esto. –me da un papel que al parecer es la suma que ganare por el video, no puede ser 600mil pesos.

–ves que si vale la pena y solo por dejarme grabarte mientras haces algo que haces a diario y gratis, ¿por que no recibir dinero? –no puede ser este hombre si que sabe como convencer a alguien y la verdad el dinero no esta nada mal.

–esta bien acepto... pero con una condición, usare un antifaz o una mascara.

–no no no, eso no puede ser por que si al publico le encantas pasaras a follarte a las mujeres mas hermosas que tenemos en este estudio.

–hagámoslo antes de que me arrepienta. –no puedo creer que estoy a punto de hacer esto.

–así se habla, ahora ponte el traje que esta en la silla vuelvo en 5 minutos.

Bien Luis, relájate y haz lo mejor que sabes hacer 'pajearte' –este traje curiosamente es de mi talla, me miro en un pequeño espejo que hay aquí y... estoy muy guapo, la verdad todo lo que uso se me ve bien.

–valla sin duda alguna serás un éxito. –dijo aquel tipo volviendo a entrar. –bien ahora siéntate en la silla y cuando te avise te comienzas a tocar sensualmente y te vas quitando una prenda a la vez hasta que quedes desnudo y ahí te empiezas a masturbar y a jugar con todo lo que hay aquí en la oficina ¿si? –simplemente asiento.

–listo... ¡acción!

Comienzo sobándome el pecho y abdomen por encima del traje a la vez que pongo cara de placer, luego procedo acariciarme el pene por encima del pantalón y por mas incomodo que sea el momento lo único que siento excitación, no se por que pero el tener una cámara frente a mi me da un poco de morbo y eso se ve reflejado en lo bien marcado que se nota mi gran bulto en los pantalones. Después de un rato me levanto de la silla y comienzo a despojarme de las prendas, primero me quito el saco del traje suavemente, luego comienzo a desabotonarme uno por uno los botones de la camisa blanca que llevo puesta a la vez que simulo estar penetrando al escritorio con suaves movimientos de cadera, después de quitarme la camisa y quedar desnudo del torso para arriba comienzo a quitar el botos del pantalón y lentamente bajo el cierre, saco mi pene que la verdad no tengo nada que envidiar(son 19 cm, con un buen grosor) y comienzo a pajearme con los pantalones a la altura de mis nalgas, comienzo con un sube y baja lentamente en mi pene a la vez que con la otra mano me retuerzo un pezón y comienzo a dar pequeños gemidos.

–ohh...sii... ricooo...ohhh.

Después de 5 minutos, me termino de quitar los pantalones y quedo totalmente desnudo(nunca me ha avergonzado mostrar mi cuerpo ya que estoy en muy buena forma), me monto sobre el escritorio y comienzo a mover mis caderas como si estuviera penetrando al aire mientras me masturbo de una manera rápida y frenética. y mis gemidos empiezan a incrementar.

–¡ohhh!... ¡siii!...¡sii!... me corro... me.... ¡corrooo!.

Dicho esto comienzo a soltar grandes chorros de semen por todo el escritorio.

–y... ¡corte!, si resultaste ser todo un semental muchacho, ya te digo que tienes un buen futuro como actor porno aun que no lo quieras.

–...

–vístete que te espero afuera para darte tu pago.

Se fue y me quedo ahí pensando en lo que acabo de hacer, la verdad no me desagrado nada de lo que hice, con ese pensamiento me dirigí adonde están mis cosas y lo primero que reviso es el celular, me sorprendo cuando veo que tengo 5 llamadas perdidas de David por lo que decido de volver la llamada.

–hola David, ¿paso algo? ¿por que esas 5 llamadas?. –digo en tono de burla.

–donde carajos has estado, he llamado a tu casa y me han dicho que no estabas. –noto furia con un poco de preocupación en su voz.

–me distraje en el centro comercial, pero ¿pasa algo? te noto preocupado.

–estamos en el hospital, rodigo fue apuñalado en el estacionamiento de la escuela. –quedo en shock por unos segundos.

Le pregunto a David, en que hospital están y procedo a vestirme lo mas rápido que puedo, al salir le digo al señor... ahora caigo en cuenta que me he dejado grabar de alguien el cual no me se ni su nombre.

Después de averiguar que el nombre del aque señor era 'Sergio', tomo el dinero y salgo a toda prisa hacia el hospital.

CONTINUARA......

Nota:gracias aquellos comentarios positivos que me han dejado, eso me hace querer seguir con esta historia.

Les mando un saludo.