Agradable retorno

Agradable retorno.

"Doña Sandra", me dijo una de las recepcionistas de la empresa donde aun trabajo. "Hay una llamada para usted, la dama dice que es su vecina"

Era Marta la vecina que vivía frente a mi casa, "Sandra, hay un hombre frente a la entrada de su casa, dice que la busca"

"Muchas gracias Doña Marta, estaré ahí en media hora" respondió Sandra

Soy una mujer de 56 años, a la que le ha tocado tener una vida muy dura, aunque trabajo como secretaria para una importante compañía de la ciudad, el que fuese mi marido durante muchos años se divorcio de mi hace 8 años, además mi hija de 26 años, había sido acusada por transportar ilegalmente cocaína durante un viaje al exterior, por lo que había sido condenada a 4 años de prisión, esto no había sido lo peor, después de haber sido juzgada, descubrimos que estaba embarazada. Sin embargo una de las cosas para mi fue descubrir que el padre del niño era un joven de su misma edad, un tipo al que también habían enviado a prisión por el mismo motivo. Mi vida en verdad hubiese sido completamente vacía y solitaria si no fue porque el único motivo de mi vivir ahora era mi pequeña nieta.

He de admitir que al principio no me encontraba muy satisfecha con la noticia de que debía ocuparme de mi nieta mientras mi hija estuviera presa, sin embargo asumí la obligación. Así que el tribunal me concedió la custodia de la niña. Esto sucedió hace dos años.

En el momento en que estacionaba el auto frente a la casa, vi al hombre que se encontraba allí, era un hombre de aproximadamente 28 años, alto, aunque su aspecto era un poco descuidado se notaba que tenía un cuerpo fuerte y vigoroso. Lo mire sorprendida, este hombre era Julio Arroyo, el padre biológico de mi nieta. Aunque lo había visto muy pocas veces pude reconocerlo. Había salido de prisión apenas hacia un día, había tomado el primer autobús al pueblo para poder ver a su hija.

"Buenas señora," me dijo suavemente apenas y me baje del auto "Le importaría si veo a mi hija"

Arroyo estaba parado frente a la entrada de mi casa, así que tome a mi nieta en brazos y le dije que entrara, no quería que los vecinos se dieran cuenta de lo que sucedía.

Por lo que fue cerca de una hora le permití que jugase con su hija, al principio la niña estuvo un poco asustada pero poco a poco y con la insistencia de El, la niña le fue tomando confianza, durante este tiempo me contó de cuanto había sufrido por lo que había sucedido y de cómo El y mi hija habían sido engañados para realizar el acto que los envió a prisión. Escuche callada cuanto me dijo. Después de algunas horas le pregunte que donde se iba a quedar, me dijo que no lo sabia, no tenia ningún lugar a donde ir, su familia se había mudado a una zona lejana y que por su condición de exconvicto le seria muy difícil encontrar donde hospedarse.

ME dio un poco de pena con el muchacho, además aun con todo lo que había sucedido era el padre de mi nieta, por lo que decidí ayudarlo, le dije que podía permanecer en mi casa por algunos días mientras encontraba un lugar adecuado donde vivir, El estuvo muy agradecido.

La mañana siguiente antes de salir con mi nieta hacia la guardería para dejarla su padre se despidió muy cariñosamente de ella, me dijo que leería algunos periódicos para ver si podía encontrar algún empleo y un lugar para vivir.

El día trascurrió normalmente, cuando regrese por la tarde a la guardería a recoger a mi nieta, estaba muy contenta de verme, y podía decir que la niña ansia ver de nuevo al hombre que tanto la hacia reír y que permanecía en la casa.

"Hola Bebe!" La voz de Julio saludo a su hija.

Mi nieta salto a los brazos de su padre y acaricio su nariz contra la de El. Deje a mi nieta con su padre mientras me dirigí a hacer la cena.

Después de la cena mi yerno me platico de que había estado buscando algún empleo sin embargo en ninguno lo habían aceptado por sus antecedentes. Al poco tiempo mi nieta empezó a dormirse por lo que decidí cambiarla para llevarla a su cuna. Durante todo este tiempo mi yerno permaneció cerca de mí.

Así pasaron varios días de convivencia, me sentía un poco extraña después de tanto tiempo de no sentir la presencia de un hombre junto a mi, de pronto este joven que era prácticamente un desconocido y con el cual solamente me unía el lazo de familiaridad por mi nieta, venia a llenar el vació de la figura paternal en mi casa. Compartía mucho tiempo con su hija y conmigo, aunque me asustaba un poco ver la manera en que mi nieta había empezado a encariñarse con El, que pasaría cuando tuviese que irse.

Una noche después de que había acostado a mi nieta en la cuna dentro de mi cuarto, mi yerno se reunió conmigo un rato en la sala mientras yo leia un libro sobre cuidados infantiles, estaba concentrada en la lectura cuando mi yerno me hablo

"Usted es una mujer muy hermosa señora" dijo

Sus palabras me sacaron de mi concentración, gire mi vista extrañada con su comentario

"Sabe una cosa señora, usted es aun una mujer muy hermosa, hay algo que me intriga mucho, como una mujer tan atractiva y con tantas virtudes ha permanecido sola tanto tiempo" agrego

"Le agradezco el cumplido Julio, pero se que no es verdad, ya soy una mujer mayor" respondí a su comentario

"No aun usted es muy atractiva, hace cuanto fue la ultima vez que hizo el amor señora?" hablo mi yerno mirándome fijamente.

Sus palabras me sobresaltaron, porque este joven me preguntaba eso, nunca le había dado la confianza suficiente como para que me hablara sobre eso. Un poco airada le conteste enfáticamente

"Creo que eso es algo que a usted no le importa, que pensaría usted si yo le hago una pregunta tan impertinente como esa?"

"Le respondería" contesto "La ultima vez que estuve con una mujer fue hace un año, ocho meses y veintisiete días, y esta era tan inexperta que no me satisfizo"

Su respuesta me sorprendió, de quien hablaba seguramente era de mi hija.

"Por supuesto en prisión tuve otras formas de desahogarme, pero de eso es mejor no hablar" continuo

Lo mire indignada, sus palabras cada vez me sorprendían más.

"Sin embargo siempre añoraba la suavidad y calor de una mujer de verdad" agrego

Trate de detener la conversación, creí que había llegado demasiado lejos con sus comentarios

"Creo que es mejor terminar esta conversación, nosotros no deberíamos estar hablando de esos temas" le hable

"Claro que debemos, a fin de cuentas no hay nada mas importante en la vida de mi hija que la mujer que esta actuando como su madre y el padre que apenas empieza a conocer" respondió mi yerno

"Quiere decir que usted piensa quedarse mas tiempo con la niña?" pregunte

"Si eso es lo que mas deseo en el mundo" respondió suavemente "Mi hija es la persona mas importante en mi vida en este momento, y lo que mas quiero en el mundo es poder cuidar de ella y cuidar de usted señora" agrego

Lo mire fijamente, estaba muy extrañada con sus palabras, de pronto mi yerno se levanto y camino despacio cerca de mi, tomándome de la mano me levanto, lentamente su cuerpo se acerco al mío, sentía mi cuerpo completamente congelado de la impresión, en ningún momento había pensado que este hombre muchísimo menor que yo pudiese interesarse en mi, la abuela de su hija.

Sus manos recorrieron despacio mis hombros y espaldas, mi cuerpo se escalofrió al sentir el contacto del suyo, hacia muchos años que ningún hombre me había tocado, sentí mis piernas perder fuerza, entonces mi yerno me abrazo contra El.

Las cosas sucedieron tan rápido esa noche.

Boca arriba en la cama, levante las caderas para que mi yerno pudiera bajar mi falda y mi ropa interior, deslizándolos rápidamente por mis muslos y fuera de mi cuerpo.

"Oh señora usted es muy hermosa" exclamo al ver la parte inferior de mi cuerpo desnudo.

Me ruborice un poco, "Oh Julio quiero verlo desnudo también, por favor muéstreme su cuerpo"

Mi yerno desabrocho su camisa y se la quito, un fuerte pecho apareció ante mis ojos, definitivamente este hombre había empleado mucho de su tiempo en prisión ejercitándose. Con un lento movimiento el bajo el cierre de su pantalón, deshaciéndose de este, quedando vestido con un viejo calzoncillo que apenas podía contener su creciente erección. Mi asuste un poco al ver el tamaño del enorme bulto que se formaba dentro de su prenda y que luchaba por salir.

Sentí como mi respiración se había acelerado por la excitación.

Entonces se inclino, entre mis piernas, sus gruesos dedos acariciaron los labios de mi vagina.

"Ahhh" gemí al sentir el roce de sus manos

Mi yerno llevo uno de sus dedos dentro de la boca y lo chupo, luego de nuevo lo deslizo sobre la entrada de mi raja, gemí suavemente otra vez. La caricia duro solo un momento entonces su dedo fue reemplazado por su caliente lengua. Sentía como mi cuerpo se estremecía de placer

"OHhhh!"

Después de algunos minutos en que su lengua jugo con mi vagina, mi yerno se levanto, con ambas manos bajo su calzoncillo, una enorme columna de gruesa carne apareció ante mis ojos, me asuste un poco, mi yerno la tenia muchísimo mas grande que mi ex marido, el tamaño de la columna de carne entre las piernas de mi yerno era tan grande que apenas podía creer lo que veía.

"OHHh es tan grande" gemí

Inclinándose sobre mi, este aproximo su enorme erección a la entrada de mi vagina que ya se encontraba completamente lubricada.

"Ohhhh si señora, es esta tan mojada, se nota que realmente quiere que me la coja" gimió en mi oído

"Oh si por favor cojame!" gemí

Habían pasado 8 años desde la última vez que había tenido sexo con mi marido, ahora sentía como empezaba a metérmela el padre de mi nieta.

Abrí completamente mis piernas, sintiendo como la enorme columna de mi yerno entraba profunda en mí interior, al principio sentí un poco de dolor, su pene era demasiado grande y yo tenía mucho tiempo sin ser penetrada. Sin embargo pronto el dolor fue reemplazado por intensas olas de placer, me sentía completamente llena.

"OH señora que delicia" gimió en mi oreja

Nuestros cuerpos se mezclaron en una frenética búsqueda de placer, me yerno me penetro intensamente, gozando de nuestra urgencia y deseo. Ambos jadeábamos y gemíamos de placer.

"OH señora, su raja se siente tan bien, esta muy rica" gemía, parecía que mi yerno estaba gozando del cuerpo de la madre de su amante.

"Oh que delicia, su raja esta tan buena, ahhh!, creo que todo este tiempo había estado soñando con la mujer equivocada de esta familia" continuaba gimiendo mientras fuertemente continuaba con su penetración, yo movía mis caderas acoplándome al ritmo de su penetración, mientras las paredes de mi raja apretaban su enorme herramienta en mi interior.

"Ohhh, por favor no diga eso Julio" gemí, aunque debía reconocer que en mi interior esas palabras me hacían muy feliz.

Parecía que mi joven yerno estaba totalmente extasiado de placer, dos años en prisión sin el contacto con una mujer lo habían trastornado, jadeo aun mas duro mientras aumento la fuerza de su penetración.

Sabia que ambos estábamos a punto de acabar, estaba gozando enormemente con la intensa cogida que mi yerno me estaba dando, tanto tiempo de placer reprimido se abría ahora ante mis ojos, gemí mas fuerte a medida que sentía como mi cuerpo era recorrido por enormes olas de placer, mi yerno hundió su verga profundamente dentro de mi raja mientras gemía "AHhhhhhhhhhh"

Con su intenso gemido de liberación, su verga empezó a disparar semen en mi interior, una enorme carga de espeso semen lleno completamente mi ya muy mojada vagina, nuestros jugos de placer se mezclaron abundantemente.

Me abrace contra El a medida que nuestros cuerpos recobraban la tranquilidad después de tan intensas explosiones de placer.

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