2 parejas, casa rural, confinamiento 8

No sé el límite de mi humillación.

A la mañana siguiente las humillaciones no se hicieron esperar, con el tanga blanco puesto que me había dado Elena por la noche estaba haciendo el desayuno cuando Raúl entró.

Un azote de buenos días me regaló para que me fuera entonando para lo que me esperaba.

Raúl- Hoy perrito no hagas desayuno para ti, que el tuyo es especial.

Yo: si Amo.

Las chicas entraron en bragas y camiseta, les servi el desayuno y espere de pie las órdenes.

Raúl: Perrito trae el ordenador.

Le lleve el ordenador a Raúl, se lo deje encima de la mesa .

Elena: Perrito tu desayuno te está esperando, debajo de la mesa. De primero tienes jugo vaginal de dos sabores y de postre leche de nabo jajajajaja.

Debajo de la mesa me metí, empecé a bajarle las bragas a Elena y a comerle el coño, tenía restos de orina y de la fiesta de anoche de los tres.

Me afane en la chupada y conseguí pronto su orgasmo, después continúe con Ana, que me costó algo más conseguirle sacar el orgasmo y por último fui a por la leche de nabo, del rabo de Raúl. Tarde como en recibir la corrida de Raúl directamente en mi garganta.

Me hicieron salir de debajo de la mesa después de recibir mi desayuno.

Vieron la empalmada que tenía y se echaron a reír.

Ana: Cariño cuánto tiempo llevas sin correrte?

Yo: más de 10 días Ama.

Las risas de los tres fue atronadora. - No te preocupes que hoy te vaciamos el los huevos jajaja- dijo Elena.

Me ataron los brazos por detrás de la cabeza, la muñeca de una mano con el hombro del brazo contrario y en el otro lado igual. Me colocaron de pie enfrente de una mesa donde habían colocado el ordenador.

Elena se acercó donde yo estaba y me escribo en el pecho con pinta labios " me han hecho..." Ana me coloco una mascarilla de las que usamos todos ahora en la que ponía "Sumiso" ellos se pusieron otra cada uno. Raúl dejo de manipular el ordenador y al separarse..... Abrí los ojos como platos, era un chat de cam en vivo, había una 15 personas en la sala, tanto mujeres como hombres. Raúl en voz en off dijo " si adivináis que ha sufrido el sumiso en esta cuarentena lo escribiremos en su cuerpo y os permitiré que nos digáis un castigo y se lo haremos".

Empezaron a decir cosas y Elena empezó a escribir por mi cuerpo "WC" "mamadas" "darle por culo" "consoladores en el culo" "Perrito" "corridas en la cara" "humillarme"

El castigo del primero fue fácil. "Quitarle el tanga" Ana fue la encargada , fue por detrás y me bajo el tanga hasta los tobillos de un tirón y aprovecho para sobarme el rabo un rato e ir calentándolo.

"15 azotes en el culo con una pala" Elena fue a por una espumadera de madera a la cocina y volvió me giro y empezó a pegarme. Cuando llevaba unos cuantos se escuchó en la sala, " que los cuente" pues Elena decidió empezar y yo tenía que contar y dar las gracias con cada azote. Cuando acabó tenía el culo rojo y me ardía por todos lados.

Otro de los castigos de los de la sala del chat fue  "medirle el pito y apuntarselo en la frente" las rifas de Ana y Elena continuaban con cada ocurrencia de la sala del chat, Elena me calentó un poquito y cogió un metro me midió "19cm" y me lo escribió sin decirlo en la frente, la sala empezó a aplaudir y a gritar "pene pequeño" "poca polla" y lindeces de ese estilo.

El más doloroso fue el de " pillarle una cuerda con las pinzas de secar la ropa y tirar fuerte" yo quiero hacer ese - dijo Raúl. -y yo- - yo también- dijeron Ana y Elena respectivamente. Llegaron al acuerdo de hacerlo 3 veces con 8 pinzas cada uno. Empezó Raúl que me las puso por el pene, pezones y costillas, hizo una cuenta atrás desde 5 y tiro, el dormir y es por qué sentí fue horroroso y unas lágrimas callejón por mi cara. Las risas en la sala y los comentario de "Hasta que llore como una nenaza" se repetían. La siguiente fue Ana, que coloco las pinzas en la punta de mi pene, en el pene y en los pezones, hizo la cuenta atrás y ahora más escozor y más dolor sentí, con la cabeza gacha y las lágrimas saliendo de mis ojos. La última fue Elena. Coloco Cos pinzas en el pene, en la punta del pene y en los huevos, igual que Ana y Raúl hizo la cuenta atrás y tiro, creí que los huevos se me separaban del cuerpo, el dolor fue horroroso y no pude más llorar según estaba.

Me dejaron un par de minutos para que me recuperará pero enfrente de la sala y sin desconectar. Pude apreciar 6-7 hombres y el resto mujeres, los hombres tenían la mayoría la polla en la mano y la mujeres alguna se estaban tocando descaradamente con mi humillacion.

Cuando me recupere Ana pidió otro castigo a la sala " que se coma su corrida" Ana se acercó donde estaba y empezó a hacerme una paja- Venga cariño acaba pronto y así se acaba la humillación pronto... O no? Jajajaja ya veremos, que yo estoy cachonda todo el día de tratarte así jajajaja" me corrí a los 3 minutos Ana cogió un vaso y con la corrida dentro la acercó a mí cara con la mascarilla puesta - Cariño ahora sí, o tardas poco y van a ver demasiado tiempo tu cara los del ordenador y de un tirón me bajo la mascarilla y me puso el vaso en la boca, trague lo más rápido que puse pero la mascarilla no me la volvió a poner, estaba expuesto ante todos los del ordenador que ahora sí me podían ver sin mascarilla, cualquiera me podría reconocer o grabarlo y publicarlo, estaba aterrado. Pero faltaba la última humillacion. Cogieron un vaso de sidra Ana se agachó y meo un poquito, luego le todo a Elena y Raúl se puso enfrente Ana le hizo una paja y se corrió en el vaso. Elena se acercó con el vaso en la mano y me lo aproximó en la boca - disfruta de tu segundo desayuno, es todo un manjar jajajaja. Cuando acabe de beberlo apagaron el ordenador y se empezaron a descojonar, me desataron y me mandaron a hacer las labores de la casa.

Mi primera humillacion pública había finalizado aunque lo que realmente me daba miedo era que si esa había sido la primera humillación pública, como serían las restantes.