Adoptado por una pareja liberal 3: Más morbo

Mi madre adoptiva me pilló curioseando en su habitación y me enseña a disfrutar del sexo sin tabús. La confianza me permite confesar mis fantasías y probar juguetes sexuales.

Adoptado por una pareja liberal 3: Más morbo

Gracia a todos por vuestros comentarios y mails. Me animan a seguir sacando tiempo para escribir cuando puedo. Me encanta saber que os masturbáis con estos relatos. Me encanta dar placer, lo confieso.

Estaba solo en casa y había tenido una mañana de máxima excitación, a pesar de haberme corrido, seguía empalmado después de espiar a mi padre adoptivo cuando su guapisimo amigo le hacía una mamada espectacular. Al quedarme solo no pude evitar entrar en la habitación de mis padres a cotillear un poco. Vi la lencería sexy de mi madre, pero sobre todo mi curiosidad hizo que probase a chupar un consolador que tenían en el cajón mientras me masturbaba. Justo cuando estaba a punto de correrme oí que llegaba mi madre y salí corriendo pero me topé con ella en la puerta de la habitación chocándonos por las prisas.

  • Uy Dani, perdona, te he hecho daño? - se disculpó mi madre - no me imaginaba que estabas en mi habitación.

  • No no, sólo vine a buscar un calzoncillo que no encuentro y pensé que igual lo cogió papá sin darse cuenta - me inventé como escusa a toda velocidad.

  • No pasa nada hijo, nosotros no tenemos secretos para ti, puedes entrar en esta habitación siempre que quieras. De hecho ya te habrás dado cuenta de que no solemos cerrar la puerta nunca - me dijo guiñándome un ojo.

Qué habrá querido decir? Pensé yo. Se habrían dado cuenta de que les espié anoche cuando follaban?. En este momento sólo pensaba en “tierra tragame”. Bueno en eso y en que mi polla seguía empalmadísima y estaban saliendo algunas gotas de puro semen sin que yo pudiera controlarlas.

  • Así que habías venido a buscar unos calzoncillos que no encontrabas? - dijo Karla mientras ordenaba su lencería que estaba en la butaca - Dani, soy tu madre y quiero que tengas toda la confianza del mundo conmigo. Puedes contarme lo que quieras y especialmente temas de sexo porque sé que estás descubriéndolo ahora y tener alguien de confianza es muy bueno.

  • No mamá, yo sólo toqué tus braguitas un momento por si estaba mi ropa debajo - dije yo sin saber que decir y cada vez más excitado.

Karla seguía hablándome mientras ordenaba las cosas. Se acercó a la cama que se había quedado deshecha al haber estado yo sentado en ella y con la mano se puso a estirar la colcha llegando a la almohada y descubriendo que el consolador estaba debajo.

  • Ah, así que era esto lo que te despertaba curiosidad, cariño? - dijo Karla mientras notaba la saliva que mojaba todo el consolador - Está empapado con saliva calentita. Ven cielo, sientate a mi lado y cuéntame.

Yo seguía de pie al lado de la cama sin poder moverme ni articular palabra pero Karla me agarró de la mano y me sentó a su lado.

  • Cuéntame hijo, tienes curiosidad por las pollas también verdad? Es normal, aunque hay muchos tabús en esta sociedad lo natural es que un chico joven quiera descubrir el sexo en todas sus facetas. Has estado viendo videos porno en internet de chicos chupando la polla a otros chicos? - me preguntó mi madre.

  • No mamá, te lo juro. No he visto videos porno - le respondí tartamudeando.

  • Pero por lo que veo has estado chupando esta polla de latex, y creo que a la vez te estabas tocando, verdad hijo? - me dijo mientras me tocaba mi polla empalmadísima dentro del pantalón y que ya lo tenía mojado de las gotitas de semen q me estaban saliendo - uy, si estás manchándote todo el pantalón. No me digas que te he interrumpido justo cuando te ibas a correr? Mil perdones cariño. No quiero crearte ningún trauma, venga sácate esa polla que te estará doliendo muchísimo.

Yo estaba paralizado. Mi madre me hablaba con esa naturalidad mientras me desabrochaba el empapado pantalón y me sacaba mi pollita totalmente empalmada y manchada de las primeras gotitas de semen.

  • Esta mañana has empapado el pijama con tu corrida, ahora el pantalón jeje, voy a tener que enseñarte a eyacular sin manchar tanto la ropa cielo - dijo mi madre sacándome totalmente mi polla con su mano - cuentame Danie, que me tienes intrigada. Te estabas masturbando con mis braguitas o imaginando que chupabas una polla?

  • Karla, yo … no sé - dije yo tartamudeando.

  • Dani, llamame mamá, ya lo sabes. Y no seas tímido. Quiero ayudarte a conocer todas las variantes sexuales - me dijo Karla mientras seguía acariciándome muy suavemente mi polla y apretaba la puntita para que salieran más gotitas sin llegar a correrme - he visto que el consolador estaba lleno de saliva, supongo que tienes curiosidad por saber a qué sabe una polla verdad?, No te ruborices, entiendo tu curiosidad y te quiero ayudar. Ya sé que anoche estuviste viendo como follabamos. A que te gustó verlo?

  • …. Si, mami, fue curiosidad - dije yo disculpándome.

  • No te disculpes, no pasa nada, entiendo que has pasado toda tu adolescencia reprimido y ahora tienes toda la curiosidad del mundo y nosotros somos una pareja muy abierta y te podemos enseñar todo lo que quieras aprender - dijo mi madre - te gustó ver como se la chupaba yo a tu padre?

  • Sí, disfrutabais mucho - dije yo con más confianza, pero tratando de aguantarme la corrida por la excitación de la situación y las caricias suaves que me estaba haciendo Karla en mi polla.

  • Una polla en la boca sabe deliciosa, y la de tu padre más - dijo Karla cogiéndo unas gotitas de semen con sus dedos y llevándolas a mi boca. Mira, prueba.

Yo abrí la boca y chupé los dedos de mamá probando mi propio semen. En ese momento ella aceleró un poco la paja y no pude aguantarme más. Iba a correrme con el sabor del semen en mi boca y mi madre adoptiva masturbando mi polla.

Empecé a correrme y noté que Karla se había agachado para meterse mi polla en la boca chupandola con deseo. Me volví loco. Nunca en mi vida había sentido tanto placer. Mi polla volvía a eyacular y notaba como los labios de Karla se pegaban a mi prepucio y lo acariciaban haciéndome llegar a lo máximo.

Las últimas gotas las recogió Karla con su lengua y al incorporarse me dio un beso en la boca y me pasó toda mi leche. Me supo a gloria. Yo aún estaba extasiado, no sabía que pensar, sólo me dejaba llevar por todos los sentidos y prolongué el beso jugando con nuestras lenguas y saboreando la leche.

  • Cariño, eres un jovencito delicioso - dijo Karla - me encanta que te hayamos adoptado. Vas a recuperar todo el tiempo perdido en tu juventud y te voy a enseñar a disfrutar de todos los placeres de la vida. Además me excita mucho hacerlo. Me he puesto muy caliente viendo como disfrutas.

Karla se tumbó en la cama levantandose el vestido y quitandose la pequeña tanguita para meterse el consolador y masturbarse frenéticamente con él. Yo seguía excitado, aún con el sabor del semen en mi boca y viendo como Karla estaba empezando a gemir mientras se metía el consolador cada vez más dentro.

Era excitante ver como se masturbaba, con las piernas abiertas hacia mi para que yo viera como entraba y salía a toda velocidad esa polla de plástico en el empapado coño. Yo sólo pensaba en el placer que estaba sintiendo Karla y ella cada vez más excitada se sacó el consolador del coño y empezó a meterselo por su culito.

  • Karla, es un consolador muy grande, ten cuidado - es lo único que se me ocurrió decir mientras miraba asombrado como entraba con facilidad gracias a lo empapado que estaba de sus flujos.

  • Dani cielo, me has puesto a mil, quiero que me follen por todos lados, el sexo anal es maravilloso - me dijo Karla metiéndose el consolador entero en su culito.

  • Da tanto placer? - dije yo con muchísima curiosidad de lo que se sentiría al ser penetrado por el culito.

  • Si cielo, a tu mami le encanta - dijo Karla - Cariño , ven , ven , besame un poquito el clitoris que estoy a punto de correrme, aggg. Dani chupame!!!

Sin pensarlo agaché mi cabeza y, mientras ella seguía follándose su culo con el consolador, yo me puse a chupar su coño, sin experiencia pero con muchas ganas. Metía mi lengua hasta el fondo notando el sabor de sus flujos y la sacaba chupando todos sus labios y explorando cada rincón de ese delicioso coñito.

Estaba chupando el coño de mi propia madre adoptiva pero no me parecía algo malo, sólo pensaba en darle todo el placer que ella me había dado al masturbar mi pollita. Cada vez sus gritos eran más intensos y yo aceleraba mis lamidas aprendiendo a toda velocidad a dar placer con mi lengua, chupando todos los rincones de su coñito hasta que con el consolador totalmente metido en su culo tuvo un orgasmo brutal.

Cuando se relajó me dio un beso en la boca y chupó sus propios flujos que me habían empapado toda la cara. Pero fue un beso que nos unió completamente, como el beso anterior en el que compartimos mi semen.

  • Ha sido delicioso cariño, a pesar de que no tienes experiencia noto que eres un chico muy sexual y que te va a gustar mucho el sexo - dijo Karla.

  • Si, sí, quiero aprender, conocer, probarlo todo - dije yo emocionado de lo que estaba sintiendo y sin importarme ya el prejuicio de que fueran mis padres adoptivos.

  • Ya he visto que tienes muchas ganas de aprender, por eso has probado a chupar el consolador. Quieres chupar una polla real, a que sí? - me preguntó Karla.

  • Bueno, no sé si debo, soy un chico - dije yo por los prejuicios que aún tenía.

  • Eso no debe preocuparte, tienes que tener mentalidad abierta y probar todo. Sé que estás deseando chupar una polla de verdad.

  • Sí, creo que sí, y también… - no me atreví a seguir hablando, pero Karla me adivinó el pensamiento.

  • También quieres saber que se siente cuando te follan el culito, verdad? - me dijo mientras yo agachaba la cabeza.

  • Bueno, no sé. Eso lo hacen los gays, verdad? - pregunté yo.

  • Dani cielo, tienes que tener la mente más abierta, el culo es muy sensual y si sabes disfrutar de él te puede dar mucho placer. Y tú ya has demostrado que te gustan las mujeres, me has comido el coño de manera deliciosa, no pasa nada por que ahora pruebes una polla rica. Además tu tío es super varonil y folla de maravilla con las mujeres, y también le gusta tener sexo con chicos. Incluso disfruta cuando yo le meto el consolador en el culo.

  • Sí, lo sé - se me escapó decir - bueno, quiero decir que no lo sabía.

  • Jaja - se rió Karla - convivimos en la misma casa, no tenemos secretos. Ya sé que anoche viste como follábamos y como le metí el consolador a tu padre. He visto las gotitas de semen que dejaste. Fue una bonita travesura jeje

Yo estaba muerto de vergüenza. Karla me había pillado. Lo sabría también mi papi?. Era un pensamiento que me asustaba pero a la vez me excitaba. No paraba de pensar en la polla de Marcos, tan dura, grande y deliciosa.

Mientras pensaba esas cosas Karla me incorporo y poniéndo un poco de lubricante que sacó del cajón me empezó a meter un dedo en mi culito. Despacito y suavemente el dedo iba entrando sin dificultad haciendome sentir cosas nuevas.

  • Mami, que haces? - dije taratamudeando.

  • Tranquilo Dani, ves como es fácil. A que es agradable?.

  • Sí, creo que sí, ummmm - dije mientras sentía como el dedo entraba cada vez más y más.

  • Me encanta poder enseñar a mi hijo a disfrutar de todo. Ya verás como disfrutaras de mujeres, de hombres y del tercer sexo. Te haré sentir como hetero, como gay y como todo lo que quieras.

  • mmmm sí mami, y probaré a chupar una polla que lo estoy deseando - dije yo descontrolado por el dedo de Karla.

  • Lo sé, sé que deseas una polla y que también deseas que te follen este culito super sexy. Yo te ayudaré y te convertiré en una zorrita tan viciosa que hasta Marcos querrá follarte.

  • Con papá? - pregunté con prejuicios.

  • Claro que sí hijo, lo está deseando. Desde el principio me dijo que notaba un lado super femenino en ti que le excitaba mucho y está deseando que se la chupes y follarte. Nosotros somos una pareja de mentalidad muuy abierta y no tenemos secretos ni prejuicios.

Mientras me hablaba, mi madre me seguía metiendo esta vez dos dedos hasta dentro y me masturbaba mi ya empalmada polla. Otra vez estaba a punto de correrme.

  • aaaa, mami, voy a correrme otra vez- dije yo sin poder aguantarme - me estoy imaginando la polla de papi.

  • Lo sé cariño, sé que deseas mucho la polla de tu padre. Ya verás lo delicioso que será cuando te fole ese culito.

Oyendo estas palabras de mi madres no pude aguantar más y me corrí salvajemente de nuevo. Ahhhhh. Puse las manos instintivamente y, aunque algo cayó manchando el calzón, recogí un poquito de leche que auntomáticamente la chupé.

  • Dani cielo, ya verás cómo vamos a disfrutar. Yo te ayudaré a ser una zorrita para poner caliente a tu papi.

  • Sí mami, es delicioso. Deseo conocer cosas nuevas - dije mientras chupaba instintivamente la leche de mis manos - y me encantaría probar la polla de Marcos, es preciosa.

  • Mira, vamos a hacer una cosa cariño - dijo mi madre - quitate esos calzones que has manchado y ponte estas braguitas mias que están en la butaca.

  • Pero, porqué? Cómo voy a hacer eso - dije yo sorprendido pero intrigado.

  • No tengas reparos Dani, es sólo un juego. Asi te sentirás un poco más femenina y eso inconscientemente lo notará Mateo y ya verás como le gusta - me dijo Karla convenciéndome.

La verdad es que me sentí a gusto con las braguitas debajo del pantalón y sin pensarlo más nos fuimos a la cocina a preparar la comida juntas.

La intimidad que se había formado con mi madre era preciosa. Incluso me fijaba en sus tetas y deseaba chuparselas y follar ese coñito que me había comido y no me daba ningún tabú.

(continuará)

Seguiré contando esta morbosa aventura en cuanto pueda. No duden en enviarme sus comentarios (buenos o malos) y puntuar este relato en la web o simplemente saludar. Un beso

dulcex@gmx.es