Ahora que está sola
Ella jugo con fuego y termino quemada, muy quemada.
Esta historia me fue contada por quien dijo ser un testigo casual de lo que sucedió, el cual no me parecía del todo fiable, pero luego, por esas cosas de la vida, me lo relato quien fue la victima, y ella corroboro lo que aquella persona me había contado.
En ese entonces Vanina era una joven de 23años, había contraído nupcias con su marido de 35 años y fueron a vivir a un lugar en la periferia de la pequeña ciudad, donde su esposo estaba terminado de construir la casa donde vivirían. Era un lugar muy bello, rodeado de arboledas, con parques abiertos y calles amplias, muy tranquilo, con pocas casas en los alrededores, como vecinos solo tenían una pareja de ancianos del lado Este de su casa y una obra en construcción pero que hacia un tiempo nadie trabajaba del lado Oeste.
La vida en esos primero meses y más entrando al invierno era bastante aburrida, ella pasaba la mayor parte del día en casa de sus padres ya que el esposo se iba a trabajar temprano y no volvía hasta llegado la noche.
De común acuerdo con su marido, iniciaron la obra de construir una piscina en el parque de la casa para que estuviera lista en el verano, y no sean tan aburridas las tardes. Vanina, para colaborar con la construcción, consiguió un trabajo de medio tiempo por la mañana.
Fue pasando el invierno y al finalizar la primavera la alberca esta lista, se arreglo el parque con plantas, césped y todo lo necesario para que sea un lugar agradable.
Mientras tanto la obra en construcción, lindera a la propiedad de Vanina, que estaba casi en estado de abandono, tomo nuevo impulso y se comenzaron las obra. La joven pareja vio con agrado este hecho ya que tendrían vecinos nuevos y no esa obra que estaba a oscuras y parecía una boca de lobo. Pero pasado un tiempo con sorpresa vieron que la obra tenia dos planta y que a medida que se construida la planta superior todos obreros de la construcción tenían posibilidad de espiar el patio y principalmente la zona de la piscina, lo que le quitaba privacidad.
De a poco llego el verano, y con el las altas temperaturas; y la piscina estaba lista. Toda la mañana, mientras trabajaba, Vanina solo pensaba en la hora de irse a casa y en el momento de encontrarse con su esposo para inaugurar la alberca ,dáncese un chapuzón los dos solos.
Al fin llego la hora Osvaldo, su marido, la paso a buscar y la llevo a casa, estaban planeando la tarde cuando un llamado al teléfono móvil rompió con sus planes, un accidente en la planta donde trabajaba Osvaldo lo requería de urgencia y no podía escapar a sus obligaciones. Vanina de mala ganas entendió, y se quedo sola en casa, mientras su marido regresaba al trabajo.
El calor era agobiante, el agua de la piscina brillaba como un espejo que refleja la luz del sol, la brisa en el parque de la casa era suave y fresca y Vanina estaba tentada de darse un chapuzón, pero la detenía la promesa hecha a Osvaldo que lo harían juntos.
Entre tanto, busco sus trajes de baño, y eligió los últimos que uso la temporada anterior, tenia algunos realmente diminutos que había comprado en Río de Janeiro cuando fue de luna de miel con su marido. Se los probó y de verdad le quedaban espléndidos, ella tenia una figura soñada, siempre practicó patín y tenía apego por el deporte. Se probo primero el negro y le quedaba como para mostrarlo en un desfile de moda, una tanguita muy chiquita, por detrás desaparecía el hilito entre sus apretadas y firmes nalgas y reaparecía en un minúsculo triangulito con bordados brillantes, se miro por delante y vio que asomaba algo de su bello púbico por arriba del bikini que a duras penas tapaba su vagina. Se acomodo el corpiño, apretó sus buenos pechos (95 de busco y naturalmente hermosos) y corrigió la posición del corpiño para que le alcanzara a tapar sus rozados pezones. Se probó el bikini rosa y era mas pequeño y sexy que el negro ya que tenia en la parte posterior un hilito que se unía a los otros dos y parecía que de atrás estaba desnuda. Vanina tenia una figura soñada, es bellísima por donde se la mirara, sus hombros rectos su espalda triangular, su cintura pequeña, un culo que parecía de mármol y tallado por Miguel Ángel, sus tetas grandes bien redondas firmes, y su piel blanca contrastaba con su cabello negro corto a la altura del cuello con un corte tipo careé.
Vanina se volvió a dar cuenta que los bikinis le quedaban soñadas pero debía depilarse y no tenia ganas en ese momento, así que busco un bikini mas grande y se lo probo. Le quedaba espléndido, no era tan llamativo y se desobligaba de depilarse por el momento.
Fue pasando la hora, su marido no llegaba, ella desesperaba por zambullirse en la piscina, y no aguanto más, lo llamo por teléfono, él le dijo que estaba muy retrasado, que llegaría al anochecer y le dijo a Vanina que aprovechara para meterte en la piscina.
Vanina colgó el teléfono y salió corriendo de la casa pasó por la galería, cruzó el patio y se tiro de cabeza en el agua.
Estaba espléndida, la piscina era enorme, ella podía nadar de una punta a la otra, tirarse del pequeño trampolín, el lugar era genial. Pero cuando salió del agua a tomar sol escucho unos cuchicheos, luego unos silbidos , algunos palabra que la elogiaban pero subidas de tonos, y cuando miro vio a los obreros que la miraban como si nunca hubieran vista una mujer en su vida. Primero ella intento hacer caso omiso pero luego de un tiempo enfureció, se levanto y cuando se iba para su casa les grito, ¡¡¡¡que le pasa idiotas, nunca vieron una mujer en traje de baño!!!!!!!!!! Y del otro lado también le gritaron barias cosas pero la que se destaco se la dijo un obrero morocho, enorme casi de dos metros, pinta de árabe o turco, que estaba en el piso superior, ¡¡¡¡¡¡¡si pero nunca una perrita como tu, divida , que tetas , que culo !!! ¡¡¡¡¡¡¡¡¡perrita si te hace falta un perro bien perro y bien dotado no tienes mas que llamar!!!!!!!!.
Espero que llegara Osvaldo y le contó, él, entre el cansancio y lo tarde que era no le dio mucha importancia y le dijo que no se preocupara que al otro día hablaría con el encargado.
Al día siguiente Vanina, otra vez fue a la pileta, esta vez se puso una malla enteriza, como para no levantar el libido de los tipos, y fue a la pileta. Y otra vez la misma situación, pero esta vez, que era un poco más tarde solo eran tres los tipos que estaban y los improperios recibidos por la joven esposa no eran tan graves, pero si molestos. Llegó la noche, llego Osvaldo y también los reclamos de Vanina, entonces Osvaldo decidió al día siguiente hablar con el encargado de la obra para hacer el reclamo, cuando encontró al encargado le hizo el reclamo correspondiente y este le prometió una solución.
El problema continuaba, si bien Vanina iba a la piscina cada vez más tarde para que haya menos obreros siempre estaban estos tres, el gigante árabe, otro de estatura media 1,70, colorado, con barba entre crecida, de ojos celestes, con una barrida bastante prominente, y de unos 40 años de edad, y el tercer sujeto, de uno 25 años, alto bien flaco, medio jorobado, castaño, de ojos negros, nariz aguileña, mirada muy penetrante y el más callado de todos, es el que cuchichea sin elevar la voz y los otros parecen hacer lo que éste dice. Los tres personajes eran de malos hábitos, siempre a escondidas del encargado, buscan la ocasión de tomar alguna cerveza o alguna bebida alcohólica que llevan a escondidas, fumaban mucho, y muy desalineados.
En esos días Vanina recibe un llama y una visita que la alegra mucho, es una prima lejana, a la que ella quiere y con la cual tienen una excelente amistad que cultivaron desde muy niñas. Tania, la prima lejana, llego a casa de los padres de Vanina y Vanina paso por ella en las ultimas horas de la mañana, fueron a casa, Tania asombrada, felicito a Vanina por el hermoso hogar que tenían con su marido y quedo maravillada cuando vio el parque y la piscina. Tania le dijo que quería darse un baño y que le prestara un traje de baño, que si no se metería desnuda. Entonces Vanina le contó lo que ocurría con los obreros de la construcción vecina, y Tania le dijo, entonces amiga lo que ahí que hacer es hacerlos calentar a más no poder, se van a terminar masturbando entre ellos esos idiotas; Vanina la miró con asombro y replicó: mientras no se les ocurra cruzar el muro divisorio y violarme, Tania sonrió y le respondió: perro que ladra no muerde!; amiga hoy mismo empezamos y para mañana, cuando me valla, van a estar como perros en celos, eso si, tu continuas con el trabajo y me tienes informada, comentó Tania.
Almorzaron, fueron al guardarropa y eligieron las prendas de baño, Tania busco un micro bikini de su amiga, que le quedaba incrustado en el cuerpo, parecía que tenia que explotar ya que Tania es mas alta y más corpulenta que Vanina, tiene un cuerpo, no solo escultural sin exuberante por donde se la mire. Cuando Vanina salió del baño y l a vio no podía creer, lo que veían sus ojos y le dijo azorada:- Por Dios cuando te vean te van a querer violar, esos trapitos no te cubren nada, hasta a mi me calientas de verte. Tania se sonrojo por el comentario y le contesto: - bueno ya basta, te dije que había que calentar esos perros y esos vamos a hacer, ahora te pido que me dejes pasar al baño a depilarme ya que me queda algo de bello sin cubrir, y aprovecha Vanina, ponte otro traje de baño más sexy que con eso no calientas a nadie. Vanina le contesto: -es un bikini! Y no tengo valor para ponerme otro mas pequeño; Tania le respondió: - tu tienes la culpa si mi plan fracasa.
Esperaron que solo quedaran los tres sujetos de siempre y salieron de la casa para meterse en la piscina; se bañaron, jugaron un poco en el agua, y siempre siendo observadas por los tres obreros. Tania en secreto le dijo al oído de Vanina: - salgamos del agua a tomar sol y ahora empieza la acción; Vanina asintió y siguió a Tania en su plan. Se acostaron en el piso boca abajo con sus piernas apuntando a sus mirones y Tania, la más osada, separó bien las piernas, para que los tipos le pudieran ver las entrepiernas, Vanina, después de la orden de su amiga, comenzó a pasar bronceador por todo el cuerpo de Tania deteniéndose en sus glúteos, le desamarro las tiritas del sostén para dejar la espalda al descubierto, y se detuvo con el bronceador en ese lugar, haciendo masajes en la espalda de Tania, que se relajaba a medida que Vanina la masajeaba y dejaba escapar pequeñas carcajadas cuando a algunos de los tipos se le escapaba algún comentario grotesco. Así, estuvo Vanina en cremando a su amiga hasta que Tania se dio vuelta, dejando caer su corpiño y exponiendo al sol y a todos los que la quisieran ver sus enormes y bellos pechos; Vanina entendió el mensaje y le paso bronceador por las tetas, deteniéndose en la entrepierna, para seguir con la línea que marcaba la bombachita del bikini y terminar en las piernas.
Los tipos deben estar ardiendo, sugirió Tania en vos baja, ya no dicen nada, se han quedado mudos. Era verdad no se los escuchaba, pero lo que también era cierto que Vanina estaba cachonda con los masajes que le estaba dando a Tania y pensando que tal vez esos tipos se están calentando horrores con lo que ellas estaban haciendo. Y Tania, estaba ardiendo con lo que le estaba haciendo Vanina. La situación no daba para más o si pero era necesario que algunas de las dos enfrié el clima o por lo menos eso intentara., y para frenar la situación Vanina le dice a Tania: - por favor, ahora tu dame masajes con el bronceador. Vanina se pone boca abajo y su amiga empieza la sesión de masajes; primero en la espalda, luego los glúteos, el interior de los glúteos hasta casi rozar los labios de la vagina de Vanina, lo que le provoco un temblor, y a lo que Tania se dio cuenta, e intensifico los masajes en la zona, casi instintivamente; Vanina separo las piernas para que los dedos de su masajista alcanzaran la zona y así fue como primero uno dedo corrió el bikini para que otro con mucha crema humectara la vulva; los masajes empezaron de manera más profunda, Tania corrió la tirita de la tanga y dejo al descubierto el orificio anal de Vanina al que se decidió a en cremar con especial atención, luego siguió con la vagina, le introdujo muy suavemente un dedo, y Vanina empezó a mojarse...
Se escucho el ruido del portón de ingreso a la casa y la voz de Osvaldo que la llamaba, Vanina, espantada, pego un salto, y a duras pena se prendió el corpiño de su bikini y se acomodo como pudo y lo propio hizo Tania, y se pusieron a conversar de alguna pavada que se les ocurrió hasta que Osvaldo apareció en el patio. Todos se saludaron con afecto, charlaron de bueyes perdidos durante lo que quedaba de la tarde, y se dispusieron las dos mujeres a preparar la cena, mientras Osvaldo continuaba con la parte de su trabajo que llevaba para hacer en casa.
Mientras conversaban, Tania le dijo a Vanina que no se ofendiera que quería hacerle una pregunta, a lo que Vanina le dijo:- anda dime. Por lo que he visto hoy , tu nunca has tenido sexo anal? Le pregunto Tania. Vanina hizo un silencio y respondió: - que solo después de casada lo había intentado con Osvaldo pero que no lo había logrado porque le producía un dolor intenso y por ésta razón, no le resultaba gustoso y suspendieron, poco tiempo después de casarse la practica del sexo por el accidente de Osvaldo. Tania abrió los ojos como desencajada, y le dijo: - cuanto hace que no tienes sexo? Tres meses, respondió Vanina. Y entonces Osvaldo es impotente? Preguntó Tania. NOOOO!, le dijo Vanina, solo hasta que acabe de recuperarse del accidente y de la cirugía, es temporal su situación. Y como fue?, Pregunto Tania; en ese momento en que Vanina se disponía a decirle entro Osvaldo y la conversación quedo inconclusa.
Al día siguiente Tania se fue, y en la despedida le dijo a Vanina: -dos temas nos quedaron inconclusos, el del accidente de Osvaldo y el nuestro en la pileta, Tania sonrió, saludo a su amiga y a su marido, subió al taxi y se fue; Vanina quedo sin palabras, y Osvaldo no entendió pero tampoco pregunto, porque como siempre estaba apurado; solo al partir le dijo a Vanina, tu estás loca si crees que yo voy a solucionar el tema con los albañiles para que te dejen de decir obscenidades si tú y tú amiga lo provocan paseándose casi en pelotas, me entendiste? Si, respondió Vanina mientras se subía al auto de su marido para que la llevara a su trabajo.
Se hizo la tarde, Vanina ya esta sola en casa, y mientras almorzaba algo ligero, pensaba si era buena idea continuar con el plan que le propuso Tania, lo pensó una y mil veces, y por su memoria pasaban todas esa imágenes y recuerdos del día anterior que un poco la avergonzaba y otro poco la excitaba. Como poseída, casi sin pensar en lo que estaba haciendo, se levanto de la mesa, fue a su cuarto, se desnudó por completo y comenzó a probarse esos pequeños bikinis que antes no se animó a usar, eligió el negro, se lo volvió a colocar, notó que era necesario depilarse la entrepierna, fue al baño, tomo una tijera, cortó su bello púbico lo necesario como para poder utilizar el depilador y comenzó la tarea; primero se depiló solo un poco, luego un poco más y finalizo por depilarse completamente, verificó con su dedo primero y luego con un espejo que no le quedase ni un solo pelito en la zona del ano y mientras se miraba, se dio cuenta que Tania tenia razón, ella era bastante estrecha su vagina y su ano tan cerradito que apenas se distinguía; tal vez por esa razón le dolía al intentar tener sexo anal. Luego de la inspección minuciosa a su depilado sexo, buscó una loción lubricante para usar luego de afeitarse y se comenzó a pasar por la zona de la vagina primero y luego del ano. Mientras se acariciaba comenzó a pasar por su cabeza la idea de intentar lubricar bien su pequeño culito e introducirse algo, pero que? y mientras casi en forma inconsciente se pasaba más y más crema por su augerito fue presionando con su dedo mayor hasta que este comenzó a deslizarse en forma lenta pero firme hacia el interior de ese estrecho canal. Fue primero la primera falange, luego respiro profundo y apretó su mano contra el culo y se metió la segunda falange, se dio cuenta que no le dolía, solo era una extraña sensación; y entonces acometió la embestida final y se clavo todo el dedo dentro, se extraño que no le doliera, solo lo sentía; se quedo unos segundos así, era una nueva sensación, y entonces lo empezó a sacar de a poquito el dedo, sintió plenamente como salía de su ajustado culito, y también se dio cuenta que la situación la estaba excitando muchísimo, tenia la vagina muy mojada, estaba tan lubricada que casi chorreaba. Saco por completo el dedo de su culo, se miro la mano, alzó el dedo pulgar de lo refregó por su muy lubricada vagina, tomando de esta los jugos, se lubrico nuevamente el augerito, posó su pulgar a la entrada del culo, presiono con firmeza y logro que de un solo movimiento se metiera hasta el fondo. Cuando entro todo lo comenzó el mete y saca muy suave, hasta que su mirada se fijo en el espejo de la habitación y se miró extasiada, estaba en cuatro patas, con las piernas abiertas a más no poder y con el dedo de su mano clavado en el culo, como si se tratara de la verga de su mejor amante. Se vio y vio a una perra en celo, vio a la puta que llevaba adentro, esa mujer que soportaba la abstinencia y solo quería gozar como una perra en celo, pero que también se contenía esperando a su marido, al cual amaba y del que espera su pronta recuperación para vivir esos momento de lujuria que tanto necesitaba.
Se dio cuenta que estaba al borde del orgasmo y se detuvo. Intento enfriar su cabeza pero la idea de salir al patio y mostrase divina, hacer calentar esos hombres casi despreciables la excitaba sobremanera, y eso la asustó, y el susto la trajo en sí.
Paseo por la casa un buen rato, cuando se hizo la hora indicada, se puso la pequeña bikini y salió al parque. Sintió la mirada de alguien, disimulo, giro la cabeza de un lado a otro y vio a los tres tipos que la miraban desde distintos lugares de la obra en construcción.
La idea de calentarlos la asustaba, pero también la excitaba; se metió a la piscina, estuvo solo un instante en el agua y salió, se acostó en el piso sobre la toalla, mirando el cielo y dando la espalda a los tipejos que no se perdían detalle, se desabrocho el corpiño y comenzó a pasarse el bronceador. Mientras hacia esto intentaba tener movimientos hacia los costado disimulando buscar algo o que miraba algo, así sus grandes y duras tetas podían ser vistas en parte por sus tres espectadores.
Después de estar un rato boca arriba, se puso de espalda, apuntando con sus piernas hacia la obra en construcción, las abrió un poco, para solo mostrar algo de su entrepierna, y comenzó con el ritual del bronceador. Cuando llegaba a su culo se lo pasaba entre los glúteos teniendo especial cuidado en separarlos para que la tele platea pudiera apreciar los detalles. Estuvo un rato así y luego se paro; se fue a la casa. Cuando entro se noto mojada, estaba muy excitada; pero se asusto de lo que era capaz, ella no era así, ella era recatada, tranquila, una señora, no podía tener esa actitud Tal vez, pensó, sea fruto de la abstinencia, o tan solo estaba enloqueciendo, tanto tiempo solo en aquel solitario lugar, sin la compañía de su esposo.
Reflexiono todo el resto de la tarde, y toda la noche, tomó la decisión de no volver a intentar una locura semejante. A la mañana siguiente, mientras tenia ocupada su cabeza con lo ocurrido la tarde anterior, y se dio cuenta, que los obreros no le habían dicho ni una sola palabra, solo recordaba que cuchichiaban entre ellos pero no le dirigieron ningún improperio libidinoso como acostumbraban; Tania tenia razón!; Pensó para sí, perro que ladra no muerde. Será que se están curando esos babosos asquerosos; tal vez hasta se masturban pensando en mí. La idea la éxito mucho. Quizás sea necesario darles un poco más de esta medicina así se dejan de molestarme definitivamente.
Al mediodía de nuevo en casa, almorzó algo ligero, fue al cambiador de su habitación, tomo del mueble la bikini rosa, la mas pequeña, esa que parecía que estaba desnuda, se la puso muy bien calzada para que se notaran todas las curvas, acomodo su pelo renegrido y se fue a la piscina a la hora indicada, como acostumbraba desde hacia varias tarde. Se paro en el borde de la pileta, dando la espalda a la obra sin reparar que los tipos estén o no, se quito el corpiño y se zambullo. Estuvo un buen rato dándose un refrescante baño hasta que al momento de salir, se dio cuenta que los tiritas de telas que a duras penas le cubrían su vagina y el bellísimo culo que tenia no las tenia puesta; miro dentro de la pileta y se percató que no solo se le habían salido sino que se habiendo roto, fruto del chapuzón, ahora estaba en pelotas. En realidad la situación no la preocupo mucho, salió del agua, se tendió sobre la reposeerá, se paso bronceador; se relajo y casi quedó dormida cuando la sobresaltaron uno sonidos, giro la cabeza buscando de donde venían los sonidos, y a su lado vio a dos personas paradas muy junto a ella , salto de la reposeerá, y se aterrorizó al ver que eran dos hombres los que estaban parados a su lado, eran el gordo colorado y el flaco cara de asesino. Vanina grito, intento ir hacia la casa pero estos dos sujetos le cortaron el paso, ella estaba descalza y en la maniobra abrupta por esquivar el manotón que le quiso dar el flaco, trastabillo en el césped y cayo boca arriba, se intento parar, pero en flaco ya la había sujetado del brazo y el colorado se acercaba para amarrarle las piernas, se defendió como pudo, le propino una patada al colorado que le permitió librarse la pierna, clavo sus uñas en el brazo del flaco, éste la soltó mientras intentaba sujetarla del cabello, pero Vanina logro correr hacia el fondo de la casa, intentando lograr llegar a la tapia de los ancianos que eran vecinos de ella, pero se dio cuenta que la distancia era mucha y la alcanzarían; entonces corrió haciendo un circulo con la intención de dirigirse nuevamente a la casa, pero sintió tropezar con algo; le dolió mucho la cabeza y en la confusión se dio cuenta que la tenia tomada de los cabellos el enorme tipo que faltaba para formar el trío. Cuando el colorado y el gordo vieron que el gigante la había capturado le gritaron ¡bien hecho Mulo! Y mulo sonrió. Grito Vanina, ¿que es lo que ustedes quieren, hijos de puta? y el flaco sonriendo respondió: -tu que crees zorrita, nos has estado calentado las vergas, tú y tu amiguita, y ahora te queremos enseñar a ti que eso no se le hace a tres hombres desesperado. Vanina les gritaba que ellos no tenían derecho, que invadían su privacidad, que eran unos degenerados, que llamaría a la policía y por sobre toda las cosas que la soltaran. Vanina estaba realmente enojada, era como si no se hubiese dado cuenta de lo delicado de la situación.
El gordo colorado, se acercó a ella, que seguía sujetada de los pelos y también de cuello por el Mulo, y sin decir una palabra le tomo con una mano un seno y con la otro le quiso introducir el dedo mayor en la vagina. Vanina se sacudió, se retorció, y le propino una buena patada, que lo dio por tierra, mientras intentaba morder el brazo que estrangulaba su cuello, pero sin éxito. Entonces el flaco dijo:- tráela mulo ponla sobre la meja de jardín y al colorado le dijo: -sácate el cinturón mientras él hacia lo mismo. Con un par de movimientos de Mulo, Vanina quedo boca a bajo sobre la mesa del jardín, mientras el colorado y el flaco se encargaban de atarle las piernas una a cada pata de la mesa; cuando terminaron de sujetarla, el mulo su puso frente a la cabeza de Vanina que casi no podía verlo, mientras los otros dos sujetos estaban detrás de la mujer observando su entrepierna, que había quedado expuesta al tener las piernas atadas y muy separadas. El colorado le dijo al Mulo: - espérate mulito ya te va a tocar observar este bello paisaje; el mulo rió fuerte. El flaco dirigiéndose a la joven le dijo: que bien putita, nos estabas esperando con la raja y el culo afeitaditos.
Vanina mientras todas estas maniobras para sujetarlas eran hechas, solo intento resistirse e insultarlos con todas las barbaridades que se le venían a la boca, cosa que no pareció afectar a los tipos.
El colorado se acerco al culo de Vanina y le dijo al flaco: - vos me das permiso para que la toque un poquito, Si, colorado, dale, pero ahora solo la tocas . El colorado paso sus manos enormes, con dedos casi desproporcionados, rústicas por el trabajo, ajadas; de arriba hacia abajo por los glúteos de Vanina, los separo más todavía, y puso un dedo a la entrada de la vagina, presiono, lo refregó, y noto que estaba seco y apretadito, se agacho, metió la cabeza entre la entrepierna de la mujer, le dio un par de lengüetazos, y la salivo dos veces, lo que le dejo la concha chorreando baba, Vanina se convulsiono, intento gritar pero Mulo la silenció. El gordo ya parado enarbolo su dedo índice y se lo empezó a refregar por la vulva y luego lo comenzó a introducirlo en el interior de la lubricadísima vagina, hasta que se lo clavo todo. Vanina grito ahogadamente, se contorsionaba, pero era inevitable, se lo estaban haciendo con el dedo.
El colorado le dio movimientos vertiginosos a su dedo metiendo y sacándolo, así unas cuantas veces, cuando se lo retiro de la concha, ésta le quedo abierta, notándose la cueva de su interior. El colorado cuando vio esto se éxito al limite de la locura, con el mismo dedo lubricado, empezó a aplicar masajes al ano de la chica y ésta tembló, Vanina no podía creer lo que estaba pasando, que le metieran un dedo en la vagina era horrible pero no en el culo, no lo soportaría, se quería desmayar para no sentir esa sensación. El colorado le afirmó la punta del dedo en el culo y le dijo: -putita, tanto me lo mostraste, tanto me lo ofreciste, que ahora quiero probarlo. Se agacho nuevamente, le escupió el culo, lubricó con el dedo la zona y se lo empezó a clavar con lentitud y firmeza. Vanina arqueo la espalda, sacudió el culo como para librarse del dedo, intento gritar y no pudo, sintió milímetro a milímetro como el dedo enorme le barreneaba el ano, mientras las paredes del recto se abrían paso dándole lugar. Era una sensación de sofocación, de impotencia, pero no tanto de dolor y entonces no tenia más opción que soportar y se dejo caer sobre la mesa.
El colorado le retiro el dedo del agujerito no sin antes introducirlo y sacarlo unas cuantas veces, mientras la pobre Vanina gritaba ahogadamente. Al retirar el dedo por completo, la chica se sintió aliviada, los dos hombres vieron como el culito le queda abierto, como la entrada de una cueva, y se lo escupieron, disfrutando como la saliva se deslizaba hacia el fondo de esa caverna. Se quedaron quietos unos instantes, que le permitieron a Vanina tomar en cuenta unos detalles, por ejemplo que los hombres estaban los tres con el torso desnudo, llevaban pantalones largos, estaban transpirados, y llenos de polvillo de la construcción y los mas importante olían mal muy mal; también se percato que el cabecilla del grupo era el flaco, y que el Mulo no tenia todas las luces, era más bien lento, como así también pensó que todo acabaría pronto o que ya había terminado. Pero estaba muy equivocada.
La situación de Vanina tendida boca abajo, la vagina afeitada y muy lubricada con saliva, el ano rozadito y abierto, volvió loco al colorado que en una fracción de segundos se quito los pantalones, he intento introducirle el pene sin importar por donde entonces el flaco lo sujeto y lo detuvo en su acometida diciéndole: -se hace todo de acuerdo al plan! el colorado reflexiono y se detuvo; giro alrededor de la mesa, se paro junto al mulo y él sujeto ahora la cabeza de la joven por sus cabellos, dejando en libertad al mulo para que empezara su parte de la función.
El gigante se paro detrás de Vanina, se agachó y empezó a lamer la vagina como si estuviese poseído, iba desde la concha hasta el ano, se detenía ahí y volvía, clavaba la lengua dentro de la vagina de la joven y se la metía dentro, la sacaba y volvía a empezar.
Cuando la empezó a lamer el mulo, Vanina empezó a llorar, se dio cuenta que ésto recién empezaba, sabia que faltaba lo peor y parecía que su llanto excitaba más a los hombres, porque cuando se percataron de la situación se reían y le decían: - aflojaste putita, no eras tan mala, y ahora después de esto relájate que te vamos a hacer gozar como un perra en celo. Mulo siguió lamiendo y lamiendo, mientras Vanina pedía por favor que pararan, ya basta les decía; pero el mulo seguía. Vanina, empezó a sentir que en forma instintiva, su cuerpo respondía a los estímulos y sintió que se mojaba, pese al asco que sentía no podía creer lo que le pasaba, se odió por esto, solo espero que los tipos no se percataran y se largo a llorar desconsoladamente. El flaco dijo: - mira como llora la nena tal vez esté necesitando que le den un juguete!. Camino hasta ponerse ante la cara de Vanina y le dijo: -mira putita lo que tengo para voz, y le enseño la enorme verga, muy blanca y venosa, con un glande que no parecía natural, la tenia tan parada que le llegaba la ombligo, y entonces el flaco le dijo: - me la vas a chupar un ratito! Vanina lo miro horrorizada y le contesto:- me lo pones en la boca y te lo corto, hijo de puta. El flaco la miro, sonrió y le dijo: bueno si no quieres no importa, ya vamos a ver como te la arreglas dentro de un rato. Se volvió detrás de Vanina, lo quito de en medio al mulo con un ademán, y se acercó a Vanina con su miembro en alto. Se lo puso en la entrada a la concha y le dijo: - primero por donde a vos te gusta putita, despajes por donde me gusta a mí, y le clavo la verga de un solo movimiento hasta el fondo, Vanina dio un grito con los dientes apretados, luego grito de nuevo y por ultimo se contuvo. El flaco la clavaba casi con odio, sus movimientos eran bruscos y veloces, la verga entraba arrastrando la humedad y salía caliente de las entrañas de la joven, el flaco veía como la estrecha vagina de la chica se ajustaba a su pene y lo acompañaba en sus movimientos. Le retiraba la verga por completo y miraba con alegría como la caverna quedaba abierta, y la volvía a clavar sin piedad. Vanina sentía que le faltaba el aire cada vez que el trozo de carne se abría camino por su entrepierna; cuando le sacaba la verga del todo era casi un alivio y cuando se la ponía con fuerza su vagina se dilataba produciéndole casi dolor. Vanina sentía el vértigo de las embestida, cada golpe del pene al clavársele le hacia solar el aire con fuerza y se escuchaba como un quejido mezclado con jadeo.
En la vagina sentía fuego, que el flaco se encargaba de avivar, y entonces se empezó a mojar, no lo podía creer pero se mojaba. El olor a sexo para el tipo era casi un perfume, y los quejidos de la joven era el combustible que avivaba el fuego. De pronto el flaco se detuvo cuando casi estaba por llegar, lo miro al gordo, y le dijo: - dale que ahora te toca a vos, se paro detrás de Vanina, puso su pene en el agüero y comenzó a moverse. Vanina de alguna forma sintió cierto alivio, no le dolía tanto; los golpes del pene entrando eran más suave, y pudo de alguna manera relajarse, mientras el tipo dale que te dale surcaba el camino ya hecho. El gordo noto cierta indiferencia por parte de las reacciones de Vanina a sus embestidas y le dijo: - puta, ahora ya no te duele porque la tienes dilatada, ahora te quiero ver con esto en el culo; mientras acomodaba la punta de la verga en el ano de la joven. Vanina al sentir este comentario tembló, cuando sintió que le apoyaba la verga en el culo casi no lo podía creer y cuando empezó a sentir que se le metía y se le metía si ella poder hacer nada, casi se desmaya. Era doloroso, su agujerito parecía que se estiraba hasta romperse, la presión que hacia que el pené se le metiera era la misma que le hacia dar alaridos. El culo le ardía, le dolía, a las paredes de su ano las sentía estallar. Y la sodomizaba sin piedad.
Con el transcurso de los segundos, ella sentía que de alguna manera se había dilatado el ano y la sensación no era tan dolorosa pero si horrible. Cuando el colorado dijo que estaba a punto de llegar, se quito, dejo a Vanina boca a bajo con la entrepierna transpirada y el ano bien abierto, lo miró al flaco y le dijo: -ahora te lo deje listo para voz, el flaco sonrió sarcásticamente, y le contesto al colorado:- déjalo al Mulo que se saque las ganas.
El Mulo pido que la dieran vuelta a la joven, éstos la giraron y la dejaron de espalda a la mesa, le ataron las manos a las patas de la mesa como crucificada, dejando bien expuestas las generosa teta de Vanina, el gordo tomo un pierna, el flaco la otra y se las abrieron. El Mulo se quito los pantalones, y dejo al descubierto el engendro que tenia en la entrepierna, cuando Vanina lo vio grito, no por favor no dejen que me meta eso, me va romper toda, no por favor noooooooo. El mulo no atendió a las suplicas, tomo el pene, lo puso en la puerta de entrada de la concha de Vanina, luego hizo unos movimientos y empezó a introducirlo, lento pero sin pausas. Vanina sintió que la desvirgaban, que le quitaban por segunda vez la virginidad, sentía que era un palo lo que le clavaban no un pene, sentía que se desgarraba por dentro y pidió piedad; Basta por favor, basta, por lo menos, lubrícame un poco hijo de puta, le decía al Mulo; mientras este se la seguía metiendo y Vanina gritaba. El mulo al ser tan alto alcanzaba con facilidad las tetas de Vanina a las que empezó a chupar mientras movía su cintura de adelante hacia atrás, metiendo y sacando esa tremenda verga. Sin prisa pero sin pausa se movía, y Vanina se acostumbraba a sentirlo dentro suyo, lo veía con odio mientras le chupaba las tetas, le repugnaba el olor, era tan asquerosa la situación, ella estaba siendo follada como una animal y por un animal que le despertó el morbo y esto hizo que se excitara y comenzara a mojarse, se mojaba mucho. El vaivén del tipo metiendo y sacando su verga, la situación que era espantosa, aunque era también un poco lo que ella había imaginado que ocurriera si su plan fallaba, era la abstinencia, de cuatro meses, era la violación, era sentirse una perra usada por esos sucios y asquerosos tipos que despertaban en ella una sensación de asco y excitación, era ese enorme tipo con esa enorme verga a la que sentía en cada milímetro por las paredes de su vagina lo que la llevo a seguir mojándose, luego siguieron unos espasmos, luego el orgasmo; tremendo, convulcionante, infinitamente largo, doloroso y excitante, no deseado pero anhelado. Por Dios estoy llegando, pensó Vanina, mientras levantaba las caderas, levantaba la pelvis y se contorsionaba alrededor el tronco que la surcaba como un eje hasta sus fondos más escondidos. Vanina se corrió, pero seguía sufriendo, seguía sintiendo dolor, seguía siendo torturada, estaba siendo violada.
Aflojo las piernas, dejo de oponer resistencia, sintió nuevamente que se mojaba, y se dejo llevar. Los tipos se dieron cuenta y la empezaron solo a sostener y no ya a sujetar con fuerzas, pero nadie dijo nada, solo las cosas iban ocurriendo. Vanina sentía dolor, placer, se mojaba, y casi empezaba a sentir que su cuerpo empezaba a tener pequeñas contracciones como si estuviese por llegar nuevamente; esa verga enorme, le daba dolor, pero la llenaba de forma total, las pareces de su vagina sentían hasta lo mas profundo cada partecita del miembro, sentía el placer que le producía cuando le sacaba la verga de su interior y la sensación de placer cuando la volvía a meter que la llevaba a la locura, porque quería resistirse pero quería llegar de nuevo, sí de nuevo y se mojaba mucho, y sentía que en la refriega su concha latía con cada embestida, y cerro los ojos, se relajo y llego al orgasmo nuevamente, fue muy intenso, muy intenso, grito, jadeo, pero lo disimuló lo mas que pudo. Llego como asía mucho lo esperaba, tenia miedo de que se dieran cuenta pero no le importo si ya que podía pasar.
Pero se equivocaba.
Mulo la soltó cuando él estuvo por llegar, tomo su lugar le gordo, le clavo otra vez así boca arriba como estaba, la pija en el culo, mientras le cortaba el gose a Vanina que ya no veia con agrado la situación, el gordo le surcaba el culo con violencia mientras le metia un dedo en la concha a la joven que seguía mojada, pero era por haber acabado no por que le gustara que le hicieran el culo, el gordo, se separó de ella y tomo su lugar el flaco que también se la dio por el culo. Cuando Vanina sintió que la pija del flaco entraba en su ano, ya no le dolía, no le gustaba pero no le dolía, y entonces aprovecho para abrirse bien de piernas y empezar a sentir al final algo de placer y cerro los ojos. El flaco le dio lugar a mulo, este se acomodo, y calzo su garrote en el ano ya dilatado de la chica, presiono y empezó a insertarlo. Vanina se convulsiono, abrió los ojos, grito que se detuviera, NO BASTA POR FABOR, ya basta, me va a matar, decía; Mulo no la escucho y siguió empujando, Vanina lloraba, sentía que la estaqueaban, que las pareces de su recto se estivaban hasta casi romperse, que moriría del dolor, que no controlaba los esfínteres, y pedía piedad. Mulo siguió introduciendo su verga, milímetro a milímetro, hasta casi su totalidad, mientras Vanina lloraba y gritaba, entonces se dio cuenta que se orinaba encima, era patética la escena. La verga la rompía la surcaba con dolor extremo, la sentía en su interior como una mecha que la perforaba si piedad, la llenaba en forma desbordante, sentía desfallecer, intentaba abrir lo más que pudiera para darle lugar al tremendo miembro que tenia adentro pero era en vano, la estaba desollando. En un momento sintió que le sacaba del todo la verga del culo, y que los otros tipos se admiraban como le había quedado abierto el ano, hasta que uno de ellos dijo: -Mira Mulo la sacaste con mierda, se cagó encima la puta, se ve que se la pusiste bien adentro. Mulo se miro y se rió a carcajadas. Vanina ni se inmuto ya no le importaba nada. Solo quería que esto terminara. Los tipos la ayudaron a incorporarse, la pusieron de espalda, hicieron que Vanina se apoye con el torso a la mesa, boca a bajo, dejando bien expuesto el culo, ella no se resistió, y empezó a sentir como nuevamente le penetraban por el culo, pero ahora desde atrás; era el gordo colorado, que le clavo de un solo golpe la verga hasta el fondo, ella intento gritar pero ya casi no podía; el colorado se movió solo un poco, cuando Vanina sintió que se tencionaba el cuerpo del tipo, la sujetaba fuerte de la cintura y le llenaba el culo de leche mientras tenia la verga clavada bien en el fondo de su ojete, luego siguió el flaco, y sucedió lo mismo, un par de movimientos y se corrio dentro de ella, y sin perder tiempo cuando salio el flaco la perforo el Mulo, esta vez si la hizo gritar la penetración, y también se modio un rato y le acabo dentro. El mulo saca muy despacio el pedazote de carne del ojete de Vanina. Todos incluidos la joven se quedaron quietos y en silencio. Pasaron unos instantes, cuando Vanina sintió unas terribles ganas de evacuar el intestino, se estaba cagando, los tipos la sujetaron ella se tomo del borde de la mesa para intentar aguantar las ganas pero fue en vano y dejo salir lo que tenia que salir. Apreto fuerte sus manos contra el borde de la mesa, tensionó los brazos, levanto el culo casi instintivamente y dejo salir chorrito a chorrito, gota a gota el esperma que dejaron los tipos en su culo. Ellos vivaban la situación y le decían: -hace fuerza nenita, dale queremos ver más, tienes más dale cágalo!. Y ella seguía despidiendo leche del ano; sentía como corría por sus piernas, y caiga en gotas al piso. La escena dura unos minutos, ella siguió evacuando, hasta que al final, salía esperma mezclado con un poco de materia fecal. El flaco se acercó otra vez por detrás, y le dijo:- eso que estas haciendo ahora no es nuestro, y le metió el pene en el culo nuevamente, y la bombeaba como loco, estaba loco; en el ambiente el olor a semen y a mierda era notorio, pero no le importaba a ese tipo, le daba y le daba por el culo, se la culiaba como loco, asía que se mezclaran todos los jugos, y le gritaba que apretara el culo que la quería sentir bien estrechita, Vanina solo aguantaba, hasta que el tipo le mordió fuerte, muy fuerte el cuello, Vanina contrajo todos sus músculos del dolor que le producía la mordedura y el tipo le lleno de leche de nuevo en el culo dando un alarido de placer. Le saco la pija del ano, se acerco a sus amigos, le hablo al oído, y se fueron. Vanina quedo tendida en la mesa, despidiendo el semen que el flaco le había dejado.
Espero unos minutos, ya estaba oscureciendo, se fue a la casa, lleno la bañera con agua tibia, se metió dentro, se dio un buen baño, Tomo unos analgésicos, y se fue a acostar. Tomó el teléfono, llamo a su amiga Tania y le empezó a relatar lo que había pasado mientras, tomaba una crema humectante y se la pasaba por la vagina tocándose con desesperación, estaba terriblemente excitada, mientras le contaba a Tania y recordaba los detalles de su violación, estaba como loca, entonces, se puso en cuatro patas, y mientras le hablaba la manos libres (hang free) de su teléfono se masturbaba, acariciándose la concha y metiéndose uno y dos dedos en el culo, mientras masajeaba su inflamada vagina. hasta que se corrio, acabo como una loca, como pocas veces había llegado. Quedo tendida en la cama, corto lo comunicación con Tania y se durmió.