Ángel de la noche (12).
La rendición del padre Ortega.
LA RENDICIÓN DEL PADRE ORTEGA.
Ángela introdujo la llave en la cerradura de la puerta del pequeño apartamento, pero aunque escuchó el pestillo correr, la puerta no se abrió. Indudablemente el gran cerrojo interno estaba echado, lo que la hizo maldecir entre dientes. Ginger se había encerrado intencionadamente, negándole la entrada. Podía desencajar la puerta fácilmente, pero no estaba dispuesta a llamar la atención de los vecinos a las cinco de la madrugada.
Ya se temía una reacción así. Gin...