Abusada por el mejor amigo de papá - Parte 1
Fuimos, aún hacía mucho calor, aunque no era solo el calor, mis nervios me hacían traspirar de mas. Y eso que estaba ligera de ropa, llevaba una bikini rosa, y un short de jean color blanco, arriba solo tenía mi bikini, para cubrir mis pechos
Era el mes de Diciembre, mi padre había alquilado una casa con pileta para todo el mes, fuera de la Ciudad de Buenos Aires.
Soy hija única por lo que la primer parte del mes me la pasé tomando sol, y disfrutando de la pileta, y los fines de semana, venían mis tíos con mis primos.
Un Lunes a la noche pasada las 21 hs, la cocina donde estaba cenando con mis padres, se iluminó con las luces de un auto ingresando al jardín. Le pregunté a mi papá quien era y me dijo que era su mejor amigo Esteban.
Lo conocía, pero hacía bastante tiempo que no lo veía, solía pasar mucho tiempo con mi padre, pero se había casado con una mexicana que conoció en el trabajo y se fue a vivir a Veracruz.
Recuerdo que me caía muy bien, siempre era atento, gracioso y pasaba bastante tiempo conmigo.
Me gustó saber que lo volvería a ver.
Salí con mis padres al jardín a recibirlo, y era solo el, esperaba conocer a su mujer, hasta me imaginé que tendría hijos, pero estaba solo.
Estaba como lo recordaba, ya tenia mas de 45 años, era alto, 1.85 m. seguro o tal vez mas, pelo negro, abundante, que lo usaba sin peinar, ojos que no eran verdes, pero casi, eran de un verde grisáceo difícil de identificar, tenía ojos alegres y siempre sonreía, de contextura delgada. Tenía puesto una bermuda azul y una camisa blanca lisa, con zapatos marrones.
Se abrazó con mi padre, luego mi madre y finalmente me levantó y me abrazó fuerte y me besó la mejilla. Me encantó sentir el perfume que llevaba puesto.
Entramos, el fue a una de las habitaciones que había para los invitados, lo acompañó mi padre.
Le pregunté a mamá por su pareja, pero me calló, y me dijo que no pregunte que se había separado hacia solo 2 meses. Sentí curiosidad sobre lo que había pasado pero lo dejé ahí el tema.
Mamá agregó un plato, vaso y cubiertos para Esteban, mientras las dos seguimos cenando, me dijo que seguro iban a demorarse y así fue, no se veían hace 4 años y se ve que se estaban poniendo al día o por lo menos en parte.
Finalmente aparecieron después de casi una hora, cenamos, no pararon de hablar, nos quedamos haciendo sobremesa por horas, me encantaba escuchar las experiencias de Esteban, además todo lo que contaba de México me encantaba, me hizo querer conocer ese país, hasta contó que había pasado con su mujer, había sido que le fue infiel y si bien trataron de superarlo, al final ella decidió que no podía perdonarlo y se terminó. Vivieron juntos unos cuantos meses mas pero cada uno con su vida, hasta que Esteban consiguiera donde vivir, finalmente decidió volver a Argentina.
Eso de las 3 de la madrugada, mamá no aguantó mas el cansancio y se fue a dormir. Y luego le siguió papá al rato.
Me quedé a solas con el, me encantaba como era, como me hablaba como si fuera su par, siempre los adultos te tratan distinto pero el no, no paraba de hablar, sacaba tema tras otro.
Salimos al jardín ya eran casi las 5 de la madrugada, nos sentamos en dos reposeras y seguimos conversando.
En un momento la conversación se fue volviendo mas personal.
Ya tenes novio?
No , le respondí.
Tuviste?
No.
Que desperdicio, te pusiste muy linda.
No dije nada, solo me sentía mas avergonzada y con mucho calor hasta comencé a sudar.
- Te pusiste re cogible, me dijo como si nada.
Miraba para otro lado.
Cambió de tema, creo que se puso a hablar de mi papá de una anécdota de cuando eran jóvenes.
Si bien seguía hablando como si nada, se sentía rara la conversación ya no fluía como antes, mas que nada de mi parte que me costaba concentrarme y ya casi no respondía.
Ahora vuelvo, dijo Esteban y fue a la cocina, trajo dos cervezas en lata.
Me ofreció pero no quise pero siguió insistiendo.
- Solo mójate los labios y listo.
Al final cedí.
Quise beber un sorbo pero me pareció asquerosa y la dejé, y el se rió.
No pasa nada, al principio siempre es así. Dijo.
Me voy a dormir.
Espera, no me dejes bebiendo solo, es de mala educación me dijo riéndose.
Me quedé, aunque deseaba con todo mi ser irme de ahí.
Se lo veía raro, nervioso.
Acompañame, mostrame el jardín.
En serio, quiero ir a dormir.
No seas mala, encima que me dejas solo no me queres mostrar el lugar.
Perdón estoy cansada.
Mostrame un poco y te libero, que aún no tengo sueño. No seas mala.
Como siempre, cedí.
Me preguntó que es eso, señalando un galpón que estaba a unos 25 metros.
Le dije que había herramientas, un pequeño tractor para cortar el césped, y no mucho mas.
Mostrame.
No hay nada que ver, en serio.
Acompañame y ya te dejo ir, en serio.
Fuimos, aún hacía mucho calor, aunque no era solo el calor, mis nervios me hacían traspirar de mas. Y eso que estaba ligera de ropa, llevaba una bikini rosa, y un short de jean color blanco, arriba solo tenía mi bikini, para cubrir mis pechos, aunque no había mucho para cubrir. Mi mejor parte de mi cuerpo era mi cola, redondita, parada y al ser tan delgada, resaltaba bastante, me consideraba una chica normal, pelo negro, tirando a rojizo, ojos marrones, piel blanca.
Yo me quedé en la entrada del galpón, miró rápidamente volvió a salir.
Me tomó de la mano y ya con su expresión cambiada, me tiró hacia dentro del galpón con mucha fuerza, terminé tropezando y cayendo al suelo de tierra, cerró la puerta, apenas se veía, estaba muy oscuro, me levantó y acercó su cara contra la mia, y me besó la cara, buscando mis labios, apestaba al alcohol, y encontró mis labios, y comenzó a besarme contra mi voluntad, sentía su lengua asquerosa mintiéndose en mi boca, me resistía, lamía mi cara, su mano derecha se posó sobre mi pecho izquierdo, lo frotaba con vehemencia, tanto que terminó desatando mi corpiño, y quedé de la cintura para arriba desnuda, traté de empujarlo, pero la diferencia de fuerza era abismal, era insignificante comparado a el, con su mano podía moverme de aca para allá como un trapo.
Luego su lengua asquerosa comenzó a lamer mi cuello sin dejar de manosearme cada parte de mi cuerpo, le gustaba pellizcar mis pequeños pezones con fuerza, los lastimaba luego se puso a chuparlos y mordisquearlos, estaba frenético, era como un animal salvaje, tenía mucho miedo, sus manos desabrocharon mi short, que cayó solo hacia mis tobillos, de un tirón arrancó la parte de abajo del bikini, que solo estaba atado con dos tiras al costado.
Mientras me lamía asquerosamente por todos lados, hasta dentro de mis orejas, sus manos no paraban de acariciar mi cola, separaba mis nalgas y sentía sus dedos buscado la entrada de mi ano, luego seguía con mis piernas, concha, y también parecía disfrutar pellizcar mis labios vaginales, que me sacaba varios gritos de dolor y los disfrutaba.
Sus dedos se metían entre mis labios vaginales, quise golpearlo, tiré un puñetazo que dio en su pecho, pero no hizo nada, volví a intentarlo, y me tomó de la cabeza y me tiró contra el suelo violentamente, me lastimé la cabeza con algo solido, que me dejo un poco atontada por unos instantes.
No se como terminé de rodillas, y con algo en mi mano derecha, era su pija, carnosa, era la primera vez que tocaba una, y por un momento perdí la noción de espacio tiempo, y me gustó sentir ese pedazo gordo de carne, caliente y pesado en mi mano, por unos segundos me había olvidado que estaba pasando. Sin darme cuenta estaba marturbandolo, no se como llegué a eso, pero ahí estaba, frotando su pija, con mi pequeña mano y los gemidos de placer de Esteban de fondo, no entendía que me pasaba pero ya no era algo desagradable, y sentía curiosidad por ese miembro masculino que se ponía mas grande y duro en mi mano y hasta excitada.
El momento se cortó cuando me dio una cachetada en la cabeza, en la zona superior de mi oreja izquierda.
Luego me tomó del cuello y dijo:
Cuidado con lo que haces con la boca, si la lastimas te mato aca mismo.
Entendiste.
Entendiste!!!!!!!!!!!!
Si, si, si, dije con la voz temblorosa y débil, apenas se escuchaba.
Se prendió una luz, me asusté pensé que eran mis padres, en ese momento, me di cuenta, que no les contaría a mis padres que había pasado, sabía que no era mi culpa, pero no quería contarles, que sepan las cosas que su hija estaba haciendo. No podía imaginarme contar esa situación a nadie.
Era la luz de su celular, había comenzado a grabar un video, sentí mucha pena, temía a quien podría mostrárselo, o que termine dando vuelta en la web y terminar siendo viral por algo así.
Pero no se, ya estaba entregada a la situación.
Sentí la cabeza de su pija contra mi mejilla derecha, la fue pasando por toda mi cara, hasta que terminó contra mis labios, fue hundiéndola en mi boca y sentí el glande entrar, abrí mis labios y cedí a la presión de su pija, que fue entrando de a poco en mi boca, que por primera vez estaba probando un miembro masculino, no estaba en mis planes, ni cercanos ni lejanos, pero ahí estaba, con la pija en la boca del mejor amigo de mi papá.
La metía de a poco y la sacaba, no creo que lo hacía delicadamente por mi, mas que nada temía que se la lastime con mis dientes. Abrí mi boca lo mas grande que pude y solo logré tragar su glande y un poco mas del tronco de su pija.
En ese momento empezó a masturbarse con mucha fuerza con su mano derecha aún con su pija en mi boca, me golpeaba el mentón y nariz cuando se la jalaba hacia su cabeza. Ademas la luz de su cámara me apuntaba de cerca, y era molesto, tenía que cerrar mis ojos.
No tenía experiencia pero sabía que estaba por eyacular en boca, y me fui preparando.
Comenzó a gemir mas fuerte, y con su mano izquierda me sujetó la cabeza y con su mano en su miembro la hundió lo mas que pudo en mi boca y largó un grito ahogado, y me llenó la boca de leche, trate de no tragarla, pero era tanta que terminé tragando su leche, me dio asco, tuve una arcada, pero no me dejaba escupir la leche, son su pija cubriendo mi boca, y terminé tragándola casi toda, me hizo sentir enferma ese sabor a semen tuve ganas de vomitar. Sacó su miembro y respiré, tomé una bocanada de aire, lo cual me hizo toser, sentía un dolor en mi garganta.
Esteban se sentó en el suelo, agotado, con la respiración agitada.
Me subí el short.
Puedo irme?
Si, no te olvides el bikini.
Me había olvidado que solo tenía puesto el short.
Me arrojó la parte de arriba del bikini. Me la puse, le pedí la de abajo, que estaba a su lado.
La tomó y se la puso a oler.
- Después te la doy. No la necesitas ahora.
Me di la vuelta y cuando estaba saliendo del galpón.
- Vicky.
Me detuve pero ni me di vuelta, solo me quede esperando.
- Vas a ser una buena nena?
Sabía lo que significaba, que tenía que guardarme todo lo que había pasado.
- Si, respondí y me fui caminando a mi cuarto.
Fui al baño de mi habitación y me lavé la boca, con abundante agua, tragué varios sorbos, para sacarme la sensación del semen en mi garganta, lavé mis dientes varias veces y me cambié.
Me sentía un ente, había pasado una experiencia brutal pero no terminaba de caer. Seguía como si nada.
Me desvestí.
Busqué una tanga blanca, me quedaba algo chica, apenas cubría mis partes intimas, pero no tenía ganas de seguir buscando y me puse una remera vieja de papa como camisón, sin corpiño, como solía dormir.
Recuerdo recostarme, pero a diferencia de lo que solía pasar, que daba vueltas y vueltas y usaba las redes sociales antes de dormir, esa noche caí en un sueño profundo.
Continua…