Mi amiga de la Sex-shop

Nunca me imaginé que una compañera de la escuela tuviera una sex-shop...

El otro día salí a correr por un parque que está cercano a mi casa, la mañana era agradable y era común ver a muchas personas haciendo ejercicio ya que era un lugar perfecto para ello.

Al poco tiempo, ya que había dado alrededor de cinco vueltas al parque, me detuve a descansar en una banca y ahí que quedé mirando al resto de las personas que pasaban por el lugar; como llevaba puestos unos lentes oscuros, me deleitaba la vista viendo a las chicas que pasaban enfundadas en sus trajes deportivos, alguna...

Amor a la Italiana, LAir Du Temps

Feliz Navidad ;) como siempre, estoy atenta a correos, intentaré responder a tod@s tan rápido como pueda, un abrazo!

Camilla despertó sobresaltada, el calor había interrumpido su plácido sueño, revisó el reloj y se sorprendió al ver que eran las dos de la tarde, se sentó en la cama y movió un poco su cuello, miró alrededor… Las puertas del balcón abiertas, las cortinas corridas, sobre el escritorio de enfrente, en medio de copas a medio llenar y un par de botellas vacías reposaba una estatuilla plateada, Camilla se levantó y la tomó, pero algo faltaba, buscó con la mirada en el escritorio

-¿buscabas esto? – escuchó,...

Nunca más estarás sola 23

“A mí querida futura esposa, Te Amo, te Amo Inmenso gandolera, ¿Tienes alguna idea de cuánto es inmenso? Infinito, infinito más uno, te veo en el juzgado, solo tuya, Lupita, tu novia bonita”

Capitulo 23

El sonido del teléfono de casa me despertó, aún con los ojos cerrados me levanté a ver quién era. No sé en qué momento me había cambiado de cama, pero estaba en mi habitación. Su inconfundible voz al teléfono me alertó y ese tono de tristeza me hizo despertar de un solo tajo. Solo atiné a ponerme la prótesis y los zapatos, tome la chaqueta que tenía temprano, las llaves de la moto, el casco y saliendo del departamento como una loca, fui directamente al departamento de Aristóteles. Por poco...

Pillada en el baño

Raras veces, pero a veces puede ocurrir, que al cambiar de baño habitual, pueda suceder esto.

Pillada en el baño

Miré el reloj... Eran las trece en punto... Acababa de terminar una montaña de papeleo y ahora era mi esperada hora del almuerzo.

Estaba lista para un descanso de mi trabajo... Entré en la cafetería y me senté con mi habitual combinación de taza de café y sándwich.

Cuando terminé miré mi reloj y descubrí que todavía tenía mucho tiempo para ir al baño y arreglarme el pelo y el maquillaje... Fui al baño y me encontré con un cartel avisando que no funcionaba... Tenía pu...

Ernestina y Placida segundo encuentro mucho mejor

Nuestro segundo encuentro mas rico y mejor y aun faltan mas

Pues como ya en otro relato les conte yo me llamo Ernestina y la mujer de mis relatos que son 100% reales se llama Placida.

Les comentaba que habiamos tenido nuestro primer encuentro que fue lindisimo para mi fue un sueño hecho realidad pues yo a ella la habia querido muchisimo por que ella me apoyaba y siempre estaba conmigo en todo momento.

Paso una semana exactamente era un viernes por la noche yo llegaba a casa siempre a las 8 de la noche.

Toda esa semana no dejaba de pensar en ella en...

Ernestina y Placida

Nuestro primer encuentro de muchos

Mi nombre es ERNESTINA soy una mujer blanca mido 1.60 pelo chino hasta los hombros peliroja senos 34 b mi cuerpo ahorita es pues rellenita actualmente tengo 50 años . Mi relato empieza asi yo en aquel entonces tenia 18 años era una mujer soltera vivia con mis padres. Yo trabajaba en una (tortilleria para variar jeje) bueno pues yo convivia mucho con la esposa de mi tio pues era una mujer muy amable y servicial ella siempre me trataba muy bien y nos gustaba mucho platicar sabiamos de amtemano que ambas neces...

Jazmín - la maestra jardinera

En una salida de jardín de infantes la tía que quiere entablar conversación se encuentra con una grata experiencia bajo un árbol

Mi sobrino Teo termina este año su jardín de infantes y los maestros propusieron ir a una granja ecológica a pasar el día. Cómo sus padres no podían mi hermana me pidió si podía ir yo en su reemplazo, tengo días a favor en mi trabajo así que no dude en responder que si. El viaje fue entre gritos y algunos llantos. La señorita y los padres trataban de calmarlos. Teo y yo íbamos plácidamente mirando por la ventana. Al llegar a la granja había actividades planificadas y los adultos estábamos un poco pintados. ...

Nunca más estarás sola 22

Por eso quiero que quede claro, tienes en tus feas manos lo más valioso de mi vida. Solo cuídalo y multiplícalo, porque gandolera, tú y yo no somos familia. Y tengo un carro, con muy mal temperamento.

Capitulo 22

Habían pasado 45 minutos desde que había traído a Guadalupita, estaba en la sala de espera con Bernardo, agradecía ser abogada para dejar claro que el perro debía estar conmigo por ser mi perro de apoyo. Estaba sentada en el piso abrazada al perro, que olía a ella. Nadie salía a darme razón de su vida, más allá de los papeles que me pidieron llenar para el ingreso inmediato de Lupita. Fuera de ello, nadie me decía que había pasado, estaba llena de preocupación, de ansiedad y soledad.

...

Nunca más estarás sola 21

En definitiva yo no creía en Dios pero si creía que algo nos había juntado y gracias a lo que fuese podía decir que era mi esposa.

Guadalupe Rilvers

  • ¿Novia? -la llame por tercera vez- apresúrate… tráeme los pañales -ella se veía cansada- cuéntame, y ¿así querías un bebé?

  • Claro que lo quería -dijo haciéndole cariño a Ethan- ¿cómo no querer a un precioso así? -me entrego los pañales de tela y beso mi mejilla- hay que darnos prisa.

  • De acuerdo. Ya esté hermoso quedó listo -tome al bebé de solo 8 meses en mis brazos- ahora te vas a quedar con mi novia -ella me observo despavorida-

  • Pero…

  • Debo arr...

Maestra y alumna Químicamente imposible

Sueños húmedos

-Ay cariño, no seas amargada, vamos a bailar. -Dijo Gloria tratando de convencer a su amiga, esa noche no habían compartido grandes chismes, pero por lo menos quería encontrar alguna chica que fuese del interés de su ebria compañera, ella lo merecía, llevaba mucho tiempo sola con la estúpida ilusión de que Rosa, la profesora de química, tuviese aunque sea un poco de interés en sus labios, en su cuerpo, deseaba que su irreal utopía de llamar su atención aunque fuese solo un poco, se volviera realidad, a vece...