3 skaters

3 skaters me cogen en una calle solitaria y hacen de mi lo que siempre había soñado...

3 SKATERS

El pasado mes de Agosto tuve que quedarme en casa y no pude ir a disfrutar mis vacaciones a ninguna parte.

Estaba tan aburrido y tan cansado de no tener nada que hacer que no hacía más que pensar en qué podría entretenerme en los días que aún me quedaban por delante. A esto se unía que no tenía ningún dinero para poder salir por las noches de fiesta, que era lo que realmente me hubiese gustado hacer.

La Banda Sonora de Aquellos días era el "Summer in the city" de Joe Cocker, que no dejaba de rondarme por la cabeza a cada momento.

Tenía que encontrar algo que me sacara de aquel tedio insoportable.

Una de las noches más calurosas de aquel mes de Agosto, estar en casa se hizo insoportable y fue entonces cuando tuve una feliz idea. Tomé mi bicicleta y salí a dar un paseo. Normalmente la utilizaba para desplazarme por la ciudad, pero no para pasear simplemente, pero se convirtió en la única vía de escape para aquella noche.

Por algún extraño motivo, no conduje mi bici por calles principales. Más bien todo lo contrario. Fui por lugares inhóspitos, oscuros, poco seguros, lugares en los que normalmente no están las personas más recomendables.

En una ocasión pasé por una calle en muy oscura, ya que casi todas sus farolas estaban destrozadas. Era un lugar en el que la gente joven solía reunirse los fines de semana a beber y divertirse. Sin embargo, aquel día era lunes, y bastante tarde, por lo que no había casi nadie por allí.

Al llegar casi al final de la callé, dónde estaba más oscuro pude escuchar unas grandes risas que me hicieron acelerar el pedaleo. Pasé entonces, delante de tres skaters que estaban sentados en un banco fumando porros y bebiendo alcohol.

Se notaba que estaban muy alegres por las fuertes risas y los gritos que daban.

Pasé tan rápido junto a ellos que no pude fijarme bien en nada, tan solo ví las tablas de skate y pude comprobar que, al menos, uno de estos chicos era negro.

Solo de pensar en ellos ya me sentí excitado. Hmmm tres jóvenes skaters borrachos en la noche.....

El sentido común me pedía que me fuese de aquel lugar, pero un sentimiento más carnal me obligaba a volver a pasar junto a ellos. Solo con verles ya disfrutaba. Fue entonces cuando cambié el sentido y volví a pasar por el mismo lugar pero hacia el lado contrario.

En esta ocasión, los chicos ya vieron que yo volvería a pasar junto a ellos. De hecho yo iba más despacio para poder observarlos bien.

Sin embargo, al pasar a su lado tuve que volver a acelerar el pedaleo porque me lanzaron una botella vacía y algunas basuras que tenían cerca.

También me insultaron y me gritaban palabras bastante soeces.

Ya había podido comprobar que los otros dos chicos también eran de razas que me ponían muy caliente... Uno de ellos era oriental y el otro parecía árabe.

Era el momento de marcharse. Yo lo sabía.

Sin embargo...

Esperé unos minutos para pasar de nuevo cuando estuviesen desprevenidos y dando la vuelta a la manzana volví a pasar junto a ellos.

Pero no estaban distraídos. En esta ocasión, dos de ellos se situaron en mi camino evitando que pudiese pasar con la bicicleta y tuve que detenerme.

En aquel momento mi cuerpo estaba invadido por sensaciones contradictorias. Por una parte deseaba que hiciesen conmigo todo tipo de locuras, pero por otro lado, no sabía nada de ellos y me asustaba si lo que me pensaban hacer no era lo que yo esperaba.

El chico asiático parecía el más joven del grupo. Posiblemente por su cara de niño. Llevaba unos grandes baggy jeans muy gastados y usados; una camiseta sin mangas y una gorra. Lo mejor estaba en sus pies. Unas gigantescas y fabulosas OSIRIS D3 completamente viejas y usadas. Realmente deliciosas para mi boca. Pensé.

El chico negro me ponía también muy caliente. Era un joven muy musculado, no demasiado alto, y tenía en su cabeza un curioso dibujo rapado. Después pude comprobar que era el logo de NIKE. Tenía un piercing en la ceja derecha y su estilo de ropa era diferente al del asiático.

Llevaba una inmensa camiseta de tirantes de los Lakers y unos pantalones, también de basket, aunque de otro equipo distinto. Eran cortos pero la talla que usaba el chico era tan grande que casi le llegaban hasta los pies. Y era ahí, donde precisamente vi otro par de asombrosas zapas que me hicieron tragar saliva al pensar que alguna vez podrían estar pisándome. Se trataba de unas antiguas CONVERSE ALL STARS blancas. No eran las de lona, eran de piel. Y estaban demasiado sucias como para reconocer que su color original fue el blanco.

Por último, el árabe. Era el más delgado de los tres pero estaba en buena forma. Tenía unos profundos ojos oscuros y unos labios muy carnosos. Su piel morena era realmente atractiva.

Vestía unos pantalones piratas de tela muy fina que permitía que por la parte de delante se marcase su prominente paquete, que dejaba intuir un gran arma debajo. Estaban caídos y junto con la camiseta tan corta que llevaba arriba dejaban asomar sus calzones CALVIN KLEIN. Las zapas que llevaba este tío eran también otras de mis favoritas. En este caso eran unas fantásticas NIKE SHOX NZ BLANCO Y ORO. Indudablemente eran las más sucias y asquerosas de los tres pares. Por ello, se convirtieron en mis preferidas de aquella noche.

Yo pude ver todo esto en tan solo unos segundos. El tiempo que ellos emplearon en decidir que hacer conmigo. Y pronto empezó la diversión para el grupo de skaters. Aunque ellos no sabían que yo también iba a disfrutar con ellos.

El chico árabe me empujó y dijo: "hace mucho que no subo en bicicleta". Y apartándome de ella la tomó y comenzó a pedalear calle arriba y calle abajo.

Mientras, los otros dos tíos me empezaron a empujar, cada vez lo hacían más fuerte, hasta que consiguieron hacerme caer al suelo. Fue en ese momento cuando comenzaron a darme patadas. Yo estaba muy excitado. Cada vez más y más. Sintiendo aquellas CONVERSE ALL STARS y aquellas OSIRIS D3 golpeando mi cuerpo indefenso. Me sentía tan felíz.......

No solo me patearon. También comenzaron a pisarme, subiendo sobre mi cuerpo y poniendo sus zapas sobre mi cara. Sobre mi boca. Yo no pude contenerme y sacando mi lengua comencé a lamerlas decididamente.

Era como hacer realidad una de esas fantasías con las que tantas veces había soñado.

Cuando vieron mi entrega y las ganas con las que lamía sus zapas, se dieron cuenta de que era algo que me gustaba hacer y entonces comenzaron a escupir sobre ellas para que lo lamiese, mientras gritaban entre risas "lámelas", "déjalas bien limpias", "así nos gusta que lo hagas"......

La sensación de temor que había experimentado anteriormente se había transformado ahora en placer. Una mezcla de placer y dolor muy agradable.

Los dos muchachos hicieron de mi su alfombra y su esclavo limpiador de zapas. Yo los adoraba y adoraba aquella situación.

Mientras tanto el árabe continuaba con la bicicleta por toda la calle.

Entonces fue cuando la situación pasó a otros términos. El chico negro abrió su pantalón y sacó un gigantesco trozo de carne, que no dudó en introducir en mi boca. Estaba tan sorprendido por lo inesperado de la situación que mi primer impulso fue sacarla de mi boca. Pero entonces el asiático me sujetó los brazos y empujó mi cabeza contra aquella negra y dura polla.

La chupé como si me fuese la vida en ello. Era realmente deliciosa. Aquel chico y su verga tenían un olor tan particular y delicioso que ya notaba como mi polla no cabía dentro de mi pantalón.

El chico árabe llegó y dejó la bici en el suelo sentándose después en el banco sobre el que estaban las tablas de skate y comenzó a pajearse mientras observaba como yo le comía la polla a su amigo. El chico asiático dejó de sujetarme la cabeza y la tomó el negro, quien la sacudió rítmicamente follandome la boca tan fuertemente, que aquella tremenda polla casi me asfixia.

El asiático se sentó junto al árabe y comenzaron a liarse un porro nuevamente.

Cuando ellos estaban fumando el chico negro terminó su trabajo y antes de correrse sobre mi cara escupió sobre su capullo varias veces y me golpeó con su polla la cara, restregando su saliva por toda ella. Una vez que se corrió en mi cara toda mi boca, mis ojos, mi nariz estaban llenos de su cálida y cremosa leche. Entonces él se dedicó a restregar todos esos líquidos por mi cara, como si de una crema hidratante se tratara.

Gritó hacia los chicos del banco: "Muhammad, shing". Es vuestro turno.

Fue Muhammad, el chico árabe, el que saltó rápidamente, y antes de que yo pudiese reaccionar ya había puesto su verga en mi boca.

No era tan desmesurada como la polla del negro pero era ancha y estaba un poco torcida. Y por supuesto, su sabor era diferente; y delicioso.

Siguió y siguió hasta estar a punto de correrse. Aunque esto lo hizo sobre sus NIKE SHOX NZ BLANCAS Y ORO. Tan sucias. Tan destrozadas. Y ahora tan atrayentes para una lengua deseosa de limpiarlas en profundidad.

Después de un rato trabajando con mi lengua, que ya estaba muy agotada de tanta acción, el chico se marchó de nuevo hacia el banco dándome una patada que me hizo rodar por el suelo nuevamente.

Me encantó.

Era una pena.

Porque el postre, lo mejor de la cena, es decir el asiático iba a encontrarme tan cansado que apenas podría hacerle disfrutar. Mi lengua también estaba tan cansada de aquel arduo trabajo que no sabía si podría estar a la altura de sus deseos.

Entonces el chico árabe quiso liarse otro porro, pero descubrió que no les quedaba hierba se enfadó y le propuso al chico negro el ir a comprar más marihuana para lo que usaron la bicicleta.

Nos quedamos solos el asiático y yo. Fue entonces cuando él se acercó y comenzó a besarme en la boca y a lamer los restos de semen del chico negro. Cuando los tenía en su lengua los arrastraba hasta mi boca y los introducía en ella con un húmedo beso. Yo me quedé atónito. Porque esta actitud no era propia de un chico hetero, y yo estaba seguro de que los tres lo eran.

Entonces le pregunté y él me respondió que era gay. " ¿y tus amigos?".

"no, ellos no lo son", contestó.

"¿y saben que tu lo eres?", pregunté yo.

En aquel momento ya me explicó que ellos si lo sabían y que ellos tan solo estaban interesados en follarselo a él y en las zapas. Aunque ambos tenían novias.

Después de decirme esto hicimos un 69 en el que nos lamimos mutuamente nuestras zapas y después nuestras pollas. Luego él asiático lamió mi ojete hasta dilatarlo y lubricarlo antes de penetrarme produciéndome un gran placer.

Yo iba a hacer lo mismo, pero cuando estaba a punto de introducir mi verga en él llegaron los otros chicos voceando. Por lo que tuve que parar porque no sabía como iban a reaccionar si me veían follandome a su compañero.

De este modo, ellos se marcharon tirando mi bicicleta y escupiéndome en la boca antes de marcharse.

Pensé que aquella había sido una noche irrepetible pero no suponía que el chico asiático, al que yo le había dado mi número de móvil me llamaría al poco tiempo para tener nuevas sesiones de trampling con ellos tres.

3 SKATERS

Last August I had to remain in house and could not be going to enjoy my vacations nowhere.

I was so boring and so tired of not having anything to do that I was not doing any more that to think in what I might amuse in the days that yet I still had ahead. To this one was joining that I hadn´t any money to be able to go out in the nights of party, which was what really I had liked to do.

The O.S.T. from my live in that days was the "SUMMER IN THE CITY" JOE COCKER´s which didn´t stopped court me for the head at every moment. I had to find something that extracted me from that umbearable world-weariness.

One of the warmest night of that August, be at home made to umbearable and was at the time I had a good idea. I took my bicycle and went out to give a walk.

I thought that was the only way to exit that night.

I don´t wich extrange motive didn´t make me ride my bicycle from principal streets. Rather everything opposites. I was for inhospitable, dark, slightly sure places, places in which normally the most advisable persons are not.

One time I was for a street in very dark cause almost all the lampost had been ruined. It was a place where the younger people used meet at weekend for drinking and have fun. But that day was monday and very late, coz there were no people.

Near reaching the final of that street, where there was the darkest zone I could ear some big laughs and that made me acceletare I pedal. I passed then, in front of thres skaters that were sat in a bank smoking joints and drinking alcohol. I could realize that they were very fun coz of their big laughs and their shouts.

I was ridding so quickly next them that I couldn´t notice in detals, just could see their skateboards and I realized that, at least, one of them was a black boy.

Just thinking in them I felt excited. HMMMM. Three younger skaters drunks in the night......

Brain asked myself to go away of that place, but a carnal full feeling was forcing me to pass together them again.

Just seeing them I was enjoing. That time I decide change my way and I turned to pass that same place again.

Then, the guys noticed that I´d pass near them, and I again I had to accelerate ride cause they began to throw an empty bottle and some garbages they had near.

Also they insulted me and vile enough words were shouting me.

In that moment I could realize that the other two boys were from races that made me very warm.... One of them was an asian guy and the other seemed tobe arabic.

It was the moment to go. I knew It.

Nevertheless....

I wait for a few minutes to pass again when they were unprepared and riding around the apple I returned to pass toguether with them.

But they were not absent-minded. In that moment, two of them placed in my way preventing I could continue cycling, so I had to stop.

In that moment my body was invaded by a contradictory feeling. On one hand I was wishing they did with me all kinds of madnesses, but on the other hand, I did not know anything of them, so I was scaring if what they were thinking to do was not for what I was waiting.

The asian boy seemed to be the youngest of the group. Possibly caused his babyface he was in a baggys very used and worn-out jeans, a T-shirt withous sleeves and a cap. The better thing was in his feet. A pair of gigantic and fabulous OSIRIS D-3 completely old and worm. Really delicious for my mouth. I thought.

The black boy made me also very warm. He was a muscled young boy, not too highly, and he had in his head a rare cut drawing. After I could verify that it was a NIKE´s logo. He had a piercing in his right eyebrow and his dressing style was different from the asian guy.

He wore an inmense vest of suspender of the Lakers and a basket shorts, although of a different basket team. The trousers were short but the heigh that the boy wore was so big almost they reached his feet. And it was there where I could see another pair of amazing sneakers that made me swallow saliva just thinking the could be anytime treading on me. They were an ancient white CONVERSE ALL STARS. They were not CHUCK, they seemed them, but were leather. And they were too dirty to let somebody admit that the colour of them was white anytime.

Finally, the arab boy. He was the thinest of the three but he got a fitted body. He had a deep proof dark eyes and very beefy lips. His dark skin was really attractive.

He wore pirates trousers of very thin fabric wich allowed he marked on the ahead part his prominent package, wich advised of the big weapon below he got. That trousers were fallen and toguether with his short T-shirt were stopping put his CALVIN KLEIN interior. This guy wore one of my favourites sneakers. In this case they were a fantastic NIKE SHOX NZ WHITE AND GOLD. Undoubtedly they were the dirtyest and disgusting of the three pairs. So they turned my preferred ones of that night.

I could see that just in a few seconds. The time that they used in deciding what will they do with me. And soon, the fun time began for the skaters group. Although they didn´t know it was that I´d enjoy toguether them too.

Then the arab boy pulled me and told: " I had been too much time without riding bycicle", and sepparated of this he took it and began to pedal across the street.

While, the other two boys started to pull me, stronger each time, till they made me fall on the floor. It was in that time when they began to kick me. I was very excited. Every time more and more. Feeling that CONVERSE ALL STARS and those OSIRIS D3 strikking my defenseless body. I felt so happy....

Not only they stamped on me. Also they began to tread on me, rising on my body and putting their sneakers on my face. On my mouth. I could not control and extracting my tongue I began to licked them determined. It was like real made one of these fantasies of which so often I had dreamed.

When they saw my desire and how I licked theyr sneakers, they realized that it was a thing I loved to do so they began to spit on them i order to be licked by myself, while they were laugthing and shoutin me "lick them", " clean them", " this is the way we like you do it"....

The sensation of dread i had experimented previously had transformed now in pleasure. A mixing of pleasure and very agreeable pain.

The two boys made of myself their doormat and their sneaker´s cleaner slave. And I loved that situation.

Meanwhile, the arab boy continued riding the bycicle across the street.

Then was when the situation changed. The black boy opened his trouser and

Entonces fue cuando la situación pasó a otros términos. El chico negro abrió su pantalón y sacó un gigantesco trozo de carne, que no dudó en introducir en mi boca. Estaba tan sorprendido por lo inesperado de la situación que mi primer impulso fue sacarla de mi boca. Pero entonces el asiático me sujetó los brazos y empujó mi cabeza contra aquella negra y dura polla.

La chupé como si me fuese la vida en ello. Era realmente deliciosa. Aquel chico y su verga tenían un olor tan particular y delicioso que ya notaba como mi polla no cabía dentro de mi pantalón.

El chico árabe llegó y dejó la bici en el suelo sentándose después en el banco sobre el que estaban las tablas de skate y comenzó a pajearse mientras observaba como yo le comía la polla a su amigo. El chico asiático dejó de sujetarme la cabeza y la tomó el negro, quien la sacudió rítmicamente follandome la boca tan fuertemente, que aquella tremenda polla casi me asfixia.

El asiático se sentó junto al árabe y comenzaron a liarse un porro nuevamente.

Cuando ellos estaban fumando el chico negro terminó su trabajo y antes de correrse sobre mi cara escupió sobre su capullo varias veces y me golpeó con su polla la cara, restregando su saliva por toda ella. Una vez que se corrió en mi cara toda mi boca, mis ojos, mi nariz estaban llenos de su cálida y cremosa leche. Entonces él se dedicó a restregar todos esos líquidos por mi cara, como si de una crema hidratante se tratara.

Gritó hacia los chicos del banco: "Muhammad, shing". Es vuestro turno.

Fue Muhammad, el chico árabe, el que saltó rápidamente, y antes de que yo pudiese reaccionar ya había puesto su verga en mi boca.

No era tan desmesurada como la polla del negro pero era ancha y estaba un poco torcida. Y por supuesto, su sabor era diferente; y delicioso.

Siguió y siguió hasta estar a punto de correrse. Aunque esto lo hizo sobre sus NIKE SHOX NZ BLANCAS Y ORO. Tan sucias. Tan destrozadas. Y ahora tan atrayentes para una lengua deseosa de limpiarlas en profundidad.

Después de un rato trabajando con mi lengua, que ya estaba muy agotada de tanta acción, el chico se marchó de nuevo hacia el banco dándome una patada que me hizo rodar por el suelo nuevamente.

Me encantó.

Era una pena.

Porque el postre, lo mejor de la cena, es decir el asiático iba a encontrarme tan cansado que apenas podría hacerle disfrutar. Mi lengua también estaba tan cansada de aquel arduo trabajo que no sabía si podría estar a la altura de sus deseos.