18 (4: El Recuerdo de Hugo)

LAS PARTES PREVIAS DEL RELATO ESTÁN EN "BISEXUALES": HE CAMBIADO MI ESTILO; ESPERO LES GUSTE, ME AYUDARÍAN MUCHO ALGUNOS COMENTARIOS. THX.

El maldito invierno de Lima, la horrible, se hacía más invierno y más horrible a cada hora; a cada minuto, a cada segundo. Todos mis momentos con mi tío, antes de este mes surrealista, iban cayendo sobre mí en constante conspiración en mi contra.

Aquellos consejos sobre mis enamoradas de turno, aquellas bromas tontas sobre malos actores, aquel clásico sermón de cada vez que yo estaba tomado y debía entrar a la casa por su cuarto, poco a poco me fui remontando hacia mis recuerdos con una sonrisa que no percibí sino hacia el final de mis evocaciones. Aquellos paseos juntos a mis ocho años, como padre e hijo… ¡el parque era tan grande entonces! … entonces… : aquel entonces en el que me esforzaba por que le prestara atención a mis más novedosas piruetas, a las que respondía con su sonrisa y su "más fuerte, campeón", reí para mí mismo: por fin entendía a las mujeres que se le acercaban con alguna excusa ridícula: él era muy atractivo, ahora lo entendía. Esos momentos… todos ellos se turnaban para hacerme sentir el ser más confundido del universo, el más sucio y tal vez el más culpable… todo eso devino en la clásica manifestación de la confusión infranqueable: frustración hecha ira. Ira de todos los colores y de todas las clases, por todos y para todos

Ira pura contra Hugo, ira de amor contra Nicolle por regalarme un teléfono móvil, ira de despecho contra la puta de María por dejarme, ira de vergüenza contra mi familia, ira contra el maldito perro que ladraba en la calle, ira de resentimiento contra mi padre por propiciarme hacia Hugo con su muerte; ira contra mí cuerpo por dejarse caer, por dejarse juguete de las situaciones… pero para qué explicar, para qué sufrir.

El mp4 me aburrió y pasé a función radio: Shakira; no estaba para "hips don´t lie" así que cambié de emisora algo molesto: cuántas veces hemos deseado escuchar una canción para nosotros… una que no conozcamos, pero para cada uno de nosotros.

Pensar con lluvia en un taxi es horrible: un pensamiento te lleva a otro y así, de un inoportuno Michael Jackson, llegué otra vez al mismo lugar del que había partido e intentaba huir: mi vida. Aunque pude acallar a su momento mi confusión en Nicolle y eso bastó por un tiempo -exactamente dos semanas-: era cuestión de tiempo hasta que me volví a sentir irremediablemente solo.

Me atormentaba la veracidad de lo que había hecho; aunque ya no había vuelta que darle: me había simple y sencillamente encamado con mi tío -Realmente ni fue una penetración , no está mal si no es una penetr... ¡ A quien trataba de engañar, maldita sea!- Aunque asumirlo fue terrible, tuve que dejar de verlo como aquel hombre que, pese a superarme sólo por tres centímetros de estatura, me inspiraba la protección del padre que nunca tuve.

A lo mejor todo era culpa de él.

Mi atormentada mente se echó a la tarea de transgredir su imagen y sus hábitos... todo había sido demasiado vertiginoso: ¿Acaso siempre había querido llevarme a este punto? ¿Acaso desde siempre me había protegido en su regazo con la intención de, algún día, hacerme su amante?, ¿ Me había cobijado de mis fracasos desde los seis con la intención de tenerme desnudo en sus brazos en algún momento?, O… ¿Acaso todo era un juego sexual para él?.

Él, Él, Él, Él… E…él

Pero el centro de todo mi desconcierto no estaba en él, yo lo sabía; pero prefería ignorarlo. Yo había encontrado en Nicolle más de lo que esperaba, y esperaba tal vez olvidarlo todo… de la radio de mi mp4 empezó a sonar una canción de Robbie Williams; no sé porqué me dio por escucharla completa por primera vez en mi vida:

Así es la ley

Hay un ángel hecho para mí

Aunque prefería la versión en inglés, por primera vez entendía… por primera vez la sentía dedicada a mí.

Volvía a aquel momento después del sexo el en el que el alma se deja caer en un instante que parece infinito… en ese momento recordé haberle dicho

Te conocí…el tiempo se me fue

Tal como llego

Y te fallé, te hice daño

Tantos años yo

Que lo amaba.

-CONTINÚA-