90 minutos...8ª parte (final)

¡Sí ha sido duro al principio, a la mitad y ahora también la noto dura pese a llenarme el culo de semen!

90 MINUTOS…8ª PARTE (FINAL)

90 minutos duró el regreso a Madrid desde el Aeropuerto de Barcelona, tras la gran despedida de mis hijos y el resto de nuevos amigos, mi corazón seguía latiendo de forma descontrolada, los tres días has pasado como un suspiro. Soy Claudia.


Por la tarde nos hemos despedido de Claudia la madre de Marc y Hugo, que regresa a Madrid. Soy Miguel(Mike) y ya estamos en nuestra cama agotados por un largo rato de sexo, Jordan duerme boca arriba con su brazo doblado sobre la cara, yo a su lado de costado mirando en su dirección y detrás de mí Vadim, también de costado rozando mi cuerpo, su pecho casi pegado a mi espalda, yo en forma de cuatro y él también, tengo los ojos cerrados lo mismo que Jordan, pero noto a Vadim algo inquieto, nuestras respiraciones están relajadas y pasado un largo rato Vadim levanta su cara mirándonos, apoya de nuevo su cabeza sobre la almohada y dice con voz queda:

Waldeck, aunque ahora te llamas Jordan, para mí siempre serás Waldeck, te quiero, desde la primera vez que te vi me enamoré, tú apenas me mirabas, mejor dicho no mirabas a nadie solamente trabajabas y muy duro, mientras el resto de chicos se iban a la disco, yo pensaba, que tú ibas con ellos pero te seguí descubriendo en muchas ocasiones que te dedicabas a pasear por la arena de la playa  mojándote los pies y sentándote sobre la arena como si fueras una estatua, me habría gustado estar en tus pensamientos, pero siempre tan distante, tan ensimismado, alguna vez te habías enjugado alguna lágrima y me dolía no poder abrazarte para consolarte, mi propio mutismo me enervaba, te observaba durmiendo y me gustaba sentirte tan cerca y al mismo tiempo tan separados…Mi amor era silencioso como mi voz.

Y apareció Miguel, tan delgaducho, casi un palitroque, pero te ofreció compartir su cama con él sin pedirte nada más solamente para que estuvieras más cómodo y algo dentro de ti cambió porque esa noche tuvisteis sexo juntos, para mí fue doloroso y al mismo tiempo excitante todo era suavidad cuando lo acariciabas imaginándome en su lugar, mi verga se endurecía mirando por la noche la pantalla del portátil, él hacía lo posible para agradarte y se entregaba una y otra vez a ti con dolor por el tamaño, pero de forma muy tierna, pese a todo tengo que reconocer, que hacéis una muy buena pareja y disfruto estando con los dos, pero creo que ha llegado el momento de apartarme a un lado, os amáis mucho y no quiero ser la causa de vuestra separación, os quiero demasiado a los dos para ello.

Mike, llegaste a nuestras vidas siendo un niñato, en pocos meses tu cuerpo mejoró y tu comportamiento cada vez con más soltura me fue ganando lentamente, yo esperaba ansiosamente las noches para mirar la pantalla y veros teniendo sexo una y otra vez, pero ganaste mi corazón cuando soltaste el aullido ante el cuerpo inerte de Waldeck drogado sin tú saber nada y entrando con Troy en la ducha vestido sin importarte nada más que él, eso me llegó al corazón, más tarde me aceptaste como parte de vosotros dos y hemos disfrutado ampliamente de sexo los tres, lentamente has ganado mi corazón, por eso te quiero con locura.

Noté sus labios sobre mi nuca, abrí los ojos mirando a Jordan, que también los tenía abiertos bajo su brazo, mi mano tomó el brazo de Vadim y lo puse sobre mí pecho susurrando: ¡Vadim, te quiero, no quiero que te apartes de nosotros, eres parte de mi corazón, sin ti estaría medio vacío! Giré mi cara y besé sus labios.

Jordan estiró su brazo que reposaba sobre su cara y tiró con suavidad de Vadim haciendo que su cuerpo desnudo pasara sobre el mío y se quedara sobre el suyo, puso sus manos en las mejillas de Vadim mirándole a los ojos y dijo: ¡Yo también te amo, pero tus silencios me hacían creer que apenas existía para ti, noté que algunas veces me seguías, pero nunca te acercabas para poder hablar contigo y entonces lloraba, por ti, por mí por todas las crueldades que nos han pasado, pero ahora estamos juntos y bien, no necesitamos a nadie más nos tenemos los tres, tú me quieres, quieres a Mike, él te quiere y a mí también, yo le quiero y a ti también, es extraño pero los tres nos queremos, no es solo sexo, que también cuenta, pero disfrutamos los tres juntos y eso es lo más maravilloso, si estuvieran aquí Troy y Tony te dirían lo mismo. Y lentamente besó su boca mientras su lengua entraba dentro de la suya saboreándose mutuamente, instantes después Jordan hizo incorporar el hermoso cuerpo de Vadim sentándolo sobre sus muslos y dijo: ¡Somos jóvenes, no sabemos lo que ocurrirá mañana o dentro de unos meses o tal vez muchos años, podemos envejecer juntos o tal vez vivamos con otras personas, pero por mi parte os voy  hacer un juramento, la mitad de mi corazón nunca dejará de ser vuestro, ocurra lo que ocurra con el tiempo! Al terminar de decir estas palabras comenzó a masturbarse su gran verga con ambas manos, gimió y gimió mirándonos a los dos a la cara terminando por soltar su semen sobre su plano vientre con un fuerte resoplido final de placer, alargó su mano a la mesita donde reposaba un libro pequeño y como señalador de página había un estilete muy afilado, lo puso en la palma de su mano cerrándola y con la otra tiraba del estilete hacia arriba, por debajo del puño cerrado resbalaron algunas gotas de sangre que fue dejando caer sobre su semen, era lo más parecido a una tarta de queso con fresas por encima, yo me incliné sobre su cuerpo y comencé a lamerlo lentamente, Vadim hizo lo mismo y entre los dos dejamos su cuerpo limpio de nuevo.

Ahora Jordan se incorporó quedando de rodillas y nosotros hicimos lo mismo, dijo: ¡Habéis bebido mi semen, habéis bebido mi sangre, falta el último líquido vital mío y me tendréis en vuestro corazón siempre! Nos hizo inclinarnos un poco y sujetando su polla la metió dentro de la boca de Vadim mientras él tironeaba sus huevos y comenzó a orinar dentro de su boca, mi cara pegada a la de Vadim esperaba mi turno para recibir tan preciado regalo y al poco su verga entró en mi boca llenándomela con su orina, que yo tragaba a duras penas ante tal presión del chorro, pero no quedó ni una gota por ser degustada, nuestras bocas limpiaron su polla y nos incorporamos de rodillas junto a él y abrazándonos a los dos nos morreó, primero uno, luego el otro y después los tres.

Me tumbé en la cama boca arriba y comencé a masturbarme, tomé la mano herida de Jordan lamiéndola mientras mi placer se acercaba y estallé llenando mi pecho de semen, tomé el estilete e hice lo mismo cortándome ligeramente la palma de la mano dejando caer mi sangre sobre mi semen, ahora ellos dos lamieron mi cuerpo mientras decían: ¡Siempre serás nuestro, por siempre! Finalizamos con el turno de mi orina, que ambos se tragaron. Luego fue Vadim quien terminó masturbándose, cortando su mano y depositando su sangre sobre el semen, Jordan y yo lo lamimos y al poco nos bebíamos su orina, nos lamíamos las heridas en las manos unos a otros limpiando las heridas, cuando dejaron de sangrar nos besamos y nos tumbamos abrazados los tres juntos quedándonos dormidos de esa forma, todo estaba dicho.


La noche que mamá Claudia se fue, Rolo y yo volvimos al apartamento de Diego, el camarero venezolano, los tres disfrutábamos mucho teniendo sexo, pero esta vez se apuntó el otro camarero rubito, que Rolo casi lo acaparó para él solo, al haber solamente una cama los cuatro estábamos en ella, Diego estaba muy salido y me pedía que lo follara de forma brutal, que necesitaba que lo dominara, yo le susurré al oído: ¿Quieres tener dos pollas iguales en tu lindo culo? Él asintió con la cabeza susurrando: ¡Síiii, me encantaría! Tumbado boca arriba, yo entre sus piernas le hacía una soberana mamada, al poco levantaba sus piernas enterrando mi boca en su ano mordiéndolo y chupándolo, paseando mi lengua una y otra vez mojándolo y haciendo que palpitara ante mi insistencia, un dedo fue entrando mientras lamía moviéndolo dentro y fuera, se fue dilatando y entraron dos, que también le hicieron gemir de placer y finalmente entró un tercero, los suspiros eran profundos, mis tres dedos entraban y salían con fuerza, cada vez con más rapidez, mi boca capturó su verga chupándola dejándola bien llena de saliva, coloqué la almohada bajo sus lumbares y apartando sus huevos hacia un lado fue forzando su polla hacía abajo y lentamente su propio capullo entró dentro de su ano, gimió, busqué su mano poniéndola sobre el tronco de su polla, me incorporé sujetando la mía y la clavé de un solo golpe junto a la suya, ahora yo ya sujetaba su tronco forzándolo más y más adentro de su propio ano mientras yo empujaba mi verga una y otra vez dentro de él, mis dedos masturbaban su verga doblada mientras que él notaba el placer en el roce de la mía con su capullo dentro de su ano, suspiraba y su cabeza se removía de lado a lado gimiendo de puro éxtasis, sus gemidos me produjeron tal placer que terminé llenándole el culo con mi semen, al poco me salí de su culo sacando su verga del interior, levanté más su culo dejándolo apoyado sobre mi pecho en vertical mientras que mi boca se tragaba y chupaba sus huevos los cuatro dedos de mi mano izquierda entraban dentro de su dilatado ano y al mismo ritmo mi derecha le masturbaba, volvía a estar con espasmos de placer y mientras mis dedos entraban con fuerza terminó soltando su semen sobre su propia cara al tiempo que abría la boca para capturar esas gotas de su propio fluido, me tumbé sobre su cuerpo lamiendo el semen no capturado besándole la boca después, me dijo: ¿Seguro que tienes la edad que dices? Yo asentí y él añadió: ¡Pues sabes más que mucha gente algo mayor que tú, cada vez me haces sufrir más de forma placentera esperando el final y el final siempre es apoteósico, gracias guapo!

A nuestro lado el rubito boca abajo era follado de forma contundente por Rolo mientras le azotaba las nalgas ya enrojecidas, él joven se agitaba pidiendo más y más, más fuerte más duro, Rolo le levantó un poco el trasero quedando de rodillas el joven camarero, la mano de mi amante lo masturbaba con fuerza y gimiendo los dos a galope tendido ambos se desplomaron sobre la cama, el chico rubio con la cara sofocada miró a Diego diciéndole: ¡Lo siento te he manchado las sábanas, no he podido parar…! Diego acercó sus labios al joven diciéndole: ¡De algo sirven las lavadoras, no te preocupes! Diego continuó: ¡Se te veía muy bien como una jaca jerezana montada por un buen semental! El rubito dijo: ¡Diego tú parecías un torero siendo empitonado por detrás  por un toro Miura, retorciéndote ante el placer! Terminamos todos riendo a carcajadas.

Tras beber y fumar relajados, nos fuimos calentando de nuevo con algunos relatos que contábamos todos y poniéndonos de costado me penetró Diego, a él le taladró Rolo y a éste Javi, el rubito, que empujaba con fuerza contra todos, ahora gemíamos de placer, la polla de Diego tan similar a la mía me causaba un placer inigualable, los fuertes embistes de Rolo a él le hacían gemir en mi oreja mientras su lengua la lamía, Javi palmeaba la nalga de Rolo mientras lo penetraba, lentamente fuimos deshaciendo el trenecito quedándome tumbado boca arriba, entre mis muslos Rolo, mi amor, que levantándome las piernas y sujetándose la polla me la clavó con fuerza palmeándome las nalgas, detrás de él Diego clavó su potente verga, que le hizo soltar un gemido, Javi se puso con las rodillas separadas con mi cara entre ellas ofreciéndome su polla, que atrapé con mi boca mientras él se inclinaba sobre mi pecho capturando la mía, mi culo siendo penetrado, mi boca ocupada mamando y mis dedos entrando en el culo de Javi mientras se tragaba mi verga, la otra mano separaba su nalga. Mi cabeza subía y bajaba tragándome la polla de Javi al ritmo de mis dedos dentro de él, Rolo entre mis piernas se besaba con Diego mientras éste lo penetraba y pellizcaba sus tetillas, lentamente fuimos descargando nuestro semen, yo en la boca de Javi, él en la mía, Rolo dentro de mi culo y Diego en el de él, al terminar nos derrumbamos los cuatro palmeándonos las nalgas jugueteando, con las respiraciones agitadas nos fue venciendo el sopor del sueño.


Pasados unos días tras la marcha de Claudia, se presentó en el bar musical una pareja de Mossos d´Escuadra con un niño de corta edad, preguntaron por Troy o Tony, en ése momento estaba allí Tony, le entregaron una carta, que leyó detenidamente, saludó a los uniformados y con una señal llamó a Jordan para que le siguiera yo fui tras ellos, en el segundo piso llamó a Troy, que estaba en la ducha diciéndole que subiera al tercer piso, al poco Tony, Jordan, yo y el niño estábamos frente a los ordenadores, el pequeñajo decía: ¡Que guay, tantos ordenadores, que bien! Mientras el niño decía esto yo lo observaba, se parecía a alguien muy cercano a mí, mientras cavilaba entró Troy, Tony le entregó la carta, que leyó varias veces, Troy se agachó preguntándole al niño su nombre y dijo con soltura: ¡Mi nombre es Dominic, pero todos me llaman Dom y él se parece a mi papá! Al decir esto señalaba a Jordan, continuó: ¡Voy a cumplir cinco años! Remarcándolo mostrando sus deditos, Troy tomando un colgante del cuello del niño dijo: ¿Me prestas un momento tu amuleto? El niño suspicaz añadió: ¡Me lo devuelves, es un regalo del tío Uri! Los cuatro presentes al oír el nombre nos quedamos petrificados, del amuleto en forma de libro con cierre de plata Troy encontró una pequeña tarjeta de memoria USB, entregándosela a Vadim que tras unos minutos la conectó al ordenador central.

En la gran pantalla apareció Uri diciendo: Querido Waldeck, presiento, que cuando veas esto yo no estaré para verlo, recuerdas la última fiesta de disfraces en casa de los hermanos Corsinati, eso fue poco antes de tu fuga, en la fiesta fuiste como siempre el centro de atracción, la orgia fue espectacular, follaste con chicas, con chicos, solos o en grupo, parecía que no tenías fin, llegaste al orgasmo hasta en 7 ocasiones, tú ignorabas que en tu bebida habían disuelto drogas excitantes, cuando finalizó y te llevaron a tu habitación algo agotado, pero a espaldas de los anfitriones se coló una joven ahijada de ellos y tú de forma inconsciente la desfloraste derramando tu semilla dentro en tres ocasiones más, al darse ellos cuenta al día siguiente llevaron a la chica a un convento encerrándola allí, jurándose entre ellos de hacerte pagar por ello con la vida, por eso te querían muerto, pero Yoram no y yo estaba para protegerte, la joven Regina tuvo un hijo, Yoram lo quería para él como moneda de cambio contra los Corsinati, pero alguien se adelantó y fue rescatado a tiempo, la madre se quedó allí para tomar los hábitos creyendo que el niño había nacido muerto, lo mismo se comunicó a Yoram y a los Corsinati. El niño fue atendido por mi hermanastra, que había tenido un niño, lo cuidó como si fuera suyo, poco tiempo después tú descubriste la puerta mal cerrada para huir. Solamente yo sabía dónde estabas y no se lo dije a nadie, quería mantenerte lejos, pero aparecieron las fotos de la terraza del bar en Facebook y pedí que me enviaran aquí para que regresaras.

Cuando salimos deprisa de vuestro piso ante tu suicidio estaba desolado, pero analizando el video del móvil descubrí el engaño y pasé riéndome todo el día diciendo: ¡Bien por ti, mi niño! Espero que aprecies mi regalo devolviéndote a tú hijo, siempre te cuidé lo mejor que pude, tú eres zurdo y la posición de tu cuerpo en la bañera y el cuchillo junto a la mano derecha me dio la respuesta. ¡Te quiero!

El niño se enjugó una lágrima de la cara y con su ligero acento extranjero dijo: ¡Tío Uri me enseñaba fotos de mi padre y videos que guardaba desde muchos años antes hasta su desaparición!

Troy acercó a Dom junto a Jordan diciéndole: ¡Éste es tú papá, algo cambiado, pero es él, antes se llamaba Waldeck, ahora lo llamamos Jordan, recuerda su nombre! Jordan algo trastornado abrazó al niño diciendo: ¡Tengo 20 años, tengo una nueva familia además de mis dos hombres y mi hijo, que más podría desear, tal vez que Uri no hubiera fallecido, le debo tanto…! Jordan abrazó a Vadim y a mí mientras Dom intentaba abrazarnos a los tres con sus brazos.


Ahora voy a cumplir 18 años, mi nombre es Dom y vivo con mis tres padres, en los últimos trece años ha pasado de todo y todo bueno, todos cuchichean a mi alrededor, supongo que preparan una fiesta de celebración, Troy y Tony aseguran, que me parezco mucho a papá cuando lo conocieron, casi idéntico, reconozco que he sido muy malcriado recibiendo toda clase de atenciones, pero están orgullosos de mí, mis notas son excelentes, mi comportamiento también y en deportes estoy por encima de mis compañeros del cole.

Recuerdo, que al día de mi llegada montaron una cama en la misma habitación de mi papá, cuando nos acostamos, ellos esperaron a que yo me durmiera para tener sexo, yo me hice el dormido viendo como Vadim, Mike y Jordan, mi papá, tenían relaciones sexuales, así pasaron los años yo me negaba a dormir solo en una habitación poniendo un montón de escusas y ellos transigían. Al cumplir la misma edad que tenía papá cuando fue secuestrado por Yoram, tras haberse saciado los tres de sexo me colé en su cama chupando o lamiendo la verga de los tres uno a uno mientras masturbaba las otras dos vergas, finalmente conseguí que masturbándose terminaran soltando su semen, yo lo fui lamiendo como siempre veía a ellos hacerlo y me encantó su sabor, pero al terminar me reprendieron ligeramente alegando que era muy joven para eso. Pero de vez en cuando me dejaban participar, lentamente cada vez aprendía más y más cosas sobre el sexo.

Una tarde estaba Mike con su portátil en el comedor y yo frente a él haciendo mis deberes del cole, de vez en cuando le preguntaba alguna cosa de los deberes y él se levantaba acercándose a mí explicándome el problema, yo notaba el amor incondicional de Mike hacia Jordan y Vadim, pero él era mi preferido, no es tan espectacular como Jordan, ni tan guapo como Vadim, pero cuando me sonríe parece que se me ilumina el día, papá dice que a él y a Vadim les pasa lo mismo. Ahora está enfrascado escribiendo en el portátil, sin que se percate me deslizo de la silla colándome bajo la mesa colocándome entre sus piernas, estamos a finales de septiembre y lleva pantalón corto deportivo, como a mí me gusta, sin tocarle las piernas acercó mi boca sobre su entrepierna sacando mi lengua la paso por su verga por encima del pantalón, la humedad le hace reaccionar y comienza a crecer, intenta retirarme, pero poniendo mis manos sobre sus muslos aprieto más mi boca saboreando su erección, meto mi mano por el camal de la prenda sacándole la polla llevándomela a la boca, chupo y chupo como si mi vida dependiera de ello, me encanta oír sus gemidos, hacen que me excite todavía más, me he vuelto un experto mamón.

Mike se levanta y se acerca al sofá, se descalza bajándose el pantalón y se sienta, me acerco a él, me baja mi pantalón y sujetándome por las nalgas con sus manos se come mi gran polla de una sola sentada, ahora su cabeza se mueve cada vez más rápido mis manos sobre su cabello lo acarician siguiendo sus movimientos en la mamada, yo gimo apretando mi verga dentro de su boca mientras se la lleno con mi semen, sigue chupándola, me separa de él sacándose la camiseta, introduce tres dedos de su mano en la boca mojándolos llenándolos con saliva y los va metiendo en su ano poco a poco mientras levanta sus piernas dejándome ver su ano siendo penetrado por sus dedos, mi polla reacciona de nuevo levantando la cabeza, cuando los dedos dejan de entrar se sujeta con las manos los tobillos dejándome ver la palpitación de su ano, me acerco y sujetando mi verga la voy empujando dentro de su culo, mi hombre preferido va a ser mi primera penetración, cuando llego al fondo gime, me mira asintiendo, mis manos sobre las suyas sujetando los tobillos, ése contacto me excita mucho y comienzo a penetrarlo, como siempre había soñado, los dos gemimos, miro sus ojos y leo su amor por mí, mi cuerpo va acelerando las embestidas ¡Flip, Flop! Una y otra vez, su verga tamborilea sobre su plano vientre, sale un ligero líquido mojando la zona, una de sus manos me indica que reduzca el ritmo acelerado de mis embestidas y reconozco que es más placentero, noto toda mi polla entrando dentro de su ano yendo más lento, alarga su brazo atrayendo mi boca sobre la suya y nos besamos como adultos, me gustan sus labios carnosos y los mordisqueo, pasándole después la lengua sobre ellos, mi mano derecha coge su verga y comienzo a masturbarlo, entonces dice: ¡Acelera! Y yo acelero de forma tan brutal que al poco noto como su polla escupe semen sobre su cuerpo apretando el esfínter dándome mayor placer y estallando dentro de él, al terminar me iba a retirar pero él ha cruzado las piernas sobre mis nalgas moviéndolas para seguir entrando dentro de él, poco después las retira dejándome separar de su cuerpo.

Me arrodillo entre sus piernas lamiendo su semen, levanto sus piernas enterrando mi boca en su ano limpiando el mío, que él fuerza a salir, me levanto y me hace subir sobre el sofá, su boca chupa mi verga limpiándola lentamente su lengua y boca van resbalando hacia mi ano mojándolo, me gusta esa nueva sensación de placer, noto que mi ano comienza a palpitar, su dedo índice entra dentro de mí mientras me lame los huevos y el dedo se mueve dentro, una extraña sensación me recorre el cuerpo, un poco de dolor pero placentero, más tarde entra otro dedo más y duele, pero no me quejo, sé que me está dilatando, su boca es una delicia entierra mi verga hasta el fondo clavándome su nariz en la pelvis y gimoteo, sus dedos no paran de revolotear dentro de mi ano, coloca mis manos sobre sus hombros y me hace agachar mientras él sujeta su verga, la noto en la entrada, sus manos en mis nalgas me indican que tengo que bajar y lentamente mi ano comienza a engullir su polla, me muerdo los labios ante el dolor, me mira y yo a él, me hace subir ligeramente y volver de nuevo a bajar, cada vez su verga entraba más, con paciencia por su parte y dolor por el mío, sin avisarle bajé mi culo de golpe clavándome toda su polla ¡Por Dios que dolor! Acerca su boca a la mía y me besa, eso me hace olvidar el dolor, noto su verga palpitar dentro mío y le sonrió, ahora lentamente sus manos me guían subiendo y bajando mi cuerpo para darnos placer mutuo, pasado el dolor mi polla se yergue de nuevo entre nuestros cuerpos rozándose con los pelos de su pecho, mi cuerpo pide acelerar y lo hago, asumo el ritmo de la penetración cabalgando sobre su polla y ambos gemimos, con el roce de su pecho mi verga estalla soltando esperma sobre él y notó que mi culo recibe uno tras otro trallazos de semen mientras apretó su cabeza sobre la mía besándonos con ardor, mis manos no paran de revolverle el largo cabello y pienso ¡Soy feliz, siempre será mi primer hombre! Y lo besó con más ardor.

Y de esa guisa nos encontraron Jordan y Vadim, besándonos y acunándonos mutuamente. Con una mueca de burla Jordan dice: ¡Vadim nos hemos perdido el desfloramiento de mi niño, bueno de nuestro niño, que ahora ya es un hombrecito! Al bajar del sofá Vadim se sentó e inclinándose sobre el pecho de Mike comenzó a lamer mi semen diciendo: ¡Hummm, que rico semen de un recién desflorado! Y los cuatro nos reímos.

A partir de ése día yo entraba en sus juegos sexuales enseñándome a controlar el placer retardándolo, el primer día que penetré a Jordan lloró de orgullosa emoción, yo estaba exultante y dispuesto a recibirlo dentro de mí, ocurrió días más tarde, su enorme polla entrando en mi culo mientras la miraba me excitaba a pesar del gran dolor terminando empalado de igual forma que yo a él días antes, mientras Mike y Vadim nos animaban sonriendo.

Tiempo atrás no pasaba un día que no tuviera una verga en mi boca dando placer a mis compañeros del cole y la mía en su boca intentando comérsela entera, ya fuera en los vestuarios, en la disco o tras un botellón multitudinario buscando sitios apartados para estar mejor, incluso un profe de química, que en clase se acercaba a mi mesa rozando la entrepierna de su pantalón contra mi mano que descansaba en el borde de la mesa, cuando se retiraba su entrepierna abultaba más que antes, esos momentos me excitaban, el profe no estaba nada mal de unos 28 años con una ligera barbita y gafas  de montura metálica liviana, no muy alto, pero bastante delgado, con pinta del clásico empollón sabiondo.

Una tarde de fuerte tormenta me vio en la parada del bus y se ofreció para acompañarme a casa, subí a su coche, era de tamaño familiar y le dije donde era, le veía mirarme de reojo, alargué mi mano izquierda y colocándola sobre su entrepierna fui acariciando su verga que fue creciendo con prontitud, entonces dijo: ¿Tienes prisa por llegar a casa? Yo respondí, que no tenía prisa alguna y cambiando de dirección terminamos en una zona boscosa, paró el coche y nos pasamos a los amplios asientos traseros, se abrió el pantalón mostrándome su verga erecta, incliné mi cuerpo y mi boca se zampó el pedazo de mástil y gimió diciendo: ¡No vayas tan deprisa que terminaría muy rápido! Mi boca redujo la velocidad, sus largos dedos acariciaban mi espalda y cabeza, me hizo incorporar mi cuerpo y él se inclinó sobre mi entrepierna mientras sus dedos abrían el pantalón y también la camisa, yo bajé el pantalón hasta el suelo dejando salir mi verga en todo su esplendor, él soltó: ¡Por Dios es una magnífica polla, digna de estar como una de las maravillas del mundo! Una mano acariciaba mis huevos, la otra sujetaba mi verga mientras que su boca intentaba meterse lo más que podía de mi herramienta, él jadeaba y yo gemía, aparte del golpeteo de la lluvia solamente se oía su boca succionándome, separó la camisa y dejando de chupar paseó su lengua por mis tetillas mordisqueándolas hasta el punto de endurecerse, ahora me masturbaba con las dos manos muy lentamente, su boca fue subiendo posándose sobre la mía, mi lengua salió a su encuentro y nos besamos, mi mano lo masturbaba de forma lenta y los dedos de mi mano frotaban su apretado ano, que no cedía.

Separé mi boca de la suya inclinándome sobre su verga dejando resbalar saliva mojándome los dedos y volvía frotar su ano con insistencia, mientras me tragaba una y otra vez su polla, finalmente mis dedos comenzaron a entrar dentro y mi boca fue acelerando, mientras él repetía: ¡Por Dios, por Dios voy a reventar, para que me vas a volver loco! Mis dedos entraban ya con más facilidad y finalmente estalló soltándome su semen dentro de la boca, unos tremendos trallazos, que rebotaban por todo el paladar y su polla no paraba de soltar semen, mientras que sus dedos enmarañaban mi cabello, él soltó: ¡Mi mujer acaba de dar a luz hace poco a mi segundo hijo y no he tenido relaciones con nadie hasta ahora!

Le dejé la verga limpia separé los botones de su camisa besando su delgado pecho subiendo mis labios hasta su boca y nos besamos de nuevo, mis manos habían despojado mi pantalón y zapatillas quedando desnudo la parte inferior, le bajé los pantalones junto con el bóxer y frente a él coloqué mis piernas acuclillado a cada lado de sus muslos, sujetando su verga la fui entrando dentro de mi culo antes que se aflojara del todo, sus manos me quitaron la camisa acariciándome el cuerpo, nuestros labios no se separaban en ningún momento, yo levantaba ligeramente mi cuerpo dejándole resbalar de nuevo sobre su polla, que volvía a estar dura , apoyé mis manos sobre el respaldo de atrás dejándole espacio para que me follara, él inclinó su boca sobre mi tetilla mordiéndola, mis dedos jugueteaban con su ensortijado cabello y me folló con fuerza sujetándome las nalgas, el roce de mi polla con los pelos de su pecho me provocaban inmenso placer y avisándole derramé mi semen sobre esa zona gimiendo, sus dedos separaron mis nalgas y clavándose más noté como derramaba su semen dentro de mi culo.

Al separar nuestros cuerpos lamí mi semen de su pecho mientras sus manos terminaban de sacarse el pantalón y el bóxer juntándose con los zapatos, hizo que incorporara mi cuerpo y sujetándose las piernas las levantó bajando un poco su trasero del asiento dejándolo frente a mi verga, mirándome a los ojos susurró: ¡Por favor con cuidado! Tomando mi verga la fui frotando entre sus genitales poniéndose de nuevo dura y al poco lo fui penetrando, gemía y suspiraba al mismo tiempo, yo notaba su estrechez y el dolor que eso suponía, pero fue aguantándolo cuando notó mis huevos golpeándole el trasero suspiró profundamente estaba bien empalado, él separó más sus piernas y miraba como yo retiraba mi polla para clavarla de nuevo dentro de él y gemíamos los dos, mi mano sujetaba la cadera sobre la ingle mientras la otra pellizcaba su tetilla y lentamente lo follé, no había prisa, su ano se había dilatado y mi penetración se fue acelerando, alargó su mano metiéndome tres dedos dentro de mi boca, que yo chupé con fruición y la otra se masturbaba al mismo ritmo que yo, ahora aceleró su mano y yo mis embistes, estallando los dos al mismo tiempo y yo chupando sus dedos con frenesí, al sacar mi polla metió sus dedos dentro de su culo sacando parte de mi semen llevándoselo a la boca, lo repitió varias veces, yo chupé de nuevo su cuerpo de mi semen dijo: ¡Me has dejado bien abierto!

Estiró su brazo sobre mi nuca acercándome a él y nos besamos, instantes más tarde nos vestimos y me acercó a casa, antes de separarnos susurró: ¡No sé si seré capaz de darte clase, porque siempre me vendrá a la memoria éste momento compartido, gracias! Besó ligeramente mis labios y bajé del coche, pero antes dije: ¡Gracias por no mentirme, bien estás casado y tienes dos hijos, me alegro por vosotros, es maravilloso! ¡Á bientôt!

El tiempo pasa volando y heme que ya cumplo los 18 años, ansío la fiesta secreta que preparan, cual será mi regalo, la potente moto o tal vez el deportivo que me gusta, mentalmente sonrío pensando en un harén de jóvenes efebos para mi placer, han preparado unas carpas alrededor de la piscina y preveo un montón de gente. Y a media mañana comenzaron a desfilar amigos, conocidos y familiares, los primeros fueron mis colegas del cole y disfrutamos un rato de la piscina terminando unas horas después en los vestuarios haciéndonos unas buenas mamadas, aparecieron los hijos adoptivos de Troy y Tony, algunos casados y con descendencia, otros liados entre ellos o con terceros, las dos “nonas” (abuelas) Leti y Nita, Román con sus hijos Mike y Nico, Claudia con su nuevo y flamante esposo cirujano junto a sus hijos Marc y Hugo, también aparecieron los camareros del bar musical, Diego el venezolano junto a su esposa de la misma nacionalidad y sus tres hijos, el rubito Javi con un señor algo mayor, muy elegante y distinguido, por supuesto también Jordan con Vadim y Mike siempre juntos. los regalos se iban amontonando en el salón, al mediodía aparecieron unos camareros llevando unos carritos con comida, unos fríos y otros calientes ofreciendo una gran variedad para todos los gustos, no habían escatimado en gastos, algo más apartados distinguí a mi profe de química con su mujer y los dos niños, yo iba repartiendo saludos por todos lados mientras me felicitaban cordialmente, saludé a mi profe y él me presentó a su esposa, le di dos besos en las mejillas asegurándome que la fiesta era fabulosa, cosa que yo se lo agradecí, en una zona delimitada se levantaban unos castillos hinchables para la diversión de los más pequeños vigilados por asistentes sociales y como dioses del Olimpo Troy y Tony, mirando maravillados a los asistentes, para mi asombro también se encontraban entre los invitados la segunda  exmujer del padre de Marc y Hugo con su atractivo hijo, todo eran risas y felicidad, yo estaba orgulloso y pletórico. Mike se acercó a mí preguntándome si ya había abierto los regalos, yo denegué con la cabeza, decidí que ya era el momento de ir abriendo regalos, mientras todos disfrutaban de la fiesta, comencé por los más grandes, aparecieron varias tablas de surf, con un sobre enganchado, dentro contenía unos pasajes para Hawái con estancia para dos semanas, era el regalo de Mike conjuntamente con Román, Nico y Marc lo besé, una caja grande con un chaquetón de pelo de lobo con gorro y pantalones de piel, la nota de Vadim, que decía: ¡Para que no pases frio en Rusia! Las abuelas un viaje a San Petersburgo para dos semanas para practicar  patinaje sobre el hielo, los hijos adoptivos de Troy y Tony dos pares de patines sobre el hielo, con cada regalo me quedaba sin habla, estaba súper emocionado y a punto de soltar lágrimas. Troy y Tony me regalaban una espléndida moto MTT Turbine Superbike Y2K rojo pasión, con turbina Rolls Royce y potencia de 320 CV, era una locura aunque de momento solamente tenía las llaves con el prospecto, yo sabía su alto precio pero no esperaba tanto, pensaba en algo más discreto. Nico me obsequió con unas prendas diseñadas por él en exclusiva, luego regalos menores pero que hicieron mi delicia, traje de neopreno para surf, finalmente una minúscula cajita casi al fondo de todas llamó mi atención, parecía el estuche de una joya, lo desenvolví encontrando una nota de Troy y Tony muy escueta: ¡Feliz Cumpleaños tesoro, pero éste regalo es para tú padre! Y dentro las llaves de un coche, se oyó el rugido de un potente motor y todos nos asomamos afuera, entonces apareció un BMW Z4 Roadster azul cobalto metalizado descapotable, yo lloraba de emoción Jordan lo merecía, entonces al levantar el juego de llaves vi una pequeña nota: ¡Hijo, tienes todo lo que siempre has querido, espero que mi regalo, te agrade Waldeck/Jordan! No entendía esa nota, pero bajé hacia donde se encontraba el coche y mientras me acercaba lentamente mi corazón se aceleraba por momentos y no sabía la razón, cuando estaba a pocos metros frente al coche el conductor descendió, llevaba un traje oscuro, camisa blanca y corbata también oscura en su cabeza una gorra de chofer, que ensombrecía su rostro, me recordaba a Jason Statham en la peli de Transporter, su cara miraba al suelo, levantó su mano tomando la gorra y poniéndola bajo su brazo, me quedé estupefacto y rápidamente eché a correr lanzándome a los brazos del hombre mientras sollozaba repitiendo una y otra vez su nombre: ¡Uri, Uri, tío Uri, estás vivo! Le besaba toda la cara sin dejar de llorar, sus brazos me abrazaban con fuerza y dijo: ¡Feliz aniversario, eres igual de guapo que tu padre!

De pronto llegó el rugido potente de una moto deteniéndose junto al coche, de ella bajó un joven totalmente equipado para una carrera, su cabeza cubierta por un asombroso casco, no dejaba ver su cara, una vez de pie junto a la moto, el joven abrió su chaqueta, en su cuello pude distinguir un colgante de variados colores, metió su mano dentro de la prenda tendiéndomela al tiempo que comenzaba a sacarse el casco, al abrir su mano enguantada vi un colgante casi idéntico al suyo, su otra mano ya sujetaba el casco mientras el joven sacudía su rubia melena mientras decía: ¡Creo que te olvidaste esto al marcharte! Levanté la mirada encontrándome con esos ojos almendrados de gacela y me tiré sobre él exclamando: ¡Enzo, Enzo, Enzo! Mis ojos no cesaban de llorar, su mano con el colgante levantaron mi barbilla y depositó sus labios sobre los míos besándome con ternura susurrando: ¡Feliz Cumpleaños hermanito! Cogí el colgante colocándomelo al cuello y tomando también las llaves de la nueva moto, me sequé las lágrimas mirándole la cara, su pelo lacio rubio dorado le caía sobre la frente dándole un aire de rufián, el cabello llegaba por encima de sus hombros, estaba fantástico y se lo dije.

La fiesta continuó y lentamente los invitados se fueron despidiendo, a las 21 horas solamente quedábamos los más íntimos. Troy y Tony, Román con Marc, Jordan, Vadim y Mike juntos, Nico con Pol y Hugo con Rolo, finalmente Uri, Enzo y yo, los más jóvenes nos metimos en la piscina tras ponernos los bañadores, Jordan hablaba con Uri junto a Troy y Tony animadamente, yo dentro del agua jugueteaba con Enzo mientras nos contábamos nuestras vidas tras la separación trece años antes, lo mal que lo pasó y la posterior desaparición de Uri de éste tema apenas hablaba aludiendo desconocerlo, me dijo que había hecho algunas exposiciones fotográficas con buen resultado, yo le conté mi poca excitante vida, poniéndome sus manos sobre la cabeza la empujó dentro del agua soltando: ¡Jaaa y quieres que yo me lo crea! Cuando saqué la cabeza del agua le miré y añadió mirando a nuestro alrededor: ¡Con tantos pibones rodeándote, me extraña! Enzo me abrazó poniendo su boca pegada a mi oído susurrando: ¡Te he echado de menos muchísimo! Su tierna voz erizó mi vello hasta mi verga comenzó a crecer dentro del bañador, su voz era muy sensual, quería separarme para que no notara mi erección, pero sus brazos me lo impidieron, entonces apoyó su cuerpo sobre el mío, noté también su erección, ahora su cara frente a la mía mirándome a los ojos dijo: ¡Estaba esperando este momento, no quiero que te enfades conmigo, he salido con chicas y chicos, pero siempre terminaba dejándoles, porque no eras tú! Yo respondí: ¡Tal vez me tienes en un pedestal tras la separación, pero tal vez te llevas una decepción, no soy perfecto, soy testarudo y malcriado además caprichoso, estos años lo he tenido tan fácil…, que incluso me he vuelto egoísta, tú eres más límpido, más puro de corazón…! Enzo acariciando mi cara con las dos manos dijo: ¡Déjame averiguarlo por mí mismo y si hay algo que no me guste te lo diré, de la misma forma que estamos ahora! Yo respondí en broma: ¿En la piscina y con bañador? Enzo riendo soltó: ¡No tonto, abrazados y haciendo el amor!

Tirando de su brazo nos acercamos al borde de la piscina, salimos tomando unas toallas nos secamos y cogiéndole de la mano entramos en la casa subiendo con rapidez las escaleras, una vez en mi habitación, me tumbé sobre la amplia cama tironeándole, cayó sobre mí, mis brazos acariciaban su espalda y costados nuestras bocas se unían saboreándose con lentitud, nuestras pollas crecían apretadas en los bañadores, sus manos acariciaban mi rostro deslizándolas por mi cuerpo y separándome las piernas, frotaba su verga contra la mía con fuerza, yo notaba el gran tamaño dentro de su bañador, su pelvis frotaba y frotaba, separé mis labios de su boca diciéndole: ¡Cómo sigas así, me agotarás en 5 minutos! Él respondió: ¡He esperado mucho para estar contigo, tenemos que recuperar el tiempo perdido! Mientras soltaba esas frases  se comenzó a quitar el bañador, luego sacó el mío, nuestras vergas libres de las prendas se erguían en todo su esplendor frotándose continuamente y babeando de gusto.

Por sus movimientos era claro que quería penetrarme, moví mi cuerpo estirando el brazo a la mesita y cogiendo un preservativo, se lo mostré, él se encogió de hombros e iba a cogerlo pero lo dejé sobre la mesita, tras ese movimiento me puse boca abajo, todo su cuerpo reposaba sobre mi espalda, su verga se frotaba contra la raja de mi trasero, apoyándose sobre una mano sujetó su verga acercándola a mi ano haciendo presión y poco a poco fue entrando con gran dolor, era casi tan grande como la mía o la de Jordan, con su pecho apoyado en mi espalda sus manos separaban mis nalgas mientras retiraba la verga entrando de nuevo un poco más, mis manos crispadas apretaban la almohada lo mismo que mis dientes para no soltar un grito, apenas estaba dilatado, intenté relajarme y lentamente consiguió ir entrando hasta el fondo llenándome completamente, moví mi cuerpo levantado mi parte izquierda quedando los dos pegados de costado, mi pierna derecha en forma de cuatro sobre la cama y la izquierda la pasé sobre sus piernas apoyando el pie sobre la cama, su gran polla palpitaba dentro de mí, giré la cara buscando su boca fundiéndonos en un largo beso y comencé a moverme retirándome de su verga y empujando mi culo hacia atrás, ambos gemimos, el dolor no existía, solo había placer. Enzo comenzó a penetrarme a conciencia, con cada clavada yo gemía, sus manos me acariciaban incluso me masturbaba mientras que nuestras bocas se consumían de ardor, ahora sus embestidas eran más constantes notaba la gran dureza dentro de mí llenándome el cuerpo, aceleraba y aceleraba su cuerpo estaba tenso y susurró: ¡Me reservaba para ti! Y mientras decía esto su polla descargó en mi culo llenándome con su leche, que manaba como una fuente, yo apretaba mi culo contra él y Enzo mordía mis labios con el corazón acelerado, yo iba a masturbarme pero me apartó las manos, su mano comenzó a masturbarme de forma incontrolada y al poco mi verga escupió mi semen salpicándome todo el pecho y barbilla.

Cuando nuestros corazones dejaron de palpitar desaforadamente estiré el brazo intentando coger una de las toallas, pero no llegaba, pasé mi brazo atrás empujando su cuerpo y el mío hasta el borde de la cama y la cogí poniéndola sobre la sabana bajo mi trasero, Enzo dijo: ¡No me importa si me has manchado! Yo mirándole dije: ¡No es eso, saldrá limpia, pero tal vez con la cantidad de semen que has soltado se escape un poco cuando la saques! Mis dedos recogían mi propio semen llevándomelos a la boca, Enzo dijo: ¿A qué sabe? Su pregunta era inocente, le miré a los ojos respondiendo: ¡Cada persona encuentra el gusto distinto, se ha de probar, para saber si te gusta o no! Sus dedos cogieron semen llevándoselo a la boca y lo repitió diciendo: ¡No está nada mal, me gusta tu semen! Al poco sacó su verga de mi abierto culo y con rapidez paseé mis dedos tomando su semen antes que cayera sobre la toalla llevándomelos a la boca y saboreando su néctar dije: ¡Tú semen es de primera! Sin mediar palabra desplazó su cuerpo hacia abajo enterrando su boca en mi ano sus dedos separaban mis nalgas y su lengua buscaba su semen.

Cuando se recostó a mi lado pregunté: ¿Me habías dicho que has estado con chicas y chicos…? Enzo dijo: ¡Sí es cierto, pero nos besábamos y terminaban masturbándome, todos tenían miedo del tamaño de mi polla, algún chico la había chupado pero poco más! Entonces dije: ¿Eso de que te reservabas para mí…? Él añadió: ¡En parte es cierto, mi polla ya no es virgen te he follado, mi boca tampoco he saboreado tu semen y el mío, no te he mentido! Medio en broma y medio cabreado lo giré dejando su cuerpo boca abajo y subiéndome a su espalda diciéndole: ¡Ahora veré si tú culo miente! Él intentaba zafarse pero yo lo retenía con fuerza, mi verga frotándose contra su trasero cobró vida de nuevo decía: ¡Me vas a desgarrar…! Todo su cuerpo se convulsionaba, deslicé mi cuerpo tras él bajando hasta su trasero, enterrando mi boca entre sus nalgas, mis manos por cada lado acariciaban su polla y mi lengua se saciaba de tan preciado ano virginal, su cuerpo ya no luchaba, se estaba relajando al placer de mi boca, lentamente su ano palpitó un poco y con delicadeza fui metiendo un dedo, luego dos y finalmente un tercero, ahora Enzo movía su trasero de placer notando mis dedos penetrándolo.

Giré su cuerpo dejándolo boca arriba, levanté sus piernas colocándolas sobre mis hombros y sujetando mi verga presioné, la invasión de mi polla en su culo le causaba dolor y se notaba en su cara, sus brazos estirados sobre la cama, sus manos apretaban las sábanas con fuerza, yo seguí entrando dentro de él cada vez más y más terminando con toda mi polla en su culo, de vez en cuando mi verga cimbreaba dentro y él daba un respingo, poco a poco el dolor menguó ya no estaba tan tenso y lo follé, follé mirándole a los ojos, como siempre había soñado, el placer era inmenso su polla estaba endurecida sobre su vientre palpitando constantemente, agaché mi cuerpo sobre el suyo y antes de besar sus labios dije: ¡Es cierto, que me estabas esperando! Y nos fundimos en un beso ardiente mientras lo taladraba una y otra y otra vez, yo notaba su verga palpitando cada vez más levanté mi cuerpo y sujetando su polla con mis dos puños cerrados uno sobre el otro doble mi cuerpo chupándole el glande, gimió y mientras yo lo empitonaba continué chupando su polla recibiendo como trofeo su semen esparciéndose dentro de mi boca, él apretó el ano mientras se corría y el placer me llegó hasta la rabadilla llenándole el culo con mi semen mientras continuaba empujando mi verga dentro de él.

Agotados me tumbé sobre él diciendo: ¿Ha sido tan duro? Él lo pensó respondiendo: ¡Sí ha sido duro al principio, a la mitad y ahora también la noto dura pese a llenarme el culo de semen! Yo añadí: ¡Si pasas dos días conmigo, te pasará lo mismo, cuando haces más veces el amor, más ganas tienes! Continué: ¡Por cierto yo había soñado más de una vez con este día y ha sido estupendo, gracias por tú regalo, te quiero y hemos estado 90 minutos!

Nos dimos una rápida ducha y nos vestimos, yo le dejé alguna ropa y bajamos por las escaleras cogidos de la mano sonriendo, Uri al vernos nos llamó, con él estaban Troy, Tony, Vadim, Mike y por supuesto Jordan, Uri cogió la mano de Enzo diciendo: ¡Cariño tenemos que contarte algo, estamos seguros, que tú y Dom sois hermanos de distintas madres, tú madre Sandra antes de morir de cáncer me aseguró que había participado en una de las fiestas de los Corsinati, allí el único semental era Waldeck, que se follaba a todas y a todos, tiempo después supo que estaba encinta y se inventó un romance con un marinero de paso, pero hablando con Jordan, Troy y Tony, estamos seguros que realmente sois hermanos! Enzo miró mi entrepierna y yo la suya y sonreímos diciendo: ¡Creemos saber en qué nos parecemos! Uri continuó: ¿Te gustaría vivir aquí? Enzo dijo: ¿Aquí, aquí o en Barcelona? Uri continuó: ¡Los dos podemos vivir aquí todos juntos, Troy y Tony tienen un trabajo para mí y tú estarías de nuevo con Dom, estaríamos todos juntos y tu padre Wal…Jordan! Enzo dijo: ¡Si tú estás de acuerdo sí! Uri levantó su bebida diciendo: ¡Por un feliz comienzo! Todos levantaron sus bebidas en un brindis, Enzo me abrazó buscando mi boca besándonos.


Unas semanas antes de la fiesta del cumpleaños de Dom, el convento de los monjes en la zona de León quedó arrasado por el fuego y los monjes fueron dispersados por otras comunidades.

Un pequeño artículo en el periódico decía, que habían detenido a un pederasta, que maltrataba a los niños menores, tras su detención, se supo que el hombre en cuestión había sido concejal, se había casado dos veces, del primer matrimonio su hijo mayor con 10 años había desaparecido y en su segundo matrimonio se había terminado tras una paliza a su mujer y a su hijo también.

En prisión corrió la voz, que el hombre había violado a su hijo matándolo a golpes haciéndolo desaparecer bajo el cauce de un rio helado… y en prisión recibió su condena, su cuerpo fue usado para el desahogo de los presos y en el patio siempre aparecía con magulladuras.

FIN.