La proposicion
Un incidente en una discoteca desemboca en un excitante trio, algo impensable para la protagonista hasta ese momento.
Como cada fin de semana, mis amigas y yo nos bajamos del autobús, cubrimos andando los escasos metros que separaban la parada del edificio, y nos pusimos a la cola, que casi daba la vuelta a la manzana. Yo tendría entonces unos 20 años, más o menos, y mis amigas y yo frecuentábamos aquella conocida discoteca de Madrid. Íbamos todos los sábados, sin faltar prácticamente ninguno, por lo que los relaciones publicas, camareros, seguridad, etc., nos conocían, a fuerza de vernos por allí cada fin de semana....