3 Mujeres. Hace 21 años. Parte 4

Con Lorena, la hermana de Maria y tia de la pequeña Ilda. (Parte 1).

Con Lorena, la hermana de Maria y tia de la pequeña Ilda. (Parte 1).

... (-Bueno cielo, Lorena ahora se está duchando y... ¡Anda!... ¡Pues no!... ¡Jejeje!)...

Parece que ya ha terminado, pues detras de tí la tienes... ¡Hola Lore!... Entra, entra que te presento... Bueno Lore, pues por fín, aquí lo tienes... El es Luismi, mi precioso y amado Luismi y ella es, Lorena, mi preciosa hermana menor-. Dijo Maria presentandonos.

Lorena pasó junto a mí, me beso en la mejilla y se presentó acariciandome la espalda. Hola Luismi, como ha dicho mí hermana, yo soy Lorena y me alegro mucho de conocerte al fin... ¡Ufffffff!... El famoso amorcito y amante de mí hermanita mayor-. Dijo Lorena mirandome a los ojos.

Lorena, se vé, venia muy caliente y al ver como su hermana mayor comenzaba de nuevo a revolcarse por el sofa abrazada a su hijita, se quitó de un tirón la minuscula toalla arrojandola al suelo, quedando vestida tan solo con unos taconazos rojos de aguja. Lorena tenia las tetas grandes y redondas coronadas por unos enormes pezones oscuros y duros como piedras y un precioso gran culo, que coqueta, me mostró con un guiño.

Lore se acercó al sofá y sin mas empezó a lamerle las tetas, dandole un enorme chupón en la derecha, a su hermana. Ví que le encantaba besarselas, se notaba que la calentaba, mientras que con la otra mano habia empezado a acariciar el bonito culo de su sobrinita. Maria gemía, gemia y gemia mordiendose los labios.

-Me voy a correr Lore... Que bueno... ¡Que bueno Lore!... Dame, dame Lore... Chupa... ¡Chúpamelas!... ¡Chúpamelas Lore!... ¡Mmmmmmmmmm!... ¡Lamemelaaaass!... ¡Si!... ¡Que gusto cariño!... ¡Uffffffffff!- Gemia enloquecida Maria, a la vez que elevaba las piernas para que entre su hijita y su hermana menor la empezaran a comer el coñito.

Ilda y Lore, con sus besos, lamidas y caricias la hicieron llegar en un largo y deseado orgasmo. Con esto la situación se empezo a calentar mucho, hasta que por fín, las tres dispusieron que habia llegado ya el momento de que yo tambien participara de la "pequeña", fiesta familiar.

Ilda, mientras Lore seguía haciendo acabar a su hermana, se acercó hasta donde yo estaba y tomandome con su manita por el miembro, me lo empezo a acariciar. Me lo besó, lo lamió, lo pajeó con ganas y me la chupó viciosa tragandosela toda entera con furor, atragantandose, tosiendo, gimiendo y ensalivando en exceso, escurriendose sus babas por su carita de angel. Fué una tremenda mamada que me excitó muchísimo haciendome sentir que llegaba, pero ahí paró, la niña no permitío que acabará en su boca.

Cojiendome por la verga, me llevó hasta el sillón donde Lorena había acostado boca abajo a su hermana, que seguía gozando y gritando de placer con el culo en pompa, un culo grande y redondo, de glúteos duros y bien formados. ¡Ufffff!... Una autentica preciosidad de culo.

Maria me miró otra vez, esta vez lo hizo hacia mi pene, que totalmente erecto ya, lo tenia enorme y ahí me dijo...

-Cojetela por el culo Luismi. Cojeselo, no la hagas esperar más-.

Lorena no se lo esperó, la volteé poniendola a cuatro patas y le clavé de un solo empujón todo mí garrote dentro de su culo. La pobre grito bestialmente de dolor, sintiendo como la desgarraba las entrañas. Temblando empezando a llorar mordiendose el labio inferior hasta hacerselo sangrar mientras que yo, seguia y seguia bombeandole aquel duro trozo de carne dentro de su ano, que roto ya, le sangraba escurriendo finos hilos rojos por entre sus muslos, mientras ella, a pesar de todo el dolor que estaba sufriendo mientras la desvirgava el culo, en ningún momento dijo nada.

Y entonces ocurrió, no aguantando más, la muchacha empezó a gritar y gritar en medio de un llanto desconsolante, mientras me rogaba que por favor se la sacara, que la estaba matando. Pero yo no podia parar y se lo enterraba hasta el fondo todavía más y más y más fuerte, mientras con mi mano derecha le retorcia los pezones tirando de ellos sin piedad, con rabia y autentica saña.

Entonces y ante mí sorpresa, Lorena, perdió el conocimiento y se desmayó...

CONTINUARA.