La Reunión (parte 2)
Ella apretaba el culo contra mí en cada embestida, acompañando el bombeo de mi polla, iba notando la acumulación de la tensión en mi sexo, la leche comprimida ya no podía controlar la eyaculación
Después de lo que pasó en las escaleras de casa de Imma, estuvimos una temporada sin decirnos nada, intentando enfriar aquello, huyendo de esas situaciones embarazosas aunque placenteras, pero que podían complicarnos la vida a los dos. Al cabo de unas semanas el Partido nos envió a Madrid a otra reunión con los representantes que tenemos en la capital, a aquella reunión nos mandaron a junto a dos compañeros más un hombre y una mujer, María, Juan su marido, a Imma y a mí.
Por la tarde después del trab...