Nuestro hijo adoptivo III
Sigue la historia de esta nueva familia.
Nuestro hijo adoptivo III
Me desperté aún abrazado a mi marido, el cuál estaba desnudo y con una erección de caballo tan bestial que tenía todo el abdomen lleno del précum que desprendía su capullo, pero había que preparar cosas y no había tiempo que perder.
Me puse unos slips limpios y fui a la cocina, aunque antes me asomé al cuarto de mi hijo, al ver la puerta abierta para alegrar más aún aquella mañana.
¡ MI PROPIO HIJO ! Estaba en una nube.
Al mirar hacia la cama lo que vi me de...