Cambio de vida (9)

Entré a la oficina el siguiente día...

Entré a la oficina el siguiente día con el paso firme y seguro de mi mismo, pasé por delante de la mesa de Pilar.

PILAR: ¿Cómo está hoy jefe?, por que ayer no daba ni una.

YO: Con la cabeza despejada y muy contento, ¿decías algo más Pilar?

PILAR: Nada, que repasemos la agenda que hoy la tiene muy llena.

A media mañana recibí un mensaje.

KATIA: “A las seis partido con Carmen y Fer antes de cenar”

Le contesté con el dibujito del puño con el dedo para arriba y seguí solucion...

Perra...? Puta...? O tal vez las dos cosas...? (3)

Alfonso empieza a domar a Carmen, algo aparentemente degradante pero que hará que ella descubra una faceta suya oculta hasta entonces, yendo ambos de compras después a un centro comercial...

Entró por fin en su casa y le sorprendió el olor a limpio que se respiraba en el ambiente, así como lo ordenado que estaba todo. Sin duda, Puta había cumplido con el cometido que le había encomendado. Ella se encontraba sentada en el salón, viendo la televisión, pero reaccionó cuando le escuchó entrar. Intentó llamar su atención, preguntarle dónde había estado, encontrando en cambio una mirada de desdén mientras Alfonso se dirigía a la cocina y sacaba una lata de bebida de la nevera que se tomó sentado en e...

Perra...? Puta...? O tal vez las dos cosas...? (4)

El cómo empezó todo, aunque desde el punto de vista de Carmen. Resulta sorprendente cómo el deseo puede provocar cambios tan radicales e inesperados en una, hasta el momento, tradicional esposa y ama de casa...

En esta entrega varía el hilo conductor de la historia de esta pareja amiga mía, y será Carmen quien nos dé su punto de vista tras tener la oportunidad de hablar tranquilamente con ella. Cuando hablé con Alfonso y me contó el giro que habían dado sus vidas, tras darle unas cuantas vueltas en mi cabeza les pedí permiso para escribir esta historia, mostrándose ambos muy predispuestos a relatarme algunas situaciones en las que se habían visto inmersos para que sea yo quien os las cuente. Así que tras varias co...

Mesa para tres III

Continuación de Mesa Para Tres II

-          Cabrón, que me has metido?

-          Un juguetito para que te vayas acostumbrando. Esta tarde este culo va a dejar de ser virgen, y ahora seguid a lo que estabais – le quite el pañuelo y en su mirada vi que no le disgustaba el regalo. Habría que ver lo que decía cuando viera los otros dos tamaños, pero eso sería otra historia

MESA PARA TRES III

Me fui al salón a trabajar un rato. Aunque era difícil centrarse pensando en lo que acababa de hacer y sobre todo lo que tenía plane...

Planeta Prohibido. Capítulo 14

14. Quemando motores y destruyendo estaciones

14. Quemando motores y destruyendo estaciones

Me desperté de nuevo con todo el cuerpo agarrotado por el intenso ejercicio. Eudora se había comportado como lo que era... una máquina y prácticamente no había descansado nada. Hasta estuve tentado de usar la potente droga que había sacado de la hembra yuba, pero preferí guardarme ese as en la manga para un ocasión mejor.  Fuera, en aquella noche perpetua, nada parecía haber cambiado. Al final Eudora había entrado en razón y nos vigilaba atentamente en...

Cambio de vida (8)

Me levanté nervioso...

Me levanté nervioso de pensar que aquella noche iba a salir con dos chicas a la vez y como se desenvolvería todo, llegué a la oficina despistado que no sabía ni donde estaba, me senté en mi mesa y entró pilar.

PILAR: David, ¿no ha puesto el ordenador en marcha todavía?

YO: ¿Eh, qué?

PILAR: Cojones como venimos hoy.

YO: ¿Has dicho algo Pilar?

PILAR (con paciencia): Por favor, puede poner en marcha el ordenador para confirmar el trabajo de hoy.

YO: ¿Qué haga qué?

PILA...

Universitaria: Profesora particular IV

Continua las aventuras con mi alumno Diego, que termina tocando mis tetas y dejándome cachonda perdida, para en casa, terminar montando un concurso de pajas.

Hola amigos y amigas del morbo. Sí, sé que he tardado muchísimo en volver por aquí, pero la verdad es que ha sido para llenar mi vida de nuevas anécdotas en mi nuevo trabajo, que espero traeros a la página algún día, cuando acabemos primero con esta historia.

Espero también escribiros con más frecuencia ahora que tendremos tiempo con esta situación sanitaria (PD: Espero que todos os encontréis bien). Solo puedo deciros que escribo con muchísimas ganas cada relato después de leer vuestros comentarios,...

Cambio de vida (7)

El día siguiente estaba bastante cansado, pensé en ir al gimnasio...

El día siguiente estaba bastante cansado, pensé en ir al gimnasio y largarme para casa, al llegar saludé a Rocío, la recepcionista de la tarde.

YO: Buenas tardes Rocío, ¿cómo estás?

ROCIO: Muy bien señor David.

YO: ¿No podrías tutearme por favor?, eso de usted siempre me hace sentir muy viejo.

ROCIO: Lo siento señor, son la normas, nos obligan a llamarle de usted a todos los socios.

YO: Pues dile al responsable que eso es muy antiguo.

Ella me miraba continuamente a los oj...

Cambio de vida (6)

El lunes llegué a la oficina más triste de lo normal...

El lunes llegué a la oficina más triste de lo normal, me tenía que acostumbrar a mi nueva situación, me senté en mi mesa y entró la secretaría con la agenda para leerme lo que tenía para ese día.

PILAR: Buenos días.

Me fue leyendo y yo solo me enteré de la primera cita, miré por la ventana y me distraje con las vistas y la gente que pasaba por la calle, oí una voz, David, David, me giré mirándola.

PILAR: ¿No se ha enterado de nada verdad?

Giré la cabeza de lado a lado.

PILAR: N...

Cambio de vida (5)

Me duché con abundante jabón...

Me duché con abundante jabón, me puse el bañador y la camiseta de rigor y me fui a comer al chiringuito, estaba bastante lleno, busqué una mesa vacía y le hice una señal a Sandra por si podía sentarme, me lo confirmó con la cabeza en la distancia sonriendo, cuando pudo se acercó a la mesa con la libreta en la mano para apuntar.

SANDRA (con una sonrisa): Hola David, has venido muy temprano hoy.

YO: Tú eres muy hija de la gran puta, ¿los sabes no?

Se quedó tiesa borrándosele de la cara la so...