Memorias de una Pulga VIII

Memorias de una pulga muy especial

CAPITULO VIII

BELLA SEGUIA PROPORCIONANDOME EL MÁS delicioso de los alimentos. Sus juveniles miembros nunca echaron de menos las sangrías carmesí provocadas por mis piquetes, los que, muy a pesar mío, me veía obligada a dar para obtener mi sustento. Determiné, por consiguiente, continuar con ella, no obstante que, a decir verdad, su conducta en los últimos tiempos había devenido discutible y ligeramente irregular.

Una cosa manifiestamente cierta era que había perdido todo sentido de...

Memorias de una Pulga VII

Una pulga singular y sus aventuras

CAPITULO VII

BELLA TENÍA UNA AMIGA, UNA DAMITA SÓLO unos pocos meses mayor que ella, hija de un adinerado caballero, que vivía cerca del señor

Verbouc

. Julia, sin embargo, era de temperamento menos ardiente y voluptuoso, y Bella comprendió pronto que no había madurado lo bastante para entender los sentimientos pasionales, ni comprender los fuertes instintos que despierta el placer.

Julia era ligeramente más alta que su joven amiga, algo menos rolliza, pero con formas capaces...

Ratón de biblioteca

Su espalda tropieza contra una estantería. La estantería tiembla. Un libro cae. Yo lo cojo en el aire. Me acerco un poco más. Noto su cálida sangre correr turbulenta

Llego cinco minutos antes de que cierre la biblioteca. La gente deja las salas vacías mientras yo entro. La bibliotecaria me mira severa desde detrás de los cristales de unas austeras gafas de pasta negras y su boca se convierte en una fina línea de disgusto. La ignoro y me voy al fondo de la sección de poesía.

Me quedo parado, de pie apoyando una de mis manos sobre una larga mesa de teca mientras observo por la ventana como avanzan las sombras. La noche es poderosa en su oscuridad...

Escucho un...

Memorias de una Pulga VI

Una Pulga un poco fuera de lo normal.

CAPITULO VI

NO DE INCOMODAR AL LECTOR CON EL relato de cómo sucedió que un día me encontré cómodamente oculto en la persona del buen padre Clemente; ni me detendré a explicar cómo fue que estuve presente cuando el mismo eclesiástico recibió en confesión a una elegante damita de unos veinte años de edad. Pronto descubrí, por la marcha de su conversación, que aunque relacionada de cerca con personas de rango, la dama no poseía títulos, si bien estaba casada con uno de los más ricos terratenientes de la...

Memorias de una pulga V

Una caliente pulga nos cuenta su historia y la de Bella RElato encontrado en los años 60`s por mi y subido a este portal para deleite de todos.

CAPITULO V

TRES DÍAS DESPUES DE LOS ACONTECIMIENTOS relatados en las páginas precedentes, Bella compareció tan sonrosada y encantadora como siempre en el salón de recibimiento de su tío. En el ínterin, mis movimientos habían sido erráticos, ya que en modo alguno era escaso mi apetito, y cualquier nuevo semblante posee para mí siempre cierto atractivo, que me hace no prolongar demasiado la residencia en un solo punto. Fue así como alcancé a oír una conversación que no dejó de sorprenderme algo, y que n...

Memorias de una Pulga III

Continua esta singular historia.

CAPITULO III

NO CREO QUE EN NINGUNA OTRA OCASIÓN haya tenido que sonrojarme con mayor motivo que en esta oportunidad. Y es que hasta una pulga tenía que sentirse avergonzada ante la proterva visión de lo que acabo de dejar registrado. Una muchacha tan joven, de apariencia tan inocente, y sin embargo, de inclinaciones y deseos tan lascivos. Una persona de frescura y belleza infinitas; una mente de llameante sensualidad convertida por el accidental curso de los acontecimientos en un activo volcán de luj...

Memorias de una Pulga IV

Continúan las peripecias de esta pulguita ESTE RELATO NO ES MIO, LO LEI EN LOS 60´S Y QUIERO COMPARTIRLO A LA COMUNIDAD-

CAPITULO IV

SE SACARON ALGUNAS BOTELLAS DE VINO, de una cosecha rara y añeja, y bajo su poderosa influencia Bella fue recobrando poco a poco su fortaleza.

Transcurrida una hora, los tres curas consideraron que había tenido tiempo bastante para recuperarse, y comenzaron de nuevo a presentar síntomas de que deseaban volver a gozar de su persona.

Excitada tanto por los efectos del vino como por la vista y el contacto con sus lascivos compañeros, la jovencita comenzó a extraer de debajo las so...

Chica anime. O de cómo le cumplí una fantasía...

Adrián es un muy amado amigo mío. Un día nos platicamos nuestros más perversos deseos y fantasías. Él no sabría, hasta este momento, que yo tenía la firme intención de cumplírsela, y con ello, también la mía.

Lo que ahora vengo a contarles sucedió hace un mes. Para esto, creo que deben de saber unas cosas antes de relatarles mi experiencia.

Lo primero es mi amigo. Llevamos mucho tiempo de conocernos (como dos años y medio). Aunque su nombre real poco importa, aquí le diré Adrián. Si hay algo que hasta el momento nos ha permitido ser tan buenos amigos es que ambos nos hemos apoyado en los momentos más difíciles. Mientras haya mujeres y hombres que creen en que se pueden dar amistades entre hombres y m...

Memorias de una Pulga

Las aventuras de una singular pulga que vive en la entrepierna de Bella. Este relato no es mío, yo lo leí en los 60´s, espero les guste tanto como a mi.

MEMORIAS DE UNA PULGA.

Nací, pero no sabría decir como, cuándo o dónde, y por lo tanto debo permitirle al lector que acepte esta afirmación mía y que la crea si bien le parece. Otra cosa es asimismo cierta: el hecho de mi nacimiento no es ni siquiera un átomo menos cierto que la veracidad de estas memorias, y si el estudiante inteligente que profundice en estas páginas se pregunta cómo sucedió que en el transcurso de mi paso por la vida —o tal vez he debido decir mi brinco por ella— estuve dotada de i...

Memorias de una Pulga II

Continúan las aventuras de esta singular pulga.

CAPITULO II

CURIOSA POR SABER EL DESARROLLO DE UNA aventura en la que ya estaba verdaderamente interesada, al propio tiempo que por la suerte de la gentil y amable Bella, me sentí obligada a permanecer junto a ella, y por lo tanto tuve buen cuidado de no molestarla con mis atenciones, no fuera a despertar su resistencia y a desencadenar un ataque a destiempo, en un momento en el que para el buen éxito de mis propósitos necesitaba estar en el propio campo de operaciones de la joven. No trataré de descr...