A ritmo del bolero de Ravel

Carlos, mejor amigo de mi marido y esposo de mi mejor amiga, follada a ritmo de bolero de Ravel, y con mis sentimientos algo confusos, soy puta y zorra pero en cuanto a sentimientos también los tengo como cualquiera

Sin dudas alguna el amante que mas ha hecho tambalear o al menos sembrar dudas con respecto a mi matrimonio no es otro que Carlos, el mismo que junto a su esposa Tere son los mejores amigos de nuestro matrimonio, solemos salir juntos fines de semana a cenar y tomar copas incluso hemos realizado algún viajecillo de vacaciones juntos con nuestros respectivos hijos, nos conocemos desde hace muchos años, incluso antes de casarnos, y nuestra relación con ellos se basa en la confianza, el repeto y hacemos bueno el significado tan bonito que tiene la palabra amistad.

Dicho todo esto y presentados a nuestros amigos me dispongo a contaros como Carlos se convirtió en algo mas que un amigo pasándose a convertir de amigo a amante y posible aspirante a pareja.

Lo que distingue a Carlos de mis demás amantes es su manera tan gentil, caballerosa, tierna, romántica y llena de amor de como me trata. Y todo esto surgió en una conversación de desveladores secretos de nuestros matrimonios en un restaurante.

Estábamos cenando en nuestro habitual restaurante cuando casualmente nuestra conversación comenzó a girar en torno al sexo, y todo porque la caprichosa forma de una servilleta enroscada en una copa tenía el claro aspecto de un enorme pene. Sin comentarios obscenos pero si graciosos comienza aquí una conversación con respecto al sexo que a la postre se llenaría de desveladores secretos por parte de ambos matrimonio.

Primero llegaron los comentarios propios y yo diría que algo machistas de mi marido, el muy imbécil comenzó a alardear de sus relaciones conmigo como si fueran buenas y constantes, mientras Carlos se reía con los comentarios inventados de mi marido Tere dio un vuelco espectacular a la convesación.

  • Pues sabéis lo que os digo, que para mi el tema del sexo no es prioritario en mi vida ni en mi matrimonio, desde que tenemos hijos nuestra vida sexual se resume en tres o cuatro veces al año y me quedo tan contenta y agusto. (Tere)

A Carlos se le notó bastante que ese comentario de Tere no le gustó mucho y con gran disimulo comenzó a mirar a Tere de manera cruel y despiadada para que callase en sus argumentos, en ese momento y para gran asombro de todos especialmente para mí el imbécil ( es como llamo a mi marido ) se comportó como todo un hombrecito de verdad y confesó  a todos después de sus alardeos conmigo que todo era mentira, que a el le pasaba igual que Tere, que sus relaciones sexuales conmigo eran escasas y de poca calidad, que debido al estres de su empresa había dejado completamente aparcado el tema del sexo y que le daba verguenza admitirlo.

El comentario de mi marido apaciguó bastante los animos de Carlos, y retomamos la conversacion en la medida de las circunstancias que ya sabiamos todos, y como dos autenticos puritanos tanto Tere como mi marido zanjaron la conversacion argumentando de que lo que pasaba en nuestros matrimonios era de lo mas normal del mundo, que había amor y eso era lo principal y lo unico que contaba.

Hipocritamente y para no hacer sentir mal a nadie tanto Carlos como yo asentamos con la cabeza y dimos por bueno el comentario de ambos, aunque eso si la nota de humor llegó con Carlos cuando mi marido y Tere en su ya habitual manera de entender la vida cambiaron la conversación y comenzaron a hablar de política y de cual se leía mas periódicos al dia de los dos, allí fue cuando Carlos de manera sincera pero muy graciosa dijo:

  • Por favor queréis dejar de leer tantos periódicos y leer mas kamasutra

Este tono de humor hizo que el ambiente se relajase por completo y la noche prosiguiese menos tensa de como se puso anteriormente. Una vez acabada la cena, nos dirigimos a un tranquilo bar de copas donde solemos acabar la noche después de cenar, como mi marido y Tere no paraban de hablar de sus temas políticos los dejamos que se sentaran juntos para que siguieran con sus aburridos temas empresariales y politicos, mientras Carlos y yo retomamos la conversación principal de la cena.

  • Pero ¿ no ves ? es que no paran los dos, toda la noche hablando de lo mismo (Carlos)

  • Dejalos al menos están entretenidos, mira que felices son los dos con sus politicas (yo)

  • Al final si que voy a tener que comprar el kamasutra jeje, (Carlos)

  • Ah, ¿ pero no lo tienes en casa?, yo tengo uno, y aunque le suelo echar un vistazo de vez en cuando lo podría utilizar perfectamente de calzo para la mesa (yo)

  • Pero no has escuchado a Tere, para ella solo existen dos posturas o arriba o abajo (Carlos)

  • Pues mas o menos como mi marido, el se conforman con poco (yo)

  • La verdad es que a veces se me hace difícil el ser fiel con ella, aunque siempre lo he sido hay ocasiones en que mis fantasias sexuales me hacen querer descubrir nuevas cosas (Carlos)

  • El sexo es algo necesario, hay muchos matrimonios que se rompen por culpa de esto, yo también tengo muchas fantasias que no puedo cumplir por el (yo)

  • Jajaja, la verdad es que nuestros matrimonios parecen estar cambiados, ellos tan felices hablando de sus políticos y nosotros de nuestras fantasias no cumplidas (Carlos)

  • ¿Te imaginas a nosotros dos casados?, jajaja, todo el día dandole al bombo (yo)

  • Yo no te dejaría parar nunca, todo el día enganchados como perrillos en celo (Carlos)

  • Jajaja, no tendríamos que gastar en ropa, todo el día desnudos (yo)

Esta conversación estaba adquiriendo un tono claramente caliente, tanto Carlos como yo habíamos bebido mas vino de lo normal en la cena, y con cubata de ron barceló en mano nuestras lenguas parecian estar mas sueltas de lo habitual.

  • Quizás contrate los servicios de una prostituta para dar rienda suelta a mis fantasias (Carlos)

  • Pero que antiguo eres, dejate de putas y conviertete en gigoló, no solo te saldrá gratis , además ganarás algunos eurillos (yo)

  • ¿pero tu me has visto bien?, jajaja, ¿ quien pagaría por estar conmigo? ( Carlos)

  • Bueno, si lo fueses yo te contrataría, tienes buen tipo y eres sexy (yo)

  • Jajaja, que bueno, pero a ti no te cobraría nada lo haría gratis (Carlos)

  • Pues vaya gigoló estas hecho, mejor así me ahorro la pasta (yo)

  • Bueno entonces ¿en tu casa o en la mía? (Carlos)

  • Donde quieras, busco un hueco en mi agenda y quedamos,jajajaja (yo)

Esta conversación puramente cómica estaba cogiendo un relieve de veracidad absoluta, nuestros tonos distendidos y naturales de conversación hacían que nuestro dialogo se convirtiese en toda una "quedada" para convertirnos en amantes.

  • La casa de mi hermano sería perfecta, el no está y tardará en venir ( Carlos)

El hermano de Carlos es un arquitecto que vive lejos de nuestra ciudad, y mantiene su casa aquí para cuando viene de vacaciones.

  • Es verdad, esa casa sería perfecta (yo)

  • Pues solo queda saber fecha y hora (Carlos)

  • El proximo martes a las 16'00 h tengo toda la tarde-noche para mi, ya que mi marido se va de viaje despues de almorzar (yo)

  • A mi tambien me viene muy bien, Tere trabaja en el turno de tarde (Carlos)

  • yo voy a ir, a ver si cuando llegue tu no estas (yo)

  • No dudes de mi presencia (Carlos)

Mientras y sin enterarse de nada Tere y mi marido seguían "arreglando el País" con sus politiqueos, la conversación de Carlos conmigo me había puesto algo cachonda y sobretodo muy intrigada de saber si esa conversación iba en serio o era producto de nuestras copas de mas.

Sin tener contacto alguno después de esa noche, dudé entre si acudir o no al lugar de referencia en la conversacion del sabado noche, por un lado temía el ridículo de encontrar la casa vacía, por otro lado y tan caliente y tan puta como soy me imaginaba a Carlos con su polla clavada en mi culo, por lo que decidí acudir a la incierta cita.

Decidida ya en mi cuestión de ir o no ir tomé la decisión correcta y acudí al lugar de la cita, puntual como un ingles con té en mano toqué el timbre de aquella puerta, tras unos segundos de incertidumbre Carlos abrió la puerta, me sonrió le sonreí y me invitó a entrar.

En en interior de la casa había una pequeña mesa con dos velas rojas encendidas y un rosa roja presidía la mesa, dos copas y una botella de champang completaban la mesa. Este Carlos se lo había currado, jamas ninguno de mis amantes ni mi marido me habían recibido así, eso aunque realmente cursi me gustó de manera alguna y me agradó bastante.

Carlos me ofreció una de las copas y con la suya se dispuso a brindar.

  • ¿por quien brindamos? (yo)

  • Por nosotros, que tengamos una tarde hermosa y sincera (Carlos)

  • Por nosotros, que nuestras fantasias se conviertan en realidad esta tarde (yo)

Con mi brindis le había facilitado el trabajo a Carlos de descubrir si yo estaba dispuesta a a darle una tarde de sexo con el, con el terreno allanado y sin obstáculo Carlos aún con copa en mano se acercó a mi, con su mano libre me cogió mi mano y como si de un tímido adolescente  se tratara se acecó a mi, me miró a los ojos y sus labios se fueron acercando a los mios, el contacto timido y tierno de sus labios con los mios hizo estremecer mi cuerpo de manera alguna, podría considerarse un beso con lineas de amor ocultas entre sus labios, este primer beso era un beso de amor, era un beso tierno, Carlos besaba mis labios delicadamente mientras yo me dejaba hacer y podia sentir la sinceridad de sus sentimientos en ese beso.

Totalmente consciente de la falta de actividad sexual de Carlos comencé a comportarme de manera difernte a como lo hacía con el resto de mis amantes, sabiendo de la voluntad de Carlos de cumplir algunas de sus fantasias sexuales mi comportamiento  comenzó a ser como el de cual quinceañera en su primera vez, dejé a Carlos que se conviertise en el "macho dominante" en esa situación, pero debo decir que todo ese romanticismo que había en aquel ambiente hacía que mi papel de adolescente caliente fuese creible porque en realidad era como yo me sentia en aquel momento.

Con Carlos besandome los labios y con nuestras lenguas haciendo ya acto de aparición y rozandose una con otra con la misma ternura y paciencia que lo hacia con sus besos decidío apartarse unos centimetros de mi, y con su misma pasimonia y templanza que estaba demostrando comenzó a quitar los botones de mi blusa, yo decidida a no hacer nada y dejarme llevar por Carlos lo unico que me limitaba hacer era eso, simplemente a dejarme hacer lo que el quisiera. Carlos continuó quitandome la ropa muy despacio, primero mi blusa, a continuación mis zapatos, mi pantalón, bajó mis bragas y me quitó el sujetador, ya estaba completamente desnuda delante de el.

  • Eres preciosa, no imaginaba un cuerpo tan bonito debajo de esa ropa (Carlos)

Este tio sabia como ganarse a una mujer.

Carlos se dedicó por varios segundos simplemente a mirarme, y con sus suaves manos comenzó a acariciarme lentamente desde mis pies hasta mis pechos, de mis pechos a mis pies, manoseaba mi culo, masajeaba una y otra vez mis pechos el no decía nada, con estos gestos de acaricias yo me encontraba realmente humeda, caliente y excitada. Carlos decidió acompañarme hasta una habitación en el que su interior se encontraba una cama llena de petalos de rosas rojas, con una fragancia fresca que se notaba en esa habitación, había varias velas encendidas a medio gastar, el tio era un romantico de primera, me hacía sentir comoda y valorada como mujer en esos momentos, era la primera vez que un hombre se tomaba tantas molestias por mi.

Una vez dentro de la habitación Carlos me invitó a que me tumbase en la cama, así lo hice, mientras el se desnudó impidiendome que yo lo hiciese por el. Su cuerpo desnudo y con su miembro a medio camino de una erección hacía que Carlos fuera un hombre sexy en esos momentos.

Con la ropa ya quitada y los dos desnudos Carlos se dirigió a un pequeño equipo de musica y dandole el play se podia adivinar como las primeras notas de "el bolero de Ravel" comenzaban a sonar, me gustó, mientras tanto Carlos me dijo que me diera la vuelta, no sabía lo que me iba hacer, pero me daba igual, mi entrega a el era absoluta.

De repente sentí como algo frio recorría mi espalda desde arriba hasta mi culo y un cierto olor a coco y lavanda quizás se hacía notar nuevo en la habitación, seguidamente las manos de Carlos hacian acto de presencia sobre mi espalda, el tío me estaba dando un masaje con aceites, sinceramente es la primera vez que un amante me daba un masaje, pero como no, eso no solo me gustaba sino que además conseguía que mi excitación fuese en aumento.

Carlos no decia nada, solo masajeaba mi espalda, suavemente, sus manos hacían un buen trabajo, primero masajeaba mi espalda de un lado a otro practicamente desde el exterior de mis pechos de uno a otro pero con mi posición de boca abajo y tumbada en la cama, el masaje seguia rumbo abajo, comezó a masajear mi culo muy suave pero con mas fuerza que antes, con mi culo masajeado siguió rumbo por mis muslos, mis piernas, mis pies y nuevamente hacía arriba hasta llegar de nuevo a mi culo donde en esta ocasión no solo masajeaba el culo, con sus dedos podía sentir como se aproximaba al estrecho agujerito de mi culo, sus dos manos descansaban sobre mi culo haciendo pequeños movimientos de rotación sobre el,  al mismo tiempo que sus dedos lubricados con aceites jugaban disimuladamente en la entrada del orificio anal.

Carlos me volvio a pedir que me diese la vuelta, y con el mismo aceite volvió a untarme ahora mis pechos. Sus manos comenzaron a masajearlos muy despacio, bajaba por mi abdomen y volvia a subir a mis pechos, bajaba de nuevo y con mis muslos hacía bueno el masaje, ahora Carlos decidió besar mis pechos.

Con su boca abierta Carlos bajó su cabeza sobre mis pechos y de manera alguna intentaba introducirlos enteros dentro de su boca, los chupaba una y otra vez, de vez en cuando colocaba su cabeza entre mis dos tetas y con sus manos se ayudaba para que mis pechos no salieran de su cara.

Poco despues y sin apartar su lengua de mi cuerpo carlos bajaba disimuladamente a traves de mi abdomen hasta llegar a mi coñito en estado sumamente humedo y caliente, su lengua se movía de manera magistral, de vez en cuando lamía todo mi coño, pero lo hacía desde mi agujerito del culo hasta mi ombligo, con mis manos lo ayudé para que se centrara en mi coño o mi culo, me daba igual, el decidió comerme el coño mientras que uno de sus dedos hacía acto de presencia en el agujerito del culo, intentaba introducirlo en el, lo que consiguío habilmente y produjo que mi primer orgasmo de la tarde estuviese a punto de llegar.

Con Carlos con su lengua acariciandome el coño y su dedo dentro de mi culo saliendo y entrando otra vez en repetidas y suaves ocasiones:

  • Siiiiiiiiiii, sigue Carlos no pares, aaaaaaaaaaaaaah, me corro, me corro, aaaaaaaaaaaah

Acabé corriendome como una colegiala con mi coño en su boca y su dedo incansable penetrando una y otra vez mi culo.

  • ¿ te has corrido ? (Carlos)

  • Como una perra, pero tranquilo la tarde no he hecho mas que comenzar (yo)

A los pocos segundo de aquel orgasmo levanté mi cuerpo y dandome  cuenta de la gran erección que presentaba Carlos cogí su polla con mi mano y me la introduje en mi boca, con rapidos movimientos de cabeza introducía su polla una y otra y otra vez dentro de mi boca, con mi lengua acariciaba su glande, y con mi saliva lubricaba bien el miembro para no sentir escozor con los movimientos de mi boca rodeando su polla.

  • Si Alicia, me gusta, chupamela, metetela toda en la boca

Ahora su polla bailaba dentro de mi boca, y en esta ocasión fuí yo la que decidí que uno de mis dedos iban hacer acto de presencia en el estrecho orificio anal de Carlos, saqué su polla de mi boca, chupé mi dedo con mi lengua y al mismo tiempo que volvía a meter su polla dentro de mi boca con mi dedo mojado en saliva me dispuse a introducir un poquito ese dedo dentro del culo de Carlos, ésto le gusto mucho.

  • ¿Que me haces alicia?, me gusta, sigue por favor, me gusta mucho aaaaaaaaaaaah

Con medio dedo dentro del culo de Carlos el apretaba y empujaba su agujerito para que mi dedo se introdujese aún mas adentro, ya sentía como Carlos estaba proximo a correrse y esparcir toda su leche fuera de su polla.

  • ¿Te vas a correr Carlos?

  • Si Alicia, me voy a correr, me voy a correr

Como en un gesto de gentileza Carlos intentó sacar su polla de mi boca para dejar salir su leche fuera, pero hoy no estaba yo con ganas de derramar una sola gota de su leche, por lo que tomé el mando y agarrando al mismo tiempo que masturbaba el miembro no dejé salir esa polla de mi boca.

  • Si Alicia, yaaaaaaaaaaaaaaa yaaaaaaaaaaaaa me corroooooooooooo

Con grandes gestos de placer y rapidos movimientos de cintura Carlos depositaba toda su leche dentro de mi boca, grita mas que gemía, creo que era su primera corrida en la boca de una mujer, su leche estaba ya dentro de mi boca, saqué su polla de mi boca, tragué toda su leche y volvía coger nuevamente su polla para terminar de "exprimir" hasta la ultima gota de aquel viscoso fluido blanco.

  • ¿Te ha gustado Alicia? (Carlos)

  • Claro que me ha gustado, he disfrutado mucho contigo Carlos (yo)

  • Yo tambien he disfrutado pero.......(Carlos)

  • Pero te hubiera gustado follarme ¿verdad? (yo)

  • Pues la verdad es que si, tenía en mente muchas cosas (Carlos)

  • Tenemos toda la tarde, me puedes follar cuando y por donde quieras (yo)

  • ¿Por donde yo quiera? (Carlos)

  • Por donde tu quieras Carlos, hazme lo que quieras, soy toda para ti (yo)

De manera alguna sabía que Carlos quería follarme el culo, y yo no estaba dispuesta a marcharme sin sentir su polla dentro de el.

Los dos tumbados en la cama y dando tiempo a Carlos a que pudiera conseguir una nueva erección me levanté me dirigí al equipo de musica y dispuse el cd para que volviese a sonar de nuevo "el bolero"., como en la pelicula.

Al volver a la cama pude ver con asombro como Carlos presentaba una nueva erección, todavía no era completa pero si tenía aspecto de polla grande y con ganas de penetrar.

Me tumbé en la cama boca abajo, dejando al descubierto mi culo en la parted e arriba, Carlos cogió mi culo con sus dos manos, y pude sentir como con sus dedos pulgares apartaba y hacia hueco para que el agujerito del culo quedase bien al descubierto, enseguida noté como su lengua hacía presencia en mi estrecho ojete, la movia de una lado a otro lubricando bien la zona, de repente noté como su lengua quería entrar dentro,

  • ¡ Que gusto mas grande ! Carlos, no pares sigue metiendo tu lengua,aaaaaaaaaaaah (yo)

Pude ver como Carlos cogía el bote de aceite con el que me había masajeado anteriormente, derramó un poco en mi orificio y supongo que untó algo en su polla. Mi estado de excitación era nuevamente espectacular, caliente como cual zorra, deseosa de sentir su polla dentro de mi culo.

Dejé a Carlos la iniciativa del juego, yo seguía completamente tumbada en la cama con mi posición de boca abajo, Carlos decidió que esa posición le gustaba, se dispuso de manera que su cuerpo estaba ya detrás del mio casi encima, con sus piernas intentó hacer que las mias se abriesen un poco mas, se acercó a mi y comencé a notar la punta de su polla en la estrechez de mi orificio anal, levanté un poco mi cintura de manera que mi culo quedase algo mas arriba y facilitar la entrada a la bienvenida de polla de Carlos.

Carlos era primerizo en esta faena, eso ma hacía sentir como mas puta y mas zorra, iba a ser su primera experiencia anal con una mujer, eso "me ponía" de manera notable, le ayudé con mis manos para que su polla entrase de una vez en mi culo.

  • Si Carlos, siiiiiiiiiiiiiii, ya está dentro, ya me estás follando el culo aaaaaaaaaaaah (yo)

  • Me gusta, que estrechito y calentito, estoy en la gloria, quiero follarte mucho (Carlos)

Como Carlos se habia corrido antes sabía que ahora aguantaría algo mas con su polla dentro de mi culo, con mi mano comencé mi tarea de estimulacion de mi clitoris, lo hacía muy despacio para intentar correrme al mismo tiemo que Carlos.

Con el bolero de ravel sonando de fondo (como experiencia os la recomiendo a todos) el ritmo de penetracion de la polla de Carlos en mi culo seguía el ritmo de la sinfonía, era espectacular, como el bolero subía en notas y como Carlos adaptaba su ritmo con la musica.

  • Carlos me gusta, aaaaaaaaaaaaah me gusta mucho sigue asiiiiiiiii (yo)

  • ¿te gusta tener mi polla dentro de tu culo ? (Carlos)

  • Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii me gusta, daaaaaaaaaaaaaame follameeeeeeeeeee (yo)

Conforme el bolero de Ravel iba llegando a su fin con sus altas notas y su elevado ritmo Carlos emulaba perfectamente las sacudidas de su polla en mi culo y comenzó a advertirme

  • Alicia me falta poco para correrme,

  • Siiiiiiiiiii cuando quieras Carlos  cuando tu quieras, pero no te salgas, te corres dentro de mi

Aumenté el ritmo en mi particular sesión de estimulación masturbatoria de mi coño, todo para correrme junto a el los dos juntos, y como ayudados con la musica cuando el bolero llegaba a su fin Carlos :

  • Aliciaaaaaaaaaa me corroooooooooooooooo, me corrooooooooooo

  • Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii aahhhhhhhhh, suelta tu leche en mi culo aaaaaaaaaaaaaaah

  • Tomaaaaaaaaaaaaaa tomaaaaaaaaaaa mi lecheeeeeeeeeeeeee

  • Siiiiiiiiiiiiiii la puedo sentiiiiiiiiiir, como me gusta aaaaaaaaaah, yo tambien me estoy corriendoooooooooooooooo aaaaaaaaaaaaah

Carlos estaba derramando ,inyectando toda su leche dentro de mi culo y yo podía sentirla  al mismo tiempo que mi orgasmo era una realidad, me corria al mismo tiempo que Carlos dejaba su leche en mi culo,

  • AAaaaaaahhhhhhh, Gracias Carlos me has follado como un semantal (yo)

Los dos nos quedamos un buen rato en la cama, Carlos era ahora el agradecido por cumplir algunas de sus fantasias, la experiencia me gustó bastante, había sido un buen amante y posiblemente sería un buen marido, muy a mi pesar y para no estropear la amistad de ambos ni los matrimonios decidí que con Carlos no volvería a repetir, pues incluso yo me podía hacer daño al confundir sentimientos de amistad con el, y eso fué lo que pasó durante algún tiempo, que los dos nos pensamos en posibilidad de rehacer nuestras vidas en común, después de pensarlo muy bien decidimos de seguir siendo amigos, solo amigos y no volvimos a repetir la sesión de sexo ( al menos de momento).

Ah, en nota informativa para algunos lectores que me ha preguntado diré que finalmente el posible embarazo con mi sobrino quedó en un pequeño susto,aunque como ya dije tampoco hubiese pasado nada, pero pensandolo bien, estoy mejor así.