1976 Unas vacaciones diferentes, Capítulo 9 y Fin

Las últimas "parientas" caen ante la lujuria de Claudio

Capítulo 9: Las Últimas Fronteras Vírgenes

Como de costumbre las chicas se organizan para salir a pasear mientras esperan que el día se despeje de nubes, pero hay un cambio inusitado, tía Pilar se ofrece a cocinar cambiando de turno con tía Cristina, me parece algo más que extraño, pero en fin, no hago comentarios y como de costumbre me quedo para ayudar en lo que sea útil. Una vez que todas salen, miro a tía Pilar y me dirijo a ella.

  • ¿Qué me miras dice tía Pilar?
  • A ti y lo linda que estas.
  • Sobrino, lo que pasó el ayer…. ya pasó y no debe repetirse.
  • ¿No te gustó?
  • Sí, pero no está bien, soy tu tía.
  • Una tía preciosa que deseo con toda el alma.
  • Ni te atrevas, soy tu tía.
  • Mi tía maravillosamente rica digo mientras la abrazo.

Ella se resiste intentando separarme, pero yo no la dejo, la beso en los labios, pero ella quita su cara y le lengüeteo el cuello y su oreja, ella me golpea, yo la tomo de su culo, uno de los mejores de la familia si no el mejor, ella intenta una vez más separarme, pero le tomo sus tetas y de un tirón le rompo la blusa y parte del sujetador, le tomo sus tetas y ella me tira del pelo, su actitud me suena conocida, pero ya no tengo el miedo de los primeros días de vacaciones, le tomo las muñecas y la arrimo contra un muro, procediendo a chuparle las tetas, ella sigue forcejeando cada vez con menos convicción y fuerza, le meto mano a su coño, el cual sorprendentemente está húmedo de calentura y le digo:

  • Tía, si estás caliente por qué te resistes a lo inevitable.
  • ¿Quién dice que estoy caliente?
  • Tu coño que está muy húmedo.
  • No le creas, yo no quiero nada contigo, eres mi sobrino.
  • Si lo quieres y te lo voy a demostrar.
  • ¿Cómo mmmm?
  • ¡Así!!

Saco mi verga del pantalón y tomando una de las muñecas aprisionadas por mí, le dirijo la mano a mi “amiguito”, corriendo el riesgo que ella me haga daño, tiene el puño cerrado sin tomar mi herramienta, suelto su otra mano y le abro los dedos, haciendo que tome lo que creo que desea, su tierna y delicada mano por fin toma mi verga y se queda quieta, la beso y tomo sus tetas, ella se deja hacer sin moverse, finalmente intercambiamos nuestras lenguas y una de mis manos libera su falda y la meto bajo sus bragas, procediendo a acariciar su Monte de Venus, sobando con pasión sus labios mayores y profundizando la caricia con el dedo medio entrando en la rajita y presionando su clítoris que ya está duro, ella solo gime y suspira.

  • Soy virgen me dice.
  • ¿Qué?
  • Soy virgen, nunca un hombre me ha hecho el amor.
  • Tiita te trataré muy bien, con delicadeza, no te preocupes. Me sorprende que ningún hombre se acercara a ti con lo encantadora que eres.
  • Nunca tuve la oportunidad….

Le bajé las bragas y continué besándola mientras la calentaba más y más, con una mano jugaba con sus tetas y pezones con la otra le estimulaba su clítoris y le relajaba su vagina, ella ya no hablaba solo gemía y suspiraba, comencé a pasarle mi verga por su rajita y por la entrada de su vagina sin penetrarla, le acariciaba toda, su culo, sus tetas, su cuello, su espalda, cuando ya sentí que sus flujo mojaban mi verga, la llevé al sofá de la sala y la senté con las piernas abiertas, apunté mi “amiguito” y comencé a penetrarla, venciendo la natural resistencia acrecentada por su nerviosismo, ni me acordé de los condones, intentaba relajarla con palabras cariñosas, suaves caricias a su rostro y cuerpo, manteniendo la temperatura elevada, para que su flujo vaginal ayudara a la desfloración, en un momento sentí un suave espasmo en su coñito, me pareció que fue a causa del dolor inicial, había traspasado la barrera de su himen y mi tía ya no era virgen, ella gemía y vi unas lágrimas en su rostro, se veía preciosa, en ese momento sentí una profunda ternura, continué suavemente hasta llegar al fondo, topando nuestros pubis, ella lloró silenciosamente, me sentí acongojado por su llanto, le pregunté si se sentía bien.

  • Me siento de maravilla y mi llanto es de felicidad de ser tuya sobrinito de mi corazón, nunca pensé que un hombre me miraría como mujer a mi edad.
  • Pero tía eres aún joven y preciosa como las hay pocas, cualquier tipo estaría encantado de estar a tu lado.
  • ¿Tú realmente lo crees?
  • Yo lo estoy, créeme.

Inicié un suave mete saca que transformó el dolor inicial, en una mezcla de placer con el dolor, el cual ya remitía, ella comenzó a seguir mi ritmo profundizando cada estocada de carne de mi verga, al poco rato, comenzó a aumentar el ritmo, apurándome como una veterana, exigiéndome que se la metiera más fuerte, como nunca creí posible de su boca brotaron palabras llenas de pasión y fuego

  • Métemela,…más fuerte,…dale me encanta,…dale….dale….no te reprimas, dame fuerte, métemela hasta el fondo,….métemela bien metida…. no seas suave, dale fuerte Claudito.
  • ¿No te duele?
  • Un poco pero me siento queme llenas y me das un placer indescriptible, quiero que estés dentro de mi…..es tan rico.
  • Si lo quieres así, así será.

Comencé a cabalgarla ferozmente, como a ninguna anteriormente se la había metido, cada estocada era más intensa que la otra, le subí las piernas a mis hombros para apretar su coño, ella se alegró, me decía que la sensación de estar llena de verga y dolor era mejor que lo anterior, su declaración me sorprendió, me di cuenta que las apariencias engañan y cada mujer siente el sexo de forma diferente, pero ni en mis pensamientos más morbosos pensé que a tía Pilar le venía el tema masoquista, comenzó a gritar que se corría, yo estaba al filo del orgasmo, al escuchar su declaración aceleré aún más mi cadencia, alcanzando ambos el ansiado y casi angustiante orgasmo, el segundo que le brindaba a mi otrora virgen tía, ella nuevamente lloró y le pregunté:

  • ¿Por qué lloras ahora tía?, mientras le acariciaba la cara y detenía sus lágrimas con mi mano.
  • No lo sé, solo te puedo decir que fue maravilloso y siento tantas cosas que me pongo a llorar, un poco de dolor, otro poco de placer y no sé qué más.

Me duelen las rodillas por lo que me paro frente a ella y se me ocurre hacerle lo mismo que a Ani, la incorporo sentándola en el sofá y comienzo a pasar la semi-erecta verga por su cara, primero las orejas, luego los ojos, sin olvidar su nariz y la boca, dejando que la saboree unos instantes, ella lame mi semilla mezclada con su sangre y flujo vaginal, la miro y me sonríe, luego estoy bajando por sus tetas, mi dura verga ya está totalmente limpia y lista para un nuevo asalto, la paseo por sus pezones y la restriego por toda la suave masa de carne, me detengo en el canalillo que forman sus linda ubres y la encierro para iniciar una paja cubana que me deleita, le digo que escupa en mi verga para facilitar la paja:

  • Eres un pervertido.
  • Solo estoy tomando posesión de ti
  • ¿Quieres ser mi dueño?
  • Sí como de todas ustedes.
  • Eres muy ambicioso, pero creo que lo lograras.
  • ¿eso piensas?
  • Sí nunca creí que Cristina sucumbiera a tus encantos, pero es evidente que ya es tuya.
  • Casi mía.
  • ¿Así te gusta corazón?, me preguntó mientras se apretaba las tetas contra mi verga.
  • Si así está bien, tal vez un poco más de saliva.

Ella dejó caer su babita  mientras afirma sus tetas para facilitar el recorrido, en cada subida lamía mi glande, no tendrá experiencia pero si tiene una gran imaginación, al poco rato vuelvo a correrme en su cara y tetas, ellas me limpia la verga con su boca y junta mi leche con la mano y se la traga con pasión, lo encuentro increíble, pues a las otras no le ha gustado el sabor ocre de mi simiente y ella debutante en estas lides se comporta como la más veterana.

  • ¿Donde aprendiste esto?, le pregunto
  • De las conversaciones de mis hermanas que ya han demostrado lo putas que son y creo que hay algo de aporte de mi imaginación me dijo sonriendo
  • Eres increíble tía Pilar, eres realmente tremenda en este tema.
  • Gracias pero creo que tenemos que limpiar el piso, pues algo de mi sangre y flujo que cayó al suelo.
  • Yo lo hago tiita, debo tratarte bien en tu primera vez.
  • Hay gracias sobrinito ahora me iré a duchar.
  • De ahí te alcanzo y te tallaré tu espalda.
  • Bueno Claudito

En la ducha le jabono todo y me jabono mi verga con gel de baño, me agacho y se la meto en su conchita por detrás, afirmándole las tetas, ella grita, pese a que levanta el culo para facilitar mi ingreso, estoy eufórico, mi dulce tía pilar es tan candente que me sobre-revoluciona, me dice:

  • No sea tan bruto, despacito que mi conchita tiene poco uso y ahora está muy sensible.
  • Perdón tiita pero tu culito es muy tentador

Está muy “rica”, pese a las advertencias le doy fuerte, se queja un poco por el escozor que tiene su recién inaugurada concha, le doy sin descanso hasta que de pronto alguien entra al baño, ambos nos quedamos congelados si decir ni pío, ella pregunta:

  • ¿Quién entró?
  • Yo tía Pilar, es que tuve que regresar por me orinaba
  • Pueden seguir tranquilos.
  • ¿Ani? Pregunto
  • No, soy Catalina, Claudito, si ya estaba inmóvil, la revelación me deja paralogizado.

Me asomo lentamente como intentando ocultar mi presencia y veo a Catalina sentada en el wáter meando y me sonríe diciéndome, sigue no te preocupes por mí, no lo podía creer.

  • No pude esperar que terminaran, ya que me meaba.
  • ¿Y las demás?
  • Aún en la feria artesanal, tiene para rato, yo me vine por que pensé que aquí estaba más entretenido.
  • Mira tú dijo tía Pilar sonriendo
  • Sí y no me equivoqué.

Ya sabiéndonos descubiertos, reiniciamos nuestro coito sin más miramientos, sentimos que Catalina tira la cadena y le temperatura del agua se calientó quemándonos, por lo que gritamos.

  • ¡Ayyy!!, casi nos despellejas vivos.
  • Ella se asoma y nos dice perdón, se quemaron.

La miro y veo que está con los pantalones y bragas abajo, le veo su coñito depilado con un pequeño triangulo invertido, me calienta aún más la situación y aumento la velocidad de mí mete saca, ella no se va, por lo que le digo:

  • ¿Quieres meterte con nosotros?
  • Si encantada

Se despoja de su camiseta y sujetador, desplegando sus tremendas tetas y se saca totalmente sus pantalones y se mete a la ducha donde difícilmente cabemos los tres, le agarro las tetas y le digo a Pilar que se las chupe mientras sigo con la faena, mi tía obediente, le toma los dos melones y se los chupa como si fueran unas deliciosas frutas, que caliente resultó ser tía Pilar, con que pasión se entrega al sexo. Pronto le llega un nuevo orgasmo, ella comienza a gritar y estrujar los melones de Catalina mientras se corre, yo aún estoy en plan de batalla, me acerco a Catalina y meto la verga entre las piernas por lo que me dice.

  • Soy virgen primito así que trátame bien.
  • ¡No puede ser otra virgen más en la familia!!.
  • ¿Por qué hay más?
  • Hay dos menos y luego tres menos, le contesto

Comienzo a restregar mi verga en su rajita sobresaliendo por detrás de ella, cosa que Pilar nota y agachándose, comienza a chuparla y lamerla, afirmándose de los cachetes de su sobrina que gime como loba en celo, el cuadro ya no puede ser más delirante y me corro en la boca de Pilar, ahora todos en la ducha estamos mojados y chorreados de leche.

Le digo a Pilar que fue muy bueno lo que hizo y a Catalina que su virginidad estará a salvo por unas horas más, pues su primera vez debe ser una ocasión especial; le meto mi mano en su Monte de Venus para masturbarla y hacer que se corra, lo que logro en breves minutos mientras le chupo sus tetas, ella queda agradecida y todos nos secamos y vestimos con premura, no vaya a ser que lleguen del paseo antes de tiempo como Catalina. Pienso que ya tengo conquistadas a seis de siete y aún con dos semanas de vacaciones por delante, nunca me imaginé algo así en mi vida.

  • ¿En la tarde me quitarás la virginidad?
  • Pero es hora de playa y todas van.
  • Me puedo enfermar y tú te puedes quedar a cuidarme.
  • Yo me puedo quedar a cuidarlos a los dos, digan que están delicados del estómago y que no pueden ir a la playa.
  • ¿Tía harías eso por nosotros?
  • Si pero todo tiene su precio nos dice
  • ¿Cuál pregunta? Catalina
  • Que Claudio y tú ¡me hagan suya!
  • ¿Qué???
  • Que me hagan participar de ustedes
  • Por mi no hay problema digo.
  • Por el mío tampoco dice Catalina.

Después de almuerzo Catalina y yo nos quejamos de dolor de estómago, haciendo nuestras mejores actuaciones, tía Pilar aduciendo que como ella cocinó, se siente culpable y que se hará cargo de nosotros en la tarde para que el resto puede ir a la playa sin problemas. Sus hermanas me miran y se sonríen, creo que no se han tragado nuestra excusa ni por un instante, las únicas que se lamentan por nuestro estado son Ani y Roxana.

No pasan ni cinco minutos desde que se han marchado las playeras y tía Pilar nos llama al sofá, donde le agarra las seductoras tetas a Catalina y sacándolas afuera comienza a chuparlas, yo me dirijo a Catalina y le bajo sus pantalones dedicándome a chuparle su conchita, ella gime y suspira por el tratamiento sufrido, le digo a tía Pilar que cambiemos y ella martiriza el coñito de la aún virgen Catalina, metiéndole la lengua todo lo que puede, mientras me desnudo, al exponer mi verga, Pilar la toma y me pajea, acercándola al coño de Catalina, ella alterna su atención y pasa su lengua tanto por el coño como por la verga, nunca supuse lo caliente que podía ser tía Pilar, es una loba en forma natural, hace apenas unas horas y se comporta de lo más puta.

Sentamos a Catalina en el sofá y mientras me chupa mi verga con más dudas que deseos, desnudo a tía Pilar, la que se sienta junto a Catalina a compartir mi verga y a sugerirle cosas que ni yo sabía que se puede hacer con una verga, las detengo antes de que me hagan correr, las paro frente a mí y las masturbo con mis manos, mientras nos besamos y les chupo sus tetas, estoy en la gloria, que calentonas son mis “parientas”. Catalina no da más de deseos, la siento poniéndola en posición y con el máximo de ternura que me es posible inicio la penetración mientras Pilar escupe en mi verga para una extra-lubricación.

Catalina gime suavemente mientras rompo la barrera de su himen, Pilar le chupa una teta mientras yo afirmo las caderas y culo de mi prima iniciando un suave movimiento de penetración, haciendo debutar a Catalina en el mundo real del sexo sin tabúes, nuevamente ni me preocupo de si esta en un periodo fértil o no, para qué decir si fui por los condones a mi cuarto, que inmadurez o estupidez de mi parte, pero así se dió.

  • Hay primito me duele un poco, pero que rico, sigue así. Tía chúpame las tetas que lo haces muy bien.
  • Te gusta sobrinita que te chupe las tetas y el pardillo te la meta.
  • Mmmm….Me encantan las dos cosas.
  • Te vamos a encantar Catalina, nunca nos dejarás.

Me sigo tirando a mi prima y ella lentamente cambia su dolor por placer, pidiéndome más y más, pienso que tal vez sea tan caliente como mi tía, pero no, ella es “normal” y se derrite ante mis embestidas corriéndose calladamente después de un rato, casi no lo alcancé a notar, solo supe que alcanzaba el orgasmo cuando caía rendida en el sofá, saqué mi verga pringada de sangre y flujos, cuando tía Pilar se lanza por ella como una loba a un cordero, me la chupa por todos lados, su calentura me da una idea, busco un condón en por un momento olvidado en mi pantalón, le digo que se ponga con su conchita apuntada hacia la boca de Catalina y su culo hacia mí. Una vez en posición le pido a Catalina que le coma el coñito mientras inicio una penetración anal con la intención de darle una culeada de antología, ella gritó cuando la penetré, debo confesar que no fui muy suave, pero no rehuye de mis envestidas, continuado hasta que entre Catalina y yo, la hacemos alcanzar un orgasmo que la deja abatida como un pato en una cacería, me saco el condón y meto mi verga en la boca de mi prima y en unos segundos después me corro en ella, mi prima hace unas arcadas pero luego se traga todo lo que quedó.

Seguimos con nuestra sesión de sexo, nos acariciamos mutuamente hasta recuperarnos, cuando ya la tengo tiesa, acuesto a  Pilar en el sofá y pongo a Catalina sobre ella en un precioso 69, luego me pongo detrás y la ensarto con suavidad, teniendo en consideración su reciente desvirgada conchita, comenzamos un mete saca acompasado donde Pilar de vez en cuando me lame las bolas, ¡qué mujer más caliente!!!... parece que todos los años de reprensión, le pasan la cuenta y está sedienta de sexo, nuevamente mi prima alcanza un orgasmo, acompañado por el que ella logra sacarle a su tía, las miro y cuando ya pueden respirar con normalidad, les pido que se sienten en el sofá y me pajeo para enlecharles la cara y tetas, que espectáculo más inolvidable, le pido a las dos que limpien mi verga de sangre leche y fluidos, no se hacen ningún problema, especialmente tía Pilar que es la más salida de las dos.

Después de todos estos acontecimientos tan candentes, nos duchamos los tres para esperar que no nos sorprendan nuestras parientes de la playa, estoy con mi verga bastante maltrecha, por lo que pienso de abstenerme de sexo por el resto del día y tal vez mañana depende de cómo amanezca mi “amiguito”

En la tarde luego de cenar, jugamos a las cartas y conversamos, todas están preocupadas por nuestra salud, asegurándoles que nos encontramos bien y que no deben preocuparse, cerca de la medianoche nos vamos a dormir, al acostarme Ani me pregunta:

  • ¿Qué les hiciste?
  • ¿A quién?
  • A quien va ser, ¡a tía Pilar y Catalina!
  • Bueno ya que no tenemos secretos, te diré, a las dos las desvirgué, a tía Pilar también me la culeé bien culeada, pues resultó que está sedienta de sexo como nadie se imagina.
  • ¿En serio?
  • Si es muy caliente y le gusta la verga como los dulces a un niño.
  • Jee jee.. suelta una risa algo estridente.
  • ¿Y las dos eran vírgenes como yo?
  • Si en el grupo de servidas por mí, la mitad eran vírgenes, solo falta ver qué pasa con Roxana.
  • Yo creo que es virgen y está deseosa de perderla contigo.
  • Hay que dices Ani, ella es súper tímida como para desear que me la tire.
  • No seas tonto, ella es más que receptiva contigo que con cualquier otro que conozca, te aseguro que le encantaría sucumbir a tus encantos.
  • ¿Tú crees?
  • Si te lo aseguro, es más, mañana tíratela.
  • ¿Pero a qué hora?
  • En la playa que vamos a ir.
  • ¿Cuál?
  • La que queda lejos, cuando nos cambiemos en la carpa que siempre arrendamos.
  • ¡pero las otras se darán cuenta!!
  • Si pero a todas te las has tirado y se “harán las locas”

Pasé la noche conversando con Ani y acariciándonos si llegar a consumar ningún acto sexual, pues efectivamente mi “amiguito” requería de descanso, tanto que Ani le aplicó una crema humectante para reconfortarlo y luego un poco de pomada para quemaduras, todo ello funcionó de maravillas y logré recuperar a mi compañero de mil batallas, exagero, serán unas pocas docenas de batallas, pero igual lo quiero y pretendo que me dura toda la vida. Al otro día me quedé con mi madrina y Ani; mi madrina me miraba como deseosa de hacer algo conmigo, pero al estar su hija se reprimía pues sabía que teníamos algo serio los dos, le comenté a Ani y ella me dijo al oído:

  • Debemos de hacer algo para que se relaje.
  • ¿Te parece que la seduzcamos? Le contesté.
  • Dices que le metamos mano entre los dos y luego te la tires delante de mí.
  • Algo así, pero con una pequeña variante,
  • ¿Cuál?
  • Que yo me las tire a las dos delante de cada una dije riendo.
  • ¿De qué se ríen ustedes preguntó mi madrina?
  • De nada madrina, solo que acordamos de que le vamos a meter mano,

Dicho eso me paro y colocándome detrás de ella, le agarro las tetas y le subo la camiseta saltándole ambas tetas al aire, pues estaba sin sujetador, se las amaso mientras ella aun con unos cubiertos en la mano gritaba que:

  • Delante de Ani no.
  • Tía no se moleste, ella quiere que usted disfrute tanto como ella conmigo

Su hija se paró delante de ella y tomando uno de los melones de su madre y se lo comenzó a chupar, mi madrina quedó muda, casis catatónica, yo aprovechando la sorpresa  le subo la falda y le bajo sus bragas, pasándole mi erecta verga por su raja, luego le digo a Ani que chupe mi glande mientras está entre las piernas de su madre, ella acaricia la cabeza de su hija mientas me mama, yo le tomo sus tremendas ubres martirizando sus tremendos pezones, luego le digo a Ani:

  • Mira como se la meto a tu madre
  • ¿Te gusta la verga de mi novio mamá?
  • Mmmmm…Si, es maravillosa….dale más fuerte.
  • ¿Te gusta que te chupe las tetas mamá?, le pregunta mientras yo realizo el mete saca y ella le chupa los duros pezones.
  • Si cariño, es estupendo, sigan así.

Me siento liberado de toda traba sexual, ahora que estoy desenfrenado acelero mi mete saca, viendo como mi Ani, su hija le chupa las tetas, Ani en un estado de lujuria nunca antes visto por mí, también le tortura el clítoris con los dedos, Silvia ya no puede más, su orgasmo llega muy rápido, no habrán sido más allá de unos cinco minutos, yo sigo caliente y dejando de lado a mi madrina, le bajo los jeans a Ani y se la meto sin mayor dilación, la levanto en vilo y la pongo sobre la mesa del comedor, iniciando un frenético mete saca ahora con la hija, le digo a su madre que le saque las tetas para que yo las chupe, ella muy obediente lo hace y me las ofrece, lo hago para luego decirle que se las chupe como ella lo hizo, ella me obedece y se engolosina con una de ellas y yo le hago los honores a la otra, de vez en cuando nos besamos unos a otros, hasta que coincidimos los tres con nuestras bocas e intercambiamos las leguas, ella mete su mano al clítoris de Ani, mientras yo estoy en faena, siento como la masturba, ambos estamos corriendo la carrera desbocados, pronto nos alcanza un orgasmo gigantesco, mi verga explota llenado la conchita de mi amante con siete explosiones de placer, la saco aun algo erecta y le digo que la chupe y me la deje limpia, ella obedece si chistar.

Luego de nuestra  locura, las invito a la ducha donde ya recuperado me las culeo alternadamente hasta correrme, ambas terminan la faena dándose placer entre ellas con las manos, sus corridas y la mía son fenomenales, luego serenamente nos lavamos y terminamos las tareas de la casa como de cocinar.

Por la tarde, luego de almorzar y una buena siesta, nos vamos todos a la playa, esa que ya les dije que era lejana, donde como siempre arrendamos una carpa con quitasol para  cambiarnos y dejar nuestras cosas, la playa a la que vamos es grande y hay bastante separación entre las personas, todas se cambian en la carpa, yo me encuentro listo y partimos haciendo el ritual del factor protector, Ani me mira y habla algo con Roxana, luego de terminar con todas mi parientas muy “encremadas” y protegidas, siento que Ani me llama desde la carpa unos metros más atrás, nadie excepto yo sabe que quiere, me acerco y ella me dice:

  • Entra
  • ¿Para qué?
  • Para que va ser tontito
  • Era para asegurarme. repliqué

Al entrar veo a Roxana de pie mirándome colorada como tomate, me acerco con la seguridad que ya he adquirido después de faenarme a todas las otras y tomándole la cara, la beso sin decirle alguna palabra, ella responde tímidamente a mi beso y me mira a los ojos y me dice:

  • Ani me dijo que tomarías mi virginidad si yo quiero.
  • ¿Y quieres?
  • Si me gustaría, como me pongo dice seriamente.
  • Aquí no, en un lugar más cómodo, tu primera vez debe ser un lindo recuerdo
  • Si así lo quieres, yo encantada.
  • Bueno chicos, los dejo para que la prepares, dice Ani saliendo de la carpa.

Acaricio Roxana, abrazándola y magreándole el maravilloso culo que tiene, luego le tomo sus tetas paradas y de grandes pezones para chuparlas sin apuro, cuando saco mi verga y la pongo entre sus piernas para que la sienta, la noto algo nerviosa, estamos extasiados por nuestras caricias, cuando de pronto asoma la cabeza de su madre tía María, ella exclama horrorizada y Roxana se tapa las tetas descubiertas.

  • Tía no asustes a tu hija que después no querrá nada.
  • ¿Pero qué le estás haciendo?
  • La preparo para su primera vez.
  • Pero ella es muy joven.
  • No, no lo es, solo es algo menor que sus primas a las cuales ya les inauguré su coñito.
  • ¿También a ellas?
  • Si Roxana es la última que no ha gozado de mis atenciones, deja que sea feliz en estas vacaciones, tú ya lo fuiste
  • Increíblemente Roxana dice: Por favor mamá, di que sí.
  • Pero hija eres muy joven.
  • No lo soy, a ¿qué edad te desvirgaron?
  • No sé, sería a los  17
  • Yo estoy por cumplirlos, que son unos meses y tu ya disfrutaste de Claudio
  • Yo…
  • No lo niegues mamá, todas las otras lo han hecho con él.
  • Bueno hija, si es tu deseo que así sea.

Luego de que su madre se fuera seguimos con nuestro magreo, pese a que me costó un triunfo que ella nuevamente se relajara, le toque su conchita encontrándola mojada, todo fluyo hasta que luego salimos de la carpa ante la mirada atenta de todas las parientas que aplaudieron en masa causando que Roxana se pusiera colorada como un tomate.

La tarde transcurrió entre juegos y toqueteos, todas reían de pura complicidad del hecho que pronto ocurriría, en un momento cuando ya todos recogíamos las cosas para marcharnos Ani nos dijo:

  • Entren un momento a la carpa que tengo que pedirles algo
  • ¿Qué pretendes dijo su madre?
  • Ya veras, entra.
  • Una vez dentro, Ani dijo: sáquense el sujetador del bikini para que Roxana vea que todas estamos de acuerdo y relajadas porque mi Claudito le va a hacer el amor.

Todas sin chistar se sacaron el sujetador, en la reducida carpa puede ver la colección de tetas más lindas del mundo ni el dueño de Playboy tenía tanta suerte, de pronto Cristina dijo, está bien, debemos marcharnos, se nos hace tarde para que se produzca el evento principal del día.

Ya en el departamento, comenzó el ritual de la ducha, momento en que aproveché en llevar a Roxana a la habitación de servicio, o sea mi cuarto, exiliando a Ani al departamento con el resto de las féminas, una vez solos, comencé a acariciar a la última de las vírgenes de la familia, lo hice con cariño y suavidad, pronto la tenía entre mis brazos completamente desnuda, nos besamos con pasión mientras le sobaba su Monte de Venus para calentarla, ella respondía con gemidos y suspiros, me decía al oído que me quería desde siempre, que a contar de ahora sería solo para mí, yo la acariciaba y le decía que sería mía para siempre, le metí mi dedo medio en su coñito y le hice tomar mi verga en sus manos, ella la recorrió como intentando aprender todo de ella, luego se inclinó y me la besó con ternura, después, se la metió en la boca dándome una torpe mamada, la levanté para besarla y me preguntó:

  • ¿No te gustó?
  • Si me gustó pero la necesito para hacerte mía y no quiero correrme antes de tiempo.
  • ¡Ahh, es cierto!

Continué con las caricias y bajé mi cabeza para comerle el coñito mientras le sobaba las preciosas tetas que tiene, ella deliraba y me pedía que la empalara rápido que ya no resistía más, que desde la playa quería tenerla adentro, me incorporé y situándome entre sus piernas comencé a cumplir su deseo, me costó más que con las otras vírgenes, se sentía más estrecha y menos relajada que ellas, luego de un rictus de dolor en su cara, se le escaparon algunas lágrimas, esperé a que se acostumbrara a mi verga en su interior, la bese con suavidad y comencé a montarla con ternura, su dolor y nervios iniciales pronto se transformaron en pasión y placer, pidiendo que siguiera, que no me detuviera nunca, comenzó a acompañar mi ritmo para incrementar el placer de cada estocada de carne, me tiraba el pelo, rasguñaba mi espalda, me tomaba del culo y me apretaba contra su pubis, estaba totalmente entregada a la pasión, yo me dejé llevar por su deseo y cuando ella anunció lo inevitable, yo la cabalgué con locura, estallando ambos en un mar de leche, sangre y fluidos vaginales, ¡qué manera de correrse!, era como un río, quedamos muy pringados de los líquidos del amor; ella lloraba y me besaba con cariño, yo intentaba consolarla, con mis caricias y besos. Terminado su estreno, nos tendimos en la cama de Ani para acariciarnos y demostrar todo el cariño que nos teníamos, vio como estaba mi verga y me preguntó

  • Te he hecho daño.
  • La sangre no era mía, si no tuya.
  • ¿En serio?
  • Si tu himen desapareció y has sangrado un poco, ya no eres virgen.
  • ¿O sea soy tu mujer?
  • Si, como las otras.
  • Si como las otras reafirmó.

Terminado nuestro primer encuentro y la ducha que fue llena de afecto y caricias, fuimos a comer, al entrar todas volvieron a aplaudir y felicitarla, le preguntaron miles de cosas y como se sentía, fue una verdadera fiesta, cenamos contentos y ella encantada, creo que todo era muy distinto a lo sucedido con las otras chicas de su edad, sin ir más lejos, distinto a sus otras primas, las cuales alegaron que a ellas no las habían felicitado, por lo que también fueron alabadas por todos. Terminada la cena nos pusimos a jugar a las cartas cuando en eso tía Cristina propuso que jugáramos apostando algo más que garbanzos.

  • ¿Qué quieres apostar?
  • La ropa y la que gane se queda con Claudio toda la noche.
  • La vez anterior gané yo, dijo Ani, acepto.

Todas repartieron cartas y yo me quedé mirándolas, pues era el premio mayor y me ofrecí para sacarle las prendas a mis parientas que fuesen perdiendo, así hacer interesante el juego para mí.

  • Las primeras en perder fueron Ani, Roxana, Catalina, Silvia, Cristina y  Pilar, todas se deshicieron de las faldas o pantalones, yo las ayude cobrando algunos manoseos en sus nalgas.
  • Luego fueron María, Roxana, Catalina, Silvia, Cristina y Pilar, las que perdieron sus blusas o camisetas, ahí cobré manoseando sus melones, cada cual mejor.
  • En la tercera partida, las perdedoras son Ani, María, Roxana, Catalina, Silvia, y Cristina, ahora quedan algunas tetas al descubierto y las sobajeo,
  • En la cuarta partida, Pilar gana nuevamente y quedan algunas enteramente al descubierto.
  • En la partida final, nuevamente gana Pilar, ahora ella se levanta victoriosa y nuevamente les repite  a todas, jugué mucho tiempo con mi madre y su enfermera, tal sacrificio me hizo una experta en esto, me toma la mano y me lleva al cuarto de servicio a dar rienda suelta a su lujuria tanto tiempo reprimida.

La noche fue muy agitada, mi otrora tímida y virgen tía, se ha vuelto una verdadera gata en celo, me tiene agotado, los dos nos quedamos dormidos pringados de fluidos corporales, el despertar sigue agitado, no hay parte de tía Pilar que no haya explorado, ella está radiante y llena de felicidad, me invita amorosamente a la ducha donde nos jabonamos con una dulce pasión, ya no intento poseerla, pues creo que no podría.

Epílogo:

Las vacaciones continúan con diferentes actividades, algunas recreativas, otras muy sexuales, invento concursos de diferente tipos, por ejemplo cual la chupa mejor, cual tiene mejores tetas, cual hace la mejor cubana, cuales el mejor culo, cual tiene el mejor conjunto, mi imaginación es fértil, claro está que cuido de hacer que todas sean victoriosas en alguna oportunidad, pues son muy competitivas y creo que no es bueno que surjan las envidias y rencores entre mis “parientas”, así  los días pasan hasta el fin del verano, me lamento de que lo bueno acabe pronto, ellas juran que no me abandonaran.

Mis tíos y primos que fueron de cacería regresaron y me decían que lo habían pasado muy bien en su actividad de hombres, se burlaban de mi por tener que sufrir haciendo actividades de “niñitas” y no dejaron de mencionar que tal vez yo prefería ese tipo de actividades en vez de hacer cosas de hombres, yo me reía con ellos, simulando que los envidiaba.

Luego el verano terminó, apenado regresé a mi casa para iniciar mis estudios y calmar mis ansias y nostalgia de mis “parientas”, pero lo que por un momento pensé que se cerraba para siempre, descubrí que solo fue el inicio de unas vacaciones diferentes, es así que.

Entré a la universidad y comencé mis estudios de leyes, Ani está en un curso paralelo al mío y frecuentemente estudiamos juntos y algo más, por otra parte, tía Cristina espera un bebé y me asegura que es mío, a su vez Catalina también está embarazada, olvidé usar los benditos condones, para qué decir, ha sido el escándalo de la familia, tío Mario pese a su enojo, decidió que adoptarían al bebé que es niñita, haciéndolo pasar por mellizos pues ambas tendrán sus partos con días de diferencia, como ya supondrán la bebita también es mía, Catalina nunca dijo quien era el padre, tío Mario supone que fue un fugaz amor de verano, por lo que seré padre sobrino del niño y padre primo de la niña y entre ellos serán hermanos tío primo o algo así, en todo caso los romanos ya trabajaron eso en el derecho que ellos crearon y que ya estoy estudiando para clarificar mis grados de parentescos con mis hijos.

Sigo de amante de tía Pilar que compró un departamento cerca de la universidad, nos invitó a Ani y a mí para que vivamos con ella de lunes a Viernes, nuestros padre lo encuentran fantástico, mi tía madrina le ha prometido visitarla seguido, al igual que tía María. Actualmente está pensando ser madre soltera, pues de otra forma dice que será muy vieja para concebir un bebé.

En cuanto a Roxana estudia para rendir las pruebas de ingreso a la universidad, desea estudiar lo mismo que Ani y yo, en cuanto a Catalina, mi preciosa prima y futura madre, lo único que desea es que la niña se parezca a mí, yo le digo que ojalá que no, para que sea tan bella como ella, lamentablemente ella no ingresó a la universidad para poder llevar adelante su embarazo, espera poder ingresar el próximo año junto con Roxana, también desea cursar leyes, creo que en el futuro tendremos el bufet de abogados más caliente del país.

De todas formas, queremos que los hombres salgan de cacería el año que viene y que  yo me quede con ellas en la playa para que tengamos una vacaciones tan placenteras como las recién pasadas.-

Fin.-