Amores lejanos

Le bajé los pantalones y sin advertencia, me metí su precioso trozo en la boca y empecé a chuparlo como poseída, no con la delicadeza que acostumbro, sino de inmediato. Mariano jadeaba mientras yo disfrutaba la textura de aquella gloriosa verga

  1. Amores lejanos

Día 28

No voy a contar cómo fue que Marido descubrió lo de Alejo. Fue una imprudencia mía, loca como estaba por él, loca por completo y sí, quizá con ganas de hacer lo que ahora estoy haciendo. No contaré lo duro que fue superarlo y, para él, perdonarme. Nunca sabrá que fui yo quien sedujo a Alejo, yo quien ansiaba cogérmelo. Nunca sabrá que aquello salvó nuestro matrimonio. Nunca sabrá que estuve otra vez, casi un año, sin más verga que la suya, ni sabrá que se de ciencia cie...

Cayó Marcos

El atleta que deseaba cogerme desde hace ocho años, por fin está entre mis brazos y me hace saber que la espera no fue en vano, que el sueño no era exagerado...

  1. Interludio: Cayó Marcos

Dia 25

Cayó Marcos, cayó, anoche, ayer. Fue mío. Es mío. Y me siento loca. Ya era una locura caminar a su lado abrazándolo, notando la brevedad de su cintura, la fuerza de su abdomen, la de su pecho en que descansaba mi cabeza, pues debe ser unos veinte centímetros más alto que yo. Y esos ojos que destilaban amor, esos besos que me derretían.

Llegamos al fin al hotel y me quitó poco a poco la ropa. La ligera blusa, lo blancos chorts de mezclilla (sí, a mis cuaren...

Mi historia con el joven Javier - 14ª parte

Javier le dice a Esperanza que quiere que quite la virginidad a su amigo Eduardo y para eso les dejará solo para que tengan completa libertad, pero antes de marcharse al ver a Esperanza vestida con las ropas para recibir a su amigo se calienta y la echa un polvo por todo lo alto. Cuando llega Eduardo, Esperanza lo va seduciendo poco a poco y conseguirá hacerle perder la virginidad e incluso la follará también por el culo para acabar orinándose encima de ella.

Mi historia con el joven Javier  - 14ªparte

A la mañana siguiente como todos los días preparé la infusión para que se fuera haciendo y reposando y a los 20 minutos tomármela. Mientras tanto me entré en el cuarto de baño y me estuve aseando y preparando, eran las 8,30 de la mañana. Después desnuda como estaba me senté en la mecedora que había en el cuarto y estuve un buen rato observando a Javier, viéndole allí en la cama dormido, desnudo parecía un niño que nunca hubiera roto un plato. Enton...

La viuda

Un fin de semana romántico que se ve frustrado... o no.

Había quedado con una mujer para irnos de escapada a una casa rural. La señorita en cuestión estaba casada, su marido le había sido infiel en varias ocasiones y me temo que ella quería devolverle la moneda. Pero no pudo ser. Mi partenaire me llamó el jueves por la tarde para decirme que no podría venir conmigo. Imagino que se estaría reconciliando, por enésima vez, con su marido.

El caso es que tenía una reserva para el fin de semana y nadie con quien compartirla, así que cogí el coche, metí unas cuan...

La tia ágata

Las tardes de verano, aburridas, en compañía de la tía Ágata, no lo son tanto.

A veces pienso que en algún momento que no recuerdo, he firmado un pacto con el diablo. Pagaré con mi alma las bondades de las que disfruto en ésta vida. Trabajo en lo que quiero y me gusta, gano una pasta enorme y, además, tengo un cierto tipo de encanto que cala en las personas. Tuve una buena infancia y una mejor adolescencia. Palos, lo que se dicen palos, no me he llevado ninguno, y mi verdadera pasión la he practicado con toda la frecuencia que he deseado.

Me inicié en el sexo a los trece años. E...

Mi nueva vecina

Tenía 30 años, cuando llegó una nueva vecina a mi piso de soltero, una madurita solterona que me llevó a probar por primera vez a una madura. Una experiencia inolvidable.

Por aquella época yo tenía unos 30 años, me había acabado de comprar un piso en Sevilla y me independicé. El piso era un primero, con bajos comerciales y formaba parte de un grupo de pisos, adosado de dos en dos, de forma que teníamos una escalera por cada dos pisos, es decir, que el acceso a mi piso lo compartía sólo con el piso de al lado.

A los pocos meses llegaron los nuevos vecinos de al lado, que tras la mudanza, vino a presentarse una señora, que tendría unos 45 años de edad, delgada, con pelo...

Seducción involuntaria (2)

Miguel pasa de tener fantasías con su suegra a dejarse llevar por su atracción en su propia casa, descubriendo el placer de verdad...

*Durante el resto de la semana, Miguel no se pudo quitar de la cabeza ese momento en que se había masturbado pensando en su suegra, e incluso su novia le notaba a veces como ausente. Cuando ella hablaba por teléfono con su madre, Miguel disimuladamente se acercaba, no sabía muy bien porqué. Llegó el día en que Miguel tuvo que acercarse a casa a recoger a su suegra, y la perspectiva de estar a solas con ella en su casa le atormentaba, sentía una mezcla de culpabilidad y morbo, aún más morbo. Sólo pensaba en...

Mi ayudante para todo

A mis 36, descubro el tigre que había en mi tímido becario y enloquezco por su verga y por sus besos.

  1. Mi ayudante para todo

Día 19

Mi matrimonio atravesaba un bache bastante feo, pero yo no quería divorciarme o no sabía si quería hacerlo. De hecho, sí que dudaba. Hacía largos meses que no tenía amante ni affaire ninguno y largos meses que el sexo con Marido era de rutina. Creo que para estar bien con marido necesito otra u otras vergas. Y entonces ocurrió que tuve que hacer una gira de inspección a varias empresas de provincia más o menos por la misma fecha, y decidí irme en auto e invitar a...

Seducción involuntaria

Salir con una chica joven puede traer consigo la atracción de su madre, convirtiendo la figura de la suegra en toda una tentación...

Salir con una chica joven tiene la ventaja de que puedes tener una suegra joven. En el caso de Miguel, su chica era una guapa estudiante de arquitectura de 21 años, y le encantaba pasar horas a su lado. A pesar de que siempre se había sentido atraído por las rubias con minifalda, Carla era justo lo contrario. Tenía unos ojos azules muy bonitos, pero era morena y era raro el día en que no se ponía vaqueros. Miguel se llevaba bien con su suegra, era una mujer muy agradable, y estaba encantada con él. No tenía...

La petición de la jefa.

Soraya, un alto cargo de una empresa, preocupada por los deseos sexuales de su hijo, decide pedir a la más dotada de sus subordinadas que lo seduzca para que lo calme

El corazón de Fabiola latía con mucha más fuerza de la que estaba acostumbrada, hacía meses que no se sentía tan excitada y todo por culpa de su jefa que le había hecho un encargo especial que la supondría un sobresueldo más que apreciable en su nómina mensual.

Todo había comenzado la semana anterior, cuando Soraya, su superior en la oficina, la había hecho llamar a su despacho. Fabiola, lógicamente, se presentó ante su jefa tan pronto como la fue posible y esta comenzó a hablarle sobre el despertar s...