Virginia seducida y entregada al vecino h......iii

Virginia, queda sorprendida a ver a su propia hija Rocio, actuando como prostituta trabajando para José Enrique. Sale enfadada del Club prometiendo a el cubano en no volver, y este la dice que lo hará, pero que si quiere volver a estar con él tendrá que aceptar las condiciones que él la ponga. Virginia se entera que está preñada y a la llegada de su marido, procura que este la folle todos los días y deposite su semen en su vagina para poder hacerle creer que es el padre de la criatura que espera. Ella lucha y lucha contra ella misma para no volver con el cubano, pero al final sucumbe a sus deseos, pues son más fuertes sus deseos de estar con José Enrique que su decencia y decide acudir donde este está. El cubano la recibe pero la dice que si quiere volver a estar con él tendrá que acceder y acatar sus condiciones. Virginia acepta y firma un contrato por el cual se entrega completamente a él y podrá hacer todo lo que él quiera con ella sin poder negarse a nada. Y comienza a trabajar de prostituta para él.

Recordad que en la segunda parte de este relato, Virginia se entrego de nuevo a José Enrique e incluso le dio su virginal culo. Tras esto  él la invita a visitar el Club donde están y la va mostrando las diversas zonas y secciones de su negocio, hasta llegar a otra sala que es una especie de teatro con gradas en redondo, alrededor  de un escenario redondo  y giratorio, rodeado todo él por cuatro filas de butacas que se pueden reclinar y echar para atrás convirtiéndose, prácticamente en cama. En esta sala ha...

Virginia seducida y entregada al vecino.....ii

Virginia, en principio lucha consigo misma para evitar volver a encontrarse con José Enrique, pero después de dos días no puede aguantarse y acude a su piso para verle y descubre que ya no vive allí. Piensa que es un mensaje de Dios para que no le vuelva a ver y se queda tranquila. Pero después de 5 días recibe una llamada de él y la invita a comer, ella duda en principio, pero con las ganas que tiene de estar con él acepta y de nuevo vuelve a entregarse a su amante cubano, pecando de nuevo y esta vez incluso le da el virgo de su culo. Después José Enrique la va enseñando sus negocios, comenzando por el Club donde están.

VIRGINIA SEDUCIDA Y ENTREGADA AL VECINO HASTA EL EXTREMO DE SER SU ESCLAVA.- II

Continúo con la  II Parte de la historia de Virginia que fue seducida por su vecino José Enrique y se entrego a él. Tras lo cual se sentía culpable y se confiesa, haciendo intención de no volver a verle. Tras la confesión llama a su hija y al no estar es recibida por su yerno. Tras esto parte a su casa y aquí fue donde nos quedamos en la Primera parte. Ahora continuamos:

Tras cenar sola, me puse a ver un poco la tele...

Elena y unos celestinos muy fogosos

Se la metió de un solo golpe, tenía la vagina ligeramente irritada por la penetración anterior, pero no le importó lo más mínimo, la necesitaba dentro. Comenzó un movimiento circular de las caderas sin permitir que aquel falo se saliera ni un milímetro.

–¡Mamáaa! Es Marina, que si quedáis, que tiene un amigo que está deseando conocerte.

–¿Se puede saber qué hablabas tú con Marina durante un cuarto de hora? –cuando Elena vio que su hijo se lanzaba sobre el sofá con el teléfono en la mano, jamás imaginó que la llamada fuera para ella. ¿Qué tenía que hablar su hijo con su amiga?

»Hola Marina. ¿De qué hablabais tú y mi hijo?

»Sí, claro. De nada importante y seguro que era de algo que no me atañe a mí, ¿no?

»No me cambies de tema, y no,...

Desesperado.

Mi mala vida sexual con las jóvenes, hace que me dedique a las maduras.

Desesperado.

¡Ya no puedo más! Tengo veinte años y aún no he mojado mi pluma en ningún tintero. ¡No, esto no puede ser! Desde que tengo once años haciéndome pajas y sin catar a ninguna chica. ¡He de hacer algo! ¡Ya no puedo más!

Cada vez que salgo con mis amigos, ellos acaban mojando y yo acabo solo, acabo haciéndome una paja mientras miro una película porno en el baño. ¡No aguanto más esta situación! Si las chicas de mi edad no quieren nada conmigo, tendré que buscar algo diferente, otros t...

Virginia seducida y entregada al vecino hasta el e

Virginia es una mujer casada felizmente, decente y muy católica. Su marido por su trabajo estas temporadas fuera de casa (que van desde una semana a un mes). Tiene una hija que hace unos meses se ha casado, por tanto pasa gran tiempo sola. En su urbanización vive un joven vecino y comienza a entablar amistad con ella, hasta el punto en que un día la invita a cenar y tras un juego de seducción consigue hacerla caer en sus manos. Tras esto ella se siente culpable de lo que ha hecho y se confiesa con su confesor proponiéndose para evitar volver a caer en la tentación no volver a verse con su joven vecino, pero…….

VIRGINIA SEDUCIDA Y ENTREGADA AL VECINO HASTA EL EXTREMO DE SER SU ESCLAVA.- I

En esta ocasión no voy a contarles ninguna experiencia mia , sino la de una amiga y conocida , esta es la historia de Virginia:

Me llamo Virginia, soy una mujer casada, de 44 años, bien parecida y un buen tipo, de grandes tetas y un culo que no debe de estar mal, pues aún a mi edad  cuando voy por la calle veo como los hombres me miran e incluso alguno que otro me dice algún piropo o alguna barbaridad elogiando mi cue...

Bajo los cuidados de mi suegro

Podría decir en mi defensa que me engañó, que me dejé llevar por la soledad, la falta de cariño, que fui forzada y no disfruté… pero os estaría mintiendo. Disfruté en manos de mi suegro, más de lo que lo había hecho en toda mi vida con mi querido esposo.

Podría decir en mi defensa que me engañó, que me dejé llevar por la soledad, la falta de cariño, que fui forzada y no disfruté… pero os estaría mintiendo. Disfruté en manos de mi suegro, más de lo que lo había hecho en toda mi vida con mi querido esposo.

Ese año mí amado esposo se había empeñado en que fuéramos de vacaciones al pueblo donde él nació, así mi suegro podría conocer a nuestro primogénito, que ya tenía 5 añitos.

No era la primera vez que lo había propuesto, pero afortunadamente siemp...

Lola y el becario

Carlos (24 años) es becario en una empresa donde, entre sus compañeros de departamento, se encuentra Lola (38 años), con la cuál tendrá una inesperada y tórrida aventura durante la cena de Navidad de la empresa.

La empresa debía de estar obteniendo unos buenos beneficios porque, de otra manera, jamás nos hubieran invitado a los becarios a la cena de Navidad en aquel céntrico y elegante hotel de cuatro estrellas con pinta de caro. La verdad que, aunque mi salario era mínimo y mi esfuerzo en ocasiones rozaba la esclavitud, no estaba mal del todo en aquel "puesto" de trabajo, ya que me había tocado en un departamento lleno de gente muy maja con la que había hecho muy buenas migas. En aquella sala de trabajo éramos cin...

Un Duro Día de Clase

Hay que superarse para obtener buenas notas... A veces es muy placentero y satisfactorio

ÉL

Había sido un duro día de clase para finalizar el curso. La primera mitad de entrenamientos a un ritmo endiablado que ayudaron a liberarme del regusto que me había quedado del encuentro con la tutora. Trabajé al cien por cien y cuando paramos me sentía estupendamente. Las endorfinas estaban realizando su trabajo y liberándome de lo que pudiera recordar mi cuerpo del otro día.

Sólo quedaba esta clase para finalizar la semana, el curso y los exámenes. Por eso la había trasladado del mi...

Madura Ansiosa Busca Joven Dispuesto

Cincuentona requemada comprueba habilidad y resitencia de un jovencito

ÉL

Tenía unos cincuenta y pocos, pero con la piel completamente carbonizada de tostarse al sol, con aquel cabello rubio platino y además esa manera de vestir juvenil y fuera de su tipo la convertían en un esperpento de “progre” con ganas de marcha.

Esperaba tumbado sobre la hierba totalmente desnudo intentando mantener la ilusión de que se enfrentaba a una Bo Derek para que no se viniese abajo su picha medio erecta.

Ella casi consigue llevar al traste todo aquel trabajo al improvisa...

El milagro de Herminia

La soledad de una viuda y las ganas de sentirse mujer

La vida no sabes lo que te deparará, jamás hubiera imaginado que hoy estaría escribiendo delante de un ordenador este relato, me llamo Herminia, tengo 52 años, viuda desde hace dos, de joven según decía la gente era bastante guapa y presumía de buen tipo, ahora me sobran veinte kilos como mínimo, estuve casada treinta años pero tuve la desgracia de ver morir a mi marido tras una larga y penosa enfermedad, él era diez años mayor y me dio dos hijos que alegran la vida en la actualidad junto con dos nietos pre...