2x1

Secuestré a una chica para pedir rescate, sabreis por que me llaman 2X1

Espero en el callejon, te he observado todos tus movimientos durante dos meses, vas sola por la calle, con muestras de que te has pasado de alcohol.

Te agarro y te llevo en mi coche, pataleas, pero te noqueo con cloroformo.

Te dejo unos dias aislada en una habitacion oscura, me preguntas quien soy, que quiero yo de ti.

Pues ahora lo sabras.

En tu ultima comida te he puesto un sedante.

Te despiertas en la cama encadenada de pies y manos, incapaz de imaginar lo que va a suceder.

Yo voy con un pasamontañas y me dirijo a la camara.

-bien señor y señora, la cosa es asi, si quieren ver a su hija y a su nieto vivos, deben llevar 100.000 euros en el siguiente lugar.

Tu no entiendes lo que digo ¿nieto? Eres hija unica y no tienes hijos.

Seguramente se preguntaran ¿Qué nieto? Es mi oferta de 2X1 secuestro a su hija y se la devuelvo con un nieto.

Te retuerces en la cama intentando escapar, suplicando que no te haga nada.

-y ahora, señores, vean como les hago abuelos – digo mientras me acerco a ti.

Gritas y suplicas, pero gritas más cuando te acaricio los pechos.

-mmmm firmes y grandes, nuestro bebé estará bien alimentado.

Gritas con fuerza, pero sacó una navaja y acaricio tus pechos con ella para luego cortarte la ropa, tus pechos son preciosos, los agarro y los chupeteo con ganas mientras tu te retuerces.

Te doy un bofeton mientras te digo que estes quietecita, no obedeces y te doy otro.

Y otro.

Y otro.

Al fin te haces a la idea y dejas que te coma las tetas, se que sientes ascó, pero eso me dá igual, disfruto de tus senos con ganas, los aprieto a ver si te sale leche, tu mueca de dolor me indica que no te gusta eso, da igual, no te sale leche.

Rajo tus pantalones hasta que se te ven las bragas, las arranco de un tiron y las olisqueo, paso mi lengua por ellas mientras miro tus ojos llenos de terror.

Introduzco mis dedos dentro de tu concha, unas lagrimas brotan de tus ojos, unas lagrimas que chupo con ganas.

-mmm si, suave y calentito, que comodo estará nuestro bebé ahí.

Me escupes a la cara.

Me limpio el escupitajo y agarro tu clitoris y lo aprieto con fuerza haciendote gritar de dolor.

-bien mamita, escoje, o mi pija o mi navaja.

No dices nada.

-bien, voy a disfrutar cortandote el clitoris, desfigurarte la cara…

-¡la pija! ¡la pija! – dices espantada.

-bien, lubrica bien mamita, ahí va la leche que te va a preñar.

Lentamente acaricio tu concha con mi pija, me hago de rogar, me encanta ver tu rostro lleno de miedo, tus palabras expresando que esto no esta pasando.

Pero esta pasando nena, eres mia y te voy a preñar.

La hundo dentro de ti, cuesta un poco y te duele por lo seca que estas, pero empujo más fuerte, una y otra y otra vez hasta que está toda dentro mientras tu no paras de llorar.

Me muevo dentro de ti, despacio, quiero disfrutarte todo lo que pueda, veo que empiezas a humedecerte, ya no tengo tantas dificultades para moverme, notas mi jadeo en tu rostro manchado de lagrimas.

-¿estarán felices tus padres por su nietecito?

Esas palabras te hacen llorar otra vez, la idea de que tus padres vean como un hombre profana a su hija te parte el corazón.

Entonces yo descargo dentro de ti, llevaba un mes sin descargar, de modo que la leche te llena del todo, me mantengo largo rato dentro de ti mientras te susurro.

-felicidades, eres mamá.

Eso te rompe a llorar otra vez.

Lentamente me desacoplo y enfoco tu conchita, una concha que mana un fluido blanco y viscoso, luego enfoco tu carita llena de lagrimas.

Tras enviar el video a tus papas, te visito a tu celda y te digo que has de pagar los gastos que generas acogiendote.

Con tu cuerpo.