2 de 365 hombres para el año!
Todos podrán pensar en que soy una zorra, una perra, un desesperado, urgido o hasta un ninfómano. Pero no es así, solo soy una persona con fantasías que aun no se han cumplido y en el siguiente relato les contaré como realice mi fantasía de tener 365 hombres para los 365 días del año.
Todos podrán pensar en que soy una zorra, una perra, un desesperado, urgido o hasta un ninfómano. Pero no es así, solo soy una persona con fantasías que aun no se han cumplido y en el siguiente relato les contaré como realice mi fantasía de tener 365 hombres para los 365 días del año.
Empecé en enero de 2008 por medio de la resaca de alguna posada de temporada decembrina, ahí conocí a Aldo un chavo que era alto, cabello negro ojos café claro y sin duda unas nalgas muy apetecibles, era un cuanto robusto, pero en aquella ocasión no tuvimos forros para poder concluir nuestro encuentro por lo cual me decidí que era bueno terminar algo que ya había empezado. Lo cite una tarde a eso de las 5 pm porque iba a ser la fiesta de cumpleaños de mi amiga Andy y no quería perdérmela por irme tras unas ricas nalguitas. Todo paso bien la fiesta empezó en el antro, el ambiente estaba a lo máximo, estaba a reventar. Al terminar la fiesta tuve que calmarme un poco para que no se notara la erección que traía bajo mis pantalones talla 30 y ajustados pera lucir todo lo que tengo jejeje.
Nos fuimos al hotel después de la fiesta a eso de las 2 o 3 de la madrugada, y fue cuando ocurrió todo, a él yo le gustaba y no iba a perder la oportunidad de estar conmigo, no es que yo sea un súper modelo, pero suelo atraer algunas miradas, soy de tez blanca y tal vez de un moreno claro, por el sol, mido 1.70, y soy de aspecto amigable, solo que no sé porque en los antros casi no ligo jejeje.
Al entrar a la habitación nos dimos cuenta de que estaba un cuanto preparada para encuentros rápidos ya que lucía con un toque de apuranza en la decoración y se notaba por la ambientación que todo era para un "tíratela y vámonos" o como dirían algunos de mis amigos "Se viene y se va". Empezamos a acomodarnos en la habitación y él se tiro en la cama observando cómo mis movimientos felinos se hacían cada vez más lentos para alargar el momento y el placer, supe que a él eso le excitaba porque sus ojos desprendían un tono de perversidad que hacía que me moviera acompasadamente hacia el quitándole la camisa y el resto de ropa que me estorbaba para poder disfrutar de sus nalguitas.
Lo besé apasionadamente, fingiendo que me gustaba más de lo normal, pero que por su excitación no noto el toque sarcástico de mis movimientos, una vez desnudos me percate de que estuviera pensando que él iba a ser el "macho", el "penetrador", mostrándole mi culito respingo que a muchos se les antoja y que a muy pocos se los he entregado, en eso me senté sobre sus piernas desnudas asegurándome que su verga quedara justo entre mis nalguitas y sobre todo que rosara mi piel contra la suya. Me voltee, y lo besé fui bajando hasta quedar a la altura de sus pezones, le encantaba que los lamiera y los chupara, pero lo que más le encantaba era mi forma de chupar su virilidad, todo eso hacía que él se sintiera dueño de la situación y lleno de calentura por lo que pasaba y por lo que estaba a punto de suceder; así como estaba yo, hincado, empecé a lamer sus testículos que eran grandes como limas y que me gustaba pasear dentro de mi boca, cuidando de no lastimarlo, empecé a recostarlo para que estuviera más cómodo y sobre todo para aprovecharme de la situación, levante sus piernas con sumo cuidado mientras mi lengua juguetona empezaba a estimular justo bajo sus huevos y casi al llegar a su hoyo de placer, me encantaban sus nalguitas eran tan lampiñas que se podía comer en ella, y claro yo me las estaba comiendo, en ese momento deje de presionar mis manos contra sus piernas y empecé a ensalivar mis dedos, para estimular ere culito tan rico, que se me apetecía para el mañanero. Introduje hasta 3 dedos y por poco un cuarto, pero supe que era la hora de hacerlo sentir mi mujer, muy contrario a lo que él pensaba o imaginaba, me pude el forro e introduje mi verga suavemente para que tuviera la oportunidad de apreciar 16 cm de carne gorda y jugosa, que en ese momento estaban atravesando los, más íntimos deseos de Aldo, supe, que no era la primera vez que ese agujero era visitado por algo, porque se dilataba muy fácil al sentir mis labios en sus muslos y mi verga entrando poco a poco, también supe que no era muy común que lo visitaran, ya que estaba muy estrecho, a pesar de la previa dilatación.
Me encanto sentir mis huevos chocando contra sus lampiñas y regordetas nalguitas, porque sabía que había llegado hasta donde yo podía ofrecerle y empecé el clásico mete y saca del que muchos ya conocemos y disfrutamos como pocos, Estaba alucinado por sentir esa cavidad tan caliente y húmeda, era algo muy rico que a los 60 ó 90 minutos pararía por unos instantes llevándonos al orgasmo, yo termine dentro del condón dentro de Aldo, y el terminó justo en el momento en el que yo había terminado y saque mi verga de él, encima de su pecho, salpicándose todo y un poco a mi; pero ocurrió algo muy curioso, cuando me salí de Aldo, el condón no estaba, pensé en que se pudo haber roto, pero no había señales de él, y solo pude saber que se lo había quedado, fue algo muy chistoso porque no me había pasado algo así, pero me preocupe por la salud de mi acompañante sexual y le pregunte que tal con las enfermedades, y solo pudo decirme que él no tenía nada, que solo había tenido 3 parejas sexuales y que todas habían sido con condón, para asegurarme después me hice la prueba y salí negativo.
Ese había sido el número 1 del año pero todavía quedaban 364 condones que usar
Al día siguiente nos despedimos como si nada hubiera pasado, y con un poco de confusión por su parte porque quería conocerme, pero yo le negué el que siguiéramos en contacto ya que yo tenía otros planes. Me fui a mi casa a darme un regaderazo y a cambiarme y en la ducha se me ocurrió que podía ir al cine a encontrar más que una película para mirar y más que palomitas que ponerme en la boca.
Al llegar al cine pensé que no había gente por el día y porque eran apenas las 2 de la tarde, pero cuando abrí la puerta no pude ver otro espectáculo más hermoso que el de hombres buscando a otro para descargar sus ansias y algunos deseos ocultos que hacía que se escondieran en la obscuridad de un cine porno. Todo estaba lleno y para relajarme y ambientarme me senté en una butaca que ofrecía una amplia vista de lo que estaba pasando a mi alrededor, cosa que a veces me disgustaba porque quien se fijaba en mi en esos momentos eran señores grandes, con una pansa enorme que delataba su edad y sobre todo su descuido por su cuerpo.
Me levanté y fui al baño, pero todo estaba lleno, es eso me giro, y me doy cuenta que un señor de unos 30 aproximados, venia de pants, y una playerita de esas que usan para hacer ejercicio, junto con una cangurera que ocultaba algo muy prometedor, pero yo no vi nada que anunciara el tamaño de su verga al momento de pasar junto a él me volteo a ver con sus ojos verdes casi miel, y me sonrió, me emocione pero no pude dejar de observar su culito respingón y bien grande que me hizo pensar que estaba buenísimo, por lo que al salir lo esperé a la entrada de los baños del cine, el me busco con la mirada pero solo alcanzo a verme como me escabuia de ahí. AL salir me busco pro lo que yo me acerque a él, y sin más me presenté:
--Hola dije yo sin pudor.
--Holadijo una voz varonil que me cautivo, como si sus ojos verdes no fueran suficiente.
Me llamo Elías y tú?dije yo sin dejar de mirarlo
Franciscose porto de una manera casi indiferente, pero me miraba de arriba abajo sin alejarse de mí.
Me propuso que nos fuéramos a un lugar más a apartado de la luz del proyector del cine lo cual me gusto, porque entonces no le había sido indiferente. Al llegar a las butacas del fondo, unas casi alejadas del bullicio y de la exhibición de ligues, nos sentamos y el de inmediato se desabrocho su cangurera, y yo empecé a mirarlo con cierto aire de egocentrismo que lo hizo besarme, besaba bien y me gusto sentir su barba rasposa, junto con esos labios carnosos que prometían dar una excelentes mamadas a mi verga, en eso me fue desabrochando el cinturón, y el pantalón para llegar a mis bóxer ajustados que hacían lucir mi verga gorda, pero ene se momento no se veía mucho causa de la obscuridad para lo que se había hecho ese cine. Francisco miro alrededor buscando que no hubiera vigilante que entorpecieran nuestro encuentro o que quisieran unirse sin invitación, no me lo esperé y el ya me la estaba chupando hasta el fondo, lo tenía enfrente de mí, y yo disfrutaba como el gozaba con mi falo duro, porque lo babeaba, lo lamia, se lo introducía hasta la raíz pera de nuevo limpiar los restos de su saliva con su lengua, yo solo disfrutaba esa deliciosa mamada, y más, porque él estaba arrodillado enfrente de mí con esos brazos enormes y esos músculos que parecían de revista, yo por un momento pensé en estar en el cielo, pero algo me distrajo un ruidito, como de una envoltura de algún dulce que se rompe, no le di importancia y en eso siento como me por el condón algo muy inesperado para alguien tan varonil y tan grande de musculatura, me embadurno de saliva encima del condón para luego sentarse en mi verga, por un momento pensé que me iba a devorar, por la facilidad con la que se abría su culito, y se notaba que él estaba acostumbrado a lo grande porque en una sentada se devoró toda mi verga yo solo me dejé llevar por ese señor que se noto que sabía lo que hacía, empezó a darse desentones encima mío y era delicioso ver y sentir revotar sus nalgas sobre mí.
Después de unos minutos que parecieron horas cambiamos de posición en la que tome el contra, y lo recargue contra la pared del cine, mis pantalones cayeron hasta el suelo con ese movimiento Y de nuevo lo ensarté sin dejar de bombearlo rápidamente, suelo durar bastante para los que no me conocen y suelo advertirlo, como en ese instante me acerco a su oreja y la muerdo suavemente, y le digo, Suelo tardarme mucho ehh.
El solo respondió que rico, porque lo estaba disfrutando muchísimo, y sería una pena no disfrutar como se debe de tan rica y gorda verga, y seguía gimiendo atrayendo la atención y las miradas de los de alrededor Eso solo pudo conseguir que me excitara mas de lo que estaba, sacando toda mi verga de su culito y metiéndola de golpe contra su agujero dilatado, por momentos empecé a buscar su verga pero él se limitaba a quitar mis manos de ahí, no supe si era porque si iba a avenir o porque era completamente y sumisamente pasivo, pero había algo mas su voz ronca y varonil desapareció en el momento que se estaba corriendo porque se escucho como una mujercita disfrutando su primer orgasmo, y supe que ya me tenía que venir, bombee con más fuerza y el me dijo si te corres quiero que sea en mi boca, yo solo pude decir ajá, en cuanto lo voltee y me quite el condón y lo agarre de los hombros para hacerlo que se hincara para que probara mi dulce néctar, empecé a masturbarme enfrente de su boca y me corrí manchando más que su lengua y su boquita de labios gruesos, el estaba como perdido viendo los chorros que pocas veces he lanzado con tanta potencia. Se trago mi lechita y saco de su cangurera papel, de donde había sacado el condón con el que habíamos disfrutado, se limpio y me dijo que estuvo excelente, pero no se quedo a descansar, sino que me beso en la boca aun con restos de mi semen y se fue.
Ese fue el segundo de 365 hombres y ya lo había conseguido en 3 días al parecer iba a ser un poco difícil mi tarea jejeje. Continuará