Carmen, menudo curso! (4)
Finalmente Carmen, la compañera de clase que con su pinta de mosquita muerta ocultaba a una auténtica fiera sexual, cumplió con su promesa y me dio la recompensa que durante tanto habia perseguido: Poseerla . Pero ahora la incertidumbre reposaba en saber cual seria la siguiente etapa en nuestra inquietante y clandestina relación.
Finalmente Carmen, la compañera de clase que con su pinta de "mosquita muerta" ocultaba a una auténtica fiera sexual, cumplió con su promesa y me dio la "recompensa" que durante tanto habia perseguido: Poseerla . Pero ahora la incertidumbre reposaba en saber cual seria la siguiente etapa en nuestra inquietante y clandestina relación.
El camino de vuelta a casa fue delicioso. Al salir del portal de Carmen me llevé un pitillo a la boca. Y al tomar aire, olisqueé mis dedos, donde estaba atrapada la...