A plena luz del día

En las afueras del la uni... me cogí en el auto a mi chica, algo furra de lo común.

Me la cogí a plena luz del día en mi auto

Nunca me imagine que yo me cogería a mi novia y menos en la puerta de la escuela, bueno a dos metros de distancia y aun lado de la puerta principal…………. es una de las locuras más grandes que he hecho en toda mi vida aparte de otras lo pueden creer ó no a mi meda igual pero es una verdad maravillosa. Eran alrededor de las 2:30 de la tarde un diciembre de 1999, cuando el frío apenas iba tomando su fuerza el cielo aun despejado y un sol quemoso por la evaporación de agua consecuencia de las masas de neblina de esta época del año resulta de que "D" y yo nos habíamos volado una clase y decidimos estar un rato juntos sin decirle a nuestros compañeros en donde estaríamos, cual fue mi sorpresa al llevarla a mi auto pues hay junto a la escuela está una caseta de vigilancia, que por cierto todavía permanece hay con don Juvencio un señor cómo de unos 47 años quien conoce a todos los jóvenes y autos de la población estudiantil bueno pues ya entrando en materia de ligue mi novia y yo prendimos el auto estéreo con volumen bajito, el frío comenzaba a calarnos los huesos, nos castañeaban los dientes yo estaba algo molesto por que el día anterior mi novia me había dejado plantado a la hora del descanso yéndose con sus amigas a la cafetería y sin avisarme. Por lo que ese era el punto a tratar me dijo: oye hace un frío espantoso yo me mostré un poquito indiferente para hacerla sentir mal y obtener una disculpa o una bonita reconciliación por lo menos algo que la disculpara.

Después de un rato Don Juvencio no se percato de nuestra presencia en el auto y la carretera esta luego, luego hay frente a la escuela pasa mucha gente. Bueno mi novia me tomó la mano "D" y yo permanecíamos en el auto sin la menor preocupación, sostuve su mano la puse en mi pierna en señal de cariño ambos sentados en la parte trasera del auto y con el estero encendido, sintiendo que la temblorina del frío nos invadía la sujete del cuello y le plante un largo y profundo beso, jugueteando con nuestras lenguas, cómo si saboreáramos una deliciosa golosina, ella me abrazo tiernamente, llevaba puesto un suéter holgado, de estambre mostrando unos pechos de gran tamaño y con una fragancia que me embriagaba de tan rico olor que despedían sus ropas, ambos teníamos jeans, yo apenas y podía mantenerme quieto por el frío que hacía, ella me sugirió recostarme en sus piernas mientras se me pasaban los espasmos, yo acepte con gusto tenía una vista estupenda al sentir sus muslos carnosos y lo ancho de sus caderas bajo mi cabeza tuve una erección enorme, lubricando hasta mi ropa interior, la tome de su abdomen dándole un suave masaje por encima de su vientre, podía notar que comenzaba a excitarla, lentamente se deslizó hacia a bajo y me beso nuevamente pero ahora retorciendo su boca y clavando sus enormes tetas sobre mi pecho y parte de mi rostro.

La tome entonces de su cuello y tome su cabello largo acariciándolo una y otra vez , baje mis manos y las metí debajo del suéter que traía puesto, toque aquellas tetas color rosa preciosas, que esbozaban unos pezones extremadamente apetecibles estaban erectos a punto de estallar por ser tocados fue entonces cuando los tome con mis labios aprisionándolos contra mí y llenando mi cara de sus hermosas tetas suaves y muy carnosas proporcionándole unas mamadas ricas que la hacían retorcerse ella no tardó en buscar mi palo, que con ansiedad quería sentir de inmediato me acomode y cambiamos la posición ella me confesó que nunca había hecho semejante cosa le di confianza, y tomo mi pinga con sus manos, y sin pensarlo más la introdujo despacio en su boca no sabía cómo hacerlo, poco a poco la lubrico con su saliva y yo la guiaba tomándola de su cabello y embistiéndola hacia su boca, sintiendo sus labios ávidos, de mi sexo ella cerro los ojos y yo gemí como un toro, por unos instantes recordé el lugar en donde estábamos y estaba tranquilo el lugar nadie se había dado cuenta de lo que hacíamos los cristales del auto se habían empañado casi por completo, yo disfrutaba su mamada, me quito los jeans, mis calzones y yo la tenía en pelotas sin sostén aun no llegaba a su sexo.

Toque sus nalgas y las apreté para sentir el volumen de su cuerpecito muy calientito, antes de chorrearme me dirigí a su vulva cubierta por una prenda intima que dejaba ver su abultado monte con pelos rubios y muy rizados sentí su humedad despedía olores indescriptibles que levantaban mi verga al máximo entonces nos recostamos en el auto lentamente para no causar curiosidad en los movimientos del auto, introduje mis dedos hasta tocar su vulva y sentir esos ricos labios mayores que tenían bastante carne para cobijar mi verga, de un solo tajo, me lamí los dedos al retiralos de su vulva y ella se estremeció le encanta que la estuviera deseando jadeaba como una pantera en celo y yo cahondisimo con ganas de meterle la verga hasta el fondo ya sin prendas los dos optamos una nueva posición para iniciar la penetración esta vez tenía que ingeniármelas para cogermela bien ya que estando en un auto es algo incomodo pero para mi suerte , los asientos se reclinaban al máximo en mi auto dejando una cama improvisada, una vez acomodados le metí la verga sin piedad ya me la había desflorado medio año atrás, dame tu osito mi amor, le dije espera a que te meta la verga por el culo mi reina ella clavo sus uñas en mi espalda diciéndome al oído te amo mi amor hazme tuya para siempre ………………..

Eso me motivo aun más y le metí la verga de un solo empujón a punto de venirme ella apretó mis huevos fuerte para retener al eyaculación, le lamía la chocha y me la cogía muy bien sus piernas escurrían en jugo estaban hermosas con unas caderas a mi medida se abrió a todo lo que daba y me dijo: quiero sentirte dentro de mí metemela cabrón sin piedad quiero más dame más ahhhhhhhhh ahhhhhhh así así le susurraba al oído te gusta mi cielo quiero desgarrarte el culo ella dijo sí hazlo ya no aguanto más quiero que me cojas con toda tu fuerza se mojaba los labios y sostenía yo sus tetas a la altura de mi boca haciéndole unos chupetones enormes por todas sus tetas ella se jalaba e impulsándose hasta adentro mi verga jalaba mis nalgas, yo le introduje mis dedos en el culo y ella se desgarro de dolor le aparte sus enormes nalgas y le embestí el culo con mis dedos su ano es color rosa se veía delicioso muy entalladito para cobijar mi pene después de introducirle la mano le mantuve la dilatación de su rico coño y con pequeños gemidos prolongados y dolor eleve sus nalgas y entonces mi verga toda hinchada llena de sangre que circulaba a lo largo del tronco por lo caliente que estaba se la metí por el culo, casi podía decir que aullaba y hasta a mi me dolía el pito se lo lubrique muy bien con mi saliva me decía me voy a venir mi cielo y yo también cerraba los ojos de placer y yo me la cogía más rico, espere a que ella sintiera esas ricas contracciones al eyacular alcanzando un orgasmo sensacional nos venimos al mismo tiempo acabe por llenarle sus intestinos de mi leche y ella se quedó sin fuerzas sobre los asientos del auto casi se cagaba del dolor pero le encanto sudorosos esperamos a que se nos pasara la desvanecida y concluimos esa gran culeada descansamos hasta reponernos, que afortunados fuimos al no ser descubiertos por nadie.