Las horas del diván

Podria pasar que por querernos curar mas enfermos cayesemos hundiendonos sin remedio con nuestros demonios.

Las horas del diván

En las palmas de tus manos

Con confianza estoy sentada

Revelare mis secretos

si tan solo no me engañas.

Veo los números cambiando: 1,2,3...8 hasta que llego al octavo piso y las puertas del ascensor se abren con un ruido sordo, salgo y camino por el pasillo desierto amortiguando los pasos inconscientemente para no romper el críptico silencio que se cernía sobre la estructura como presagiando malas noticias.

Camino unos pasos más hasta llegar frente...

Una tarde de verano

Ya lo dice el titulo, es lo que me ocurrió una tarde de verano, mientras me preparaba, para los exámenes de septiembre.

Ya pasó la mitad de las vacaciones del verano, sin dar palo al agua, y se aproxima el mes de septiembre, ese mes favorito de los estudiantes, que no hacen nada, durante el curso.

Como cada tarde y por aburrimiento y también un poco por obligación, me iba a mi cuarto a estudiar, bueno, a mirar apuntes: de civil, internacional, etc., etc., y eso día tras día. Hasta que una tarde, me intentaba concentrar en no sé qué articulo y una música, rompió la monotonía, el sonido venia de la casa de mis veci...

Los picores de Manuela

Un imprevisto en vacaciones, la madre de mi cuñada en casa, y sexo del bueno...

Los picores de Manuela

Un imprevisto en vacaciones, la madre de mi cuñada en casa, y sexo del bueno......

Soy un golfo, lo reconozco y lo tengo asumido. Mis conocidos y mi familia también lo tiene más que asumido y ya ni me preguntan por mi eterna soltería. Mi máxima en cuanto al sexo es que el primer polvo no se le puede negar a ninguna mujer, todas tienen algo que las hace especiales, pero repetir ya es otra cosa, tiene que tener algo más.

Por mi vida y por mi cama han pasado...

Una hembra perversa de Guayaquil

No siempre los ojos son capaces de mostrar la voracidad del fuego que hay dentro de una mujer, siempre listo para explotar.

En Abril del 2005 tuve que viajar a Ecuador por cuestiones de trabajo. En cuanto llegué a Guayaquil me hospedé, y teniendo aún un día libre antes de tener que comenzar con mis labores decidí darme una vueltecilla por la ciudad para conocerla y deleitarme con la comida local y lo que pudiera aparecer. En uno de los extremos del malecón me metí a un barcito y a ver al fondo la suavidad verdosa del río Guayas y el afluente humano que recorría la zona comercial. Estuve un buen rato, disfrutando de un tequ...

Una Mañana de Vacaciones

Despertar con tu pareja a mitad de un paraíso, levantarse encendidos e irse a buscar donde pasar mejor Una Mañana de Vacaciones, ese es el plan.

UNA MAÑANA DE VACACIONES

-No me apetece, gracias- le dije mientras rechazaba el generoso plato de cereal con leche que ella me ofrecía para desayunar. Quizá un plato de fruta fresca me hubiera caído mejor; desayunar cereal no es lo que uno apetece después de una tormenta de baile, alcohol risas y sexo en medio del Caribe.

Mientras ella daba cuenta de su desayuno eché una ojeada a las guías turísticas de aquel sitio para planear nuestra siguiente mañana en aquel paraíso.

En la parte t...

Tarjetas de visita

Unas tarjetas de un desconocido llevan a la protagonista a una aventura sexual completa.

Tarjetas de visita.

Tengo 28 años, vivo en Madrid. Lo que os voy a relatar me ocurrió el verano pasado. Para mi fue una experiencia inolvidable y creo que irrepetible. Hacía tiempo que no quedábamos. En cuanto empiezan las obligaciones te dejas de ver con las amigas, es normal, cada una tiene su vida hecha. Por eso decidimos apartar a nuestros novios ese viernes y salir por nuestra cuenta. Recordar viejos tiempos. La noche trascurrió de la forma habitual en esas ocasiones. Cena, charla de n...

Te quiero mucho-mucho...

Me tomas en tus brazos como a una pluma y abres mis piernas ante el espejo: "Mira, por esos hoyitos te voy a querer mucho-mucho..."

Me sonreíste desde la primera vez que te vi. Yo estaba con mi mami, y tu con una señora que te regañaba frente al gruo de personas que esperaban a que abriera la tienda. Me miraste con tus ojos lindos como si yo hubiera sido tu único apoyo en la vida, y te compadecí. A mí me pasa lo mismo cuando me regañan mis papis y me quiero morir de vergüenza.

Te quise contar estas cosas en nuestro primer encuentro de verdad, frente a un surtidor del supermercado, cuando me levantaste para que pudiera beber...

La colombiana (4)

Al fin solos, primera parte.

La colombiana 4

Después de nuestro encuentro en la biblioteca mi alumna y yo seguimos teniendo algunos juegos y escarceos en el colegio, para cada vez se hacía más necesario el estar solos y podernos disfrutar con tiempo y a placer.

La oportunidad se nos presentó luego de dos giras que realizamos s dos museos del país. Adriana le dijo a sus padres que no había podido tomar suficientes notas y que quería regresar, pero que era necesario que yo la acompañara para que le explicara algunos asun...

La historia de Leydi Diana (2)

Continuación del primer episodio.

Hola amigos:

Después de un tiempo regreso a contarles la historia de Leidy Diana y sus parientes, la cual estaban esperando:

Cuando Leidy sintió que la desmontaban sintió que por entre sus muslos corría el semen tibio y espeso de su tío, acompañado de su sangre y sus fluidos virginales. Ahora el cansancio, el licor y el sueño la adormecían muy a su pesar, y ante las caricias toscas que le proferían los machos excitados trataba de mantenerse despierta para poder escapar de su castigo y salir...

La colombiana (3)

Fin del anterior.

La colombiana 3

Habíamos quedado sumamente calientes. El resto de la clase solo podía pensar en ese culito que había estado recibiéndome y que ahora estaba ahí pegando al pupitre, bajo ese cuerpo de infarto que me miraba con cara de lujuria.

Los últimos veinte minutos de clase eran de investigación en la biblioteca del colegio y hacia allá nos dirigimos todas mis alumnas y yo.

Mis veintidós alumnas revisaban libros entre los estantes, y yo me paseaba vigilándolas, y tratando de que no...