Agitación temporal
Gotas de placer solitario.
Agitación temporal
Estoy desnuda. Recién salida de la ducha. Cabello mojado. Mi cuerpo se estira y queda tendido lánguidamente sobre el sofá. Mis ojos miran perezosamente al exterior y mi vista se pierde contemplando las ramas y árboles mecerse ferozmente empujados por el viento. Un rincón de mi mente reconoce como me voy humedeciendo. Mi mano juguetea con los pocos cabellos de mi sexo, retorciéndolos suavemente. Mis pezones se endurecen. Mi respiración poco a poco se va acelerando.
La vegetación desaparece. Cierro los ojos y me dejo llevar. Mis piernas se han ido abriendo casi imperceptiblemente parecen reclamar que preste total atención a lo que tengo entre ellas. ¿Y porqué no? Hace demasiado tiempo que nadie le hace caso. Entre unas cosas y otras el sexo es prácticamente una utopía en mi vida. Y lo echo de menos.
Retazos de imágenes del pasado acuden a mi como fogonazos. Sirven para lo que sirven para elevar mi lívido. Y mi imaginación hace el resto.
Sigo con los ojos cerrados. Los dedos recorren mi anatomía, la piel se va erizando, mis labios se entreabren dejando escapar un suspiro...
A estas alturas la humedad de mi coño es tal que me empapa la superficie del sofá. Sin necesidad de tocarlo ya palpita reclamando ser atendido. Echa en falta una buena polla así que tendrá que conformarse con lo que hay.
Empiezo a frotarme el clítoris. Círculos. De arriba a abajo. Lo voy tocando mientras sigo pellizcándome los pezones. La pantalla apagada del televisor me devuelve la imagen. Abierta de piernas, lasciva, dándome placer... con los pechos duros, algunas gotas de sudor apareciendo en mi cuerpo... La sola imagen valdría para hacerme alcanzar el orgasmo pero no lo quiero tan pronto... Me detengo...
La pantalla del ordenador me reclama, busco en mi web porno favorita algún vídeo que me llame la atención. Alguno en el que el tío se corra dentro de ella o algún otro donde dos hombres se follen salvajemente a la mujer... pronto aparece esto último ante mis ojos...
Dos pollas no muy grandes pero duras y preciosas, de las que me gusta comer, chupar y disfrutar aparecen en la pantalla siendo tratadas con destreza por una muchacha de rostro bonito pero cuerpo más bonito aún.... Su boca traga polla como si le fuera la vida en ello... la mía se abre sola como si yo misma fuera la protagonista del vídeo... Mi mano busca el enorme vibrador que me regalé hace tiempo y empiezo a mojarlo con mi saliva simulando que tengo entre mis manos los falos de la pantalla...
En ella uno de los hombres agarra firmemente la cabeza de su compañera para follarle la boca... mis movimientos se sincronizan con los de él... El otro tipo le está metiendo los dedos en el coño al mismo tiempo que se lo come con dedicación. Yo no tengo a nadie que me lo coma pero tengo unos dedos muy juguetones que empiezan de nuevo a retorcer la parte más sensible de mi... Mi cuerpo se arquea un par de veces cuando un flash de placer lo recorre...
El vibrador abandona mi boca para recorrer completamente empapado mi cuerpo... Junto mis senos y simulo hacer una cubana a esa polla de plástico como la que está haciendo la de la película... Mis pezones erectos, mi piel erizada... cada centímetro de mi parece unido a mi clítoris, enviándome continuas ráfagas de un gozo... Incluso el tacto de piel del sofá se ha vuelto incandescente... es como si de repente me abrazase otra persona y me trasladase su calor, su excitación...
El falo sigue el recorrido de mi anatomía y al mismo tiempo que uno de los tipos la penetra entra en mi empapada vagina de un solo movimiento. Un gemido intenso y gutural escapa de mi garganta... Me follo con la misma fiereza que veo en la imagen... me vuelvo a pellizcar los senos con dureza...
Jadeo, gimo, me muerdo los labios... el sudor ya no se manifiesta en gotas... perla mis poros, resbala por mi cuerpo... El placer es tan intenso que cierro los ojos de nuevo escapando de las imágenes y me veo a mi misma tumbada en la mesa de esa cafetería con él detrás... es él quien me folla, quien recorre con sus manos mi cuerpo...
Un relámpago de luz aparece tras mis párpados... una exclamación de éxtasis brota de mi mientras grito su nombre... mi boca se abre buscando aire... el orgasmo me inunda... tanto placer...
Tan sensualmente excitante que cuando vuelvo a mirarme en la televisión apagada y me veo a mi misma con esa polla clavada en el coño, con el pelo revuelto, con los labios entreabiertos me volví a dejar llevar y de nuevo su imagen apareció delante de mi mientras me follaba y me hacía suya... Y todo volvió a empezar...