Perfidia.4.
Esa noche le entregué mi culito, tampoco era plan que su niña se lo ofreciese antes que yo ......
Capítulo 4
Desperté a Berto a las 8 de la mañana, dormía cómo un lirón. Mordí suavemente el lóbulo de su oreja, besándola y musité:
- Cielito, son las 8 y tengo que irme. Te he preparado el zumo de naranja, ¡ levántate gandul !.
Destapó sus brazos y abrazó mi cuello, sentí una de sus manos meterse bajo mi blusa sobando mis tetas.
- Nena, ven conmigo, tengo frio y quiero sentir tu cuerpo pegadito al mío dándome bocaditos.
- No me tientes, cariño, no seas...