A ésa muchacha

La chica de mis sueños tal vez... pero jamás me atreveré a decirle nada.

"A ésa muchacha"

A tí te digo, muchacha solitaria,

Que aunque te escondas tras la esquina,

Sé que observas desde muy lejos,

Mis grandes ojos negros.


¿Por qué haces esto conmigo

cuando compartes tu vida con tu marido?

Pero en tu mirada leo algo más;

Sospecho que junto a mí quieres estar.


De ojos oscuros, pero tristes.

De sonrisa fácil, que consigues enseñar tus dientes.

De pelo liso, pero no muy largo.

Y de cuerpo muy bien proporcionado.


Nunca verás en mí a una compañera.

Ni siquiera a una simple consejera.

No puedo negar que me cautivas mucho.

Ésas voces me dicen "no lo hagas" voces que no escucho.


Nuestras manos sólo un poco se rozaron.

Fué entonces cuando nuestras miradas se cruzaron.

Como algo hermoso nos sonreímos mutuamente.

Noté en ése momento que mi corazón aceleró de repente.


A tu lado siempre ansiaría estar.

Es algo que no dejo de pensar.

Rodeada estamos, de un mundo sin compresión.

De ésa manera no podré amarte con toda la pasión.


Soñar contigo es lo que puedo hacer.

Mi fantasía es poseer todo tu ser.

Pero seguimos haciendo lo mismo que al principio: mirando.

Los días pasan y mi cariño por tí va aumentando.


Mírame a los ojos sin más.

Sé sincera, únicamente quiero me digas:

"Niña, escapémonos juntas de aquí

Quiero perderme en cualquier parte junto a tí"