La segunda vez en un intercambio
La primera vez fué delicioso pero la segunda fué sensacional.
Al cabo de los cuatro meses de haber estado en aquel pub especial, y habiendo seguido con nuestras experiencias sexuales tan intensas como unos recién casados, empezamos de nuevo a recordar aquellos momentos tan especiales con un frenesí fuera de lo común.
De vez en cuando, y mientras estabamos llevando a la realidad nuestros sueños eróticos, comentábamos lo bien que lo habíamos pasado y lo satisfechos que habíamos quedado en nuestra primera visita a dicho lugar.
Un viernes, al llegar...