La Lluvia
El día había comenzado siendo soleado, pero para cuando ella llegó, gruesas nubes se amontonaban en el horizonte.
El día había comenzado siendo soleado, pero para cuando ella llegó, gruesas nubes se amontonaban en el horizonte.
Paseamos un rato, hablando un poco acerca de las escasas novedades de nuestras respectivas vidas. Nada nuevo había pasado desde la última vez que nos habíamos visto. Ella seguía en la Universidad, yo no hacía nada por el momento, más que ayudar cada tanto en el negocio familiar.
Cuando llegamos al parque, ya no teníamos nada más para conversar. Se escuchó un trueno lejano y una gota...