Ahmed

A veces la buena relación entre los compañeros de trabajo, le da a uno buenas satisfacciones, vas por ahí de copas, comentas las cosas e intercambias métodos del oficio que tenemos en común.

Hay mujeres que son unas guarras, que han nacido para putas, pero que o no lo saben o se lo montan mal o muy mal. Muchas de ellas no se atreven a seguir sus instintos en solitario, y por eso nos necesitan a nosotros. Nuestro oficio consiste en detectar mujeres de ese talante y detectar cuando se produce ese estado de ansiedad máximo y aparecer en sus vidas...Una buena follada o dos, son suficientes para que ellas asuman eso que llevan dentro y se dediquen a hacerlo crecer: ser cada día más cerdas y no pensar más que en pollas y en obtener placer sexual sabiendo que quien se las folla sólo las ve como un pedazo de carne con tres agujeros en donde descargar semen y otros líquidos. Saben que han nacido para eso.

Muchas mujeres detectan eso pronto y con 30 años más o menos ya han sido captadas por compañeros y trabajan bien contentas y a pleno rendimiento...pero hay otras que, por circunstancias de la vida, han de ser iniciadas en el ocaso de su “mujerío”, lo cual por un lado proporciona oportunidades interesantes y por otro alguna que otra dificultad menor. La gran ventaja es que son las más marranas de todas, las putas de 60 años o más saben que les queda poco y asumen su realidad como si fuera el último día; no dicen que no a nada y, para bastantes de sus chulos son una delicia. Aceptan que modifiquen sus cuerpos, que les pongan tetas duras, les estiren la piel y les den tratamiento hormonal exagerado para que su líbido esté siempre al máximo.

Ahmed es guineano, Tiene 19 años, una polla de 28 cm. bien gorda.

Su padre se dedica a “negocios turbios”, tiene buenos contactos en España  y por eso el muchacho viajó a España. Su madre se quedó en Guinea y, según nos contó en una noche de marcha y poker, es medio bruja...antes de venir a España le sometió a un ritual de magia negra que, al parecer, le aseguraría tener el control de cualquier mujer mayor que la edad de su madre.

Ahora, y desde que es mayor de edad, controla a una docena de guarras de entre 57 y 63 años repartidas por barras americanas y clubs de BDSM, y otra media docena, las más desesperadas, y siempre vigiladas por personal bajo su control,  trabajando en la calle. Son las más baratas, pero que le dan cada una de ellas más de 400 euros al día. Invirtió algunas cantidades de dinero negro procedente de las actividades de su padre y que le estorbaban un tanto, en pagar cirugías estéticas no muy complejas, como estiramientos de piel, colágenos en la cara, botox permanente en labios aumentar y sostener tetas caidas...en fin, lo más próximo a mujeres “bimbo doll” en “cash” a cirujanos de cierto nivel social ahogados por deudas de todo tipo con prestamistas, de modo que el círculo de seguimiento del dinero  estaba cerrado.

Son putas de la edad que digo pero que aparentan entre 30 y 40 años, pero tienen mentalidad de viejas viciosas; saben la edad que tienen pero no tienen más camino que el que recorren, y Ahmed las tiene perfectamente amarradas.

A los 18 años, al poco de venir a España, sedujo a una monja seglar aún virgen de 55 años que trabajaba en una clínica de rehabilitación a donde tuvo que ir por una lesión que se hizo jugando al futbol. En cuanto terminó la recuperación tardó más o menos 15 días en hacerse con ella y se la estuvo follando mañana tarde y noche veces al día durante una semana, polvos de un par de horas, corriéndose dentro de ella en el coño, en el culo y en la boca y convirtiéndola en adicta al sexo y enviciándola fuertemente...la sacaba por ahí de paseo vestida de guarra, con minifaldas escandalosas, maquillajes a todo trapo y botas al muslo con tacón de aguja...ella no se daba cuenta del todo al principio, incluso se veía guapa porque todos la miraban pero, para cuando quiso enterarse, Ahmed ya la vendía a otros para que se la follaran…le decía cosas como estas, que todos usamos para doblegar aún más a las mujeres que acabarán siendo nuestras putas...como la primera vez...

-”Le gustas mucho a mis dos amigos, no me hagas quedar mal y deja que te follen los dos a la vez mientras piensas en mi y en mi polla, además me harás un favor porque les debo un favor -(eso era mentira)-. Si lo haces bien y me dicen que se han divertido mucho contigo, luego te llevaré a mi casa y te meteré mi polla por el culo hasta que babees y llores de placer. No les digas que no a nada y que te follen bien fuerte y como les de la gana, ya sabes que yo te digo lo guarra que me gusta que seas cuando estamos juntos, ahora es la ocasión perfecta para que le enseñes lo cerda que puedes llegar a ser...”

Una caricia en el culo, la voz adecuada musitando en el oido y un morreo con lengua bastaban para activarla y lanzar su deseo...

Y la guarra, que ya sabía lo que era tener el rabo de Ahmed dentro de ella entrando y saliendo durante un buen rato, hizo lo que se le decía. Subió a una habitación y empezó, casi sin darse cuenta, a trabajar y dejarse tratar como una puta por dos hombres a la vez que la tratarían como una marrana depravada y le enseñarían lo que se esperaba de ella desde ese momento en adelante.

Ese día tardó más de tres horas en bajar de la habitación, y  cuando Ahmed le dijo que había decidido hacer de ella una puta y ponerla a trabajar en un club o en la calle según ella se comportara, ella no puso ningún problema, sabía quien era ahora su amo y haría lo que él dijera...haría todo lo posible... sentía que estaba enganchada a los hombres y a sentir una polla o más en sus agujeros, y sabía que ya no podría vivir sin eso.

… Y en muy poco tiempo, la que antes era una amable y virgen monja seglar, se iría transformando poco a poco en una cerda redomada adicta a las pollas, los gangbangs y a realizar cualquier depravación sexual que se le ordenara.

Como esa, hubo bastantes más y Ahmed descubrió su potencial como proxeneta, reconocido por los “veteranos” del ambiente.

Nos resultaba gracioso, ocurrente y además era respetuoso con el “gang”, nos llamaba para comentar cosas y nunca trataba de hacer las cosas por su cuenta, y encajaba bien en el grupo.

Ahmed y yo somos amigos a pesar de la diferencia de edad, porque compartimos sistema de trabajo...tenemos a las zorras un tiempo y luego las “traspasamos”. La diferencia entre el y yo es que el tiene locales donde tiene a sus mujeres trabajando y puede obtener beneficios más tiempo, además las tiene contentas, les proporciona  suficiente dinero para sus cosas, una habitación espaciosa donde estar y jamás se porta mal con ellas, siempre que tengan claro el tipo de cosas que se espera de ellas. Están ahí para ser unas guarras y es conveniente para todos que, no solo que esa idea no se les vaya de la cabeza, sino que cada vez se implante más en sus mentes.

Por eso Ahmed las estimula usando su “especial predicamento”...

La puta que más clientes tenga en una semana gana un premio: Una noche en la cama de Ahmed

Ahmed las conoce bien a todas, él las ha puesto donde están y no hay ninguna que no venere su polla; no se si el hechizo de su madre tiene algo que ver….el se ríe…

En fin que os cuento todo esto porque un buen día recibí un mensaje para quedar conmigo y hablarme de una idea que tenía y que quería, si era posible, desarrollar conmigo.

Así que quedamos para cenar en un restaurante cuya dueña era una de las amantes viciosas “no putas” de Ahmed...cuando digo “no putas”, es porque a Ahmed no le ha salido de los huevos, de momento, emputecerlas; le conviene tener mujeres a las que se folla cuando quiere, que puede llamar a acudir a fiestas selectas en chalets ultraprivados donde llevar a guarras profesionales no está bien visto, para que puedan “ejercer” de putas pero sin serlo formalmente; fiestas donde por ejemplo, un concejal puede travestirse y ser follado con un strap-on por la dueña de un restaurante mientras le come la polla a un constructor gay casado con una zorra madura drogadicta a la que se follan tres árabes a la vez….esas cosas, que os voy a contar que no sepáis.

La cena fue muy agradable, en un reservado individual atendidos personalmente por la dueña. Ahmed tiene buen gusto para las mujeres maduras...aunque también ellas se ponen las pilas si las han de ver andar o alternar con un bollazo de hombre como Ahmed.

Fue en esa cena donde me contó todos los detalles que os relato a modo de información sobre quien iba a ser mi socio así como algunas cosas más que no tienen mucha más relevancia.

La idea que quería discutir conmigo era sencilla, reunir a entre 20 y 30 zorras, varios hombres de pollas grandes y algunos transexuales operados y bimbotizados para hacer un local exclusivo y muy selecto de BDSM en un chalet de acceso “no fácil” ubicado en un terreno privado, con lujo a toda pastilla y donde se admitirían estancias a modo de hotel de mujeres y hombres que desearan practicar la dominación y la sumisión; cada uno elegiría qué...el local dispondría de cualquier tipo de personal que el cliente deseara, si una mujer deseaba una dómina, pues la tendría, si deseaba ser sometida y emputecida durante su estancia, pues también...todo lo que el cliente pudiera desear, además de un pequeño casino privado donde poder jugar, un pequeño campo de golf, dos o tres ambientes de copas, restaurantes…

Me enseñó algunos planos de la idea. Se los había elaborado una arquitecta que había caído en sus garras un tiempo atrás y que, como la dueña del restaurante, estaba loca por su polla; aunque para él le resultaba más útil, al igual que la dueña del restaurante, como arquitecta y fuente de contactos, que como puta.

La inversión era muy grande y requería que no solo yo entrara en la sociedad, sino que algunos otros proxenetas se animaran. Su padre disponía de tapadera legal para poder usar dinero negro de difícil blanqueamiento en otras circunstancias, de modo que teníamos encima de la mesa un negocio que podría dar buenos beneficios en dos o tres años de explotación.

Mientras tanto, seguiríamos con nuestras cosas mientras la cosa se estudiaba con más detalle y se hacían números.

Teníamos las putas, los gigolos y los transexuales, también el terreno y los planos de las cosas. Los permisos para hacer las cosas también se obtuvieron sin grandes problemas, el sitio no estorbaba ecológicamente a nadie y las personas que habían de firmar estaban convenientemente “asesoradas” sobre qué era lo correcto. Tampoco se trataba de chinchar a nadie con atentados al medio ambiente, antes al contrario, el proyecto iba a dar trabajo a bastante gente. Digamos que iba a ser un “Complejo privado de vacaciones integral.”

El licor de café con que terminamos la cena era excelente. Ahmed se despidió de nuestra anfitriona con un “Nos veremos pronto”, y ella con “Si, y trae a tu amigo” (mirándome).

Salimos del local y Ahmed llamó a un número.

-”Enseguida viene un coche, vamos a uno de mis clubs, me apetece que me coman la polla…¿a ti también?…”

-”Pues no es mala idea...”

-”¿Te acuerdas de la monja de la que te hablé?, lleva algún tiempo aquí y es de las mejores putas que tengo pues verás que mamada me hace, y después haré que se la follen tres de mis chicos para que la veas en acción.

A ti te comerá la polla otra guarra de 50 años que he captado hace un par de meses; era reponedora en un hiper, la ayudé un día en que fui al sitio donde trabajaba a hablar con uno de mis informantes (me dicen si hay mujeres que captar) a librarse de un gilipollas que la molestaba en el trabajo...ahí quedó todo, pero al poco tiempo me la encontré en la cafetería de la estación del tren, aún se acordaba de mi... había ido a despedir a un familiar que regresaba a Francia y yo tenía que hablar con un funcionario de la compañía de tren para que no molestaran a alguien que venía sin la documentación en regla.

La invité a cenar y luego me la llevé a un hotel de mis habituales y me la follé hasta por las orejas esa misma noche, parecía que estaba deseando que se la follaran así, no paraba de correrse la hija de puta, al cabo de un buen rato, se echó a llorar y a retorcerse pidiéndome más polla, ya sabes lo divertido que es ver a una cerda de esas que no para de correrse una y otra vez con tu rabo metido todo dentro de su culo llorando, chillando y suplicando por más... y fue cuando le dije que la iba a poner de puta para mi, que yo era proxeneta. Tuve que darle dos bofetones, la tenía a cuatro patas dándole por el culo, bajó las manos y apoyó su cabeza en la cama clavándose y empotrándose con mi polla con toda la fuerza que podía, llorando y chillando pidiendo más y mas….ya deshinibida del todo aceptando lo que le iba a pasar.  Me la traje al club esa misma noche, la emborraché un poco y la tuve haciendo gangbangs de tres durante varias horas hasta desbravarla del todo y al día siguiente mande a un apoderado a rescindir su contrato de trabajo. Ahora es feliz...y verás que mamada te hace.”

Entre estas y otras cosas, llegamos al club donde Ahmed había decidido que continuáramos la velada. No entramos por la puerta por donde entraban los clientes, sino por una entrada exclusiva guardada por personal “profesional”, que nos abrió la puerta con delicadeza extrema. Muy bien...Ahmed se lo montaba con clase.

Se disculpó unos instantes para dar instrucciones a uno de sus  hombres, y me sonrió haciendo un ademán para que le acompañara a una sala privada.

Espaciosa sala donde los haya, con dos sofás de cuero, dos mesitas bajas donde dejar las copas y un pequeño escenario para “audiciones privadas”.

Una puta bimbo, madura, muy maquillada, con las tetas enhiestas operadas al aire, tanga y tacones ultra altos de aguja como toda vestimenta, nos trajo una botella de Chivas Regal de cosecha limitada con sus vasos, hielo y esas cosas. Ahmed le dijo:

-”Subete ahí, señalando al pequeño escenario, y hazte una paja de pie mirándonos...y te corres cuando yo te haga una seña...no antes...recuerda que me vienen bien unas cuantas zorras más en la calle...ya tardas...”

La marrana se subió y empezó a tocarse el coño sin dejar de mirarnos...gemía como una cerda, no hacía más que decir…

-”Por favor, por favor...”

Ahmed me miró cuando ya pasaban unos minutos y la puta seguía pajeándose…

-”¿La dejamos correrse?”…

-”¡Que cabrón que eres!...dile que se arrodille y que se corra arrodillada...”

-”Ya lo has oído cerda, danos un buen squirt...y luego lo lames, dejas limpio el suelo y te vas a que te folle alguien, en 5 minutos desde que te vayas quiero que me digan que estás en una habitación con dos o tres clientes”…

La guarra no esperó mucho y se corrio viva, chorreando por el coño gritando y mirando a Ahmed...se agachó, lamió su squirt y ajustándose las bragas salió hacia-supongo- la sala.

-”Ya veo que tienes todo controlado, las tienes bien amaestradas, cabrón, aprovechas bien el tener un club...quizás, aparte de lo que me has propuesto, yo también me meta en este asunto”..

Brindamos “por el resto de la noche”...Uno de los hombres de mi anfitrión entró y le habló al oído a su jefe. Efectivamente, la puta que nos había dado el espectáculo ya estaba follando en una habitación con tres clientes a la vez.

-”Trabajar en la calle les baja el caché, acabas fichada….si una puta  está una temporada en la calle, las demás lo saben y lo hablan...al final van perdiendo clientes lentamente y ya no vuelven a estar en un club...se quedan en la calle y no es lo mismo que te den por el culo por 10 euros apoyada en una pared de callejón que en una cama mullida en una habitación caliente cobrando 100, por eso cuando les enseño el panorama...tiemblan y me dan el 120 %, que es el ejemplo que quiero que tengan. Mientras me den el 120% vivirán bien, así que las tengo a tope siempre. Tienen que tener presente siempre que puedo ser muy bueno, pero soy su chulo.”

Hizo un gesto a su hombre y salió de la estancia...al minuto entraron dos cerdas, vestidas de cerdas busconas y algo borrachas por petición de Ahmed, nos iban a comer la polla y a la monja se la iban a follar delante de nosotros.

Ambas vestían botas de plataforma y tacón de aguja al muslo, tanga, minifalda de spandex de 15 cm., de las que te dejan ver el coño y ajustan a media nalga, y un sujetador de tiras que sujetaba, por decir algo, unas tetas bimbo exageradas pero duras y sin asomo de caida. La piel de las dos putas estaba muy bien estirada, y cualquiera hubiera jurado que tenían 30 o 35 años, pero la monja frisaba ya los 60… parecían gemelas...solo las diferenciaba el color de las botas y la minifalda...ambas llevaban pendientes de aro y piercings en las tetas y en la lengua…

-”Poneos a cuatro patas y acercaos, perras, lengua fuera...”

Ellas se acercaron…

-”Ronnie, te presento a “La monja” y a Perlita. Perlita te va a comer el rabo bien comido...vamos a levantarnos...”

Nos levantamos, nos desabrocharon el cinturon y nos bajaron las cremalleras del pantalón con los dientes...mirándonos y acariciándonos las nalgas...los pantalones y la ropa interior cayeron y nos empujaron levemente para sentarnos en el sofá.

Nuestras pollas son enormes comparadas con la media, no pretendo presumir, pero así son las cosas. Otras personas tienen el cerebro mejor dotado que el nuestro para la ciencia, el cuerpo mejor preparado para el deporte o más resistencias inmunológicas.

Ahmed y yo somos de los que tenemos una polla grande y vivimos de eso, como los demás viven de otras cosas…

Puestos en posición, las zorras empezaron a comernos  el rabo...me sorprendió la capacidad de la monja para meterse todo entero el miembro de Ahmed, y la pasión con la que Perlita me cogía los huevos y me empezaba a comer la polla poco a poco, metiéndose cada vez más carne en la boca mientras me miraba sin quitarme la vista de encima…

En un par de minutos, ambas putas tenían nuestros rabos duros completamente metidos dentro de sus bocas, entrando y saliendo de sus bocas desde la punta del capullo hasta tocar con sus labios nuestro abdomen, yo diría que como dos novias enamoradas...mientras Ahmed y yo hablábamos de negocios y disfrutabamos de la escena, La monja miraba de reojo a la otra puta, como presumiendo de que le estaba comiendo la polla al amo…

Ahmed advirtió eso, y le dio un par de bofetadas fuertes, diciéndole que la iba a poner en la calle esa misma noche, que nunca más se la volvería a follar y que lo único que tenía que tener en la cabeza era comerle la polla…

La monja empezó un metisaca desesperado, gruñendo con la boca llena de polla...en realidad las dos estaban así, tuve tiempo de fijarme y las dos tenían el coño chorreando, pese a su edad...claro que las hormonas hacen su trabajo, pero es enternecedor ver a una cerda cercana a los 60 años con el coño choreando mientras se come una polla.

Ahmed hizo una seña y su hombre entró con cuatro consoladores monstruosos con correas que amarró a la cintura de ambas con un candado, de forma que no pudieran sacárselos, y que introdujo en el coño y en el coño de las putas sin piedad, de un tirón...y nos dio dos mandos a distancia que controlaban su movimiento dentro del coño de las mujeres…

Ambas suspiraron cuando empezamos a jugar con el mando a distancia...yo ya conocía este tipo de juguetes, pero estos eran especiales, porque además de moverse, desprendían una sustancia que reaccionaba con las pareces de la vagina y del intestino de las mujeres aumentando muchísimo su sensibilidad ante una penetración, provocando, como resultado unos orgasmos brutales, largos, muy largos...y continuos...solo 20 o 30 segundos entre uno y otro, y cada uno de ellos de por lo menos 15 o 20 segundos…

Nada hay más gratificante para un chulo que ver a sus putas comerles el rabo mientras se están corriendo sin parar mientras te miran con tu polla metida hasta las trancas en su garganta…se la saca, la sacude con la mano, te vuelve a mirar con una lujuria salvaje mientras siente las oleadas invasivas de su enésimo orgasmo y se la vuelve a meter hasta dentro en un solo movimiento...virtualmente la traga y es su garganta la que aprieta tu glande buscando cazarte y que le eches tu semen diréctamente a su esófago.

Un buen chulo sabe que no puede caer en esa trampa y que debe actuar de modo que la guarra que le come la polla ha de suplicar por su semen, haga lo que haga nunca debe ser suficiente para forzar que te corras, ni en su coño, ni en su culo ni en su boca, pero debe de intentarlo siempre al límite...es su gordo de navidad y todas van siempre en busca de él…

Al cabo de un buen rato...Perlita se sacó mi rabo de su boca y suplicó por mi leche...la abofeteé, pero no se inmutó...siguió pidiéndolo mientras se corría, tenía los ojos vidriosos y me dijo que no podía más...que la necesitaba.

-”¿Qué me vas a dar a cambio, zorra?…¿Te dejarás follar por un perro?…

Y se volvió a meter la polla en su boca y a meter y sacar violentamente, a cuatro patas como una perra follándose ella misma la boca….

Así estuvo un par de minutos…

-”¡Dame tu leche que me la beba y haré lo que quieras mientras hagas que me corra como me estoy corriendo esta noche, cómprame y seré tu putaaaa.”

Le volví a dar dos bofetones, para excitarla más y que me comiera el rabo con más intensidad…

-”¿Te vas a dejar follar por un perro por el culo, marrana?...¿solo para complacerme?...”

Ella se estaba corriendo sin parar, era consciente de su grado de depravación, de lo puta que era y de que no podía negarse, porque no quería a lo que su chulo le pedía…

Con lagrimas en los ojos, mientras me cogía los huevos con las dos manos y lamía mi polla de arriba abajo me miró y me dijo que si, que se dejaría follar por el culo por un perro…

Y le di mi leche, un buen chorro que se esparció por su cara y su boca...mientras chillaba y chillaba…

El ayudante de Ahmed vino a una seña mía, le quitó los consoladores...Yo sabía que podía darle alguna orden…

-”La quiero follando con tres hombres ya mismo, y luego la pones en la calle, le grabas mientras media docena de tipos le follan el culo apoyada a la pared uno detrás de otro...¿De acuerdo?...”

Y se la llevó.

La monja había seguido un camino parecido...Ahmed le estaba continuamente diciendo lo harto que estaba de ella y que se estaba pensando seriamente ponerla en la calle esa misma noche…

Mientras ella, con cara de desesperación y en un continuo orgasmo por los consoladores, chupaba y chupaba la polla de su amo como si le fuera la vida, sin dejar de mirarle…

Ahmed cogió el teléfono y llamo al encargado del club, para que trajese a tres gigolós. Vinieron y se llevaron a la monja al pequeño escenario, allí le quitaron los consoladores y antes de empezar a follarla, Ahmed se corrió en su cara, para que su semen la estuviera marcando y goteando mientras se la follaban por boca, culo y coño. Nada de limpiarla.

-”Depende de como te folles a estos tres te voy a poner en la calle  o no, así que ya te puedes lucir para mi amigo, enséñale la clase de puta que eres y como puedes con tres rabos grandes, vieja, más te vale que me sigas dando buen dinero o te venderé...”

-”Ya verás como folla, me dijo,...no hay nada como la desesperación para hacer que una puta sea mucho más puta”.

Y así estuvimos hablando de otras cosas viendo el espectáculo de gemidos, llantos, orgasmos, azotes, petición de más polla, fóllame mas el culo... Mientras tanto, Perlita estuvo, no solo una vez con tres hombres en la habitación, sino dos veces; un grupo de 6 de tres en tres, un grupo tras otro, en media hora se los cepilló a los seis, ya iba cachonda del todo... y luego de arreglarla el maquillaje fue puesta de buscona en la calle. No lo hizo mal allí...tal vez pensó que volvería dentro...pero estaba equivocada. Al cabo del rato

Bien pensado, guarras de esas están bien en la calle, creo que es buena cosa el que piensen que pueden volver a lo que eran, cuando en realidad saben que no va a ser así, pero...la esperanza es lo último que se pierde.

A las 5 de la mañana, la monja estaba hiperfollada y aún quería más, de modo que Ahmed les dijo a sus gigolos que terminaran con ella y que la pusieran en la calle hasta las 8 de la mañana.

-”Si quieres volver a trabajar dentro, quiero 15 clientes. 5 a la hora, cerda. Ya sabes que esto es así, -le dijo mientras se recomponía la minifalda-

La monja protestó un poco, pero Ahmed le dio un bofetón que la volvió la cara del revés... todo serio.

-”Dime que quieres trabajar de puta en la calle esta misma noche”...o te vendo a ese hombre que tu y yo sabemos...marrana de mierda...arrodíllate y suplícame que te ponga de puta en la calle...”

La monja, totalmente sometida, se arrodilló y rodeó con sus manosl las nalgas de Ahmed, mientras que con la boca a la altura de sus genitales le miraba y le pedía llorando que la pusiera de puta en la calle y que sería todo lo guarra que le pidieran y más, pero que no la vendiera a Jimmy…se agachó y le besaba los zapatos...rogando por favor que la pusieran en la calle y que follaría todo lo que le dijeran, aunque fueran de tres en tres por 10 euros…

-”Sacad a esta zorra de aquí, y ponedla en la calle ya, venga, esta noche estoy harto de ella”

-”Ronnie, ¿Quieres ver como se folla un perro a Perlita?…

-”Pues estaría bien, si, estaría de puta madre – le dije – traela de la calle, pero que no se limpie ni el coño ni el culo.”

Y así se hizo, la trajeron después de haber sido follada y enculada contra la pared, babeando semen de quienes se corrieron en su boca y la ataron bien fija a un taburete en el escenario con las tetas colgando y las piernas y el coño suficientemente elevados para que el perro la follara agusto…

Ella ya sabía lo que iba a pasar, nunca la había follado un perro, pero a esas alturas podría decirse que hasta le apetecía…

-”¿Sabes que va pasar Perlita, cariño, - y ella miraba con los ojos vidriosos – Va pasar que un perro te va a follar por el culo y luego otro te va a follar por el coño, y se van a correr los dentro de ti, y después, vas a volver a la calle, a buscar más hombres para que te sigan follando y a seguir ganando dinero para mi.”

-”Si por favor, haz que me follen tus perros, pero te suplico que alguien me meta una polla gorda en la boca hasta dentro mientras lo hacen, que se corran dentro de mi boca, y que venga otro, estoy salida de la muerte, mi amor...¡Te quiero!...no me dejes así, dame pollas para mi boca mientras me follan los perros”.

El hombre que la ató al taburete se bajó el pantalon y le enchufo su rabo hasta el fondo de la garganta, mientras la untaba el culo y el coño con un ungüento que tenía en un tarrito, y que al parecer eran feromonas de perra en celo.

Trajeron a uno de los perros de vigilancia externa del club, un pastor alemán, que nada más oler a la guarra...se lanzó a por ella; hubo que sujetarle para que pudiera atinar en el culo de Perlita. De un golpe.

Era un tierno espectáculo, una guarra inmovilizada follada por el culo por un perro, mientras un hombre le sujetaba la cabeza y le follaba la boca como si fuera un coño….otro hombre esperaba….el primero se corrió en la garganta de Perlita y otro ocupó su lugar mientras parte del semen le babeaba. La polla de este segundo hombre era más grande, y al principio Perlita tenía dificultades para tragarla del todo, ya sabéis los labios tocando el abdómen, pero nada que no se solucionara con un par de bofetadas…

El perro se corrió todo en el culo de Perlita y trajeron otro. Un Butplugg tapó el culo de la guarra dejando solo hábil el coño para follar. Este segundo perro era algo más grande, tenía un buen rabo y pasó lo mismo...se la metió de un golpe y a darle fuerte...El segundo hombre se corrió en la boca de perlita y vino un tercero...y luego un cuarto...hasta que el segundo perro se corrió...le pusieron un dildo en el coño y la desataron. Trajeron una especie de bol y ordenaron a Perlita que se pusiera en cuclillas encima de él, y le quitaron los “tapones”…

Toda la lefa de los perros cayó sobre el bol…

-”Untate con ello las tetas y la cara, guarra, y el resto te lo bebes...así provocativa...eso es...bébetelo todo...pasa la lengua por el bol...límpialo...eso es, que cerda eres…”

-”Quiero que me follen más, deja que me vaya a la calle, amor mío, me gusta lo que haces conmigo…¿Vas a hacer que me follen más veces los perros?...me he sentido muy guarra y quiero más...haz que me lleven a la calle a follar mientras encuentras más perros...te lo suplico...”

-”Llevaos a esta marrana de aquí, a la calle, tapadle el coño y que se le follen solo por el culo, buscadle dos que se la metan a la vez...se lo merece…

Y en estas cosas me enteré de como era Ahmed...toda una exhibición de poderío.

Salimos al club por una puerta y vimos que había un buen ambiente...había algunos proxenetas que yo conocía tomando una copa y las putas yendo y viniendo subiendo y bajando...algunas haciendo mamadas a hombres apoyados en la barra hablando con otro.

Ahmed me buscó un coche, y al arrancar miré por la ventanilla y vi a Perlita comiéndose la polla de un fulano apoyado en la pared mientras otro la enculaba...Y pensé…

-”Si es que no puede ser”...

A las 6 de la mañana aparecí por mi casa, en mi correo electrónico tenía un enlace a una selecta “nube” donde estaban los videos de todo lo que habíamos hecho Ahmed, sus guarras y yo, incluyendo lo de Perlita, para recuerdo y un agradecimiento por haber compartido una buena noche de marcha.