A través del tiempo 1.

Hola a todos.

Ya sé que tengo a medias la historia de Eric y Peter pero la otra  noche me vino la inspiración de otra historia. Este primer caítulo es solo de presentación. Va a ser muy corto, pero todo llegará a su tiempo. He aprendido de mis errores y voy a hacer lo posible por ir poco a poco.

Episodio 1:

Es una fría mañana de otoño. Como todos los días miro al otro lado de la cama y como siempre está vacío. Pero no puedo dejar que la pena me consuma. Tengo responsabilidades. Me levanto y me voy a la ducha. Después de vestirme me voy a la cocina a preparar el desayuno. Entonces me  encuentro con Luis. Le saludo y le felicito. Hoy cumple 18 años. No es mi hijo. Es el hijo de mi mejor  que desapareció hace unos años y desde entonces, yo que soy su padrino me he ocupado de él.

En realidad su padre Lucas, era más que mi amigo. Éramos novios, aunque nunca llegamos a formalizar nuestra relación.

-Fer- me dice-, creo que ya soy suficientemente mayor para que me cuentes la verdad sobre qué le pasó a mi padre. Me lo merezco. Soy su hijo.

Suspiro. La verdad es que tiene razón. Nunca le he dicho la verdad de lo que pasó.

Desde pequeño le he dicho que su padre se sacrificó para salvarnos a los dos de un villano, y no realmente no le he mentido del todo. Su padre sigue vivo, pero no sé dónde. Más bien no sé cuándo . Aunque si quiero ser sincero conmigo mismo no sé si ha sobrevivido tantos años en esa época, pero mi corazón me dice que si.

-Te prometo que te lo contaré todo- digo seguro de mi mismo.- pero no aquí.

Ahora vete a clase. Pásalo bien. Celébralo con tus amigos y esta noche te invito a cenar y antes de que amanezca conocerás la verdad.

-Si soy sincero no me apetece ir hoy a clase. No quiero encontrarme con Alex. Después de que me diera calabazas…

Hace unas semanas Luis empezó a hablarme de Alex. Iba a su misma clase y estaba perdidamente enamorado de él… o ella. La verdad es que nunca he sabido si era un chico o una chica. Pero lo que sí sé es que es parte de su grupo de amigos.

He cuidado de Luis desde hace 13 años, desde que su padre desapareció yo he sido su único referente paterno. Nos lo contamos todo. Yo soy su tutor legal y además su amigo. Pero a pesar de la confianza que hay, no sé si le gustan los hombres o las  mujeres o ambos (como a su padre). Su madre era nuestra mejor amiga. Ella quería tener un hijo y nos pidió que la ayudásemos. Entonces éramos jóvenes y yo no quería responsabilidades. Por aquel entonces Lucas y yo no éramos más que amigos. Lo nuestro empezaría después. Por lo que Luisa eligió a Lucas, para que la inseminara. Pero las cosas se torcieron y Luisa murió en el parto. Hay una cosa que no he contado. Lucas y Luisa habían sido novios en el instituto pero cortaron porque el descubrió que le gustaban los hombres. Aún así conservaron su amistad. Yo creo que en parte Lucas aceptó por Luisa. En fin que Luisa murió y Lucas se quedó con un niño. Yo al principio me enfadé mucho con Lucas, pero en cuanto me presentó a su bebé, y me pidió que fuera el padrino cambié de opinión.

En fin volvamos al presente. Luis, tras mucho meditarlo y tras reunir mucho valor se decidió a declararse a Alex. Al parecer eran buenos amigos y se fueron a un lugar apartado, donde se veía el atardecer y allí de forma un poco torpe Luis abrió su corazón pero Alex dijo que no sentía lo mismo y salió corriendo. Eso ocurrió el sábado pasado.  Desde entonces han pasado dos días.

-Siento que Alex te rechazara. Pero tú tienes que ser  fuerte. Ahora tienes que fingir que no te importa que te haya rechazado.

-Es que me importa.

-Hazme caso. Aléjate y vendrá a ti. Si finges que te da igual, le empezará a dar vueltas.

-No creo que seas capaz.

-Tienes la fuerza de tu padre. Estoy seguro de que podrás. Por cierto hay una cosa que no me has dicho…

-Alex es un chico, si. Además es gay.

No sé porque me sorprende.

-Bueno, tú debes ir a clase. Ve a hablar con ese chico y le dices que lo sientes. Qué esperas que tu declaración no haya  roto vuestra amistad. Mira tus padres. Después de romper siguieron siendo amigos.

Luis se levanta y me da un abrazo. Yo me asombro una vez más.

-Gracias por tus consejos.

-Gracias por tu confianza. Siempre podrás contarme tus problemas.

Cuando Luis se marcha yo me preparo para ir al trabajo. No tengo uno de esos trabajos en los que se gana mucho dinero. Soy científico en un laboratorio. No trabajo en ningún proyecto importante. Solamente intento conseguir la destilación de partículas subatómicas.

Cuando entro al laboratorio está esperándome mi compañero Steve. Él era también amigo de Lucas. Cuando éramos más jóvenes teníamos un grupo de música celta.

-Te veo preocupado- dice cuando me dirijo a encender el ordenador.

-Se trata de Luis- digo-  el otro día se declaró a… alguien de su clase… que es…tá en su círculo de amistades y le dieron calabazas. He intentado aconsejarle…

-…diciéndole que se alejara- terminó.- Ferdi, Ferdi… no debíste hacerlo.

-Perdona pero con Luca funciónó.

-Bueno pero lo vuestro era solo atracción sexual- dijo.

-“está intentando picarme”-pensé- Le amaba y el también a mí. Aunque no pudimos decírnoslo.

-Y por eso no has estado con nadie en casi 3 lustros.- le encantaba meterse conmigo-. Bueno pongámonos a trabajar, tenemos que terminar esos cálculos para la hora de comer.

-Por cierto, hoy es el cumpleaños de Luis, lo sabes.

-Sí, ya lo sé. Sharon dice que os vengáis a cenar esta noche.

-Perfecto, porque tenía pensado contarle todo lo que pasó con su padre.

-¿Estás seguro?

-Sí, ya es suficientemente mayor. Y creo que tu hijo Alex debería también saberlo. Tú y Sharon también estuvisteis implicados- me quedo pensando un momento- Oye, ¿?por casualidad ha ocurrido algo entre Luis y tu hijo?

• No hace falta que te lo calles. Lo sé todo. Tu ahijado se declaró a mi hijo. Ahora Alex está hecho un lío.

-¿a tu hijo le gustan los hombres?

-Desde hace mucho. Salió del armario  hace años. Y yo sabía que Luis también era gay.

-¿Cómo es posible que lo supieras?

-¿Acaso  no ves como lo mira? Y Alex estaba coladito por él pero tenía miedo de que no le correspondiera.

-Vaya, así que ambos están enamorados y no lo sabían. Entonces  no entiendo porque tu hijo le ha rechazado.

• No lo sé. Pero esta noche deben hablar entre ellos. Y esos cálculos no se harán solos.

Luís ve a lo lejos a Alex.

Era el hijo de un amigo de su padre y su padrino Fer. Hacía tiempo que se sentía atraído  hacia él y el sábado anterior por fin había reunido el valor para declararse. Sabía que Alex era gay, y él mismo hacía tiempo se sentía atraído hacia hombres pero esto era diferente. Cuando pensaba en Alex no podía dormir, comía poco y no dejaba de pensar en él.

• Luis- dice una voz, sacándole de sus pensamientos- Hola.

Luis se gira y ve a Alex. Está más guapo que nunca. Alex tiene un pelo rubio que le llega hasta los hombros, y la mayor parte de las veces se hace una coleta. Tiene los músculos bien formados. Practica artes marciales y a la vez es uno de los chicos más inteligentes del centro.

-Ho…hola- dice Luis- Escucha, necesito hablar contigo de lo del otro día. No debí decirlo tan de golpe, debí hacerlo con más suavidad, pero llevaba demasiado tiempo callado. Y no pude resistir- Alex le besa en los labios. Al principio es algo tímido pero luego se va dejando llevar. Cuando los jóvenes se separan Luis se queda sin palabras.

-Feliz cumpleaños colega- dice Alex- nos vemos luego. Y dicho esto se va.

Luis sale corriendo detrás él pero en ese momento sonó la campana.

El día pasa muy despacio. Las clases se hacen eternas. Luis y Alex no coinciden en todas las clases. El lunes es el único día en el que no se ven nada más que en los pasillos y en el descanso de media mañana. Cuando suena la campana que señala el recreo Luis sale corriendo y se va a la puerta de la clase de Alex. Se apoya en la pared y cruza los brazos. Cuando Alex sale se lo encuentra.

-Vaya, si que te he sorprendido.

-Necesito hablar contigo. No me has dejado terminar. Y con esa interrupción no has hecho más que liarme.

-vayamos a un sitio más privado.

Los dos jóvenes se van a un sitio un poco apartado y se sientan en el césped. Ambos están nerviosos. Alex es el primero en romper el silencio.

-Mira, me gustas desde hace tiempo. Y cuando te declaraste yo pensaba que era un sueño. No me lo podía creer y entonces no puede más que negarlo.

-Vaya, tu también me gustas. Y mucho.

-Mis padres quieren que tu y Fer vengáis a cenar esta  noche. Tengo un regalo para ti.

-No hacía falta.

-Creeme- dice Alex. Y le da otro tímido beso, después le coge de la  mano- Te va a encantar.- entonces le da otro beso y ambos se tumban en la hierba. Mientras se dan cariño, Luis nota como su pene se pone duro, porque Alex ha bajado la mano a esa zona y no deja de sobarle el paquete a Luis.

-Espera- dice Luis, separándose- no me quiero precipitar. Antes tendríamos que hablar de lo nuestro.

-Perdona- responde Alex- me he dejado llevar. ¿Te parece que reflexionemos un poco sobre esto y lo hablemos esta noche?.

-Me parece estupendo- Alex se levanta y le da otro beso a Luis. Después se marcha.

Luis se queda solo y con un pequeño calentón. Entonces vuelve a sonar la sirena de vuelta a las clases. Las horas restantes pasan y a Luis se le va pasando poco a poco la calentura, pero al llegar a casa recibe un mensaje en su móvil.

“tengo ganas de tus labios”-escribe Alex- entonces recuerda el momento en el que ambos estaban tumbados en la hierba, besándose y su amigo le empezó a sobar el paquete. Entonces volvió a ponerse caliente.

Dejó la mochila en la silla y cerró la puerta. Se desnudó y miró en el espejo. Tenía la verga muy dura. No era muy grande, y tampoco tenía mucho pelo. Pero necesitaba urgentemente un pajote. Se tumbó en la cama y empezó a pensar en los labios de Alex. Poco a poco fue masajeando su pene mientras su excitación subía y entonces empezó a imaginarse con Alex, ambos desnudos. Nunca había visto a su amigo desnudo, pero si en slip y podía imaginarse como  era, debido a como se le marcaba. Entonces se corrió, con  varios disparos.

Y se dio cuenta de la hora que era. Ya eran más de las  4 de la tarde y ni siquiera había comido. Estaba todo manchado de lefa, por suerte tenía a mano un paquete de pañuelos para esos casos. Pero la habitación olía a sudor. Se levantó y abrió las ventanas y la puerta para ventilar. Y se fue a la ducha. Cuando salió se dio cuenta de que estaba muerto de hambre y se dirigió a la cocina. Luego se puso a pensar en lo que había pasado. Por fin había besado a Alex y él le correspondía. Aquella noche le volvería a besar.

Su móvil volvió a sonar. Era un mensaje de Alex y esta vez tenía una foto de Alex desnudo y un texto donde le pedía que le mandara una foto de la carátula del videojuego del que habían hablado el sábado anterior y que Luis se había comprometido a prestarle.. Luis se fue a la habitación, donde volvió a desnudarse. Volvía a tener ganas de hacerse un pajote, pero antes tenía que hacer una foto. O quizás dos.

CONTINUARÁ…

Gracias por leer hasta el final. Espero vuestros comentarios.