2 mas 1 = trio (2)
Aquello lo llevavamos planeando un tiempo.
Aquello lo llevábamos planeando desde hacía varias semanas, y por fin llegó el día llegamos al hotel que habíamos elegido en la costa para pasar los días del puente festivo, no eran muchos pero aquellas mini vacaciones prometían.
Yo llegue a la recepción unos 10 minutos antes que ellos, por lo que decidí tomar un refresco mientras los esperaba y como entretenimiento empecé a fijarme en la gente que allí se hospedaba. No pasaron más de esos diez minutos y los vi llegar, Ana estaba como yo la recordaba elegante y provocadora, llevaba el pelo suelto y esa forma de arreglárselo la hacía más llamativa y vistosa. Antonio también estaba algo cambiado, lo notaba más seguro como más satisfecho en su relación, era evidente que esta amistad que habíamos iniciado a tres bandas le hacía sentirse mejor y eso se le notaba nada más verlo. Nos saludamos y después de unos besos y abrazos, nos encaminamos hacia la recepción para que nos asignaran habitación.
Subimos a nuestra planta para dejar nuestros equipajes y nada más entrar veo como Ana abrasa a Antonio y le da un fuerte beso en los labios durante un buen rato, a continuación se separa me mira y me dice, ahora a mi segundo amor y cogiéndome de la cintura me besa con todas sus fuerzas introduciéndome su lengua en mi boca y apretando sus pechos contra los míos, yo respondo de igual manera y cogiéndola por los muslos, aprieto mi polla contra su coño, comenzando en mi una erección que ella notaba y que nada mas separarse de mí lo primero que Antonio nos dijo es: chicos parar si no queréis pasaros aquí metidos los cuatro días, sería mejor dejar algo para más tarde.
Nos pusimos los bañadores, cogimos las toallas y decidimos bajar a la piscina a refrescarnos pues hacía una mañana fabulosa, llegamos y lo primero que hicimos fue tumbamos a tomar el sol, Ana no dudo en dejar sus pechos al aire, solía decir siempre que a ella le encantaba hacer top-les y claro yo ante tan impresionante vista solo pude decir que a mí también me encanta que lo practique. En su parte de abajo, llevaba un tanga de lo más pequeño y provocador, no era difícil ver como los labios de su coño dejaban entrar la cinta de su biquini dentro de ellos. Antonio se arrimo a ella a ponerle crema solar y con aire picarón me enseñaba como se la aplicaba buscando siempre la provocación, y llamaba mi atención para que viese como se la ponía sobre los pechos y sus muslos. Dándole la vuelta, comenzó a ponerle por la raja de su culo y acercaba cada vez más sus dedos hasta su coño, pude ver cómo le pasaba su mano y a la vez le introducía los dedos en su coño, Ana no decía nada, solo se le escuchaba algún pequeño gemido de placer y yo solo podía disimular mi tremenda erección.
Así pasamos media mañana, entre juegos, baños y alguna que otra cerveza, y decido subir a la habitación pues he olvidado mi teléfono móvil que enseguida vuelvo, Antonio se pone de pie y decide acompañarme, mira a Ana sonriente, como si ya tuvieran algo premeditado entre los dos y le da un beso, ella le responde también con una gran sonrisa y yo a su lado y sin enterarme de nada. Subimos hacia la habitación, solo llevábamos puesto el bañador y la toalla echada sobre el hombro, y nada más entrar al ascensor, Antonio me coge de la mano y se la lleva a su polla, se había echado el bañador a un lado y se la había sacado, estaba excitadísimo, y a mí de nuevo comenzó a ponérseme dura ante el espectáculo, me baje hacia ella y comencé a chupársela, solo fueron dos lamidas y tuve que parar, llegábamos a nuestra planta y no era plan que nos vieran así.
Abrí la habitación y comencé a buscar el teléfono queriendo que el tomara la iniciativa, no perdió el tiempo se quedo en pelotas y se dirigió hacia mí, y agarrándome de la cintura me cogió la polla y comenzó a pajearla hasta que se arrodillo y se la metió en la boca,
ufffffffff como se la comía, notaba como se la introducía hasta el fondo, se venían a mi mente recuerdos de Ana cuando me la chupaba y lo buena que era comiéndomela, pero Antonio tampoco no se quedaba atrás, se la tragaba y notaba como la disfrutaba más que yo, no podía seguir así o me correría pronto, ahora me tocaba actuar a mí, lo levanté y tumbándolo sobre la cama le comencé a chupar su polla y sus huevos, poco a poco le fui introduciendo dos dedos en su dilatado culo, el solo gemía y me pedía que siguiera, le di la vuelta y lo puse a cuatro patas, el elevó su culo y me dijo fóllatelo, quiero notarla hasta lo más profundo y solo pude humedecerla con saliva y llevársela hasta su culo, el empezó a empujar hacia atrás y de un solo movimiento se la metió, aquello seguro debió dolerle pero seguía moviéndose y la vez se masturbaba, ahora si gemía de verdad notaba como estaba a punto de correrse y le dije: espera yo también quiero disfrutar este momento, y metiéndola más duro todavía comencé a soltar leche dentro de su culo , el también comenzó a correrse sobre las sabanas y era increíble la cantidad de leche que soltaba, tal vez fue por las ganas de polla que tenía pues cuando nos echamos a descansar un poco me dijo que mi polla era la primera de verdad que había probado, que habían jugado con consoladores y otros juguetes pero que ahora sabía que como una de verdad ninguna.
Bajamos a la piscina y allí estaba Ana, ahora se le notaba aún más la sonrisa picarona de complicidad y mirando a Antonio le dice: Cariño quiero que me cuentes con todo detalle tu primera vez como mariconcete y si lo has disfrutado, Antonio comenzó a darle detalles que yo había pasado por alto hasta que Ana nos dice: ufffffffff por favor parar que no aguanto tanta calentura como tengo vámonos a comer y después una buena siesta con sorpresa. Recogimos las cosas y nos dirigimos al restaurante, Ana nos cogió de la mano a los dos y se paseo por toda la piscina presumiendo de sus dos hombres como ella siempre nos llamaba.
Durante el tiempo que duro la comida, todos los gestos y comentarios entre los tres eran en tono provocador y subiditos de tono, así que pensamos que era el momento de subir a nuestra habitación. Solo abrir la puerta, y Ana nos pide que no hagamos nada y solo miremos pues nos tiene preparado una sorpresa, nos dirige al fondo y nos pide que nos sentemos y no hagamos nada. Ana se quitó la poca ropa que llevaba y se puso un pareo a la cintura dejando sus pechos al aire, al momento llaman a la puerta y Ana sin decir nada se va para abrirla, nosotros desde lejos oíamos risas y charlas pero sin saber nada de sus intenciones, hasta que aparece con un chico y nos dice que lo ha conocido en la piscina, nos lo presenta como Javi y comienza a sobarle los pechos y cintura, nosotros mientras solo nos mirábamos sorprendidos por la forma de actuar de Ana, ya sabíamos lo fogosa y espontanea que era, pero aquello no dejaba de sorprendernos y a la vez meternos de nuevo en acción. Javi no dudo en quedarse en pelotas lo más rápido que pudo y Ana mientras jugaba con su polla entre su cara y sus labios comenzándole una mamada de campeonato. Antonio se pudo de pie y se despeloto, me cogió a mí y levantándome me agarra de la polla y comienza a comérsela, de nuevo sentía que era un autentico maestro chupándomela y me dejaba hacer sin perder nada de vista es fabuloso espectáculo entre Ana y Javi.
Javi ya tenía una erección considerable y tumbando a Ana sobre la cama, le abrió las piernas le sobo un poco el coño con los dedos para ver si estaba húmeda (Ana necesita poco), le apunto su polla y empujo hasta el fondo, pude ver la cara de Ana como se estremecía, y empezó a follarla con toda su fuerza, mientras Antonio ya estaba a cuatro patas apuntando su culo hacia mí, por lo que le pase un poco los dedos buscando el centro y apreté, el mientras me decía empuja hasta el fondo aunque me duela, quiero sentirla toda dentro , aunque yo no necesitaba que me lo recordase , ya lo hacía y además me gustaba verlo como disfrutaba cuando me lo follaba. Ana por su parte también soltó la lengua y empezó a decirle a Javi Vamos fóllame fuerte para que lo vea mi maridito cabrón y nuestro amante a él aquello parecía que también le ponía y empujaba con
Toda su fuerza. Consigo arrimarme un poco a Javi y le hago señales para que cambiemos de pareja, aquello no pareció sentarle mal y al momento pude ver como sacaba su polla casi chorreando del coño de Ana, yo hago lo mismo del culo de Antonio y cambiamos de pareja yo comencé a follarla con fuerza, su coño estaba empapado notaba como había tenido ya algunos orgasmos y estaba como una perra en celo, Antonio no paraba de pajearse y estaba a punto de correrse, por lo que decido intervenir y les comento de corrernos todos sobre las tetas y cara de Ana, dicho y hecho Javi y Antonio se pusieron a un lado y yo al otro, Ana por su parte nos tocaba los huevos y se masturbaba al mismo tiempo, Antonio fue el primero, comenzó a descargarle por toda la cara y boca, no paraba un poco más tarde fue Javi, este fue derecho a sus tetas y las puso bien cargadas de leche y poco más empecé yo me salía para todos lados, manchaba a todos pero no paraba de soltar y Ana cogiéndomela se la metió en la boca chupándome lo que me quedaba. Cuando terminó hizo lo mismo con los demás y se las comió hasta dejarlas completamente secas, nos tumbamos en la cama y descansamos una media hora, Javi se marchó y quedamos en llamarnos en otro momento y nosotros nos quedamos dormidos en la cama Ana en medio de los dos y diciéndonos su frase favorita, hay cuantoquiero a mis dos mariditos.
Así pasamos los cuatro días, sol, copas, fiestecitas y sobre todo mucho follar, pero eso lo dejaré para el próximo capítulo.