La Libertad_08
Después de casi perder la cabeza por completo en el último asalto de Pablo, la llegada del nuevo día trae la calma que precede a la tempestad. Salgo a la calle a ver si me calmo; aterrada de no ser capaz de resistir si permanezco con él, y abrumada además por las negativas constantes de Carlos.
LIBRO 1. APERTURA. CAPÍTULO I. PRIMER DÍA
cuenta de protección y minuto de descanso
Llegué a la cocina. Como suelo hacer cuando me veo superada por un problema, opté directamente por anularlo, por eliminarlo de mi mente, refugiándome en lo cotidiano, en las cosas pequeñitas. Para no pensar y no acabar agobiada por algo que no iba a ser capaz de solucionar. Esa mañana me entregué a los quehaceres del desayuno y, por un momento, olvidé todo el frenesí y la excitación sexual que acababa de vivir....