Andrea. La transacción

Mi encuentro con Taleb y su abogado, el señor Jhon Adams, resultó ser de lo más fructifero. La venta del piso solventó nuestros apuros financieros. Lo que sucedió en el piso durante la firma del contrato, eso dejo que tú lo leas.

Era un día gris. A ratos un fino agua nieve caía mecido por súbitas envestidas de aire intensamente frío. Asomada al gran ventanal del salón, mi aliento empañaba el cristal a través del cual la mirada se zambullía en un mundo de tejados y antenas, los tejados de mi adorado Madrid.

Miré hacia abajo. Desde lo alto de los seis pisos del señorial edificio se dibujaba el plano de la espaciosa e ilustre calle Serrano, con sus cuatro carriles con dirección hacia la plaza de Atocha surcados por el inten...

Andrea. Los inicios

Recopilación de los tres primeros relatos.

1

Desde hace unos meses estaba preocupada por mi esposo. No se me ocultaban las dificultades económicas por las que pasaba mi pobre marido. Se llama Miguel.

Me enamoré de él siendo aún casi una niña, con tan sólo diecinueve años. Mi apuesto novio causó verdadera impresión entre mis amigas. Ya tenía cumplidos los treinta y dos años, lo que por otra parte era un verdadero abismo en cuanto a nuestra diferencia de edad. Nada más y nada menos que catorce años nos separan.

Aunque he de con...

Mañana loca a los 18

Ella es perfecta, la deseaba desde hace tiempo y esa mañana lluviosa se convirtió en el día más soleado de mi vida.

Era rubia. Sus ojos eran preciosos, azules, con una mirada que te hechizaba al instante. Su voz era perfecta, era sueva, deliciosa. En cuanto a su altura, como no, era igualmente perfecta, superaba en metro setenta por poco, pero sin duda alguna lo que más me gustaba de ella era su cara de niña. La historia que voy a contar sucedió hace cinco años, cuando yo aún no había acabado el colegio y tenía 18 años. Ella también tenía 18 años, y era la típica chica deseada por sus enormes tetas, aunque quizás p...

Mi historia 3. Por Andrea

Confesé a mi esposo lo sucedido con Taleb. Pero fue una confesión con clase. Leela.

Proviene de los relatos anteriores

Miguel estaba en el ordenador cuando llegué a casa

Algo parecido al remordimiento se adueñaba de mis emociones.

Desde la boda nunca había puesto sus manos sobre mí otro hombre que no fuese él. Y ahora tan solo habían pasado unas horas desde que los dedos del viejo musulmán me habían poseído y masturbado a conciencia en la soledad del lujoso piso de Serrano.

En la piel apretada y rugosa de mi agujerito trasero aún permanecía reciente la sensació...

Por fin lo conoci

Por fin llego el día, después de dos años y medio en que conocí a un cyber amigo, fue el mejor fin de semana de mi vida!

Por Fin lo conocí

Por fin llego el día, después de dos años y medio en que conocí a un cyber amigo, fue el mejor fin de semana de mi vida!

Hace 2 años y medio, conocí por internet a un chico, en una de esas páginas para conocer personas, la verdad no podría creer que un chico como él quisiera conocerme, era demasiado perfecto, no es porque sea fea, sino que un chico como el solo podría estar interesado en conocer top models, y yo soy gordita, aunque la foto que tenía en esta página es una d...

Perfil de una adicta al sexo

Exacto eso soy, una adicata al sexo pero no me da pena decirlo, al contrario, les contare lo que yo mas disfruto.

Hola lectores empezar a escribir es una tarea ardua, lo que yo les escribiré esta echo y dedicado completamente a su entretenimiento, espero que disfruten leyéndolo tanto como yo lo disfruto escribiendo. Primero quiero decirles que estuve leyendo algunas historias muy buenas y que me di cuenta que la gente a veces exige el realismo pero yo no consigo entender como dar completo realismo en mis historias.

Si es verdad que mis historias estarán basadas en hechos que en realidad me pasaron a mi pero...

Un gran cambio en mi vida (5)

Una salida a cenar con mi jefe y una noche de puro sexo y placer. Valoren por favor. Gracias!!!

Un gran cambio en mi vida(5)

Me decidí por un vestido blanco con pequeñas flores, ceñido bajo mis pechos que me llegaba un poco más arriba de la rodilla. Era sutil, casual y a su vez sexy y provocativo, ya que dejaba ver mis senos por su gran escote. Me coloque unas sandalias de tacón y tome un abrigo de media estación.

Baje la escaleras y allí parado frente a la puerta de calle estaba Pablo. Llevaba puerto un jeans de vestir color chocolate, con una camisa blanca abierta los tres primeros...

¡Feliz Navidad!

Os deseo unas felices navidades a tod@s, cargadas de amor, buenos sentimientos y placer, ¡besos!

Ha costado despertarte llamándote a voces desde el salón, parece que anoche bebiste demasiado, pero ahí estas mirándome desde la puerta, completamente despeinado, tu cara entre dormido y sorprendido mientras me miras, y ahí estoy yo, sentada en el sillón con los pies subidos embutidos en unos calcetines rojos, supongo que debo verme ridícula con ese gorrito navideño, pero tampoco parece que te importe, mis tetas apenas quedan tapadas por el wonderbra rojo, que levanta un poco mis pechos medianos, mien...

Dobles parejas

Historia de sexo e infidelidades entre una pareja de clase alta y una de clase media.

DOBLES PAREJAS

CAPÍTULO 1

HORACIO O EL NUEVO RICO

Existen dos clases de ricos: los famosos y los que mueven los hilos en la sombra. Estos primeros se caracterizan porque sus nombres y sus rostros resultan familiares a todo el mundo, a excepción de cosmonautas de viajes intergalácticos, ermitaños alojados en cuevas del Tíbet o náufragos residentes en islas desiertas. Pertenecen al mundo de la política, la empresa, la cultura, el espectáculo o los deportes. Son admirados y...

Gloria

Tras la comida con los compañeros.

Gloria

Había ido a la comida con los compañeros estrenando mi nuevo jersey vestido blanco, muy a la moda, y las botas recién compradas. Completaba el atuendo con un jersey fino cuello vuelto para llevar por debajo del vestido, medias y la lencería. Todos me decían que estaba especialmente guapa. Especialmente un compañero al que no le había hecho mucho caso llamado Luis.

La cosa es que tras la comida, y la bebida de después, nos fuimos quedando unos pocos, cada vez menos, y, ya se sabe, co...