A la hora de comer....

Era verano, había poco trabajo en la oficina. Como me aburría, me puse a chatear con un par de tíos en un sitio de encuentros... Empezó a subir el tono de las conversaciones y poco a poco, noté como me estaba entrando calor... Había cerrado la puerta del despacho, así que nadie me podía pillar.

Era verano, había poco trabajo en la oficina. Como me aburría, me puse a chatear con un par de tíos en un sitio de encuentros... Empezó a subir el tono de las conversaciones y poco a poco, noté como me estaba entrando calor... Había cerrado la puerta del despacho, así que nadie me podía pillar.

De repente, uno de los tipos me propuso quedar para ver si había química entre los dos... Intercambiamos un par de fotos (el tío no estaba mal, no estaba muy segura de que me fuera a gustar, pero bueno, tampoco estaba muy decidada a hacer algo o no, no soy muy habitual de este tipo de encuentros, pero ese día, me picaba mucho la curiosidad para ver hasta qué punto podían llegar mis límites).

Era casi la hora de comer y sabía que me iba a quedar sola así que le propusé tomar un café cerca de mi trabajo... y ni una, ni dos, quedamos abajo, en la entrada de mi edificio... Mientras venía el hombre con el que había quedado, seguí chateando con el otro, que me había puesto su webcam, y en muy poco tiempo, noté que mis braguitas se iban mojando de deseo...

Como apenas faltaban 5 minutos para que llegara el otro, me fui a arreglar rápido al baño, echando una ojeada rápida a mi aspecto: no soy una mujer super resultona, pero sé que realizo un atractivo bastante grande sobre los hombres, gracias tambíén a un par de tetas muy generosas que tenía enfundadas en un sujetador de encaje que salía un poco de mi camiseta ceñida... me miré, satisfecha con la imagen que me enviaba el espejo, agarré mi bolso y bajé, nerviosa por el encuentro que se iba a producir...

Nada más salir, lo ví, esperandome a unos metros, no tardé en reconocerle... Me acerqué, nos sonreimos algo nerviosos, y nos dimos un beso en la mejilla... y me dijo: estás muy guapa, me gusta como te queda esta camiseta... Mmmmm nos fuimos a tomar algo a una cafeteria cercana, y mientras tomabamos una cafe, empezamos a hablar más bajito y a recordar lo que nos habíamos intercambiado por msn... estabamos sentados uno al lado de otro, y bajé la mirada hacia su entrepierna, y noté un bulto de un buen tamaño.... y yo, que ya estaba muy caliente, noté como mi sexo se mojaba aún más. Y me lanzé... Le dije que podíamos subir a la ofi, que tenía unas vistas espectaculares y que no creía que ibamos a molestar a nadie ya que era la hora de la comida y que la gente solía volver tarde...

Así que pagamos la cuenta, y subimos... En el ascensor, nos acercamos el uno al otro, detrás de una mujer que había subido al mismo tiempo que nosotros, y aproveché que estaba de espalda para pasar mi mano por ese bulto creciente en los pantalones del hombre que me acompañaba. En cuanto salió la mujer del ascensor, nos empezamos a besar golosamente, los dos ya muy excitados. Me recompusé al llegar a la puerta de la oficina y entramos. Después de dar una vuelta, confirmé que estabamos solos y cerramos la puerta con llave.

Nada más cerrar la puerta, el hombre me agarró las tetas por detrás, apretandome contra él. Noté enseguida su polla, aún prisionera de sus pantalones, como me presionaba en la espalda... Me giré, nos besamos y le llevé hasta la recepción donde tenemos un sofá. Bajé la cremallera de su pantalón, y saqué su polla, grande, caliente.. y me la metí en la boca, que delicia, y se la empezé a chupar, con ganas, pero también con nervios, tenía mucho miedo a que nos pillaran, así que no quise tampoco estar así mucho tiempo. Me tumbó en el sofá, me levantó la falda, y vío como mis bragas estaban mojadas por mis jugos... me las quitó, las olió y me dijo que las quería guardar, así que se las metío en el bolsillo... me abrío las piernas y me empezó a lamer la vúlva, y me pusó aún más caliente de lo que estaba... Yo, aguantaba mis gemidos, mientras agarraba con mi mano su polla acariciandósela, deseosa de que me cogiera... de repente, se puso un condón, y me la introdujo en mi coñito, sin más preambulos, así, de un golpe... tuve que reprimir un grito, de placer inmenso ya que este hombre era muy alto, y su polla era de un tamaño proporcional a su estatura, en longitud y grosor, una gozada.... Empezó a entrar y salir de mi, con un ritmo sostenido, una de sus manos estrujando uno de mis pechos, lamiéndome el otro... mmmmmm que placer más intenso, era una maravilla, sentir esa polla en mi, que salia y entraba, cada vez más fuerte.... como gemía. De repente, me cogío y me puso a 4 patas... Ahí, me abrío las piernas, sacó su móvil, e hizo una foto de mi coñito visto desde atrás, me lo había rasurado hacía poco, y seguro que la vista sería muy excitante.... y me dijo que iría a su colección privada, que no me preocupara, que no se me veía la cabeza... y sin mediar más palabras, me penetró hasta el fondo, super excitado, y noté como llegaba muy profundo en mi... Arrrrggggg su polla me estaba llenando hasta el fondo y empezó a bombear en mi coño, y yo, como una perra en celo, le pedía que me follara bien, que me encantaba su polla caliente en mi, que era suya, que hiciera lo que quisiera... y allí, noté que me subía un orgasmo tremendo, y me corrí con su polla dentro de mi, y empezó mi coñito a chorrear de placer, la polla de este hombre aún en mi, notaba como mis flujos iban bajando por mi pierna y como me invadia una ola de calor, quería más, más, aún más....

El hombre no se había corrido, salió de mi coño, y introdujo un dedo en mi ano, y la verdad, me empecé a asustar un poco, con el tamaño de su verga, no sabía cómo iba a salir la cosa, se lo intenté impedir volteando, pero me dijo que me callara, que era su perra y que me iba a hacer lo que él quería....

Me metió, un dedo, se mojó los dedos en mi vágina con mis jugos, y agrandó mi ano con dos dedos mojados, mientras lubricaba su polla con mis jugos... Notaba como mi ano se iba dilatando, como estaba a la vez excitada y con algo de miedo, e introdujo la punta en la apertura de mi ano.... despacio, con cuidado, pero es que notaba la cabeza gigante de su verga, y empezaba a dudar seriamente de si iba a poder entrar, y sobre todo, del daño que me iba a hacer... Al mismo tiempo, con su otra mano, me masajeaba el clitoris con su pulgar y el resto de su mano en mi vágina, cosa que me estaba produciendo un placer enorme y eso ayudó a que fuera entrando su polla en mi ano poco a poco, despacio, mientras gozaba, a la merced de este hombre que me estaba dando un placer intenso.... mmmmm noté que su polla se había abierto camino en mi ano, yo aún sin entender como había podido entrar en mi una cosa de tal tamaño, y empezó a entrar y salir, más despacio, y notaba que mi ano se dilataba dejando que esa verga entrara, saliera y volviera a entrar en mi cada vez con menos resistencia.... mmmmmmm buena chica, me dijo, ves como ha entrado.... y como para puntuar su frase, me dío una pequeña embestida más fuerte, que hizo que se me escapara un grito.... mmmmmmm notaba que me estaba gustando cada vez más... empezó a entrar y salir con algo más de ritmo, mientras notaba que me empezaban a temblar las piernas.... sigue, no pares, le dije.... y siguio... su bombeo se hizo más ritmico, más rapido, y noté como me invadia de nuevo una ola de calor, casi a la vez que él se corrió dentro de mi... noté como bombeaba el semen en mi interior, y que se había quitado el condón sin decirmelo, pero al estar tan caliente, ni me percaté... se quedó unos segundos más, descargando en mi ano toda su carga, y salió... pasé un dedo por mi ano, y lo noté muy dilatado, aún preparado para el tamaño de aquel super polla.... Nos fuimos a limpiar y me dijo que se quedaba mis bragas, de recuerdo... Empecé a protestar, que no podía estar así, pero no me hizo ni caso, me dijo que quería guardarlas y olerlas cuando quisiera...

Le acompañé a la puerta, me dío un beso y se fue...

Cerré la puerta, y me fui al baño, notaba como el semen seguía saliendo de mi ano, caliente, y me fui a limpiar.... a los pocos minutos llegaron mis compañeros, no me había dado cuenta de la hora, por poco nos pillan allí, follando en el sofá...

Volví a mi mesa, a seguir con mis ocupaciones, mi coñito aún caliente... y con ganas de volver a repetir cuanto antes... ese sexo prohibido fue tan bueno, tan intenso, tan morboso... pero eso será otra historia....