A la cama con papá

El amor de una hija con su padre.

A la cama con papá

Siempre me sentí atraída por mi padre cuando niña jugábamos a luchar y yo refregaba mi cuerpo contra su pene, podía sentir como su miembro se hinchaba a mi contacto y el enorme bulto de su pantalón me indicaba lo mucho que me quería, varia veces sus manos, tocaban mi cola y yo le hacia cosquillas, mientras le decía que el seria mi novio cuando fuera grande.

A mis 17 años, cuando nos quedábamos solos me sentaba en sus rodillas y mis piernas tocaban su miembro excitándolo y encendiendo esa mirada de deseo que nos unía a los dos, luego me iba a mi cuarto y me masturbaba, pensando en ese gran miembro derramando su leche en su interior

Por fin llego ese día en que mis fantasías se hicieron realidad, comimos temprano y bebimos para festejar un ascenso en su trabajo, el alcohol me había mareado, pero no tanto como le hice creer a mi padre, me incorporé y simulando un tropiezo caí en sus brazos, sus manos se posaron en mi cola y me pegué a su cuerpo, le dije con voz de borrachita, te quiero mucho papito y lo besé en sus labios, el me dijo estas borrachita hija y me llevo a mi habitación, nos desplomamos en la cama y yo coloque mis inocentes manos en su entrepierna, su miembro comenzó a crecer y yo lo liberé de sus ataduras ante su cara de asombro, pero el deseo pudo más y el no iba a perder esa oportunidad de tener a su hija entre sus brazos, me ayudo a desnudarme, luego me sitúe en el centro de la cama y la lengua de mi padre se arrastraba de adelanta hacia atrás, sin dejar centímetro sin mojar, esparciendo ese flujo espeso producto del deseo, por todos lados sin descanso, mientras mis caderas se elevaban para que quedaran justo a la altura de la boca de mi padre, esa boca que me llevaba al éxtasis, a la locura, sus manos tocaban mis pezones y los endurecía a un punto de tener la consistencia de dos piedras, me sorprendí gritando :

-Mordeme el clítoris, papi...mordemelo siiiiiiiii, quiero gozarte papi........-Hazme tuya

-Siiiiiiiiiiii, quiero que me cojas, dámelo......

Mi padre me penetro lentamente y su pene completo fue engullido por mi vagina y comenzó una danza de caderas y embestidas que me sacaron el aliento.-

Mis manos se agarraron fuertemente de los barrotes cada vez que mi padre empujaba mas y mas dentro mi

-Lo quiero entero- grité, con la poca voz que me quedaba.-

Su torso se endureció y en su ultimo empujón derramo un torrente de semen, ese semen prohibido llenaba cada espacio de mi ardiente vagina, lo bese y nuestra lenguas se unieron en un beso apasionado.

Luego tome en mis labios su miembro aun palpitante y mojado por la mezcla de nuestros jugos, su sabor era salado, yo amaba a ese hombre y quería entregarle todos mis orificios, lo chupé hasta que se endureció de nuevo.

-Te gusta, verdad ?- preguntaba mi padre

-Si, me encanta papi !!! quiero mas !!! haceme lo que sea, papi !

Y las manos de mi padre, acercaban y alejaban las caderas de su nena logrando que su pene la atravesara una y mil veces, que entrara y saliera con una facilidad asombrosa de ese pequeño agujerito que ahora estaba completamente dilatado.

Después de un tiempo de continuos empellones, le dije

-Quiero leche papi, dame tu leche incestuosa

Y el acabo abundantemente, dándome el placer de ser su hembra, su nenita, la luz de sus ojos, unos ojos que me veían como mujer, una mujer insaciable, la mas puta de todas las mujeres

Con papá hacemos el amor muy seguido y me saca fotos desnuda y soy su adoración, un besito a todos y a todas

María Luz