Adelgazar sí o sí. 2

Las cosas que tuvo que hacer BETO para adelgazar.

Adelgazar sí o sí. 2

Cuando abría la ventana, un frío de cagarse, yo en pantaloncito y remera, corriendo alrededor de la pileta… Me estoy matando a pajas, voy a tener que hablar seriamente con Matías…

Claro él porque es un pendejo de lo más agraciado, que tiene un montón de minas, que no necesita esmerarse mucho para poder coger…

Pero a mí, que siempre me costó un montón y eso que lo hacía con mi señora, no lo quería entender, le tuve que rogar, implorar, ponerme cabreado como la puta madre y lo logré…

Apareció una señora de muy buen cuerpo, cuarentona, pintada como una puerta, Matías me hacía señas por la ventana, redondeaba dedos y embocaba otro en el agujero, que iba a coger me quería decir…

Rut, muy profesional, me la chupó, me la hizo poner recontra dura, se desnudó, me hizo subir a la cama, que se la metiera, acabar dos veces, se vistió y se fue, una operación quirúrgica, creo que me dijo hasta la próxima…

Andá a cagar Matías, no podías haberme conseguido alguien que por lo menos hable…

Después de mis reclamos fundamentados, apareció una chica veinteañera, con unos ojos verdes preciosos, paraguaya, qué placer…

Hablaba hasta por los codos, me contó de su vida, la de su madre, de la pareja de su madre, de su hermanito, de las amigas, no paraba de hablar…

Una fiera en la cama…

Gozó y me hizo gozar muchísimo, me gustó, tendría que hablar menos pero me gustó, va a volver, ves Matías que buscando se encuentra…

En las vacaciones de invierno volvieron Elena y Soledad, tuvimos sexo todos los días…

Ellas se distribuían los momentos para abusar de mí, ja ja, yo feliz…

Matías trajo asado y lo hicimos en la parrilla de la cocina…

Me parece que el hijo de puta se está cogiendo a Soledad, no descansa el guacho…

Estoy pesando 110…

Y el tiempo va pasando, comidas restringidas, sexo restringido, ejercicio a cagarse, natación a cagarse…

Por unos pliegues en mi estómago Matías hizo que viniera a revisarme una cirujana estética, Dolores Morales, qué lo parió que mina, debe ser además por la abstinencia de sexo y que soy un calentón de siempre…

En cuanto la vi, quedé enamorado, morrudita, con muy buenas gomas, muy buen culo, sonrisa amplia, ojos saltones, estoy enamorado, me revisó por todos lados, me hizo desnudar, acostado en la cama no dejó pedacito de piel sin observar, que nos iba a decir el diagnóstico…

Le pedí si no quería venir a visitarme y almorzar juntos…

Me quedó mirando y se fue…

Qué mina madre mía qué mina…

No hacía falta ninguna operación, que le diera mucho más a la natación, a correr, a la cinta, a los aparatos de gimnasia, y todo la piel excedente se reduciría sola…

La puta madre, me parece que el guacho de Matías modificó el asunto de la cinta para ver televisión, le tengo que dar el doble…

Uno se da cuenta, siente en su cuerpo la sensación de que sus músculos se van estirando, aflojando, placer físico y  mental…

Así me empecé a sentir, notaba que ya no me cansaba, que podía exigirle más a mi dolorido esqueleto…

Me empecé a sentir bien conmigo mismo y qué mierda, le daba a la cinta, a correr, a nadar, tenía horas acumuladas de televisión…

Ahora escuchaba la radio, menos mal que se le olvidó al guacho de ponerle multa, podía escuchar todo el día sin tener que acumular ejercicios…

Me miraba al espejo, me empezaba a gustar, se me había ido gran parte de la panza, estaba pesando 103…

Con lo del desayuno me trajo una tirita de asado y dos chorizos…

Que al mediodía iba a venir a visitarme la doctora Morales…

Que preparara todo para el almuerzo…

Una alegría de la puta madre…

Claro carbón sobraba, de eso nunca me faltó…

Con una delicadeza de un parrillero experimentado lo hice, lo prendí como tres horas antes, muy despacito, total tenía todo el día, ensaladas y asado, choricitos, de postre una naranja, podía haberme traído un helado el guacho no…

No vas a creer pero la doctora me trajo de contrabando un bombón de licor…

Me dijo que era la primera y última vez…

Que lo hacía para que de ésa manera la recordaría siempre…

Pensé, yo te voy a recordar por tus gomas y tu cola doctora…

Almorzamos conversando sobre su trabajo, sobre el mío, sobre los que fueron mis alumnos, sobre mi ex mujer, sobre su ex marido…

Nos comimos las tiritas de asado y los dos chorizos, las naranjas…

Y no hay nada mejor que comer un espectacular asado acompañándolo con agua…

Andá a cagar Matías…

Ella como no había traído malla al prencipio no quiso meterse en la pileta…

Le dije que lo hiciera en bombacha y corpiño, pensé que me iba a sacar cagando…

Nooo, se fue sacando la ropa y con un conjuntito negro, muy bonito, no muy atrevido se metió…

Al rato traté de besarla…

Me dijo que no apurara, que ya habría otros almuerzos…

Me paró el carro con diplomacia, a buen entendedor, se fue de tardecita, va a volver, toy enamorado…

Cuando la vi bajar del auto no lo podía creer, mi ex mujer había estacionado su auto a la altura de la ventana de la pileta de natación, yo que estaba corriendo a su alrededor la vi…

Venía con una pollera bien corta, una camisa estampada de flores, el pelo suelto, la verdad estaba muy bien…

Había solicitado permiso para verme a Matías, es que para entrar tenés que poner una clave, que se cambia todos los días…

Yo la esperaba sentado en mi cocina, ella miraba todo, pasó por el living, el dormitorio y llegó a la cocina…

Sonia estaba radiante, con poco maquillaje como a mí me gusta, sabía cómo interesarme, lástima que recordaba lo hija de puta que fue conmigo…

Me levanté y la abracé, la apreté bastante fuerte, para que sus tetas quedaran clavadas en mi pecho…

Estaba pesando 99 y tenía muy poca panza, casi marcada la tabla del pecho, me había sacado la remera a propósito…

Me quedó mirando un ratito…

Estay muy bien Beto, casi mejor que cuando nos casamos…

Vos también estas muy linda Sonia, se te ve una potra bárbara…

Sabía que le gustaba que le dijera potra, el que se la cogía debería decirle así, mientras yo trabajaba pensé…

ja ja estoy divagando…

Y cafecito mediante nos pusimos a conversar, que estaba trabajando en la administración de una clínica…

Que se enteró por una doctora del proyecto que estaba llevando a cabo…

Después me enteré que fue Dolores…

Que le habló a mi madre…

Que después le habló a Matías y que acá estaba…

Que quería verme, para ver cómo estaba…

Que sigue viviendo en la que fue nuestra casa, que no tiene pareja…

Que algo de vez en cuando ja ja…

Yo le conté que estoy encerrado, no se me permite salir, estoy bajando de peso obligado y mucho más no hay…

Le mostré toda mi vivienda, dejé el dormitorio para lo último…

Había puesto las luces de coger ja ja una combinación de sombras que fue una excentricidad de la arquitecta…

Se quedó parada junto a la punta de la cama…

La abracé por atrás, la apoyé, le dije al oído…

Sabés que te voy a coger ahora no…

Siiii, siiii, a eso vine…

Se dio vuelta y me besó, me estrujó, me agarró la pija, empezó a desnudarme, hizo de todo conmigo…

Se fue como a las tres horas, con dos polvos míos, ella acabó un montón de veces, yo quedé destruido en la cama, dijo que va a venir más seguido…

Mi madre hizo cagada, trajo una petaca de coñac…

Con el churrasquito yo le daba a los tragos de la petaca… Por la falta de costumbre últimamente me puse borrachito, con la música de la radio nos pusimos a bailar, después de apoyarla con alevosía, de tocarle bien el culo, de besarle el cuello, las orejas y la boca, de un traguito más…

La llevé a la cama, la desnudé, le chupé los labios vaginales, el clítoris, metí dedos por adelante, por atrás…creo que como tres horas estuve teniendo sexo con mi madre…

Cuando desperté estaba desnuda abrazada a mí, apoyada sobre mi pecho…

La verdad nada de remordimiento…

Es más cuando se despertó me la chupó y me hizo acabar…

En una conversación después me dijo que siempre había soñado con esto…

Listo nada de putas, mamá cubre las necesidades…

Matías no pregunta pero se extraña…

Y me cuesta como la gran puta bajar ahora, mirá que le doy a la cinta, a correr, a natación, no como nada que no me indiquen…

Claro, si me ves el pecho, el culo, las piernas, los brazos, son puro músculo, pero peso 90, me faltan 10 quilos o al menos 5…

Cristina Fernández es la psicóloga que trajo Matías para conversar conmigo…

Una señora de más de cincuenta, sus charlas me hicieron comprender de la importancia de comer para vivir, no vivir para comer, de la comida sana, del ejercicio, de de de…

Que si no cambiaba la forma de pensar sería en vano todo el esfuerzo que había hecho…

Que volvería a estar fuera de mi peso recomendable…

Nunca mencionó engordar…

No fueron pocas las conversaciones…

Es más la traje a mi vieja para conversar entre los tres…

Creo que desde que tenemos sexo con mi vieja está diferente…

Se cuida en las comidas, se viste más a la moda, va seguido a la peluquería, hace ejercicio conmigo…

Ja ja mi vieja está enamorada de mí, como yo de ella, complejo doble ja ja…

Dolores vino varias veces a almorzar y cenar conmigo… Quedó claro que ella gustaba mucho de mí, como se dice ahora y yo mucho de ella…

Pero que no iba a pasar nada hasta que terminara con el experimento, hasta que viviera  una vida normal…

Me gustaba muchísimo la doctora, lo tuve que aceptar, no me quedó otra…

Sonia venía seguido, una vez cuando estábamos dale con el sexo, agarré un pote de crema para la piel que me había dejado Dolores, y le unté el orto…

Le fui metiendo un dedo, crema dos dedos, crema tres dedos, cuando la puerteé quiso rajarse, no se lo permití, me acordé cómo me turreaba y se la metí sin compasión…

Gritó desaforadamente hijo de puta me rompiste el orto, hijo de puta sacala, sacala…

Yo haciendo caso a sus pedidos le di más fuerte, más fuerte, le pegaba cachetazos en el culo, le dejaba la marca de mi mano en los glúteos…

Al rato cogíamos como descosidos, me dijo que nunca se la habían cogido así, seguro que me mintió pero me hizo sentir bien…

Si bien con Dolores era un amor platónico…

Con Clara mi madre, con Soledad, con mi ex  y con Elena teníamos sexo casi día por medio…

Sus vacaciones la vinieron a pasar conmigo…

No había problema en estar juntos en la pileta, corriendo o haciendo ejercicios…

Cuando se me daba las ganas buscaba a una e íbamos a la cama, ningún problema…

Con la que nunca más tuve sexo fue con Carmen, se puso en pareja con un señor, plomero, que parece que la trata muy bien, eso sí, sigue haciendo unas comidas de lo más ricas…

Y después de mucho batallar, de tener bien en claro cómo tendría que ser mi futura vida, psicóloga mediante y pesar 86 kilos…

Matías decidió que ya no se podía hacer más…

Que lo que quedaba era mantenerme pero fuera del encierro…

Había pasado casi un año y medio y según él estaba en el peso ideal…

Estaba en mí mantenerme…

Estoy considerando seriamente la propuesta de Matías…

La de vender el tratamiento a personas adineradas, yo sería una especie de asesor, de psicólogo y de paso no estaría tan al pedo…

Y me podría meter a la pileta y a la sala de ejercicios con el futuro paciente…

Dos tiros por el precio de uno que se dice…

Ahora estoy noviando con Dolores, tenemos sexo muy placentero y no llevamos muy bien…

Vamos a todos lados juntos, nos divertimos mucho…claro que además tengo sexo con mi madre, con mis primas, con mi ex mujer…

A la psicóloga cuando le pregunto si podría llegar a estar únicamente con Dolores me responde…

Vos qué pensás…

Mmmm no sé, qué es lo que me pasa doctora…

Es que sos un putanero ja ja…

Está buena la psicóloga…

FIN…