(3) Me encanta ser PUTA.
Me propuse coger con tres hombres diferentes el mismo día y lo logré.
(3) Me encanta ser PUTA.
Y así pasaron los días, no sabía si reclamarle a mi mamá, o por lo menos hablar con ella del por qué me había fisgoneado con Hugo, pero una noticia mayor altero nuestra rutina, resulta que Ignacio, mi padrastro, se lo había llevado la policía por abusar de una niña vecina y su papá había puesto la denuncia, mi pobre madre sufrió la vergüenza de ver como todo el vecindario fue testigo de cómo sacaron esposado a su marido, no tuve más que consolarla y decirle que se olvidara de ese viejo violador.
MAMÁ: A ti te hizo lo mismo ¿Verdad?... eso era lo que nunca te atreviste a contarme… yo lo sospechaba, pero no quería creerlo… perdóname, hija, no he sido una buena madre para ti.
YO: No llores, mamá, eso ya pasó… tú estabas muy ocupada tratando de mantenernos… y por eso nos dejabas solos en la casa… ahora vamos a empezar de cero… y sí has sido una buena madre, mira cómo te has superado, de sirvienta pasaste a tener tu propia estética.
Como un pacto secreto, nos dispusimos nunca hablar más del asunto, la gente no dejaba de vernos como animales raros, en medio de la muchedumbre reconocí a mi cuñado, Pablo, con tanto alboroto se me había olvidado que había quedado de coger con él, mi mamá estaba deshecha, no podía priorizar mis ganas de coger, a atender a mi mamá, pero ella dijo que prefería irse a la estética a quedarse llorando en la casa, al rato la gente desapareció y Pablo, entró a mi casa sin ser visto, lo puse al tanto de todo mientras nos desnudábamos.
CUÑADO: ¿Entonces don Nacho también te violó?
YO: No, solo abusó de mí.
CUÑADO: ¿Qué te hacía?
YO: ¡¿De verdad quieres que te cuente?!
CUÑADO: Sí, no sé… me da mucho morbo que me cuentes siendo una niña… pero si no quieres, lo entiendo… ¿Te dolió la primera vez que te cogió?
YO: Nunca me la metió, solo me tocaba y… ¿viniste a hablar de ese viejo mierda o a coger?
CUÑADO: A coger… pero me encantaría que me contaras mientras te chupo tu cuquita… eso me calentaría mucho…
YO: No sé… solo de recordarlo me da asco… pero… pero al mismo tiempo lo quiero hacer… está bien… chúpame la papaya mientras te cuento.
CUÑADO: Que rica la tienes, parece de niña, bien cerradita y sin pelos.
YO: Pues… no sé ni cómo empezar… ay… que rica lengua… no me lamas el clítoris con la punta de la lengua, me gusta más cuando lo haces con toda la lengua… uf… así, cuñadito rico… así, papi… hum… pues ese viejo mierda empezó tocándome la cuca… ay que rico me chupas la raja… luego… ay… me enseñó su verga… así, más, más… uf… que rico me metes los dedos… después me la pasó por toda mi panochita… ay, que rico…
CUÑADO: ¿Cuántos años tenías?
YO: Ay, así, Pablo… que rico me chupas la pepa… tenía… ay, sí… tenía nueve años… así… me encanta que me dedées mientras me comes la cuca… así… no puedo dejar de moverme… méteme otro dedo, papi… ay, que rico siento… él me enseñó a mamar verga… así, que rico… también fue el primero en mamarme mi cuquita y mi culito… ay, papi… más, así…
CUÑADO: ¿Y no te gustaba que abusara de ti?
YO: Eso es lo peor… ay, sí… más… que rica lengua tienes… sí me gustaba que me tocara… sentía rico cuando ponía la cabeza de su verga entre mis labios… yo me mojaba toda… sentía rico, pero no sabía por qué… así… ay, que rico siento tu dedo metido en el culo, así, métemelo todo… ay… así, más, más… no sabía que me estaba abusando… pero me gustaba que me tocara y me diera su verga a mamar…
CUÑADO: No sabes lo caliente que me pones al contarme todo lo que te hacía tu padrastro mientras te mamo la cuchara… ¿Hasta qué edad dejó de tocarte?
YO: Hasta que me casé… ay, mi vida, que rico me mamas la cuchufleta… sigue… no pares por favor… ay… sí… agh… de eso hace dos años… ahora los dos hacemos como si no pasó… casi ni le hablo… ay… me vas a hacer venir… sigue… dame más duro… así, que rico… más… más fuerte… me vengo Paaaaablooooooooooooooooooooooooooo… que rico me vine… mira, tienes la boca toda mojada con mis jugos.
CUÑADO: ¿Por qué ves tanto el reloj?
YO: Es que mi mamá quedó en venir a almorzar… pero aún nos queda una hora.
CUÑADO: Ven, mámame la verga… que rica boquita, la tienes muy caliente… que rico mamas… ¿Tú crees que por causa de don Nacho eres infiel?
YO: Me imagino que sí… y lo peor de todo es que es con mi propio cuñado. ¡CONTIGO!
CUÑADO: Que buena mamona me resultaste, te la tragas toda, que rico… ¿Le has sido infiel a Luis otras veces?
YO: ¡No! ¿Me crees una puta?... pues… la verdad… sí… a ti no te lo puedo negar… me viste entrar a un hotel con Jorge.
CUÑADO: …es que cuando una niña es abusada luego se vuelve puta… sigue mamando… así… que rico mueves la lengua en la cabeza de mi verga… así, Bitty… que rico me chupas… siento que naciste para mamar vergas… así, toda, métetela toda… más… quédate ahí… con la trompa atascada de verga…
YO: Ay… ya me sacaste las lágrimas… ven cógeme que estoy muy caliente.
CUÑADO: Ponte de perra… así… me encanta meterte la verga y verte ese culito tan rico que tienes… ¿Solo has conocido tres vergas?
YO: Sí, la de tu hermano, que fue quien me desvirgó, la de Jorge y la tuya.
CUÑADO: ¿Y cuál te gusta más?
YO: Te digo, pero no te vayas a enojar… ay… métemela toda, Pablo… que rico es coger… es lo mejor del mundo… la mejor verga de las tres es la de tu hermano, la tiene más gruesa y más larga que la de ustedes dos… ¿Por qué me la sacas?... te advertí que no te fueras a enojar… métemela, por favor… no me puedes dejar así… mira, para contentarte, te cuento que tu hermano se va a los cinco minutos, siempre me deja con ganas, en cambio tú, tienes mucho aguante y me das verga sin compasión… la pregunta que deberías hacerme es: ¿Qué verga me da más placer? Y es la tuya, papito, ven cógeme, por favor…
CUÑADO: … ¿y… Jorge… cómo la tiene?
YO: Deja de hablar de otras vergas y cógeme, que manía tienen los hombre por saber cómo son las vergas de otros amantes… a una de mujer no se nos ocurre preguntar que forma tiene la cuca de otra… ay… clávamela con rabia… eso papi, hazme saber quién manda aquí… eso… que rica nalgada me diste, dame más fuerte… ay, cabrón… más, dame más, cógeme, nalguéame, pégame… pero no me la saques…
CUÑADO: Eres una puta cabrona… mueve el culo… así, puta… te encanta la verga ¿Verdad?... te encanta hacer cornudo a mi hermano… y conmigo… eres toda una puta…
YO: Sí, papito, castígame por puta… dame verga… pégame, cabrón… déjame las nalgas coloradas… así, Pablo… eso, mi amor… eres todo un macho… mi macho… sométeme… ay, papi… ay… me voy a venir otra vez… que rico, asíiiiiiiiiiiiii…ayyyyyyyyyy… yaaaaaaaaaaaaaaaaaaa… que bárbaro me hiciste venir dos veces… que rico… uf… te cuento que con nadie me venía, pero contigo lo logré y por partida doble, eres todo un semental… es hora de que te vayas, mi mamá no tarda en venir.
Me percaté de dos cosas, la primera era que ahora yo usaba a los hombres sin preocuparme de sus orgasmos, el pobre Pablo se tendría que conformar con hacerse una paja… y la segunda es que, si quieres tener a un hombre por unas horas, tócale la verga… pero si lo quieres tener más tiempo… tócale el orgullo, eso de “semental” lo ha de haber hecho sentir como el mejor amante del mundo… Ay, hombres, pobrecitos… me di cuenta que ya iba a ser la hora de mi tercera verga, así que me bañé y me quedé envuelta en mi toalla ¿Para qué me iba a vestir? Si ya me iban a empelotar otra vez.
Hugo llegó puntual como perro caliente, al nada más entrar a mi casa, agarró una orilla de la toalla y me hizo girar como trompo, dejándome desnuda frente a él, era la segunda vez que iba a coger con Hugo y me sentía muy caliente ¿Qué me estaba pasando? Acababa de tener una verga metida en mi sapo y seguía caliente…
HUGO: Que rica estás.
YO: Sé más original, eso dicen todos.
HUGO: ¿Cuántos te han visto desnuda?
YO: Dos, mi marido y tú, pero en todos los relatos que leo, los hombres les dicen a sus amantes “Que rica estás”
HUGO: Seguro que, si se lo digo a tu mamá, no sé enojaría como tú.
YO: Pues díselo, anda… ¿Tú crees que me gusta que me cojas pensando en mi mamá?
HUGO: Perdóname, Bitty, te prometo que no lo vuelvo a hacer.
YO: ¡Bruto! Me encanta que me cojas pensando que soy mi mamá… no sé… es una manera… es… es como sentirme usada… es como si fuera tu puta… me encanta ser PUTA…
HUGO: ¿De verdad? Me dejarías que te coja pensando en tu mamá… que rico… hoy vas a ser Nilda… no lo puedo creer… venga doña NILDA, mámeme la verga.
YO: Ay, no, Hugo… no me digas esas cosas… mira que estás muy chico para mí… no Hugo, por favor, respétame, mira que soy una señora y tu un escuintle.
HUGO: Pero así no me gusta el juego, se trata de que tú me la mames como si fueras tu mamá.
YO: …te quiero contar algo… pero… no sé… ustedes los hombres son muy habladores.
HUGO: Yo no quiero que me cuentes nada, te quiero culear como si fueras tu mamá.
YO: ¡Vi a Jaime coger con mi mamá!
HUGO: … ¡No te lo puedo creer!...
YO: Sí, te acuerdas que me llamaste y te dije que estaba con mi mamá… pues era cierto, estaba espiándola coger con Jaime, por eso ya no pudimos coger…
HUGO: Que rico, cuéntame ¿Cómo se ve desnuda? ¿Se depila o no? ¿Cómo tiene las tetas? ¿Cómo se le ven las nalgas desnudas?
YO: ¡Ya, cállate! Te lo voy a contar todo, pero eso no es lo peor, ¡ellos nos vieron cogiendo a nosotros dos!
HUGO: ¡Puta!... entonces tu mamá ya sabe…
YO: Que te la quieres coger… sí, sí lo sabe… pero ¿Eso te preocupa? Nos vio cogiendo, Hugo, para mí eso sí que me da vergüenza… no que ella sepa que te la quieres coger… por eso te hablaba así… así habla mi mamá cuando coge, dice que no a todo y luego se pone flojita.
HUGO: …ahora ya sé cómo entrarle.
YO: No, animal, ella no sabe que los vi. Mejor vete, ya se me pasaron las ganas de coger.
HUGO: No, por favor, dime que quieres que haga, estoy muy caliente, mira cómo tengo la pija de dura.
YO: Pues, pajéate o haz lo que quieras, pero vete.
HUGO: No, no me vas a dejar así, ven te voy a chimar.
YO: ¡No! ¡Ya te dije que no quiero!... ¡Suéltame, vete a la mierda!... ¡Te dije que no, cabrón!... ¡Quítame las manos del culo!... ay… no…
HUGO: Pues será por las buenas o por las malas… déjate, puta de mierda…
YO: ¡No! ¡Suéltame las manos! ¿Qué? ¿Me vas a violar? Suéltame, te digo, hijo de puta.
HUGO: Así me pones más caliente… abre las piernas… ay, no me muerdas, cabrona… abre las piernas o te pego… así, putita… ahora prepárate porque te voy a ensartar la verga… así mamita, trágatela toda… no, que no… así…
YO: Eres una mierda, solo porque eres más fuerte te aprovechas de mí, suéltame las manos, cabrón… ay… no… no sigas por favor… no… hum… ay… no me la zampes toda porque me duele… ay… no estoy lubricada… déjame o le cuento a Luis que me violaste…
HUGO: Dile… y yo le cuento que te acuestas con su hermano…
YO: ¡Eso es mentira!
HUGO: Lo vi entrar a tu casa, puta de mierda, me enteré lo que le pasó a don Nacho y vine a ver si te podía ayudar en algo, pero no, la muy puta metió a su cuñado para coger.
YO: ¡Dame más, hijo de puta! ¡Méteme toda tu verga! ¡Haz conmigo lo que quieras! Ay… sí… dame más… dame toda tu verga… culéame rico… así, cabrón… me tienes hirviendo… así… nalguéame… hálame el cabello… duro, joto, de mierda… abofetéame… más duro, maricón… así… sácame sangre si quieres… así… viólame… úsame, pedazo de mierda… ya… creo que me vengo… ay… que rico… ya… Huuugoooooooooooooooooooo… ay… uf… que polvo…
HUGO: ¿Qué te pasó?
YO: No sé… es como si me gustara que me violaran… pero no conocía esta sensación… fue muy rico… cuando me amenazaste se me encendieron todas las hormonas… y cuando me nalgueaste sentí muy rico… pero cuando me pegaste en la cara y me halaste del cabello sentí que me venía como una puta callejera… no sé qué me pasó… pero fue tan rico.
HUGO: A mí también me gustó tratarte como si fueras mi puta… ahora mámame la verga que quiero terminar en tu boca.
YO: No, Hugo, no me puedes pedir eso… yo soy una señora decente… qué pensaría mi hija si nos viera… no, por favor… no me obligues a chuparte el pene… pídeme otra cosa y lo haré… pero eso no…
HUGO: Tráguese mi verga, Doña Nilda, yo sé que le va a gustar… ¿para qué me enseña el calzón si luego no quiere que me la coja?, es igual a la Bitty, es una calienta huevos…
YO: No me digas eso, Hugo, ven… te la voy a chupar un poquito… pero no me vayas a echar tu semen en la boca…
HUGO: Así… así, doña Nilda… que rico me mama la pija, no sabe cuántas veces me he pajeado pensando en que me mama la verga… así… que rico chupe… tráguesela toda, Nilda… que rico… más… hasta el fondo…
YO: No, Huguito… no me hagas sentir una mujer tan sucia… mejor te masturbo… mira… así… sientes rico… no… no me obligues a que te la chupe de nuevo… no… ay… si… que rica la tienes… no… es muy grande… no… no me cabe… no, papi… tú puedes ser mi hijo… eres muy chavito para mí… no… no, por favor… ay… sí… que rico pene tienes… no… no…
HUGO: Pues este chavito le va a inundar la boca de leche… así, putita, así… más… más adentro… quiero sentir su campanilla en la cabeza de mi verga, así, me vengo doña Niiiiiiiiiiiiildaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa… ay… hum… agh… que rico… este fue el mejor polvo de mi vida…
YO: El mío también… ahora vete, no vaya a ser que venga mi mamá y nos encuentre cogiendo otra vez.
Me volví a bañar para esperar a mi última verga del día, no lo podía creer, de verdad me encanta ser PUTA… y nunca creí que Hugo, siendo el más joven de mis amantes, me regalara esos orgasmos, o tal vez no fue él, fue el sentirme ultrajada, violada… no sé… mientras me enjabonaba pensaba que aún tenía que hacer malabares con otra verga, estaba agotada… pero una puta debe complacer a sus machos y estaba dispuesta a todo, aunque me dejara seca, cansada y disecada, de tanto coger. Me ardía la cuca de tanto uso y tenía la quijada desencajada de tanto mamar vergas, pero Jorge es el que más me gustaba de todos, así que me envolví en la misma toalla mojada y lo esperé.
JORGE: Hola, vaya, se nota que estás preparada.
YO: No… pasa, pasa adelante… no quiero que te vean… me acabo de bañar, en eso tocaste y salí a abrirte… pero si me das un minuto me voy a vestir
JORGE: No, quédate así, me gusta olerte a limpio, como agua cristalina, como a virgen nueva.
YO: Pues lamento decepcionarte, pero ya no soy virgen ni nueva.
JORGE: Pues hoy voy a estrenarte, nunca me dejaste que te cogiera por el culo, ¿Sigues siendo nueva por ahí?
YO: Ni lo sueñes, ni a mi marido se lo he dado, dicen mis amigas que duele mucho.
JORGE: Porque no se los saben hacer, pero yo soy un rompe culo profesional.
YO: Sí, como no… ¿ya te cogiste más de cien culos?
JORGE: No tantos, pero sí uno que otro y hasta el momento no he recibido quejas, así que prepara el hoyito que me lo voy a chingar.
YO: No, papi, mejor dame por la panocha.
JORGE: Y por el culito, hoy vengo con muchas ganas, así que quítate esa toalla y báilame sexi… uf, que tetas, mi amor… no me canso de verlas… que ricas, como rebotan cuando bailas.
YO: Yo también quiero ver… desnúdate, mi amor, así… me encantan tus pectorales… eso… y esas piernotas se ven tan masculinas… espera… deja que yo te baje el bóxer con mis dientes… uf… que rica verga tienes, Jorge, me dejas como hipnotizada.
JORGE: Te tengo una propuesta.
YO: Me asusta, pero me gusta. ¿Cuál?
JORGE: Quiero hacer un trío contigo.
YO: ¡¿Un trío?!... ay, Jorge, eres un perverso… y… ¿Con otro hombre… o con una mujer?
JORGE: Ven, chúpame el huevo y te cuento… sí… que rica lengua tienes… así… muévela dentro de tu boca… así… que rico me acaricias la cabeza de la verga… toda… más…
YO: Pero cuéntame o ya no sigo mamándotela.
JORGE: No, sigue, mami, es que me la chupas tan rico que… ¿Silvia es tu amiga?
YO: ¿Qué, Silvia? ¿La nieta de doña Tencha?
JORGE: Sí, ella.
YO: Pues la conozco porque somos vecinas, pero mi amiga no es… ¿Me quieres volver lesbiana?
JORGE: No, Bitty… sigue mamándomela… el hecho de estar con otra mujer en un trío no te hace lesbiana, solo es una experiencia nueva.
YO: ¿Y tú cómo sabes que Silvia aceptará?
JORGE: Lo sé.
YO: ¿Ya te la cogiste, cabrón?
JORGE: Pero no te enojes, mami… ¿Quieres que te cuente lo que ella me dijo?... tú le gustas mucho.
YO: ¿A ella le gustan las mujeres?
JORGE: Nunca ha estado con una, pero quiere experimentar.
YO: Dame esa verga que te la voy a exprimir… pero cuéntamelo todo desde el principio.
JORGE: …hace como un mes que te vine a buscar, pero como no me atreví a tocar a tu puerta me quedé dentro del coche, al rato salió Silvia de su casa… la saludé y ella me contestó el saludo… nos pusimos a platicar y le pregunté si te conocía, me dijo que sí, pero que no debería buscarte porque tú eras casada, le dije que solo éramos amigos… ay, que rico… eres toda una puta mamando verga… el caso es que Silvia iba para la tienda a comprar no sé qué para hacer el almuerzo, la acompañé y me invitó a su casa, entramos, le pregunté si estaba sola y me dijo que doña Tencha había ido a un chequeo médico y que regresaba hasta la tarde…
YO: ¿Te la cogiste ese día?
JORGE: Sí, es tan puta como tú… que rico mamás, cabrona… mientras cocinaba movía las nalgas de forma muy provocativa, ella se dio cuenta que tenía la verga parada y me preguntó si eso lo había provocado ella, le dije que sí… ay, así, hasta el fondo, mami, trágate toda mi verga… le dije que tenía que hacer algo, que no me podía dejar así, entonces se vino gateando hacia mí, me bajo el zíper y me mamó la verga igual que tú…
YO: ¡Que puta!
JORGE: Igual que tú… luego nos empelotamos y nos fuimos a la cama de su abuela a coger…
YO: ¿Y dónde aparezco yo en la historia?
JORGE: Ven, ponte boca abajo que te quiero chupar el culo… ven, déjame abrirte las nalgas… me calienta mucho tu ojete cerradito…
YO: Ay, Jorge, que rico siento… me encanta tu lengua chupándome todo el culo… ay que rico… así, papi… ay… méteme la lengua… ay… ¿qué estás haciendo?
JORGE: Me estoy echando lubricante en los dedos para abrirte el culo.
YO: ¿Me va a doler?
JORGE: Un poquito, pero solo al principio… luego te va a encantar…
YO: ¡Ay!... me dolió… uf… agh… pero ya empiezo a sentir rico… ay, no… ya me metiste otro dedo… ay… sí… despacio… ay… suavecito… así… que rico… méteme otro… ay… no pares… no me saques los dedos, aunque me queje… me duele, pero es un dolor rico… no sé cómo explicarlo…
JORGE: Tú ponte flojita y cooperando… ya tienes tres dedos metidos en el culo… te sigo contando, me la cogí de todas las formas y por último le zampé la verga en el culo.
YO: ¿Le gustó?
JORGE: Le encantó, ella ya no era virgen del culo, así que no tuve que trabajarla tanto como a ti, cuando me la estaba cogiendo le agarré sus tetas y ella me dijo que envidiaba las tuyas, que se te veían muy grandes y muy ricas, entonces le pregunté que, si le gustaban las mujeres y ella me dijo que no, que le gustabas tú, le propuse hacer un trío contigo y ella aceptó encantada, pero también me dijo que no creía que tú aceptarías… ¿Contenta?... ¿Te gustaría hacer un trío con Silvia?
YO: No sé, Jorge, me tienes tan caliente…
JORGE: Ahora prepárate, mami… ven, ponte de cucharita… así… que rica te ves… siente la cabeza de mi verga en el ojete… ay que rica culeada voy a darte… ¿sientes como entra la cabecita?
YO: Ayyyyyyyyy… espérate… no te muevas… me arde el culo… es como se me estuvieras metiendo un leño encendido… ay… no… sácamela… no aguanto el dolor… ay…
JORGE: Tranquila, Bitty… no me voy a mover hasta que tu culo se acostumbre al dolor… ¿ves?... así… te la meto y te la saco suavecito… así… que rico culo tienes… uf… está bien apretadito… me encanta ser el primero que te chingue el culo…
YO: Dame… despacio… así… ya va pasando el dolor… así... tócame el clítoris, eso me distrae del dolor… que rico… méteme otro poquito de verga… así, papi… ay... es que la tienes muy gruesa… ay… otro poquito… ay… hum… despacito… así… dame más… ay… ayyyyy… ya siento tus pelos en mis nalgas… quédate ahí un ratito…
JORGE: Ay, mami, gracias por permitirme romperte el culo.
YO: Yo no he dicho que me lo rompas, solo que siento rico… siento como… como ganas de cagar… me daría mucha vergüenza…
JORGE: No te preocupes, es solo una sensación… cuando estés lista muévete tú… así… que rico… muévete más… así… te la saco casi toda y te la meto hasta los intestinos…
YO: Ahora sí me semental, dame verga… ay… así, macho cabrón… culéame… así… más… más duro… más fuerte… dame verga… así… nalguéame… ay… así papi… reviéntame el orto… haz que me cague… ay… de haber sabido que era tan rico te hubiera dado el culo desde la primera vez… ay… así… párteme en dos… que rica verga… así… jálame del cabello, así, papi, has una cola de macho y zarandéame… así… ay… apriétame las tetas, haz que me duela… así… pégame… ay que rico… abofetéame fuerte… así… úsame… sométeme… humíllame mi macho… hazme saber que soy tu puta… golpéame… ay, que rico…
JORGE: Eso, puta, trágate toda mi verga por el culo… así, cabrona… mueve ese culo…
YO: Ay, papi… que rica culeada… chíngame el culo… jódemelo… pícame, pícame más duro, así, papi… cógeme como si me estuvieras pagando… hazme sentir que soy tu puta… me voy a venir… que rico… no sabía que me podía venir por el culo… que rico… ya… más… me veeengooo Jorgeeeeeeeeeeeeeee…
JORGE: Apriétame la verga con tus nalgas… ya… yo también me vengo… así mi putaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa… agh… uf…
Estaba acalambrada de tantos orgasmos, pero ese por el culo fue memorable, lo tuve que despedir porque en una hora llegaba mi familia y tuve que abrir puertas y ventanas porque la casa olía a cogida, luego me di el último baño del día y me recosté a descansar, a punto estaba de quedarme dormida cuando escuché los gritos de mi mamá, resulta que Ignacio se le había escapado a la policía y había llamado a mi mamá, ella no quería saber nada de él, entonces la amenazó con que si no volvían le iba a hacer daño, al llegar mi marido con la nena lo pusimos al tanto, por precaución cerramos puertas y ventanas con llave y cenamos muy preocupados.
Mi marido se fue a dormir a la nena y yo le deseé buenas noches a mi mamá y le dije que no se preocupara, me dispuse a levantar la mesa y lavar los trastes, en eso estaba cuando sonó mi teléfono:
SILVIA: Hola, Bitty, te habla Silvia…
CONTINUARÁ…
Post scriptum: Quiero agradecer a todos mis lectores por haber llevado a 100,000 lecturas el primer relato de SOY ENFERMERA, NO PUTA.
Sé que para los autores españoles no es gran cosa, pero para los escritores latinoamericanos es un gran logro.