Ahilen y yo (2)

Esta vez seré yo quien relate la historia para evitar complicaciones… y gracias por las críticas, nos ayudara a mejorar nuestros relatos Mi hermana Ahilen se encuentra feliz en mi departamento, pero para mi comienza a ser un martirio, bello pero un martirio al fin

Ahilen y yo (2)

Esta vez seré yo quien relate la historia para evitar complicaciones… y gracias por las críticas, nos ayudara a mejorar nuestros relatos

Mi hermana Ahilen se encuentra feliz en mi departamento, pero para mi comienza a ser un martirio, bello pero un martirio al fin

Llegamos al aeropuerto, en silencios nos dirigimos a la sala de espera. Ahilen se mantenía melancólica, creía que el alejarse de nuestra madre, no digo que se alegraría, pero al menos tendría mas tranquilidad y la oportunidad de tener una mejor vida que la que llevaba, después de todo ella fue quien me pidió venir, pero al verla allí sentada sin ánimos de nada… pensé en decirle si quería volver a casa, que yo lo entendería, pero no… algo dentro de mi me detuvo. Quería que ella viniera conmigo, eso era lo único que deseaba en esos momentos, no dejaría que nada la apartase de mi lado a menos que ese algo se ella misma.

_ ¿Te sientes bien pequeña?_ pregunte sentándome a su lado

_Si… ¿Por qué lo dices?_ me pregunto a su vez haciendo un esfuerzo por mostrarse contenta

La tome de las manos y se las bese suavemente, estaba nerviosa, la tensión en ellas me lo indicaba. Comencé a masajeárselas como si tuviese frío, intentaba darle ánimos cuando me dijo:

_ Marck… se que es muy doloroso el disgusto que tuviste con mama, no quisiera que por mi culpa tu y ella se alejaran_ termino siendo su voz casi un murmullo

Con que eso era lo que le preocupaba, y yo que creí que era por el viaje y el alejamiento de casa. Pero pensándolo muy dentro mío con o sin problemas de por medio me la hubiera traído conmigo igual

_ Ahilen… quiero que entiendas algo, tu no tienes la culpa de nada, si hay que buscar un culpable esa es nuestra madre… ella te hizo mucho daño y no podía permitir que esto continuara, además me encanto la idea cuando me lo pediste, y eso fue antes de saber yo la verdad_ concluí mirándola serio para que no quedara dudas de que ella no era culpable de nada

_ ¿De veras?_ interrogo

Asentí con la cabeza y dándole una de mis más sinceras sonrisas acaricie su cabecita.

Ella me abrazo tan fuerte que comprendí que desde ahora en adelante lo único que tendría en el mundo era a mí. De repente el llamado de abordaje nos sorprendió. ¡Los dos nos reímos con ganas!

Las horas de viajes pasaron casi inadvertidas, nos las pasamos contándonos las cosas, fueron muchos años para poner al día, de la charla saque en claro algunas de las cosas que yo tenia curiosidad por saber, como por ejemplo… no tenia amigos ni amigas, nunca mama la dejo salir con alguna compañerita de colegio, y eso me daba la pauta que mucho menos podría haber tenido un noviecito por allí, también me daba a entender lo poco que ella había disfrutado de la vida desde la muerte de papa.

Ya tendría tiempo suficiente de llevarla a los mejores lugares y de enseñarle una que otras cosas de la vida

Una vez que retiramos el equipaje nos subimos a un taxi, ella miraba absorta los edificios, las casas y a la gente. Me causaba gracia la carita de confusión que ponía cuando los escuchaba hablar en las paradas de los semáforos. En una de las tantas veces que me reía me descubrió, no sabia si lo tomaría a mal pero para mi sorpresa se río también, su risa era contagiosa, alegre, dulce y cristalina. Fue en esos momento en que me di cuenta de lo mucho que quería a Ahilen, los nuevos sentimientos que sentía hacia ella comenzaban a ganar terreno a los antiguos sentimientos, me daba miedo… miedo de que en algún momento no pudiera controlarme he hiciera algo que echara a perder todo ese cariño y la confianza que estaba comenzando a nacer tan estrecha entre los dos.

Cuando llegamos al edificio se sorprendió, y mas aun cuando entramos al departamento. Su expresión era como para filmarla, parecía una niña, recorría detenidamente cada espacio, admirando

cada cosa que le llamaba la atención, primero fue a la cocina, le gusto mucho, después fue al living, el baño y por ultimo mi habitación. Se puso muy seria a descubrir que había una sola habitación, peor aun cuando vio que había una sola cama. La verdad su cara era un poema de tragedia, por supuesto yo me reí al ver su inquietud.

_ Tranquila pequeña_ dije abrazándola por los hombros_ no te preocupes, ya veremos como solucionaremos ese pequeño contratiempo.

Ella no dijo nada, pero la vi mas calmada.

Mientras Ahilen se dispuso a desempacar yo me di un baño, creo que fue el baño mas largo de mi vida. Eran muchas cosas en la que debía pensar, tenia que organizarme, ahora con Ahilen aquí este departamento quedaba muy chico, mañana me pondría en el trabajo de buscar uno mas grande y lindo, quería que ella estuviera feliz, luego debía volver a mi trabajo, lo bueno de todo era que aun me quedaba tres semanas de vacaciones, tiempo suficiente para mejorar mi vida. Sin darme cuenta hasta ese momento toda mi existencia la estaba organizando en función de la comodidad y felicidad de Ahilen…Ahilen, ¿que diablos me paso? No entendía como de un momento a otro mis sentimientos hacia ella habían dado un giro tan rotundo. ¿En que momento fue? Solo me venia una imagen a la mente… cuando la vi después de tantos años en el aeropuerto aquel día, por primera vez en mi vida el corazón se me acelero de tal manera que me costaba respirar, nunca me había pasado con ninguna mujer… ni siquiera en mis mejores momentos con Mary. .. No podía dejar de mirarla, me tenía completamente fascinado, si eso era lo que había sentido… fascinación por esa jovencita que era para mi desdicha mi hermana menor.

No me había dado cuenta que mientras pensaba en ella algo me estaba sucediendo... estaba totalmente excitado. Tenía una enorme erección. Me deje llevar disfrutando cada segundo el movimiento de presión que ejercía mi mano en mi miembro, me imaginaba que era ella quien me masturbara, seguía disfrutando cada segundo de esa sensación pero con miedo de que ella pudiera escucharme, trataba de contener mis gemido, pero unos minutos después con la llegada de un inmenso orgasmo perdí el control ¡y grite!

_ ¡¿Marck, estas bien?! _ se escucho la voz de Ahilen preocupada detrás de la puerta

_ ¡Si! No te preocupes, solo golpee la rodilla con el caño de la bañera, lo que pasa es que soy muy torpe_ atine a contestar casi jadeando por el esfuerzo

Escuche como se reía… ¡Diablos! Esto va a ser más complicado de lo que pensé

Salí con mi bata de baño, Ahilen estaba en la cocina, estaba haciendo un par de enormes sándwich.

_ Listo, ya tienes el baño para ti solita_ dije haciendo una mueca

_ ¿Que miras?_ pregunte intrigado y nervioso ya que miraba mis piernas

_ Nada… solo quería ver si el golpe había sido fuerte, pero veo que no, no tienes ni siquiera un magulladura, eres un llorón _ dijo burlándose descaradamente

Yo a mi ves me puse del color de la amapola, ya que recordaba perfectamente el porque de mi grito, y no tenia nada que ver con un golpe. La verdad me sentí mal por mentirle, pero no era algo de lo que me enorgullecía como para contárselo a alguien y menos a ella.

_ ¿Así que crees que soy un llorón?_ dije acercándome mas a ella_ ahora veras quien será mas llorón de los dos_ la agarre de la cintura y comencé a hacerles tantas cosquillas que empezó a gritar para que la dejara.

_Nooo… Marck, déjame… no aguanto por favor, suéltame _ suplicaba a viva voz tratando de zafarse

Pero yo en vez de eso aumente más las cosquillas, cayó al piso de rodillas porque ya no tenía fuerzas para sostenerse. Me dio tanta gracia que la abrace. En eso ella se recupero y rápida como una gacela se tiro encima mío dispuesta a hacerme lo mismo, el caso es que de un movimiento me safe y salí corriendo. Por nada del mundo podría permitir que ella me hiciera cosquillas o algo más. Eso seria un error ya que aun conservaba parte de la "excitación" que tuve en el baño, además estaba desnudo bajo mi bata. Esta vez ella se daría cuenta de mi incipiente erección y yo estaría perdido, que explicación le podría dar.

_ Ven vamos a comer_ dije para hacerla desistir de sus intenciones

Parecía que tenía hambre porque abandonó enseguida

La verdad que comía con un apetito voraz, eso se debía a que no comió nada en el avión porque estaba algo descompuesta. Pienso que porque era la primera vez que viajaba, creo que tendrá incontables primeras veces de muchas cosas… Yo estaba completamente feliz, embobado, mira cada detalle de su rostro, el rostro de una niña pero que tenia ciertas características como sus labios que los hacia deseables. Sus nítidos y tiernos ojos turquesa por los cuales se desnudaba su alma, la pequeña arruguita que se le formaba en la comisura de sus labios, me volvía loco. Su cuello largo y esbelto como el de una modelo, su cabello… bueno toda ella me fascinaba cuando sonreía ¿Quien será el primero que tendrá el placer de besar su boca? Eso me entristeció, pensar que otro lo haría y no yo, me provocó una punzada en el pecho. No se que cara tenia porque Ahilen me miraba extrañada.

_Te sucede algo, no te gusta el sándwich_ me dijo preocupada

_ No… es que estaba recordando cuando éramos niños_ dije mientras le daba un buen mordisco del sándwich dándome tiempo de pensar que es lo que estaba recordando para decírselo, unos segundos después continúe_ ¿recuerdas aquel día cuando estábamos en casa de la tía Eloisa y yo me metí en la laguna?_ su cara se ensombreció al recordar ese día

_ Si… Pensé que te habías ahogado, me enoje mucho cuando me di cuenta de que era una broma tuya, estuve mucho tiempo sin hablarte aunque quería hacerlo_ concluyo algo molesta

_ Es verdad, no pensé que te perturbaría tanto, quería hacerte una broma y me salio mal_ me escudé

_ Marck, nunca vuelvas hacerme una broma como esa, y nunca me mientas ¿si?_ rogó

Cuando me dijo "nunca me mientas" algo dentro de mí se movió, sin que ella lo supiera era la culpa. Un miedo se apodero de mi… ¿que pasaría si ella algún día se enterara de mis sentimientos, o peor aun que descubriera que el solo pensar o el verla me excitaba del tal manera como ocurrió en el baño hace unos minutos? Sacudí la cabeza como tratando de quitarme esos pensamientos. Ya vería la forma de que no lo descubriera, mientras tanto trataría de encontrar el modo de que el día en que se lo dijese no me rechazara. Debía preparar el camino, o mejor dicho tendría que saber enamorarla sin que ella se diera cuenta hasta que fuera demasiado tarde, ojala las cosas salieran como en ese momento las deseaba pero bueno uno puede planear y hacer lo mejor pero la última palabra la tiene el tiempo y el destino.

Había estado tan pensativo que Ahilen me miraba intrigada, es como si tratara de leer mi mente, al darme cuenta desvíe la mirada hacia la ventan y me limite a devorar el resto de mi sándwich.

Al terminar de cenar Ahilen se dispuso a buscar un lugar donde acomodar su ropa, ni lerdo ni perezoso saque unas cuantas cosas inútiles de mi placar para hacerle espacio, ella se alegro mucho porque le encantaba el mueble porque tenia muchos cajones y estantes, decía que era mucho mas amplio que el que tenia en casa.

En tanto ella ordenaba su ropa yo me dispuse a llamar a mis amigos, quería saber como les había ido en estos últimos días, cuando me acorde de Mery, decidí no llamarla por el momento, no quería que nada ni nadie nos molestara por lo menos hasta que Ahilen se sintiera completamente a gusto, además la visita de Mery me obstaculizaría mi relación con Ahilen.

Como bien dije anteriormente, uno puede desear o planear pero el destino es quien decide. Al llamar yo a mis amigos para mi desgracia, en uno de ellos estaba Mary, cual fue mi sorpresa cuando Emiliano le paso el teléfono sin siquiera avisarme.

_ ¡Hola amor! ¿No sabes cuanto te extrañe?, tengo tantas ganas de verte… me tomo un taxi y en unos minutos estoy allí…_ dijo llena de jubilo

_ ¡No! _ dije casi gritando. Al otro lado del tubo se hizo un silencio sepulcral_ ahora no es el momento Mery, disculpa pero no estoy solo… Ahilen… mi hermana menor esta conmigo, que te parece si lo dejamos para otro día ¿si?_ respondí evitando la mirada picara y escrutadota de Ahilen debido a mis titubeos y nerviosismo, esta no dejaba de sonreí y hacer gestos de manera burlona.

_ Esta bien, pero no veo cual es el problema de que este tu hermanita allí… pero si es lo que quieres esta bien. ¡Adiós!_ dijo y corto bruscamente

Me quede mirando el teléfono por unos segundo dándome cuenta de que acababa de ofender a Mery… era mejor así, ya que había decidido cortar toda relación que no sea la amistad con ella.

No dije nada, solo me senté en el sofá, Ahilen lentamente se acerco y sentó a mi lado. Tampoco decía nada.

En eso me volví a mirarla y la vi muy preocupada, sin decir nada me acerque más y la abrasé, solo quería estar así con ella, sentirla muy pegada a mi, sentir la tibieza de su cuerpo pegado al mío. Ella solo se limito a acariciarme el cabello. Esa sola mera acción me hacia sentir el hombre mas feliz y dichoso del mundo. Estuvo mucho tiempo acariciándome y debes en cuando me daba uno que otro beso en la nuca. Ya sabrán ustedes como reacciona un hombre ante esa demostración de cariño. No me di cuenta desde que momento le estaba acariciando la espalda, me estaba dejando llevar por el deseo y el amor que me embargaba. Me detuve lentamente… me deshice de su abrazo, la mire y sin mas la bese.

Sin planearlo, seria yo el primero quien besara esa boca… ya conciente de lo que estaba haciendo no me detuve, sentir la calidez de esos dulces labios, su tersura y el sabor, sabor a miel… fue para mí la gloria. Quise forzar esos labios para entreabrirlos, quería recorrer su boca, llegar mucho más allá de un simple beso, quería que nunca olvidara ese instante.

Solo se que me detuvo de un empujón, me miraba desconcertada, había excitación en sus ojos, pero nada tenia que ver con la pasión sino con una cólera producto de la vergüenza y orgullo a la vez. La magia de ese momento en que me deje llevar se había esfumado.

_ ¿¡Que es lo que te sucede?!... ¿porque hiciste eso?_ me grito dolida

Fue como si un sueño bello se tornara en una pesadilla, pero desperté al ver como corrían lágrimas por sus ojos.

_Perdóname Ahilen… no se que es lo que me paso_ mentí…otra ves mentí, porque sabia perfectamente que es lo que me sucedía

_ Por favor perdóname_ esta vez lo dije casi suplicando porque me espantaba la idea de su desprecio

No se que fue lo que vio o sintió que en una fracción de segundo su enojo se diluyó de su rostro. Se arrodillo a mi lado, con toda la dulzura me levanto el rostro para que la mirara. Su cara había recuperado la calma y la dulzura que la caracterizaba, pero en sus ojos aun podía verse tristeza e incertidumbre.

_ Solo dime la verdad… se que me ocultas algo Marck, se honesto conmigo_ me suplico

Quería que la tierra me tragase en ese momento, estaba perdido si le decía la verdad, la perdería para siempre como el amor de mi vida y como hermana.

_ Por favor Marck…_ suplico una vez más

Ya no pude ocultar mis sentimientos, no podría mentirle mirándola a los ojos, ella se daría cuenta y seria muchísimo peor.

_ Lo que pasa Ahilen es…_ titubee un momento_ es que desde que te vi en el aeropuerto aquel día, mis sentimientos hacia ti fueron cambiando cada día mas… no son nada fraternales. Lo que hoy siento por ti es muy fuerte y grande, no puedo controlarlo… es difícil…perdóname, pero es mas fuerte que yo, no me odies Ahilen… yo no quiero hacerte daño pero no puede evitarlo_ dije de la forma mas sincera que me fue capaz

Ella me miraba sorprendida, pero no había ya en sus ojos ni reproches ni algo parecido a la bronca, en su lugar podía verse una especie de compasión, ¿compasión?... no, yo no quiero su compasión, pero por el momento nada podía pedirle.

_ Marck… porque no me dijiste nada antes del viaje, porque te lo callaste si sabias que no podrías controlarte…_ me recriminó_ que esperabas, dime la verdad… ¿pensaste que aquí las cosas podrían ser diferente?_ me miro seriamente.

No sabia que responderle, sentí un escalofrío que me recorrió toda la columna, el miedo se apodero de mi, no se que es lo que vio Ahilen porque su tono de voz cambio nuevamente.

_ Por tu cara me doy cuenta que si lo pensaste, pensaste que las cosas cambiarían… no estoy enojada contigo Marck, solo que me estremece la idea de lo que acaba de suceder, eso no estuvo bien. Pero no voy a negar que me sorprendió sobremanera, además es muy fuerte que el primer hombre que me besara hayas sido tú, eres mi hermano, piensa como debo sentirme, si no fuera porque te quiero mucho creo que jamás te lo perdonaría, pero hagamos de cuenta de que nunca paso, y quiero que me prometas algo_ dijo con vos suplicante pero con otro timbre

_ ¿Qué?_ pregunte con vos ronca por la angustia

_ Que siempre serás sincero conmigo, no quiero que me mientas sea lo que sea, ¿de acuerdo?_ me miro y sonrío dulcemente y para sorpresa mía me beso en la mejilla con tanta ternura que si no fuera porque temía perderla la hubiera besado de nuevo.

_ Lo prometo, pero con una condición… que tu siempre me dirás lo que siente o piensas en lo que respecta a mis sentimientos hacia ti_ dije escrutando atentamente su rostro

_Lo prometo_ respondió sin titubear

Se levanto del sillón y sin decir palabra alguna se retiro a la habitación. Me quede allí sin poder moverme, pensaba en como había pasado todo, me había hecho a la idea que si Ahilen lo descubría me ganaría su desprecio y no fue así… era como que profundamente no le hubiera molestado, cualquier otra chica se hubiera escandalizado pero ella no… no terminaba de comprender porque.

Me puse a tender el sofá ya que se transformaba en un sofá cama, le dejaría a ella la cama, quería que estuviese lo mas cómoda posible, mientras hacia esto podía sentir que aun me quedaba en mi boca el sabor dulzón de sus labios, rogaba para que esa sensación me durara el mayor tiempo posible.

Solo podía oír el leve chapoteo del agua con cada movimiento de su cuerpo, mi mente se dejaba llevar por el deseo, en mi imaginación la veía desnuda, aunque no podía definir realmente cada detalle de su cuerpo porque nunca había tenido la oportunidad de verla desnuda, trataba de formar una imagen con los detalles que tenia a simple vista aun estando vestida. Y la verdad no se si el deseo o solo era mi imaginación pero lo que veía era realmente hermoso, su cuerpo esbelto, con grandes y firmes senos que para su edad estaban muy desarrollados, un vientre plano que te incitaba a saborearlo con tus labios, una cintura estrecha desde donde podía apreciarse una redondeado y firme trasero, se continuaba con bellas, torneadas y bien formadas piernas, y para terminar con unos delicados pies que parecían hechos de porcelana. No se si era mi enamoramiento, mi imaginación o simplemente que para mi ella era toda bella… no… no era mi imaginación, era el recuerdo de aquella vez que la vi en ropa interior cuando intentaba curarle los raspones que mama le hiciera… ese día había cavilado en la perfección su cuerpo.

Me acerque hasta la puerta para escuchar mejor, la oía cada tanto susurrar muy por lo bajo una melodía, por momentos escuchaba como si chapoteara en el agua jugueteando ¡dios sabe a que!… la verdad me estaba volviendo loco imaginándome que es lo que estaría haciendo. Sentía unas tremendas ganas de abrir la puerta, pero el miedo de que esta emitiera algún sonido o de que simplemente ella se diera cuenta me hizo recobrar el juicio.

Por varios minutos no escuché nada, supongo que seria que estaba solo allí tendida en la bañera con los ojos cerrados, de repente me vino a la mente una imagen totalmente distinta… estaría haciendo lo mismo que hice yo mientras me bañaba… ¡no! Así como llego la imagen se desvaneció. Jamás lo creería a menos que la viera, ella aun conservaba en muchas cosas la mentalidad de niña, no la creía capaz de masturbarse.

La curiosidad pudo mas… abrí suavemente, para mi alegría la puerta se deslizo dócilmente sin emitir sonido alguno, entonces pude verla, aunque no podía ver su cuerpo, si su rostro, este poseía la imperturbabilidad de alguien que tuviera esa paz que solo se alcanza con la serenidad del alma. Es como si estuviera dormida. ¿Dormida?... Era así, se había quedado dormida, tal vez por el cansancio del viaje. Y yo y mi mente morbosa imaginándome cuantas cosas eróticas de ella. Cerré tan suavemente como abrí, me fui al living y me tire en el sofá, comencé a reírme como un entupido pensando que muchas veces la mente jugaba con uno mismo y mas cuando el deseo sobrepasaba la prudencia.

Ya cambiado y recostado en mi nueva y próxima cama escuche la puerta del baño, había pasado mas de media hora desde que la cerré. Se apareció casi en la penumbra del living. Su silueta muy bien definida por la luz que estaba en el pasillo detrás de ella me demostraba la esbeltez de su cuerpo.

_ ¿Marck? ¿Estas dormido?_ me pregunto casi susurrando

_No pequeña, ¿necesitas algo?_ pregunte a mi vez

_ No puedo dormir_ respondió con vos algo infantil

Prendí la lámpara que estaba al costado del sofá, al ver su carita me pareció algo angustiada. Sin mas me aleje un poco del medio del sofá hacia un costado y corrí las sabanas.

_Ven acuéstate conmigo un rato si quieres_ le pedí, ni siquiera lo había pensado, solo lo dije de la forma mas natural que hasta yo mismo me sorprendí. Ella no dijo nada pero en su rostro pude ver una amplia sonrisa que denotaba asentimiento. Se metió sin preámbulos y quedando de costado de la forma que su rostro enfrentaba el mío dijo:

_ Todo me parece raro, extraño mucho mi cuarto, era el único lugar en que me sentía segura, espero poder acostumbrarme aquí Marck_ dijo con vos apacible

_ Ya veras que con el correr de los días te iras adaptando a esta ciudad, a su gente, a sus costumbres y claro a mi también, haremos muchas cosas juntos, veras como nos divertiremos_ dije a mi vez para calmarla

_ Sabes cuando me besaste esta tarde sentí cosas que nunca había sentido, se que esta mal, pero no puedo mentir sobre lo que me hiciste sentir, dime Marck que te llevo a hacerlo_ me pregunto de improvisto, nunca me imagine que me saliera con ese tipo de pregunta y con la naturalidad que lo mencionaba, me quede atónito por la sorpresa que tarde en reaccionar.

_ Ahilen tu sabes que mis sentimientos hacia ti cambiaron ¿verdad?_ dije mientras ella asentía con su cabecita_ eso significa que no solo te veo como mi hermana sino como una mujer, es mas creo que te veo mas como mujer que como mi hermana, bueno… cuando a un hombre le gusta una mujer siente que le suceden cosas en su corazón, en su mente y también en su cuerpo, cosas como amor, pasión, deseo. Esas cosas me llevaron a desear besarte, pero quiero que entiendas que yo no deseaba besar de esa forma a mi hermana, yo deseaba besar a la mujer que estaba frente a mi en ese momento… y bueno esa mujer eres tu Ahilen, se que esta mal, lo se, pero hay veces que uno no puede controlar los sentimientos, las sensaciones o las emociones, son manifestaciones que están fuera del control de nuestras manos_ dije lo mas claro posible para que ella me entendiera

_ Y como son esas sensaciones o emociones de las que tu hablas_ indago y nuevamente me sentí en un aprieto de no saber que o como responderle sin que se alterara porque la verdad si debía detallarle todo lo que yo sentía o deseaba por ella, si que se perturbaría...

_ ¿Tu quieres que te explique? _ pregunte para estar seguro que es lo que quería

_Si_ respondió sin titubeos_ que sentiste antes de besarme, quiero saber que te llevo a hacerlo_ aseguro para mi asombro

Nos estábamos metiendo en un terreno peligroso, eso significaba que podría perder nuevamente el control y no quería.

_ Esta bien…_ respire hondo como si llenarme los pulmones de aire me diera la suficiente fuerza y valentía para describirle mis sentimientos. Como diablos me había metido en este dilema. No tenía salida._ es simple Ahilen … me enamore de ti… y cuando uno esta enamorado siente ganas de besar, acariciar, abrazar a la persona que quiere, si las dos personas sienten lo mismo se aman…_ sentía que la cara me quemaba por la vergüenza, ella me miraba muy seria, yo ya no sabia como seguir mirándola..

_ ¿Tu me amas entonces?_ sus palabras resonaron en mi mente como tambores

_ Si… te amo con todo mi corazón_ respondí sin dudarlo

_ Gracias por ser tan sincero Marck, pero no tienes que explicarme las cosas como si fuera una niña_ me dijo para mi asombro_ si fuera una niña no te habrías enamorado de mi ¿verdad?_ la realidad era que me quede sin habla_ no soy tan inocente como crees, es cierto que no tengo experiencia en las cosas del corazón pero al menos por otros medio se me la teoría hermanito…_ concluyo sonriendo pícaramente mientras me estampaba un beso en la frente como si con ello me diera a entender que era un completo tonto por tratarla de esa manera.

¡Mira con lo que me salio la niña! Y yo que trataba de ser lo mas sencillo, cuidando de no ser tan explicito para no escandalizarla y ella que me sale con que no es tan inocente como yo la creía. ¡Diablos quien entiende a las mujeres!

Ella aun me miraba con su sonrisa burlona mientras reflexionaba para mi mismo. Ella tenía razón, fui un idiota al pensar que estuviera ajena a lo que pasase entre un hombre y una mujer. Su vos me volvió a la realidad.

_ Perdona hermanito… solo quería que me dijera con tus propias palabras que es lo que te estaba pasando, la verdad que nunca me imagine que fuera algo como esto, a pesar de eso no puedo juzgarte porque yo también por un instante me emocione igual que tu, pero esto no puede ser, es algo mas fuerte que yo, mira que uso tus propias palabras…_ concluyo guiñándome un ojo

Se acurruco muy pegadita a mi, se dio media vuelta y se quedo en completo silencio para agrandar mi ya enorme confusión.

A pesar de mi desconcierto me sentía feliz, ella había sentido el mismo deseo, pasión o amor que yo… eso me daba la esperanza que con el tiempo las cosas podrían cambiar a mi favor. Solo debía seguir intentando de manera sutil que me amase tanto como yo a ella. Sin decir nada también solo le pase un brazo por su cintura, la acerque más a mi cuerpo y casi susurrando al oído le dije:

_ te amo pequeña…_ lo único que supe antes de quedarme completamente dormido fue que ella me tomo la mano y la sostuvo con firmeza.