30 Pecados de una Fea

30 Pecados de una Fea:

Parte 1.

Como todas las mañanas , menos los domingos , salía de mi casa, muy temprano.

Iba a trabajar a la capital.

Caminaba once cuadras por calles de tierras y me paraba en una esquina , bajo la luz de un farol, para esperar al "truchito" , un colectivo viejo que me acercaba hasta la estación de trenes de Ezeiza.

Las once cuadras que hacia a diario las veía muy lindas por su paisaje verde y por la belleza de sus casas .

Pero, realmente temibles por su oscura soledad. Perros fieros , vagabundos y borrachos me salían al paso. Pero, mi fealdad y Dios hacían de protección.

Raras veces, mi marido Alberto me acercaba a la estación , porque dependía de un compañero que trabajaba con el, como conductor de taxi. No siempre era puntual y considerado.

A mi unico hijo Federico no lo quería molestar para que me acompañe , porque no quería ponerlo en un riesgo innecesario. En aquel año ( 2019) tenía 20 años , y a pesar de tener un secundario completo , no encontraba trabajo y no teníamos dinero para que estudie lo que el quería. Informática en una privada.

Yo, Me dedicaba ( hoy tambien) a limpiar casas por hora. Mis labores me llevaban un promedio de seis horas diarias y la paga no era mala, comparada con lo que ganaba mi marido como peón . Ganaba lo suficiente para la comida del día y para una garrafa de gas.

Al final del día regresaba caminando hasta la estación de Constitución, para poder disfrutar la ciudad , su arquitectura, su gente y de sus enormes centros comerciales, Aunque no podría comprarme nada,

era uno de los pocos momentos que me llenaba de alegría y de paz.

Cuando llegaba al barrio sentía el contraste de la pobreza y la mediocridad . Pasaba por el almacén y compraba lo justo para la cena de la noche.

Mi marido, por lo general , llegaba muy cansado , y mi hijo no salía del cuarto por estar jugando con su computadora.

Antes de ponerme a cocinar , me tomaba unos mates con un analgésico, porque me dolía muchos los hombros y las rodillas, producto de mis tareas domésticas. A mis 47 años mi cuerpo me estaba cobrando mis excesos de joven, e inclusive tuve que empezar a usar anteojos permanentemente.

Alberto se acomodaba en el comedor con un vaso de tinto y se ponía a ver el noticiero...Yo me encerraba en la cocina y ponía todo mi empeño para darles de comer nutritivos y deliciosos platos a los hombres de la casa.

Después de la cena me iba a bañar, me embadunaba la cara de cremas anti arrugas y me ponía la ropa de dormir. Un camisón blanco y viejo que me había regalado mi suegra.

Antes de ir a la cama, pasaba a ver a mi hijo para darle el beso de las buenas noche. Para el era un acto rutinario, pero para mi era otro momento lindo del día.

Federico no es hijo de Alberto. Es de un hombre que había amado y quien nos abandono al poco tiempo de nacer. Nunca más lo volví a ver. Y menos que menos me pasó plata para criarlo.

En esos tiempos , frecuentaba la iglesia y ahí fue que conoci a mi futura suegra ( Olga) , quien me presento a mi marido.

Alberto era un tipo reservado y muy tímido , que instantáneamente amo a mi hijo. Tuvimos un noviazgo de 6 meses y me propuso matrimonio.

Junto a mi hijo nos vinimos a vivir en la casita que estamos ahora. Que con tanto esfuerzo levanto mi suegro ( que nunca conocí, porque cuando me instale ya había fallecido) .

Alberto no es una persona muy demostrativo de afecto. Siempre se lo ve preocupado por la política y la economía.

Creo que su estado es producto de la enorme cantidad de tiempo que invierte mirando , o leyendo, las noticias.

Pero, de algo estoy segura , es que mi marido tiene un corazón de oro por todo los cuidados que nos brindo ( y brinda).

En mis deberes como mujer asumo un rol complaciente , más que de complacida. .

Sobre todo los domingos , que nuestro hijo no está, y donde mi marido está descansado ...

Desnudos , Nos sentamos en un sillón para ver a su equipo favorito, y mientras protesta contra los jugadores, Yo me recuesto sobre el y le doy una "chupadita".

............

Una mañana de verano, lunes feriado , salí como siempre de mi casa con rumbo al trabajo.

A mitad de camino me cruce con una pandilla de chicos que venían del baile. ....menos linda , me dijeron de todo.

Por suerte, el hijo de la almacenera , pasó con su viejo auto y se ofreció para llevarme hasta la estación.

Con las piernas temblando y a punto de orinar me, me subí.

El muchacho era muy joven, apenas 23 años. Era muy alto, morocho y de pocas palabras.

Me baje con la ropa llena de cal y cemento. Se dedicaba a la albañilería y utilizaba el auto para trasladar material.

A partir de ese día me esperaba a una cuadra de mi casa para llevarme. (Nunca se lo conté a mi marido para que no pensara mal).

. Después se iba a trabajar a una obra muy cerca de la estación de trenes.

Con el tiempo , Me refiero a un par de meses. , entro en confianza y hablaba hasta por los codos. ...Me contó sobre sus sueños, sus penas , hasta me confesó su complejo de " feo " . Tema que conozco muy bien , porque Yo sufría de lo mismo.

Me era difícil darle esperanza de que algún día hallaría al amor de su vida. Su autoestima era muy baja y sus decepciones eran muchas. Era como romper una pared con las manos.

Cada nuevo viaje , ahora, de ida y vuelta, era tocar el tema , hasta caer en un callejón sin salida.

Para darle ánimo tuve la mala idea de decirle que me gustaba como hombre. .. me miró raro, me tomó del cuello y me dio un beso en la boca.

Me sorprendió , y avergonzada me fui corriendo hasta mi casa como una escolar.

Cuando llegue a la puerta me faltaba el aire. Me escondí detrás de una planta para recobrar el aliento . No quería que mi hijo me viera así: Asustada, enojada , exitada y sufriendo.

Nunca antes me habían robado un beso.

Empecé a salir más temprano para no cruzar lo. Caminaba por otras calles , ....y había dejado de comprar en el almacén de su madre. Medidas necesarias para no enfrentarlo.

El No !, era para mi, una palabra difícil de pronunciar , sobre todo después de que mi madre me llamara para que la visitará y Yo me negara. Al otro día murio ..sin poder despedirla .! .. y todo por un maldito NO!.

Por más que le diera vuelta al asunto , no podía dejar de sentir culpa: ..culpa por ilusionar a un joven , culpa de ver al bueno de mi esposo y culpa por mi deseo de volverlo a ver.. .!

Comprendí que su beso me había gustado, que en vez de vivirlo como un abuso , fue un anhelado halago que creí no merecer .

Me había acostumbrado al rechazo , Hasta mi hijo se avergonzaba de mi frente a sus amigos.

La belleza y la gracia me habían ignorado en esta vida.

Empece a soñar lo despierta, a extrañar lo , a amarlo de una forma platónica. Era más delirio que realidad , pero me gustaba pensar en eso.

Era mi primer pensamiento del día y el último de la noche. ..., sola, levantaba mi calentura y Buscaba en Alberto tener más relaciones , para ...fantasear , ...para vivir lo que no fue.

Por más de un mes estuve indecisa en volverlo a verlo : dudas morales , temor a Dios ..o miedo a ser descubierta ¿? .. y cuando , al fin, junte coraje me fui hasta su casa, y su madre me contó que se había ido a vivir al sur por trabajo.

Esa misma noche fue la primera vez que me masturbe en la ducha. Me imaginé en situación de sometimiento, atada y violada por un hombre que me adoraba . Que , después me llevaría al medio de un bosque como si fuera su mejor tesoro.

Lamente mucho mi mala suerte. Pocas veces un hombre me había robado un beso. No soy de esas mujeres deseadas, más bien del tipo que nadie saca a bailar.

Lo llore a escondida y me resigne.

_ Que me hace una frustración más ? _ . ¡Nada! . . Ya estoy acostumbrada.

No digo que quiera dejar a mi familia. Al contrario es lo que más amo en mi vida. Simplemente quería disfrutar , por un rato, de alguien que gustará de mi. No por Amor, sino , por desesperación.

Trate de seguir con mi vida de siempre ... pero, Al final no pude evitar que me robaron ( 2 veces ) por la madrugada , camino al trabajo .

Los dolores de mis articulaciones seguían ahí. Molestando en cada tarea y recordándome que ya estaba grande...,

Y a fin de mes, a pesar del esfuerzo faraonico, el dinero seguía sin alcanzar.

Había encontrado en la masturbacion una forma de descarga. Aliviada mis tensiones con un simple toque de dedos.

El baño era mi lugar favorito. Pero, también lo hacía en el tren , en la cocina, en la terraza , en las casas donde trabajaba, etc. etc ...o en cualquier otro lugar donde nadie me viera.

Lo hacia hasta 8 veces al día.

Mi entrepierna estaba roja, me ardía y hasta olía mal. Los perros alzados me seguían por doquier.

Recuerdo llegar a casa y sentarme en el bidet por más de 10 minutos y después usaba cremas regenerativas para recomponer la piel.

Empecé a comer con más intensidad y dormía de punta a punta, toda la noche.

Un día miércoles llegue a la casa de un cliente y para mí disgusto me comunican que no necesitaban de mis servicios. Les reclame mi dinero porque no me habían avisado en tiempo y forma. La respuesta fue obvia. Que me busque otro trabajo y me cerraron la puerta en la cara.

Salí a la calle hecha una furia... y camine por varias horas para calmar mis nervios .

Sin ganas de volver a mi casa y sin dinero me dirijo a lo de una amiga ( Josefa).

• Por suerte !!!- estaba sola y cuando me vio me largue a llorar.

Cuando me calme , nos pusimos a tomar mate y le conté todo lo que me estaba pasando ( todo . Todo, inclusive la masturbacion ).

Josefa era una romántica, que vivía con descuido y enamorada de un montón de frases que había leído en una revista .

Después de escucharla por más de una hora, me aburrí y me fui.

Caminando hacia la estación de trenes , pasé por debajo de la autopista.

Y Pude ver una camioneta que repartía comida para un grupo de indigentes que dormían en la calle.

Sus refugios eran de cartón y sobrevivían reciclando basura para el municipio.

Uno de los voluntarios me ofreció un plato de comida . Arroz con pollo.

Estaba tibio y muy rico.

Tome mi bandeja y me senté entre medio de los marginados.

Era gente muy simpática y alegre, a pesar de su desgracia.

Dos muchachos, no más de veinte años eran muy parecidos y amables. Resultó que eran gemelos y que buscaban algo de diversión conmigo.

Después de comer, me llevaron a conocer su dormitorio una caja de cartón, forrada con nylon . Adentro estaba muy oscuro. De colchón usaban una vieja gomapluma con olor a humedad y a testículo sin lavar.

Los hermanos estaban sucios y una multitud de desagradables olores invadieron mi nariz.

El más decidido, sacó su pene y me pidió que se lo chupe!.

Su miembro era largo y flaco como su cuerpo. ..olía a orin y se arqueada hacia arriba.

Lo puse dentro de mi boca y con mi lengua le acaricie el glande. .. !

Su hermano, más reservado, me bajo el pantalón y me penetró por el ano.

No recuerdo cuando tiempo estuvimos así. Pero los orgasmos se sucedieron uno tras otro . Hasta desmayarme.

Cuando desperté era de noche , y los hermanos se habían ido. Nunca supe cuantos se aprovecharon de mi inconsciencia. Lo que si sabía que de mis orificios salía mucho semen. Más de lo que un solo hombre puede dar.

Me lave y me vestí lo más rápido que pude, me tomé un remis para ganar tiempo y al llegar a mi casa , le mentí a mi marido sobre mi tardanza .

Después de cenar me fui a bañar para terminar de borrar los rastros de otros hombre. Desnuda , me mire al espejo, y por algún motivo , me vi más RADIANTE !!!!!!!

Gise_lita69