Una ama de casa muy especial (06)
Una ama de casa muy especial (06)...
Anda, pasa al salón, Ernesto. Menudo bulto que le hacía el pantalón, la cosa prometía, y vaya manera de mirarme.
Mira, Maria, solo te traigo diez mil pesetas, es lo que tenía en casa, si falta algo, ya lo arreglaremos no?.
Si, hombre, ahora no te preocupes por eso. Cogí las diez mil de ala, mientras Ernesto me rodeaba por la cintura con la mano derecha y la izquierda empezaba a acariciarme las tetas, desde luego estaba acaloradísimo.
Estás preciosa, Maria, menudo culo tienes, decía mientra...